Justo en el momento en que te teleportabas oíste que la puerta del zulo de abría de forma violenta. Una sombra cruzó la alcoba, y en pocos segundos, a tu lado encontraste un enmascarado en cuyos ojos sólo se podía apreciar negrura...
- Buh - bromeó la figura con una voz de ultratumba, que había hecho gala de una celeridad y agilidad impecables, sobresaltándote inmediatamente - No te asustes... Había venido a echarte una mano... - en ese momento se retiró la máscara, y pudiste ver claramente a Herkus tras ella - Pero veo que te las apañas muy bien... - bromeó.
Era increíble, pero cada vez que éste chico se perdía de vista parecía mejorado en todos los sentidos.
¿Pero que cojones?, por un instante me giro en posición defensiva hacia la sombra que acaba de entrar, temiendo lo peor, pero el conocido rostro me alivia la tensión que empezaba a ser excesiva al ver su temible aspecto, le devuelvo la sonrisa.
¡Herkus!, ya ves, me aburría de estar tanto tiempo aquí solo, así que decidí largarme, un mueca de dolor cruza mi rostro, suspiro un tanto cansado, ¿Cómo has entrado?, ¿y Dryden?, ¿y Jolene?, tenía demasiadas preguntas que hacer, ¿Cómo me has encontrado?, Y por último, me encanta tu nuevo look tío, digo con una nueva sonrisa.
- A mí también - asiente, con la voz suave pero bromista, observando la oscuridad en que se sumía el túnel de alcantarillado - Jolene no sé dónde está... Pero Dryden... - esbozó una sonrisa maquiavélica - Está en éste mismo edificio... ¿Qué te apetece hacer con él...? A mí se me ocurren muchas ideas... Las tenía ya antes, pero viendo tu aspecto... Digamos que se "perfilan".
La sonrisa se borra de mi rostro cuando la noticia de que Dryden esta cerca, desde luego que había que hacer algo al respecto, me importa una mierda que me amenazara, pero lo de hacer daño a aquellos que me importan, hasta los hijos de puta han de tener un límite, y aquel tío lo había sobrepasado, y me da la impresión de que bastantes veces.
Digamos que tengo un asunto pendiente con él, sigo serio, Aunque no me encuentro en mi mejor momento, no tendré problemas para desplazarme, a pesar de que últimamente no controlo demasiado bien esto, bajo la cabeza y me acaricio las piernas, maldito seas cabrón, vas a pagar, Jolene estaba en su casa, me teleporte allí, pero cometí el error de no querer dañar a sus padres, no volverá a suceder asiento con la cabeza, Vayamos a realizar esa visita
Esbozó una sonrisa satisfecha en los labios y dijo, críptico y calándose de nuevo la máscara:
- Entonces tengo una sorpresa para tí... Yo conduzco... - cogió a Connor sin mucho esfuerzo y de un salto llegó de un lado a otro de la canaleta, asegurando a Art con una sóla mano mientras con la otra se cogía del agujero en el zulo que hiciste - Tú primero - dijo, "caballerosamente".
Haciendo caso a Herkus, vuelvo a sonreírle al ver su gesto y nuevamente me teleporto.
Tirada: 1d100
Motivo: Teleportacion
Dificultad: 47-
Resultado: 1 (Éxito)
De pronto apareces sentado en el interior de una de esas limusinas blindadas, en la que Dryden abre los ojos como platos al verte... Suena música clásica en el interior, el hombre va vestido de forma impoluta y elegante, como siempre. Llevaba las gafas puestas leyendo un artículo de bolsa, pero se las quita inmediatamente...
- Es imposible... - murmura ante tu aparición.
Tirada: 1d100
Motivo: Ini
Dificultad: 44-
Resultado: 62 (Fracaso)
Penalizador en INI -50 por las dos patitas rotas :D
Joder, de nuevo me teleportaba a un lugar desconocido, aunque rápidamente reconozco al cabrón que tengo delante, su expresión de sorpresa, un gesto de dolor en la mía, quería que el sufriera lo mismo, le debía eso como mínimo.
A pesar de las piernas, está demasiado cerca como para que no tenga que desplazarme demasiado, así que intento agarrarlo, esta vez no me ocurrirá como antes, pero me muevo demasiado lento, trastabillado al intentar apoyar una pierna de manera involuntaria.
Tirada: 1d100
Motivo: Iniciativa
Dificultad: -3-
Resultado: 71
Dryden inmediatamente después de unos instantes en que ninguno de los dos supo qué hacer, extrajo una automática de la parte interior de la chaqueta, apuntando a Art...
Un brusco movimiento al apartarme de su ángulo de tiro e intentar agarrarlo y caer sobre él hace que no lo consiga, ese maldito cabrón lleva una pistola en el bolsillo, será hijo de perra.
Las cosas se ponían complicadas, no dudo ni por un instante que ese tío apretará el gatillo, ni siquiera ha preguntado, pero tampoco era necesario.
Tirada: 1d100
Motivo: RP
Dificultad: 91-
Resultado: 62 (Éxito)
Tirada: 1d100
Motivo: CaC
Dificultad: 63-
Resultado: 84 (Fracaso)
Un hombre que apareció en la habitación de su hija apareció de la nada ahora en su limusina. Un hombre con las piernas rotas que había visto desconchar una pared de hormigón bastante grueso... No iba a pestañear a la hora de matar a un hombre que consideraba peligroso para sí mismo y para su familia. Disparó y la bala penetró en el muslo de Art, desgarrando carne y tendón dolorosamente.
Tirada: 1d100
Motivo: RP
Dificultad: 77-
Resultado: 9 (Éxito)
Tirada: 1d100
Motivo: Armas de fuego
Dificultad: 62-
Resultado: 27 (Éxito)
Tirada: 1d20
Motivo: Localización
Resultado: 5
Tirada: 1d10
Motivo: Localización
Resultado: 5
Tirada: 2d10(+18)
Motivo: daño
Resultados: 4(+18)=22, 8(+18)=26
Tirada: 1d10(+18)
Motivo: DAÑO (bien)
Resultado: 5(+18)=23
5x2(+18)
Daño total: 28.
Estás a 11 de vida.
El impacto del disparo, el dolor en la pierna que casi ni siento, demasiadas dificultades para moverme, un desesperado intento por apartar a aquel hombre de sus intenciones.
Pero un brusco frenazo del vehículo hace que nuevamente pierda pie y me golpee contra el cristal, por un momento se me nubla la visión, pero no se si por suerte o no, me mantengo despierto a la espera de intentar esquivar el disparo, con la ligera esperanza de que el movimiento lo desestabilice a el también.
Tirada: 1d100
Motivo: CaC
Dificultad: 63-
Resultado: 97 (Fracaso)
Tirada: 1d100
Motivo: Suerte
Dificultad: 47-
Resultado: 99 (Fracaso)
Tirada: 1d100
Motivo: Con
Dificultad: 80-
Resultado: 53 (Éxito)
Arthur reacciona cayendo a un lado ante el frenazo y el hecho de que te precipites contra el cristal que hay a su lado, pero sujeta la pistola y consigue abrir fuego contra el cuerpo de Connor de nuevo, alcanzándole las costillas y haciendo que el dolor se haga entonces insoportable... La consciencia llega a pasos tan agigantados como la frustración de que aquel hombre vuelva a escapar, a salirse con la suya... ¿Era indestructible?
¿Esa era la última lección de tu vida...?
No...
El destino tenía algo más para Art Connor... Pero no por ello dejaba de ser cruel...
Cuando despertó, se encontraba en una nueva celda. Ésta vez en una cama limpia, creyendo morir de dolor en el torso, que había sido vendado e inmovilizado... La pierna en la que Dryden le había disparado le dolía, y a su alrededor todo apuntaba a una habitación de hospital de máxima seguridad... Y ese desalmado de Dryden se había debido encargar de que dejaran a su vista una especie de acuario de cristal cerrado, en el cual flotaba en formol una pierna cortada a partir de la mitad del muslo...
Tirada: 1d100
Motivo: Arma corta (penalizada)
Dificultad: 32-
Resultado: 7 (Éxito)
Tirada: 1d20
Motivo: Localización
Resultado: 12
Tirada: 1d10(+18)
Motivo: Daño
Resultado: 10(+18)=28
Tira EQM con un penalizador de 20 por ver tu pierna ahí estando tú aquí.
Abro los ojos, dolor, quiero volver a cerrarlos, que cese, estaba muerto, debía estarlo, ¿el puto infierno era esto?, un suplicio interminable, eso parecía, no digo que no lo merezca, sólo lamentaba haberme ido solo, aunque así es como me he sentido desde que él se fue, y aquí desde luego no lo encontraré, una terrible agonía que me impide descansar, ni siquiera eso se me concede.
La luz, demasiado blanca, demasiado limpio, una pierna, dirijo mi vista al lugar en el que debería estar, Dios, ni siquiera creo en él, y sin embargo aquí estoy, mentándolo sin saber bien con que finalidad, mis ojos vuelven a fijarse en la extremidad cercenada, la pesadumbre me invade, no podré volver a andar, no podré hacer muchas cosas, no podré vengarme, pero no soy capaz de cerrar los ojos, ¿por qué sigo vivo?, ese cabrón me ha mantenido con vida, pero, él piensa que estoy muerto, una pierna, ¿qué importa?, no la necesito, no para lo que me queda por hacer.
Mary, mis pensamientos vuelan hacia ella, mataré a todos los que te importan, Art, Art, su voz, un susurro que se pierden en el tormento, no importan lo fuerte que seas, no importa las armas que tengas, no importa nada que parezca que no haya salida, Mary, la oigo, tu eres corazón Arthur, y ese todavía late, tu fuerza siempre ha estado allí, ese eres tú, puedes superar cualquier cosa, no lo se Mary, ¿o si?, bajo la mano hasta palpar el lugar por donde ha sido cortada la pierna, duele, no importa Art, debiste haberme matado Dryden, debiste haberlo hecho, tu también te equivocas, aunque nunca lo reconocerás, soy el puto Art Connor, ¿qué más da la forma de morir?, nos encontraremos tarde o temprano, esa certeza me consuela, para él estoy muerto, y lo que ya está muerto no puede volver a morir, cada latido es dolor, así lo siento, y me alegra sentirlo.
Río, río, y cada leve movimiento me tortura, mezclándose los gritos de dolor, un loco, cierro los ojos, duele, siento, late, eso soy yo, no me hace falta nada más.
Tirada: 1d100
Motivo: EQM
Dificultad: 34-
Resultado: 23 (Éxito)
De nuevo unos instantes que parecen interminables... Hasta que llega la desagradable visita de Dryden, escoltado por dos guardaespaldas enormes y armados...
El hombre tiene cara de circunstancias, y aparta la vista inmediatamente de la solución en la que está sumergida la pierna de Connor, que por el síndrome fantasma aún le duele. Te mira a los ojos, inquisitivo.
- ¿Puedo preguntarle qué demonios es usted y porqué me quiere muerto...? - un casi imperceptible deje de consternación en su voz.
Dryden, podría intentarlo, pero seguramente sus guardaespaldas me matarían, aunque nada era seguro en este mundo, ni siquiera lo era ya la muerte, la imagen de la inmortal mujer llega a mi mente, donde no se exactamente donde ubicarla, el caso es que me distrae de la pregunta que me formula aquel hombre.
Regresando de la ensoñación, de un mundo complejo a un mundo real, Las razones por las que merece morir son interminables, pero, a pesar de todo, nunca fue mi objetivo matarte, sólo quería ayudar a tú hija, no me había pasado desapercibido la forma de llamarme, Con respecto a lo que soy, únicamente en lo que me has convertido,
- Muy bien. Ya veo que, tal como se me advirtió, las criaturas como usted no razonan. La humanidad tiene derecho a saber cómo hay hombres de naturaleza tan difusa como usted... Espero que disfrute de su estancia en las instalaciones de un laboratorio. Pero tranquilo: No será el mío, yo no hago semejantes atrocidades. Espero que no nos volvamos a ver.
Dryden y sus dos guardaespaldas se marcharon sin oir una palabra de las que tuvieras que decir... De nuevo volvías a estar sólo, y de nuevo pasaron las horas así.
Ni siquiera escucho lo que dice, cierro los ojos, cansado y dolorido, por suerte no puedo pensar demasiado, recuperar algo de fuerzas, aunque no se bien para que, quizás para regresar a Nueva York, y allí seguir con el puto virus, o simplemente visitar algún lugar que antes no había estado, aunque la verdad es que no tengo demasiados buenos recuerdos de los lugares desconocidos.
¿En qué estoy pensando?, en nada Art, no pienses, nunca fuiste bueno en eso, siento la boca espesa, tengo sed, un regusto amargo y la sensación de impotencia e inutilidad empiezan a aparecer, descansa Connor, no pienses, cierra los ojos.
...y Connor cerró los ojos, sumiéndose en un profundo sueño...
Una cortina de niebla se abría como un telón ante él, y un curioso pierrot pelirrojo y de aspecto andrógino le sonreía y le tenía una piruleta roja y blanca, con dibujo espiral en ella, con pueril y grotesco "encanto"...
- Yo sé - decía con un estúpido falsete - dónde puedes encontrar una pierna que se ajuste a tu cuerpo y tu fuerza... - Un truco de prestidigitación, juntando las manos enguantadas de blanco, girando las palmas una sobre otra y sacando una cenefa de papel con dibujos de piernas, eso sí, con tacones - ¿Te interesa...? - el pierrot mostraba una sonrisa macabra, pero limpia y cuidada, en aquel entorno tan iluminado que tan sólo se veían los colores oscuros, y la forma de los claros se perdía...
- ¿Qué coño es ésto...? - preguntabas desconcertado y pestañeando.
- Sólo un sueño - contestaba el pierrot, sacándose de la espalda una fresca y vigorosa rosa de color salmón - Así que... En tu mundo... ¿Qué habrías hecho para recuperar tu pierna...?
La luz lo inundó todo... Un terrible grito de dolor surgió entre el blanco absoluto, y alguna parte de aquella pureza fué salpicada de sangre... La voz de tu hermano resonó, como un eco entre paredes invisibles...:
- ¿...Justicia?
Esos gritos... ¿Era un hombre? ¿Un animal? ¿Un niño...? Aquella blancura seguía salpicándose de rojo...
- ¿...Diversión? - la voz de Taylor ésta vez...
Entonces una voz sonó inconfundible en el torbellino ebúrneo y mareante... El embriagador tono de Jolene...
- ¡No me hagas daño, por favor...!
- ¡¡NO SE TE OCURRA TOCARLA, HIJO DE PUTA!! - la voz de su madre, llorando desesperada - ¡¡ARTHUR!! ¡¡DESPIERTA!!
Varios golpes secos, un charco de sangre, un aullido desesperado, los llantos de Jolene aumentaron, amortiguados por una fuerza que seguramente le presionaba aquellos perfectos labios...
- ¡...Perfecto! - concluía la voz invisible del pierrot, riendo satisfecho.
- Qué... ¿Qué coño has hecho... Art? - una vez más, tu hermano...
- Dirzas - interrumpía el pierrot - Dirzas es la clave... Conseguirás una pierna... Ya tienes la contraseña, ¿verdad...?
El blanco de pronto se resumió en negro absoluto. Desaparecieron los tintes rojos, los colores del pierrot, y la última voz fué hueca, como si tu hermano hablase a través de un cristal:
- ¿¡QUÉ COÑO HACES, ART!?
Sobresaltado, despertaste... El aire era denso... El olor espeso y férreo... Estabas tendido boca arriba, pero frente a tí ya no estban las luces de quirófano, sino una lámpara de araña dorada e inmensa, de lujo casi extremo... A tus lados cuerpos de guardaespaldas, algunos con el cráneo destrozado, otros con el cuello roto; dobermans en el mismo estado... Los posibles supervivientes podrían contarse con los dedos... La quietud era total en aquella mansión... Tánto que resultaba sepulcral, y tan sólo aquella lámpara de araña alumbraba la inmensa estancia en aquella noche... Al pié de unas escaleras se encontraba Elisabeth Dryden yacía, tendida como una muñeca desmadejada sobre un charco de sangre que podría ser suyo o del cadáver que tenía justo al lado... Ni rastro de Jolene o de Arthur Dryden...
Me incorporo con un movimiento brusco, apoyando los codos en el suelo, parpadeo, arrugando la nariz por el olor, mis ojos buscan mi pierna de manera inevitable, suspiro al ver que todo ha sido real, ¿todo?, ¿por qué estoy aquí?, ¿qué cojones es todo esto?.
¿QUÉ COJONES ES TODO ESTO? mi tono de voz suena extraño en la quietud, muertos, sangre, mi cabeza, hermano… ¿dónde estás?, yo no he hecho nada, NO HE HECHO NADA, ¿por qué te escondes?, mis ojos recorren la habitación, pero sólo encuentran cuerpos muertos, ¿muertos?, ¡MI PIERNA!, ¡DIRZAS! los gritos solo encontraban el silencio como respuesta, sólo aumentaban la terrible sensación de no saber donde estoy, y no me refiero a no conocer el lugar, la mansión de los Dryden, un aguijonazo de dolor en el pecho, pero soportable ahora, PATRICK, ¿Por qué está ese payaso contigo?, PATRICK, ¿dime que he hecho?, ¡DIMELO! había un payaso, de esos que se ponen en el parque, el sabe cosas, en mi sueño, en el hospital, Dryden, Jolene, no iba a hacerle daño, no quería hacerle daño, ¡PAYASO!, no se si te llamas así, ¿Dirzas?, la clave, la recuerdo, no soy tan estúpido, Tremens, cero, ocho, cuatro, solo a Dirzas, debo cuidar a Alma, se lo prometí al niño mi mano izquierda recorre mi cara, palpándola con brusquedad, sacudo la cabeza, tengo que salir de aquí, yo no he hecho nada, me culparan de todo, tengo que irme.
Apoyando los brazos en uno de los muebles, apoyo la pierna con la escayola en el suelo, pero un tremendo dolor, hace que, instintivamente busque el apoyo de la otra pierna, caigo al suelo con estrépito, arrastrando unas fotos que había sobre la cómoda, ¡MALDITA SEA!, HIJO DE PUTA, HIJO DE PUTA, golpeo con fuerza el mueble, mi pierna, lágrimas de frustración y rabia en mis ojos, odio, los gritos, todo se vuelve rojo a mi mirada, como en algunas películas, dando un nuevo golpe en el suelo comienzo a arrastrarme por él, aparto los cuerpos que se interponen en mi camino, aún tengo esta fuerza, el cuerpo de la madre de Jolene, es mi objetivo, no se porqué, PATRICK, PATRICK vuelvo a llamar desesperado, AYÚDAME POR FAVOR, AYÚDAME, un sollozo, sorbo por la nariz, tengo miedo hermano la muerte que me rodeaba, estoy solo, soy un inútil, ni siquiera puedo mantenerme en pie, ayúdame… termino casi en un susurro mientras continuo mi penoso movimiento.
Tirada: 1d100
Motivo: EQM
Dificultad: 54-
Resultado: 70 (Fracaso)