Partida Rol por web

Los sucesos eran demasiado extraños para ella, demasiado irreales... Llegó un punto en el que desconectó de aquel sueño, tentada por tirarse en el suelo, hacerse un ovillo e intentar dormir.

Los nombres iban y venían, algunas acusaciones también, datos inconexos... Megumi... ¿Qué sentido tenía todo para ella? Si solo era otra vez un sueño, alterado por el estrés del suceso que había vivido aquella tarde.

Aquello no era real. Ni esas personas, ni la chica muerta ni nada de lo que decían. Simplemente quería despertar, volver a pasar un día entero sin tener que preocuparse de lo que iba a ver cuando cerrase los ojos en la oscuridad de su habitación.

Y si algo aún le hacía dudar de la veracidad de su idea, era el acto que acababa de realizar la otra chica, totalmente fuera de sí y desproporcionado. "Un simple sueño"

Cuando Luna se clava el cuchillo todos pueden ver como efectivamente sale sangre de la herida, pero algo extraño pasa, la chica no siente dolor, ella podría esperar un fuerte dolor pero no sucede nada, siente como el arma penetra en su cuerpo, incluso si la mueve note como esta se desplaza por su interior, pero no siente dolor alguno, solo se sentía un poco mas débil.

-¡Lo que faltaba!- pensó Benjamin al ver como la hoja del arma atravesaba el hombro de la chica junto al cadáver. -Y dice que no está loca...-.

La situación se estaba volviendo cada vez más grotesca, ¿que sería lo próximo? Prefería no pensarlo.

Es cierto, yo tambien lo he visto... a ti Benji por ejemplo, no te vi muy obligado que digamos, pero si disfrutabas.

Aquellas palabras le sacaron de sus pensamientos y le dieron una pequeña idea.

-Oye Henry, que quieres decir con que me viste disfrutar? Jamás hasta ayer me había acercado a ninguno de vosotros, y cuando lo hice fue para evitar que tú destrozases el cadáver de la chica a patadas- aquello no tenía lógica, él jamás podría disfrutar de algo así -¿algo de lo que te digo tiene sentido para tí?-.

-ejemm...señor...? sigue ahi? Ha colgado? - 

Primero los ninjas y ahora un sueño compartido. Esto iba de mal en peor. Unos se acusaban a otros de ser tipos con ansia de sangre, otra se clavaba el cuchillo... Lo que hasta hace poco solo había sido una mala pesadilla había trastocado todo mi mundo, y posiblemente me estaba volviendo loco.

Me arrodillé ante la muchacha y hice una plegaria por su alma antes de mirar al resto, buscando una explicación lógica para todo aquello. Viendo que era imposible hacerlo el solo se acercó al resto y habló con voz clara y segura.

-Parece que no podremos solucionar este problema por nosotros mismos. Cada uno tiene una parte del rompecabezas, por lo que sería bueno decir lo que sabemos cada uno. Empezaré yo mismo. Ayer, o hoy, no estoy muy seguro como decirlo, unos hombres vestidos de ninjas entraron en mi clase y su lider me reto. Le derroté y accedió a responder algunas de mis preguntas. Me dijo que un mal se cirnió hace muchos años sobre el mundo y que una muchacha, ahora reencarnada en Megumi, se sacrificó por el mundo. Por años se ha ido sacrificando una y otra vez, y aquellos que portan las armas son los encargados de llevar acabo ese sacrificio. Pero tambien me dijo que no parecía haber ningún rastro de que esta vez fuera necesario matarla, que no había rastro de este mal. Eso es lo que yo se-hice una pausa para mirar al resto-. ¿Que es lo que habéis visto vosotros?

Luna primero se miró el hombro, ¿como podía ser? - yo,... ¿como es posible que la herida no duela? Aunque si me noto un poco más cansada - movió el filo hasta la palma de su mano y se retiró el arma, en su sueño le apuñalaba, pero no le dejaba la daga clavada, asimismo le sorprendía que pudiera moverla por su cuerpo como quien mueve la cuchara a través de la sopa - primero quise hacer un estudio del extraño sueño y la autosujestividad de quienes despiertan con marcas causadas tal vez por un fallo neuronal que indica la necesidad de autoinfligir señales en el mismo, y creí que sería una buena idea tener una compañera para ayudarme, dicha compañera murió de repente, después me desmayé y alguien me entregó una caja con una daga, alguien que debía estarme vigilando puesto que ni siquiera avisé a mi familia de mi colapso. Esa noche misma, me ofreció ella misma conocerle, pero cuando la vi era una estudiante de intercambio, le quisieron molestar, le defendí, y pude más o menos comprobar que ella no recordaba lo que ocurría en mi sueño, mientras hablaba con ella, más necesidad de protegerla sentía, y me dijo que tenía que morir una y otra vez para frenar los males que iban a aparecer en cualquier momento. Lo que te dijo el tipo ese, contradice lo que ella me dijo, conforme tenía que morir ella o la humanidad, y ese es el motivo por el que me he clavado la daga, le dije que lo que pasara no sería culpa de ella, si no de nuestros propios errores, y que antes iría contra quienes pretendieran culparle, que contra ella - sonrió mirándole un momento - sinceramente no creo en que uno se deba sacrificar por los demás, si algo malo ocurre, será culpa de esos "demás", y solo ellos deberán pagar por los errores que cometan, puesto que quisiera o no, yo le hice esa herida, lo único que he hecho es hacerla mía.

Me sorprendió ver que aquella mujer no sangraba nada. Es más.. ni la dolía. Creo que no necesitas mi ayuda. La indiqué mientras me levantaba y escuchaba al chaval de gafas soltarme su discursito acusador.

Ayer? Ayer entré en el sueño, ella murió, me dijo una frase.... y desperté... Jamás la patee y nunca antes había logrado ver los rostros tan claros de nadie como ahora.... ¿Miente o fue todo producto de su imaginación?

Hasta donde yo recuerdo, nunca la he pateado... ni viva ni muerta. Tu sabrás lo que sueñas y lo que ves. Yo tengo claro que nunca os ví con tanta claridad como ahora, y nunca interactué con ninguno salvo hoy. Que, según tu, la di de patadas... perfecto, continué mostrando en mi tono de voz que me importaba muy poco lo que él vió o dejó de ver, ya sabes lo que dicen.. dime lo que sueñas y te diré quien eres.

Me acerqué a Bejamín, con las manos a la espalda. Me paré a su lado. Pero tu has disfrutado salvajemente cuando tu arma a atravesado su piel y su carne. Tus ojos, tu rostro... disfrutabas con cada gota de sangre que salía de su cuerpo. Seguiría narrándotelo, pero tu ya sabes de lo que hablo. Le guiñé un ojo, muy serio y arrogante de forma muy tranquila, sin alterarme nada. Como el que explica el camino a seguir a alguien perdido. Ah! Dirijo una funeraria. Lo último que me apetece ver son más muertos, sangre y tripas. Para eso ya tengo las autopsias.

Me dirigí al resto. Veo que sabeis bastante más que yo... Yo sólo se que, desde el primer día que soñé con esto, esta cicatríz apareció en mi cuerpo. Me alcé la camisa que llevaba puesta, sobre mi ombligo, hacia la derecha, una larga marca, la cual lucía reciente, se cruzaba hacia mi costado. Me giré para que todos la viesen. Se que cada vez que tengo este maldito sueño, me duele tanto como si me hubiese herido yo mismo... Mi hacha apareció en casa, en un estuche... la puerta estaba cerrada a cal y canto, justo como la dejé antes de irme... Vivo en un piso, un séptimo piso... Aunque me hubise dejado la ventana abierta... ¿quien entró y como?

Unos ninjas, parece una locura, pero al menos eran reales. La misma víctima, ¿cuantas posibilidades tendría de que eso ocurriese? Una entre un millón? Pero esa fue su fuente.... Cosas raras, pero creibles... ¿Como coño explico que es una voz quien me habla?

Recordé que Luna mencionó que su amiga había muerto por saber del sueño. Me alegré de no haberle contado nada a mi hermano pero... ¿el profesor de yoga?

Luna, se que es duro pero... ¿cómo murió tu amiga? pregunté con curiosidad. Verás... en estos últimos quince días de tortura con este sueño y los problemas de insomnio que me generó, me apunté a clases de yoga. En mi primera y única clase, en el momento de la relajación, entré nuevamente en el sueño. Hice una pausa, tratando de recordar algo de aquel momento.

El profesor de yoga me despertó, no se que diría en voz alta si es que dije algo... lo que si recuerdo es que le mencioné que dormía mal por un sueño o algo similar sin entrar en detalles. Acabamos la clase y me fui a casa para ir luego al trabajo. Horas más tarde, me enteré que aquel hombre había fallecido en extrañas circunstancias... minutos después de dar la clase. Fue algo tan raro, que se abrió una investigación policial con ello. Me quedé en silencio, pensativo. ¿Cómo lo llamo el inspector?

Luna le miró - creo que todos hemos visto sueños desde diferentes puntos de vista, no caigais en el error de juzgar por ellos a los demás, yo misma en uno de los últimos sueños fuy a darle la vuelta con el pie, cosa que preferiría no hacer. En cuanto a mi compañera, en extrañas circunstancias, un Ictus Hemorrágico me dijeron, pero estando totalmente sana, ese diagnóstico es poco lógico, por ello creo que fue causado por lo que le conté,...

Chasqué mis dedos. Exacto! Eso fue lo que le pasó a mi profesor de yoga. Sólo que.. yo no lo relaccioné con nada de lo ocurrido durante la clase. Sano como un roble y se lo fundió un ictus... o eso deduje de la descripción que me dió el inspector de la policía cuando me contó lo ocurrido. Por eso no lo recordaba, porque me dió la descripción, no el nombre. ¿Realmente sería posible que alguien muriese por el simple hecho contarle el sueño?

A pesar de que todo lo que había visto y vivido, referente a todo lo que tuviese que ver con el sueño, aun me costaba creer ciertas cosas. Es más, incluso aun me costaba creer lo que había vivido en las últimas veinticuatro horas. Hablar de todo ello con alguien sería condenarme a una celda acolchada de por vida. Recuerdo vagamente que se habló del caso de tu amiga en las noticias... supongo que sería ella, creo que... en Barcelona fue justo el mismo día que murió mi profesor de yoga de eso si estoy seguro.

La chica le guiñó el ojo - y ten por casi seguro que nosotros les seguiremos, a Megumi le siguen unos monstruos o algo así que no veo, y después de lo acontecido estos días, no es algo que vaya a ir contando, pero le creo, y de hecho fui a mi casa a por esta daga pensando que tal vez pueda herir con ella a lo que sea que le siga. Me ha dormido para protegerme de algo, y me gustaría saber de que, lo que no entiendo, es por que estáis durmiendo ahora mismo vosotros... - al escuchar al hombre se sorprendió, no tenía idea de las noticias, sus estudios médicos ya le absorbían suficiente - si, vivo en Barcelona, es posible que hablaran de ella, no soy de ver las noticias, así que no te lo puedo confirmar.

Las constantes referencias a gente muerta le empezaron a preocupar... Quizá se había equivocado al contarselo a Laura... Un escalofrío recorrió su espalda.

-La verdad es que sé muy poco de lo que está pasando. Si que te puedo decir- dijo mirando a la chica que se había atravesado el hombro -que yo no he llegado aquí por propia voluntad, estaba en la calle, iba a entar a trabajar y bueno... supongo que me he debido de desmayar o algo así. Vivo en Madrid, por lo que no creo que haya una conexión geográfica entre nosotros. Ayer conocí a una chica que tambien tenía sueños extraños, algo así como una escena previa a este. Creo que ella conoce a Megumi o al menos ha tratado con ella en varias ocasiones-.

Calló un momento, no conocía de nada a esa gente y no sabía si podía confiar en ellos... Aunque tampoco es que hubiera muchas alternativas. Cogió aire y continuó.

-Cuando llegué a casa encontré una caja con un enorme hacha dentro. Al tocarlo, durante un momento, te pude ver, algo así como un flash. Estabas sentada en una clase y alguien a tu lado se desmayaba y aparecían médicos... No sé, fue todo muy rápido...-.

Miró al suelo y sacudió la cabeza, como intentando aclarar sus ideas. Aquello era cada vez más caótico.
 

- Hola, con quién hablo? ... Marten Klausen, mi nombre es Dagobert Blaus - tras escuchar toda la narrativa del interlocutor al otro lado del teléfono en verdad no me asusta mucho después de lo que había pasado, creo que sería complicado asustarme - Para nada siga contandome, dada la cuestión yo estoy teniendo un sueño que al parcer es igual que el vuestro y hoy casualmente me he encontrado en lo que espero que siga siendo la Universidad de Belín a uno de los participantes en el asesinato del sueño. En verdad todo me parece muy raro más que se le puede hacer -  digo mientras pauso para reflexionar unos momentos sobre el testimoio del sujeto con el cuál conversaba - Si aún estoy aquí, digame el profesor Snitch le dió alguna otra pista sobre  el tema? -

-no no, Marten no…Morten, y si, efectivamente es todo muy raro. Vera, en mi sueño somos varias personas que formamos un circulo alrededor de una joven y la asesinamos, cada uno con un tipo de arma diferente. En mi caso es con una espada. Le parecerá una locura pero faenando con mi barco en alta mar saque de mis redes la espada que porto en el sueño. Lo increíble es que, cuando me despierto, tengo la cicatriz en mi cuerpo de la herida que le he inflingido a la muchacha. La chica nos dice que nos entiende y no hay atisbos de rabia alguna. Es el mismo sueño que tiene usted, señor Dagobert?- no me puedo creer que le este contando esto a un completo desconocido, pensara que estoy como una chota.

-El Doctor Shnicht no me dio ninguna pista más. Solo me dijo que quería realizarme una entrevista para hablar sobre el asunto. Ya veo que usted se ha desplazado hasta allí. Ha podido hablar usted con el doctor? Alguna conclusión que nos pueda aclarar este suceso?-

Lo escuché en la radio. En televisión no dieron nada sobre el tema. Pasó lo de siempre, cuando te das cuenta de que la noticia te interesa, pasan a otra. Suspiré resignado.

Dices que a Megumi le siguen unos monstruos, que no los ves.... ¿Estás segura? Porque creo que estamos todos aquí. ¿Como llamarías a quienes te persiguen para matarte porque "eres la elegida"? hice el gesto de las comillas en el aire. ¿Tus mejores amigos? Yo también diría que unos monstruos me persiguen...   Y no monteis escenitas... pues es obvio que nos han colocado el muerto... con perdón. Miré a Megumi. Vaya mierda que es todo esto...

Me puse ambas manos en la cabeza y entremezclé mis dedos con el pelo mientras lo llevaba hacia atrás. ¡Esto es una puta locura! Yo supongo que aun estaré en mi cama durmiendo, a la espera de que suene el despertador para ir a trabajar. dije respondiendo a Benjamin.

Me alegré de no haberle contado nada a nadie sobre el sueño. Aquello se ponía mas misterioso a cada momento que pasaba, hasta el punto de que nada tenía sentido. Cuando Henry habló algo no me cuadraba en su teoría.

-No creo. Si ella realmente veía monstruos que nadie mas veía sería una buena explicación de lo que les pasó a vuestros amigos-dije mirando a Henry y a Luna-. Pensadlo: es posible que esas vestias ataquen a aquellos que sepan lo que pasa y no sean los elegidos.

Había conseguido serenarse lo bastante como para prestar atención a su alrededor. Por el momento, unas pequeñas dosis de acusaciones -tú hiciste esto, tú hiciste lo otro, tú disfrutaste al hacerlo, yo a ti te vi las ganas...- a las que no hizo demasiado caso, no eran útiles ni constructivas y desde luego solo estaban sirviendo para que unos y otros se pusieran a la defensiva y a justificarse, de forma innecesaria a su parecer. En los sueños, a veces uno libera los deseos más ocultos,, e incluso sádicos que lleva dentro. Ella no era luz completa, tenía partes oscuras también, y aunque intentaba siempre ser mejor aceptaba que también tenía sombras, y que ellas también formaban parte de su alma. De otra forma, estaría incompleta.

No aportó ningún dato a aquellas personas, únicamente se limitó a escuchar sus historias. Algunas más rocambolescas que otras -¿ninjas? ¿aún hay de eso?- pero por encima de todo un dato se le quedó grabado: Hablar de aquel sueño con otros podía conducirles a una muerte segura...  Agradeció internamente ser reservada por naturaleza y no tener amigos con los que poder sincerarse. Por una vez, algo había salido bien de su soledad.

Los tres hombres estaban en a conversación cuando algo extraño sucede, sienten un zumbido y como la vista se les nubla, en ese momento pueden ver que están en otro lugar, justo frente a ellos está la chica del sueño muerta en el suelo y a su alrededor el resto de personas del sueño hablan y se mueve de forma normal, como si estuvieran realmente conscientes.

Mientras todos hablaban no se dieron cuenta al principio pero después lo vieron, las personas que quedaban por "despertar" en el sueño parecían empezar a moverse y realmente parecían aturdidos y sorprendidos.

- Genial - pensó - ¿no podrían haberse despertado cinco minutos antes? Odio repetirme - luego se fijó en ellos, guardando su daga en la cintura - antes de Acercaros mucho, ¿podéis decirnos si sois conscientes o seguís siendo títeres de este sueño macabro? - prefería asegurarse, no fuera que tuviera que defenderse.

Sentada al lado de la chica, le dio por mirar el lugar, intentar centrar su vista en paredes, techo, o cualquier detalle que pudiera darle alguna pista de "algo", ni ella misma sabía bien que buscaba.

- Pues cojonudo ahora no sé dónde diablos estoy, pero si ahora mismo estaba... bueno que más da, ¿aún se encuentra en la linea? - digo mientras aún sostengo el móvil pegado a mi oreja, mas ante la expresión fuera de lo normal de la chica me quedo impresionado, esto nunca había pasado en el sueño - Tranquila hasta donde sé aún soy de carne y hueso y mira que en estos momentos no sé mucho - joder verdad Morten aún está  la línea - Morten, Morten, ¿aún estás ahí?