Partida Rol por web

- Oh... Vale. Ahora le comento a tu padre... - contestó Dale mientras Arthur sostenía la taza en el aire.

- "Lavandería" - tanteó.

Una mano de hielo surgió del suelo y cogió la taza, provocando al patriarca Dryden una sonrisa satisfecha.

- El señor Lockhart ya viene para acá, hijo... Ha ido a por su propio maletín - mantuvo la sonrisa, le gustaba conceder esos pequeños caprichos... Para que luego dijeran con razón que sus hijos eran unos mimados - Ten cuidado.

Parezco bastante interesado en las palabras de Renka

Mas gente en el este jaleo? y peligrosos, ¿sabes algo mas de ellos?

aunque algo mas me interesa

Tu llevas aqui bastante mas que nosotros, ¿eso haria que ella terminara con todo esto?

Mortymer la miraba con intensidad y preocupación mientras ella hablaba. La posibilidad de que con un sacrificio se hiciera justicia y la situación mejorase le gustaba muchisimo. Dejo que ambos hablaran sin quitarle el ojo a Renka, mirandola como un adolescente que se preocupa por la chica que le gusta - pobrecilla...

- Entre esa gente los hay con los que tener mucho cuidado... Los hijos bastardos de Gelus Virica... Experimentos genéticos, nada que ver con mutantes algunos... Falken nos habló de ellos, de cuando estaba cautivo en las instalaciones del Faraón Verde... Al parecer han escapado y se están tomando la justicia por su mano... - se paró un momento a respirar y envainar la katana - Oímos nombres como Zaan, Radar, Madhatter Devil y otros tantos...

Da un paso hacia delante, cerrando la puerta y echando a andar en dirección al almacén.

- Si a Isenhall le gustará o no el tema del sacrificio... Lo sabremos dentro de poco...

Asiento al escuchar la explicacion y comienzo a andar detras de Renka

Me podeis esperar un momentito que coja una cosa de mi habitacion, vamos de camino

Michael no parece especialmente preocupado por que la chica haya cogido la katana y vaya con las intenciones que va

- ¡¡Venga, joder!! ¡¡Que son muchos y ya estarán pensando algo!! - Renka coge la mano de Mortymer y acompaña a Michael hacia su habitación.

Salgo a los diez segundos de haber entrado, con la chaqueta de nieve puesta y habiendo palpado algo, asegurandome tambien de que queda lo suficientemente abierta para sacar el puñal del bolsillo de la prenda de debajo y todavia con la espada de la mano

Ya esta, gracias

Torció el gesto ante "el relato" de Renka algo preocupado por el tema. - Voy a dejar mi cámara aquí, si no te importa - depositó con sumo cuidado la misma sobre la cama de Renka y cogiendo el martillo con las dos manos dejandolo en horizontal frente a su estomago el chico Libanes los siguió - ¿Que tienes pensado?

- Isenhall quiere a Alice, y Sanuye quiere joder a Falken desde hace tiempo... No le voy a quitar a Alice, claro... Yo voy a por Lex. A por la jodida asesina que me quitó mi presa... Marcos era mío... - responde mientras avanza sin pestañear por el pasillo. Los ojos le brillan, llorosos, pero seguramente será una cuestión más física que sentimental...

Asiento a las palabras de Renka, impasible. La verdad es que va a ser todo un desperdicio, pero considerando que las dos ultimas personas que han discutido con ella estan inconscientes y no en muy buenas condiciones y eso era antes de que cogiera la katana, me limito a seguirla, a ver que pasa con toda la gente. Las situaciones de conflicto siempre se pueden llevar hacia tu lado, y a mal dadas esta claro que quien la ha sacado de sus casillas ha sido Hugo

Si...vale... - estaba de acuerdo, pero le costaba horrores creerselo. Hacía unos meses el repartía hamburguesas y vivía entre cucarachas y ratas para ahora ser complice de un castigo... brutal... Movió su cabeza de un lado a otro como despejandose y su cara cambio a un rostro serió - La muerte es castigo... y la muerte es justa... Alexa se lo merece... - pensó para si autoconvenciendose - vamos allá...

Llego a la puerta de la habitacion de Renka, paro un par de segundos ordenando mis ideas antes de hablar con ella, formando mi mejor sonrisa antes de
llamar a la puerta de Renka, pese a verla abierta no entro, solo pregunto desde la puerta

Hola Renka, ¿te puedo preguntar un par de cosas por lo de antes?

Una voz sollozante asiente desde el otro lado de la puerta:

- Pasa y cierra, Michael...

Al entrar puedes ver que su habitación está llena de chucherías de plástico, marcos con fotos con Jolene y Amber, posters de ídolos musicales adolescentes, colchas de colores chillones en la cama y dos fotografías excelentes:

Se queda de rodillas sobre la cama, abrazada a un cojín con forma de mariquita, mirando al muchacho que recién entra en su habitación.

- ¿Qué pasa...? - se seca el agüilla de la nariz con el antebrazo y sorbe los mocos rápidamente.

Paso, quedandome un poco apoyado en la pared

No se yo, cuando esta a lo que esta es muy buena, pero es inestable, no se si podra

Hola. Queria preguntarte, es que me parece que eres una de las pocas personas que sabe de que va todo esto de verdad, y aunque parece que hay algunos que no quieren verlo, creo que eres una de las personas que ayudara a que podamos salir de esta

La miro un par de segundos antes de continuar

¿Que es lo que pasa?, sobre todo con el indio ese, ¿por que una si y la otra no?, ¿es que quiere que nos quedemos aqui?

- No sé nada de Sanuye... Sólo que es la bestia de Isenhall. No habla nunca con nadie, siempre está a su rollo y la gente del pueblo dice que se puede convertir en un monstruo de hielo del tamaño de una montaña - se encogió de hombros - Nunca se ha juntado mucho con nosotros, sólo con Lior. Y lo de porqué una sí y otra no... Pues me imagino que quiere darnos la opción a reflexionar. O sea... Lex nos ha hecho mal a nosotros, no a lo que es el pueblo de Isenhall. No es asunto suyo...

Un acólito de hielo irrumpió súbitamente en la habitación tras dar un par de golpes a la puerta...

- El señor Arthur Dryden me ha pedido que les transmita su deseo de comer en calma en el comedor todos juntos, a fin de llegar a un entendimiento civilizadamente. ¿Debo confirmar vuestra asistencia? - preguntó con aquella voz hueca y gélida...

Renka miró a la estatua parlante y tras pensárselo un momento, asintió, levantándose y cogiendo algo para ponerse de abrigo...

Asiento tambien a las palabras del ser de hielo y espero a que se vaya para seguir comentando, mientras comenzamos a salir

Pero si no es asunto suyo, ¿por que se ha llevado las armas?, y si ademas puede salir de aqui, que no se si podra, pero atravesando hielo como hace... hay algo que no me acaba de cuadrar

La habitación siete parece un pequeño almacén: Aparte de la cama y un sin fin de cajas, hay una mesa con un ordenador personal, y varios CDs a su lado. Algunas carpetas y archivadores, televisión, vídeo VHS y varias cintas sin nombre...

VHS y CD, desde luego no andaba muy actualizado el ocupante de este curioso dormitorio, que podría pasar por despacho también, echo un vistazo por encima a los discos, por un momento me siento tentado de encender la tele y echar un vistazo, pero no es cuestión de invadir la intimidad de alguien que no conozco, mejor tener la fiesta en paz.

Los archivos y las carpetas ordenados, ya han dicho que este lugar lleva tiempo en funcionamiento, se supone que ayudando a la gente con el virus, este maldito virus, creado por alguien que decidió que algunos no merecían seguir vivos, casi lo siento en mi interior, como una presencia física.

Dejo esta estancia, no sin antes asegurarme de que no encuentro ninguna baraja, siempre me ha tranquilizado tener una.

La habitación seis parece tener los restos de quien se ha mudado hace poco: Cajas bien empaquetadas, la cama hecha, y una inscripción en la pared: Parece el alfabeto griego o cirílico quizá. Nada mucho más interesante que eso...

Sin embargo la habitación 5 si resulta curiosa. Tiene varios baúles cerrados con candados, de aspecto antiguo y recio, cuadros con mapas antiguos y una fotografía en la que se ven juntos a una mujer morena, de gran belleza, sonriendo junto a un hombre que, al igual que ella, tiene unos ojos azules verdaderamente llamativos...

Más abajo, la fotografía de otra pareja que parece igualmente enamorada. La calidad de la imágen resulta impresionante...

Y por último, en un marco especialmente bonito y de aspecto muy valioso, dos fotografías juntas, de aspecto antiguo...

Sobre la cama, un sobrio crucifijo de madera con un rosario pendiendo de ella...