Partida Rol por web

Veo el destartalado aspecto de la habitación cuando me topo con algo que no debería estar allí. ¿Será la hermana?. Atellus ve con cuidado no sabes lo que te puede deparar este encuentro, necesitas no necesitamos informacion, haber que ocurre. Me acerco lentamente a la cama, guardando la escopeta dentro del abrigo y con una sonrisa enigmática. Una mujer no es un gran enemigo, podré defenderme con la pistola laser. Mientras empiezo a mover la cama a una posición o mas alejada de la ventana. Acaba de perder a su hermano, me acuerdo de lo que sentía tras la perdida de mi mujer e hijos y se me llena el alma de compasión. Se que es duro lo que está pasando. Buenos dias me llamo Atellus y como debe suponer no soy de esta parte de la colmena, si me hiciera el favor de sentarse en la cama, le idico con la mano, educadamente, la posición mas alejada de la ventana. Estoy aquí debido a un extraño suceso y como debe haber oido no estoy solo. Hago un pausa mientras la miro a los ojos. Mientras relajadamente meto la mano en un bolsillo y saco un paquete de varillas de Ihlo y le ofrezco uno, si lo coge espero a coger yo uno y encender el mio y el suyo a la vez, si no coge la pregunto ¿Le importaría que fumara?. y me lo enciendo, guardando el paquete en uno de los bolsillos esxteriores, donde estaba antes. Ahora mismo estamos solos mis compañeros se han tenido que ir , paro un momento midiendo mis palabas. No se que está ocurriendo aqui si me lo pudiera decir o decirme que ocurre aquí aclararíamos muchas cosas. Pero lo mejor sería que me dijera que hay en esa mochila. Me siento a su lado en la cama que demonios habra en esa mochila que la aferra más que su vida. Se lo que es perder a alguien querido y creo que lo mejor es hablarlo.   "CONTACTO CON LILI" PIENSO CON TODAS MIS FUERZAS, haber si sus poderes sirven para algo.

Espero un rato para que hable.

Una vez se levanta confirmas la foto de la placa de datos. La mujer te escucha aterrorizada al principio y un poco asustada después cuando ve que guardas el arma. Se siente en la cama mientras sigue aferrando su mochila de la cúal no es consciente hasta que le preguntas sobre ella.

- Me he decidido a irme de aquí; cada noche hay más desapariciones, ya no sé cuánta gente ha desaparecido, ¡y nadie dice nada! Pasé la noche aquí ayer, una última noche, con la esperanza de que Saúl regresase a casa. Estúpido, lo sé, pero me salvó la vida. Cuando regresé a mi habitación esta mañana, en el nivel tres, habían arrancado la puerta de sus goznes y habían arrasado todo lo que había dentro, aunque no había nada que roba. Si hubiera estado allí…

Sin querer decirle lo que le paso a su hermano, me levanto rapidamente, casi como un impulso y lo más alejado posible de la ventana la acompaño hasta la salida. Lili vas a tener que confiar en mí. COmo te dije no estoy solo tengo unos amigos que te pueden ayudar bajando las escaleras. Quiero que sepas que soy un miembro de la guardia Imperial, le muestro la armadura y el manual. Y no tienes porque temer de mis amigos y de mi, estmaos en una misión y no te puedo revelar nada más pero seguro que ellos te pueden ayudar mejor. Antes de salir. ¿Sabes si hay algo de valor aqui para mi investigación?. señalando a la habitación. Si dice que si lo cojo sino la acompaño escaleras abajo, ella delante de mi y la llevo agarrada por un hombro con mi mano izquierda. No te preocupes, es mejor así. si nos atacan por detrás te cubriria con mi cuerpo y si es por delante siempre puedo ponerme delante. La digo mientras agarro la escopeta con la derecha, pero aun debajo del abrigo.

Espero que el tecno-sacerdote me diga que está limpia, sino habre hablado demasiado, pero no suficiete como para desmontar la operación.

- Que yo sepa no hay nada de interés. Hace días que la puerta está forzada y la habitación saqueada, comenta con la mirada perdida en el suelo.

Luego te acompaña asustada y aunque te mira cuando le pones el brazo encima no replica. Sigue aferrando su mochila con si fuera un salvavidas y ellé se estuviera ahogando.

Mientras avanazamos miro en su nuca para ver que no haya marcas de cirugia. Cuando la pregunto ¿Que es eso que lleas en la mochila? 

- Es lo poco que tengo, lo que pude sacar antes de que anoche saquearan mi habitación.

Caín se interna en la habitación y a pesar de sus precauciones no encuentra a nadie, parece que aquí ya no vive nadie. Enciende la luz y podéis ver una habitación que consiste en una cámara sencilla de ocho metros por ocho metros con un baño, cama, mesa dos sillas, armario, pequeña cocina y una única ventana abovedada.

Tras un buen rato absorto en mi mundo ¿Si no es mucha indiscrepción? ¿Me podria decir que hay en la mochila?, para que cojones le hago esta pregunta. Atellus intentando ser mas educado con la dama. Seguro que me dice tampax, revistas y joyas. Podria ayudarme a entender que sucede aquí.

Vacío -susurro, me refiero a la habitación, por supesto, pero tal vez exprese algo más, aquí dentro había hasta hace poco una valiosa fuente de información, una mujer que conocía perfectamente al difunto y que hubiera arrojado muchas luces sobre esta siniestra e importante investigación, un aparato de control en manos del enemigo puede ser aterrador, podrían ordenar a un alto funcionario que cerrara el suministro eléctrico, desviar toda una flota, o enviar un ejército a un planeta muerto-, nadie queda aquí.

Además han registrado todo, se habrán llevado lo más relevante, y sólo nos quedan las sobras. Tendremos que recurrir a los vecinos.

Vuelvan a subir a la habitación del difunto, nosotros seguiremos nuestro trabajo, pero, una cosa más...¿Teccus? ¿Podría, tal vez, usted decirme, si hay algún explosivo por aquí? Imagino que saben por qué lo pregunto...

- Sinceramente puedo decirlo igual que usted... No tengo ningún detector de explosivos. Aunque si que puedo desarmarlos. -

Digo friamente mientras levanto levemente los hombros.

Me giro hacia Zaddion y hago un gesto con la cabeza, haciendole saber que cuando inicie la marcha lo seguiré por detrás.

-¿Volvemos?-

Bien, Teccus, nosotros nos haremos cargo, dice Albrek. Vosotros volved arriba. Cain, vamos a pasar por un peine fino este apartamento, fijándonos en cualquier papel, huella de calzado, o cosa que esté fuera de su sitio.

Volvéis a subir las escaleras y cuando vais por el piso quinto escucháis una voz masculina hablando bajo con otra femenina, parece que bajan hacia vosotros.

Cuando los otros dos se van comenzáis vuestra tediosa labor de rebuscar entre tanto desorden.

- Algo de ropa, y algunos recuerdos...nada de valor pero es lo único que me queda de mi familia.

Miro a mi alrededor inmediatamente y busco algún lugar en el que pasar desapercibido, mi apariencia no es muy habitual por estos lares, y mejor si evitamos sospechas prematuras.

Sigo subiendo como si nada.

Soy un extraño más en un sitio extraño, y si intento esconderme se notará más.