Partida Rol por web

Ni un minuto de respiro... entre nosotros tenemos ganas de matarnos, los de fuera nos quieren muertos... Mortymer se echó el pelo hacía atrás con gesto ausente mientras escuchaba el "relato" del drogadicto.

Negó tres veces con la cabeza sintiéndose completamente desubicado, y mucho saber que hacer... Menos mal que Antti tomó las riendas y dio una seca y borde orden... algo es algo.

Se disponía a salir de la enfermería pero por pura curiosidad se quedo mirando a Amber para ver a quien elegía - seguro, que como cría que es elegíra el que menos te esperes - pensó para sus adentros

- ¿Mamá? ¿Tito...? - preguntó la pequeña, mirando a Antti, quien tragó saliva.

- No... Hoy tienes que enseñarle a jugar a otra persona, ¿eh, Amber? Y mañana se lo cuentas a mamá y al tito... Renka tampoco está en el equipo, guapa... - señala a Alice, Balaguer, Hugo, María, John, Lex y Mortymer - Tienes que elegir a uno de ellos, ¿eh, cielo?

Amber señala interrogante a Erick, Madison, Taylor y Michael.

- No, ellos no juegan... - excusó Koivusaari - Madison y Erick son nuevos... Y Taylor y Michael... - les echó una mirada reprobadora - Ellos juegan en otro equipo... - le devuelve la mirada y la niña mira a los que son sus opciones... Empezó a canturrear y a jugar a un juego de azar con su dedito. Por cómo sonaba, la canción éra japonesa... Por azares del destino, aquella cancioncilla terminó en señalar a Alejandro, tras lo cual extendió las manos hacia él.

Antti le entregó la niña al español... La mirada que le echó a Alejandro lo decía todo:
"Si le pasa algo, eres hombre muerto".

- (...) ¿Qué...? - Alexandra abrió los ojos, alarmada, al oir que el paradero de Reisel era desconocido, incluso el de Lior... No hacían ni tres horas que les había visto a ambos, y saber que su desaparición coincidía con que un puto pez gordo de los militares iba tras el lituano, no ayudaba en absoluto a calmarla...

Es... indestructible, viaja en el tiempo... Es indestructible... No pasa nada... Tiene mala suert-NO PASA NADA...

Se llevó una mano a la frente, turbada y cogiendo aire, mirando al suelo cuando Koivusaari dió la orden... Sólo desvió su cristalina mirada hacia la criatura cuando ésta decidía con quien quedarse. Balaguer. La Fortuna era una cachonda. Exhaló aire pesadamente, volviendo a tragar saliva...:

- Si Sven me necesita, avisadme... - dijo dirigiéndose a Antti, dispuesta a marcharse de la enfermería.

Taylor alza las cejas y sonríe fatigado cuando la pequeña Amber le tiene en cuenta. Es entonces cuando Koivussari le descarta para la quiniela: por una extraña razón que ni siquiera él logra comprender, eso le jode.

Eso, largáos todos. La ignorancia es la felicidad, ¿no dicen eso?. Ya lo habéis oído: el pastocillo quiere fuera a todo el rebaño. Quiero que sepáis una cosa: sois basura. No he visto tan pocos cojones en mi puta vida...

Niega con la cabeza y entorna los ojos, señalando la salida con la barbilla.

Me vas a rematar y no quieres testigos, ¿eh, Antti?.- bromea asqueado, sentado en un rincón, sobre el suelo: una saco de mierda tendría mejor aspecto. Esto te viene grande, tío. No tienes autoridad aquí.

Taylor se agarra la mano temblorosa y resopla.

Es gracioso. Lo que acabas de hacer con la cría es un ejemplo perfecto de cómo llevais las cosas por aquí: que elija el azar. No hay planificación, nada es premeditado. Sois un caos: desde la más grande hasta el último mierda que se vé de repente con el marrón encima. ¿Te reconoces en ese papel, colega? Yo creo que sí...- las venas del cuello de le hinchan, la cara empieza a tomar color por las mejillas.

Sólo órdenes, órdenes, órdenes...Borregos, eso es lo que queréis, ¿no?. Pues conmigo tenéis un hueso: quiero ayudar. No puedo dejar a Jolene en tus manos..., así que, con esto, se jode la cadena de mando, ¿te enteras?. A vuestra manera todo se va al carajo, es un hecho. Probemos a la mía.

Era un "golpe de estado" en toda regla. Taylor estaba harto de lo que para él son dictadores ineptos hijos de perra.

Balaguer y John se quedan.

Miro alternativamente a Atti y a Balaguer mirando su reaccion hasta que al final me quedo mirando a Atti

Solo dilo y se acaba la tonteria

Al final el giganton melenudo tiene sentimientos, es logico quienes han desaparecido son sus hermanos. Miro a Taylor, tiembla como un bebe con miedo de lo que le pueda pasar y el rubiales nos dice que nos vayamos a nuestros cuartos, claro y me quedo sin hacer nada aqui, como si el mundo pudiera esperar a que se decidieran todos. Sonrio a la niña y encuentro logico que no me eligan a mi, yo no soy nadie en este momento para ella y puede que nunca lo sea, una pena que un angelito asi este solo.
Estoy dispuesto a salir de alli cuando Taylor lanza su discursito, solo puedo decir un Ja que no controlo y aprieto la piedra que hay en mi bolsillo sacandola y lanzandosela a Antti Puedes darsela con todo mi cariño o hacer con ella lo que quieras. Prefiero no tener eso en mi poder me meto las manos en los bolsillos y salgo en direccion al hotel y a mi habitacion a descansar No podras dormir que narices importa, ademas mañana puede que ni siquiera hagas nada, no encajaras nunca en ningun sitio, eres el rarito. Crear cosas un poder estupido, ademas que vas a crear aqui si no funcionan los poderes.

Antti se había alejado unos pasos para darle la niña a Balaguer. Iba a contestar a Taylor y Michael sin siquiera volverse... Cuando Erick hizo su jugada. Ni siquiera se quedó a ver los resultados: Una piedra de cocaína pura algo más grande que el tamaño de un puño impactó contra el suelo frente al finlandés y su polvo se esparció por el aire, viciando éste para él mismo y para los españoles, que eran los que más cerca estaban de Koivusaari.
Amber, que estaba en brazos de Balaguer, empezó a llorar. Mara quedó inmediatamente petrificada, pálida, como si acabase de recibir a un viejo fantasma...

- JODER... - la pequeña nube blanca que se había formado en aquel espacio cerrado se disipó en meno de un segundo, pero el finlandés, que había sido el principal afectado por ella, ya tenía las pupilas dilatadas. Se giró rápidamente hacia Balaguer y vió a la niña llorando con cada vez más fuerza... Balaguer tenía también las pupilas como cabezas, de manera que cogió a ambos y los llevó inmediatamente a la zona de quirófano...

Mara empezó a sudar, temblando, pero mantuvo la compostura mientras Antti y Balaguer desaparecían tras las puertas del quirófano. La española parecía deshecha de pronto... Tragaba saliva y se había puesto inusitadamente nerviosa mirando fijamente el montón de cocaina que reposaba esparcido en el suelo...

- [ES]No... Mara... No... Calma... Pasas de ésta mierda... ¿Recuerdas...?[ES] - musitó para sí misma.

Pero apartó la vista y cogió a Hugo de la mano, corriendo con él hacia el quirófano.

Cuando Antti da las órdenes me quedo perplejo. ¿No vamos a hacer nada? ¿Simplemente irnos a las habitaciones a dormir? ¿En serio pretende que consiga algo como dormir o tranquilizarme en esta situación? Contraigo el gesto del rostro y miro a Antti, comenzando a preguntar: -Antti... ¿Eres consciente de lo difícil que es hacer lo que...? -no llego a terminar la frase. Taylor... A veces pienso que es el adalid del masoquismo. Con esas cosas que dice lo más fácil es que a alguien se le inflen las pelotas y se monte aquí una escabechina de cuidado. Por la parte de Amber no me preocupo demasiado, porque ya he visto cómo la mira Balaguer y lo que significa para él, igual que Jolene. Estará bien con el español, por muy retorcido que haya sido su pasado. Bien, volviendo al otro tema, hago un nuevo gesto para intentar hablar... Pero ahora lo que lo detiene es el chico nuevo, ese que pasa tan desapercibido como una mierda en zapato ajeno. ¿Pero qué cojones? ¡Una puta piedra de coca! En el mismo instante en que la niña empieza a llorar me abalanzo sobre Antti, Balaguer y ella, conteniendo la respiración, protegiéndoles con el cuerpo del jodido polvo blanco. Cuando María y Hugo se acercan les dejo pasar igualmente, observándoles con preocupación. Pero ahora... Giro la cabeza con violencia para observar la puerta por la que se ha marchado Erick. Doy dos rápidas zancadas que me colocan justo en ella. Partiré el cráneo a ese tío... Bailaré un puto zapateado sobre sus intestinos... Pero, una vez más, consigo controlarme para no ir tras él como una bestia. Vuelvo la cabeza hacia los que aún quedan en la sala. Una vez más frunzo el ceño, conforme resurge el enfado que aparta el dolor anterior un poquito:
-Vale... Voy a ir a reventarle la cara a ese tío porque casi ha lanzado coca a las narices de mi sobrina... Espero que todos estéis de acuerdo, porque lo que acaba de hacer ese cabrón es grave... Demasiado jodidamente grave... -se nota con cada palabra y gesto que todo mi cuerpo está en tensión y que estoy haciendo un esfuerzo de voluntad inmenso en cada momento para no ir ya mismo en busca del aspirante a cadáver.

Czigany dió dos pasos hacia atrás inconscientemente al ver la pequeña nube que el impacto de la piedra había provocado, tapándose la nariz con la mano y observando estupefacta la reacción de quienes estaban alrededor... La reacción de María no la pasó por alto.

¡¡¡A TÍ TE PARIÓ UNA GAMBA, EEERICK!!! ¡¡¡ME CAGO EN TU PADRE!!!

La húngara corrió a buscar cualquier tipo de bolsa de plástico por la sala médica. Cuando la encontró se agachó ante el pedrusco y, conteniendo la respiración, lo metió con cuidado dentro de la bolsa cerrándola, para entonces acercarse a Rewell y dejársela en su mano con seguridad - Abrid las ventanas para airear la sala - dijo mientras se acercó acelerada a la puerta del quirófano, frotándose la mano - Rewell. Esconde eso, deshazte de eso, o úsalo para modelar el cráneo de ese PEDAZO DE INUTIL , ¿deacuerdo?

Dicho ésto último, se metió en el quirófano.

Y ahora Taylor perdia la cabeza soltando una sarta que, en opinion de Mortymer no tenian demasiado peso para el, simple y llanamente le ignoro y se paso por el arco del triunfo todo cuanto dijo... aqui mandaba una Diosa que ya le congelo estando vivo... y el miedo le podia mas que unas cuantas palabras "bien dichas".

La actuacion de Erick sin duda le dejo desconcertado. No sabia muy bien que habia tirado, pero con la reaccion de todos no parecia algo bueno. Hubiera querido ir a ayudar a Rewell, pero una sensacion como de perdon o vete tu a saber no le dejaba actuar libremente - estaria mal...

Se quedo ahi, con el gesto torcido y la cara contraida por la preocupacion mirando hacia la puerta del quirofano...

Una camilla había sido cubierta por unos paneles, y en otra estaba Amber cuando Lex entró atropelladamente en el lugar. Lloraba rabiosamente y se retorcía mientras Sven intentaba hacerla vomitar...

María se había hecho un ovillo en una esquina y miraba con los ojos casi fuera de sus órbitas a Amber, rasgada por la preocupación.

- ¡Lex, atiende a los adultos! - ordenó Sven mientras lograba que al fin la pequeña regurgitara - ¡Sácalos de aquí, sácalos a fuera con el frío!

Hugo no parecía estar tan afectado como María y Balaguer...
Koivusaari por su parte ha optado por marcharse por la otra puerta de la enfermería, una sala más allá, donde se guarda también el instrumental médico.

¿Le dan la niña al que reconoció ser un asesino y a todos le parece bien?...nadie dice nada, suspiro, madre mía…..

El batería insultando y provocando de nuevo…. ¿Qué pretende hacer sin un plan? La violencia de sus palabras no creo que ayude demasiado al propósito que tienen. No estoy acostumbrada a su lenguaje, quiero salir de aquí…. ya.

¿Qué ha ti….? ¿COC… COCAINA? Mis manos a la boca, ¿donde he ido a parar dios mío?, asesinos, drogas, ha tirado cocaína a donde está Amber, sin pararse, se larga, ES GILIPOLLAS. Corro a la ventana a lo que dice Lex, pero… miro a los demás… detendrán a Rewell….. ¿no?

Lex miró a un lado y a otro, presa de cierto agobio al ver las reacciones de los dañados, pero asintió al doctor acercándose rápidamente hacia María, que por alguna razón había reaccionado de especial forma que el resto...:

- ¡Come, María...! - Aprovechó que ésta estaba hecha un ovillo para cogerla en brazos, dirigiéndose hacia afuera apresuradamente para tratarla.

Con la boca entreabierta y los ojos como los de Igor en "Young Frankenstein", a Taylor se le pasan por la cabeza los recuerdos de aquellas fiestas de tres o cuatro días en su casa de Los Angeles, donde se disfrazaba de Tony Montana y hundía la cara en montículos blancos.

EHH!! LEX, JODER, ¡¡¡¿QUÉ COÑO HACES?!!!.- ruge incrédulo mientras trata le levantarse. En la pared no hay un sólo puto asidero, así que la cosa no es fácil...y la espectacular diligencia con la que la húngara recoge el perico pone el asunto imposible.

Se incorpora pesadamente, y cae de nuevo al suelo, débil. Se arrastra sobre sus codos, apretando los dientes, con la impotencia propia de un arqueólogo que vé como alguien tira el Santo Grial por la taza del water. Desencajado.

JOHN...John, tío, por favor...- suplica con deseperación- Eso...eso es mío, colega. Antti me lo prometió. Lo necesito, hermano...

Cuando llega a las inmediaciones de los pocos restos que no ha podido recoger Lex, Taylor parece un perro hambriento...arrástrándose famélico por el suelo buscando un tazón de Dog Chow en el que ahora sólo quedan migajas. Abre los orificios nasales tanto como puede y aspira en el aire....y casi de inmediato, las pupilas se le dilatan.

Dame esa bolsa, Johnny. Por Jolene, por Donovan...dame la nieve, tío...- tumbado, alarga el brazo en dirección a Dryden. La baba se desliza por su labio inferior.

Cada vez que uso mi...mi poder. Cada vez que intento ayudaros, me quedo así...hecho una puta piltrafa. ¿Cómo quieres que encontremos a tu gente, John? Puedo hacerlo, puedo seguir su rastro, puedo saberlo TODO, JODER!!!...Ayúdame...y salvarás la vida de tus hermanos...

Y TÚ, NIÑATA DE LOS HUEVOS!!! NO ABRAS LAS PUTAS VENTANAS, QUE SE ESCAPA EL GATO!!!

Me acerco hacia la puerta cuando va a salir Rewell

John, se la deberias hacer tragar, pero en lo que le zurras, alguno de los mandamases se mosquea y se explica lo sucedido puede pasar un buen rato que lo mismo les venia mejor a tus hermanos

Miro el numerito de Taylor algo asqueado, vale que uno se puede poner todo lo que pueda, pero joder con dignidad, es cierto que si me dejan la bolsa un momentito me meto un par de rayas pero ya, pero de ahi a meter las napias en el suelo...

Me aparto y miro a Miranda

Sera mejor que salgas de aqui, parece que hay alguno que le ha podido la tension, si no vas a salir corriendo del susto en cuanto podamos hablar con Antti te buscamos donde dormir

Alice se dirigía a la puerta, dispuesta a salir del lugar. Se gira para escuchar la elección de la pequeña. En fín...con la pequeña se lleva bastante bien...

Lo demás ocurre muy rápido. Una piedrecita en una bolsa vuela por el aire y rapidamente aparece una nube blanca. la palabra cocaina llega a los oidos de Alice que observa, sin poder reaccionar, como la nube envuelve a Antti, Balaguer y...¡Amber!

Corre hacia las ventanas, al igual que Madison para abrirlas. Ya bastante estaban los animos calentados como para haceros hervir con el polvo blanco.

Lex volvió a salir, pero ésta vez con María en brazos y corriendo con ella hacia la puerta que daba al exterior. Ni qué decir tenía que su expresión era alarmada...:

- ¡¡QUE ALGUIEN SAQUE A BALAGUER CONMIGO!! - ordenó, saliendo por la puerta y dejando descansar a Ortíz sobre la nieve para tratarla rápidamente...

Miro hacia los lados en la enfermeria tratando de localizar alguna de las cosas que pueden usarse en una pasada de coca, que no se si habra a mano

(...)

Mierda...No me jodas que vamos a tener sobredosis...

Alice corre hacia Lex - Yo te ayudo a sacarlo de aquí...