Partida Rol por web

Mientras buscamos en lo que resta de los alrededores, totalmente devastados, respondo levemente ante las preguntas de Etain, ya que al parecer no llegó a tiempo para poder enterarse de las malas noticias. *Ahora que lo pienso, llegó justo antes del ataque... - Creo que Austin es más capaz de explicarte los... detalles. Pero recientemente llegaron esas noticias de NuevaYork... al parecer ... se han utilizado armas nucleares contra una nave nodriza alienígena. Y... - miro con preocupación hacia los restos de Filadelfia. - al parecer eso nos costará un desastre climático en todo el globo. *ganar una guerra con semejante sacrificio. Ni siquiera hay garantías de que la raza humana pueda sobrevivir...

Incapaz de explicar nada más que pueda calmar a la pobre chica, me empieza a intrigar más quién es, o cómo llegó sola a la base. Mientras vamos hacia la pequeña columna de humo, y sin dejar de vigilar, me atrevo y le pregunto - Era Etain... verdad? cómo fué que lograste llegar hasta la base? ..  

Entonces Lau interrumpe llamándome por mi nombre. Me giro con cara de "algo no va bien". Hacía días que no me hablaba Lau, y menos aún por mi nombre.  El campamento muestra señales de lucha, sangre, y restos de otras personas. Y entre todo eso... Lau destaca una mochila. La mochila de Jon. 

-Oh dios. - digo, atando cabos. Y de repente entre los restos distingo una gorra. Me agacho a cogerla y instantáneamente sé de quien es. Y no puedo evitar mirar los restos que dejaron las ruedas que al parecer marchaban al oeste. - Esa no es la dirección en la que fueron los saqueadores???  - Era más una afirmación que una pregunta, pues los vimos ir hacia allí justo antes de que se toparan con el chevy y el humvee - Tenemos que volver. Tenemos que avisar a los demás!

Nos había llevado un buen rato, pero teníamos todos los motores a punto, le había ido explicando a Austin, sin detenerme a ver si entendía. Una vez terminada la tarea me habría apoyado en el capo del coche cruzándome de brazos, Sam pensaba usar a mi bebe de cebo llevaba un buen rato pensando como disuadir esa idea sin pasar a discutir con todos sobre porque no cuando alguien señalaría hacia unos arbustos y lanzado una advertencia por instinto mi mano buscaría el arma y apuntaría como si en realidad supiera lo que hiciera -Quien quiera que seas, si no sales con las manos a la vista, te vas a lamentar- Dejaría escapar la amenaza como si en verdad  fuera a hacerle daño, aunque no pensaba disparar, no aun por lo menos, aun recordaba la sensación horrible que me había quedado cuando le dispare al antiguo conductor de este coche a pesar de que fue en defensa me seguía molestando "Creo que eh sido culpable de mas muertes que de los que eh salvado"

Con atención voy escuchando las indicaciones de Cassandra y de Tim. Lo cierto es que lo único que me resulta nuevo son las cosas más "del barro" del trabajo, como cómo colocar las manos para acceder a un punto, desde donde poder ver una pieza y ese tipo de cuestiones. El funcionamiento de un motor en si es bastante sencillo y no esconde ningún gran misterio.* Aún así, lo cierto es que sí es complicado tener la destreza adecuada como para saber manejarte con el motor, y en eso sí tengo que practicar.

Lamentablemente, algo me mantiene un poco distraído, algo que ya compartí con mis compañeros de coche, pero a lo que no dejo de darle vueltas hasta que oímos ese ruido entre la maleza.

Con rapidez apunto mi brazo en esa dirección portando el brazalete alienígena, el corazón me late rápido mientras lentamente voy moviéndome hasta colocarme detrás de uno de los vehículos para dificultar el disparo si intentasen hacerme algo, además de tener una linea clara de disparo por mi parte sin poner en riesgo al resto.

- Esto es un arma con la que no necesito apuntar, y si echas a correr te puedo alcanzar igualmente, así que más te vale salir lentamente y con las manos a la vista - amenazo con calma en mi voz que hace que la amenaza suene más convincente. Si se mueve más de lo debido intentaré alcanzarle con el brazalete. Con un poco de suerte lo aturdirá y nos permitirá que no huya.

Todo lo que había aprendido de mecánica era por mi propia cuenta, el trabajar al lado de alguien que ha trabajado como profesional da gusto. Conozco bastante de mecánica, me he peleado con motores, correas, direcciones, frenos, ejes… pero ella tiene un algo. Decido guardar silencio mientras ella explica, Austin tiene cara de entender todo, pero por lo que conozco a los ingenieros siempre tienen esa cara y luego no saben donde está la punta del destornillador. No puedo evitar sonreír durante todo el proceso.

De pronto Becca llama la atención sobre unos ruidos tras unos arbustos. Cassandra reacciona rápido sacando el arma y Austin lo apunta con el suyo continuando la amenaza… Así que me uno a mis compañeros y apunto con el arma.

Euuu, es una historia muy larga. -Protesto ante la insistencia de la chica nueva.- Y créeme, la ignorancia es la felicidad, ojala yo no supiera la mitad de lo que sé- Le digo tratando de disuadirla pero viendo que está muy interesada y que  Emma parece haberse fumado un porro, pues la película que le responde se ajusta a la realidad tanto como una mierda a un polo de chocolate, así de decido ir contándole. -Estaaaaa bien, pero luego no digas que no te he avisado.

Al oeste, entre Scranton y Williamsport encontramos un sitio lleno de tiendas de campaña, parecía un puesto militar abandonado. Había antenas, ordenadores, parabólicas y cosas de esas. Creíamos que no había nadie pero nos atacó un psicópata que se había hecho un collar de orejas humanas. Al final le corté la cabeza. -Le resumo- Lo importante es que entre Austin y el gordo ese que se ha quedado en el campamento se las apañaron para poner en marcha el generador y todas las antenas y ordenadores de aquel sitio cobraron vida. Era increíble, escuchamos un montón de señales desde todas las partes, había gente que pedía ayuda, otros que se despedían de sus familiares antes de suicidarse… -Un escalofrío recorre mi cuerpo- Escuchamos una señal de una niña pequeña que atrapada en el sótano de su casa suplicaba ayuda para su madre que ya no se movía…   joder, habría sido mejor que nunca hubieran puesto en marcha esos malditos ordenadores, algunas noches aún escucho la voz de aquella niña pidiendo ayuda.- Suspiro hondo haciendo una pausa en el relato.

Entre todas aquellas señales pillamos una que parecía importante, venía del ártico y estaba en ruso. No teníamos forma de entender lo que decía de modo que la grabaron en un lápiz de memoria y nos la llevamos. Cuando finalizó la misión y los azares del destino nos llevaron a Scranton encontramos a esa chica… Nadia, una ucraniana que decía entender el mensaje y que nos lo tradujo.

Era un mensaje pregrabado, su autor era el capitán de un submarino nuclear o algo así, el tipo pedía perdón al mundo, contaba que Rusia lanzó todas sus bombas nucleares contra una nave de las grandes. La derribaron, si, pero te puedes imaginar los efectos. Dijo que desde los Urales a Alemania Europa era un páramo radioactivo y que debíamos prepararnos para un invierno nuclear…    yo no me lo tomé muy en serio, pero después de la lluvia rara esta que hemos tenido ya no estoy tan segura.  -En esos momentos vemos el humo y aprovechando que ya no hay mucho más que contar doy por finalizada la explicación, que me ha dejado con la boca seca. -En fin, es mejor centrarse en el ahora. No tiene sentido rayarse por algo que está más allá de nuestro alcance.

Cuando escucho a Lau diciendo que eso pertenece a Jon intento no sonreír mientras una palabra toma forma en mi cabeza. -Karma- Que el psicópata que estuvo a punto de matarme acabe en manos de otros cómo él solo puede definirse como karma o justicia divina. La suerte que haya corrido Jon me importa un rábano pero el problema parece más serio, pues si todos los demás estaban con él…  eso sí que es un problema. ¿No habrá muerto nadie? Imposible, aquí hay balas para matar a un regimiento… y sangre…   ¿Se habrán llevado a los muertos?

Aprieto la katana con fuerza sin dejar de mirar hacia los alrededores, como temiendo que nos ataquen de repente. -Prontos e hará de noche. Yendo solos y a pie tal vez podamos acercarnos a su campamento sin ser vistos y averiguar algo más. 

Sabiéndose descubierta y al reconocer a algunos de vosotros finalmente una figura sale de detrás del árbol. Inmediatamente reconocéis a la niña que guarda algún tipo de vínculo afectivo con Carmen. La niña parece asustada y nerviosa aunque ya ha pasado por demasiadas cosas para llorar, ha madurado a la fuerza.  

No va a venir nadie. Están todos muertos - Os dice desde su sitio, revelando llevar un rato   escuchado vuestras conversaciones – Vinieron personas que parecían buenas  y…  y …  y ….  luego han matado a muchos y se han llevado a los que quedaban con vida. -Os dice desde su sitio, sin acabar de atreverse a acercarse.

Permanezco distraída mientras Cass, Tim y Austin trastean con los vehículos, mis conocimientos de mecánica se reducen a avisar a la grúa.

Caminando para no quedarme helada voy barruntando cual debería ser nuestro objetivo si McKnight no regresa, es cierto que el coronel no es santo de mi devoción, pero es de justicia reconocer que llevar el peso de tomar las decisiones, no es fácil. ¿Qué deberíamos hacer? ¿Cómo sobreviviremos?

 Al escuchar los sonidos entre la hojarasca mi mano se dirige a la espalda para agarrar la pistola que llevo en los vaqueros, aunque relajo el gesto al reconocer a la niña. ¡Helen! – Exclamo entre sorprendida y alegre al verla con vida, lo que de paso le quita un gran peso a mi conciencia, aunque las palabras que lo siguen no son nada esperanzadoras.

Ven cielo – Le digo acercándome a ella y agarrando su mano. -¿Cómo que están todos muertos? ¿A quién se han llevado con vida? Cuéntanoslo todo con calma.  ¿Y Nadia? ¿Qué pasó desde que nos separamos?    

Al ver a la niña dejo de apuntarla rápidamente aunque no suelto el arma menos al escuchar su relato, puedo sentir mi propio corazón latir con fuerza contra el pecho "Estamos jodidos" -Creo que no nos dejaran quietos, van a esperar a que bajemos la guardia, algunos de los nuestros están ahí afuera recorriendo el área deben estar en peligro- Tras decirlo en voz alta, realizo que Vincent jamas hizo ningún sonido por la niña y había dado todo un plan sobre como serían sus sonidos -Sam.. ¿Tu escuchaste a Vincent?- El órgano que antes latía con fuerza estaba comenzando a doler de nuevo, si había perdido otra persona en menos de 24 horas iba a ir sola si era necesario y matar cada alma que pudiera solo por venganza, ya no me iba a importar ser una buena persona, ya no seríamos nosotros los humanos contra ellos los aliens, pasaríamos a ser nosotros como grupo contra todo -No me voy a quedar de brazos cruzados a que nosotros solos descubramos como salvar el estúpido mundo, vamos a re agruparnos, y usar la única ventaja que tenemos- Apuntaría al todo terreno con la mano que tenía el arma -Me canse de jugar limpio, me harte de preocuparme por la humanidad, definitivamente somos tan idiotas y como tenemos la cabeza bien metida donde no da la luz como para pensar "Ohh quizás unidos si tendríamos una maldita posibilidad" nos matamos entre nosotros, y ya que cada maldito grupo que nos cruzamos se propone hacer eso con nosotros ya no creo que podamos jugar limpio, creo que es hora de rebajarnos a su nivel así me tenga que arrepentir por el resto de mi vida por quitarle la vida a mas humanos- Estaba perdiendo los estribos y delante de una niña "Perfecto Cass sigue así, seguro David se retuerce en su tumba al escucharte" 

Queriendo liberar un poco todo lo que sentía patearía la llanta del Chevy -Lo siento- Murmuraría apretando la mandíbula y dirigiéndome mas que nada a los adultos que a la niña, acababa de perder los estribos de manera bastante importante delante de todos y no estaba segura que tanto podría ser solo frustración cansancio y pena o que tanto en realidad sentía cada palabra dicha - Lo siento, este día ah resultado ser el segundo día mas difícil de mi vida y parece que solo se complica mas en cada segundo y solo hay 3 días así en mi top 10- "La muerte de papá, hoy, y cuando mato a casi todos en el coche y mate al compañero de Tuco, el ex dueño de mi amado Chevy, Ja, y luego me tomo la delicadeza de pensar que no soy como ellos, o que no lo soy del todo, viva la hipocresía"

La niña respira hondo para serenarse- Cuando os fuisteis Nadia me trajo hasta aquí con la moto, pero al poco de llegar empezó a llover, menos mal que encontramos un desagüe donde escondernos, porque el agua manchaba y picaba mucho.

Cuando dejó de llover encontramos a los soldados y a los otros. Acampamos por allí- Dice señalando la dirección por la que se han ido Emma, Lin, Lau y Etain. – Entonces vinieron unas personas, querían comida, estaban muy delgados y parecían tener mucha hambre y… y  el coronel les dijo que no teníamos nada, y entonces salieron de todas partes y empezaron a matar y…  y los soldados a disparar…     yo escapé corriendo. He estado todo el rato aquí escondida. Los soldados tenían pocas balas y…  y los otros ganaron… y se quedaron con todas las cosas y se llevaron los coches.- La niña hace una pausa para sorberse los mocos mientras se limpia los ojos con la manga - Creía que también iban a matar a los que se habían rendido, pero se los llevaron en un camión. Se marcharon un poco antes de que llegarais vosotros.

 Vincent tenía que centrarse en vigilar. Tienes...tienes que controlarlos, no puedes permitir que...madre mía, ¡Dios santo! negó una y mil veces, se sacudió la cabeza, frotó los ojos y miró respirando agitadamente por la mira. ¡no! ¡NO! volvió a frotarse los ojos, y miró por la mira del rifle contemplando imágenes de pesadilla. Era un profesor de mente abierta, pero aquello, en vivo, en directo, era simplemente horrible.

 - Joder...

 Rápidamente pensó en el grupo que se había alejado en busca de recursos. Aquello pintaba muy mal.

 Es...la hora de comer. Eso quiere decir que habrá pocos. O la oscuridad no les gusta y se sienten seguros allí, o hay algo peor que ellos suelto por este desastre.

 Se limpió el sudor frio de la frente con la manga, y respiró sin dejar de mirar una y otra vez por la mira.

 Allí, bajo el cielo que se abría ante él, lo más parecido a estrellas que podía pararse a observar eran los fuegos de las antorchas de la degeneración del hombre. El canibalismo tenía una profundidad cultural innegable, tenía decenas de justificaciones prácticas, e incluso éticas. Pero si involucraban el asesinato, tratar a otros humanos como ganado, era una forma contraria a cualquier modo civilizado de vida. La gente presa parecía el ejemplo claro de que aquello no iba a acabar bien.

 Vincent no era ningún héroe. Ahora, como siempre, era un observador proactivo, deseoso por participar, por descubrir, curioso, dispuesto al cambio. Y sin embargo, había líneas que no podía transgredir. Aquella era una línea muy clara que no podía aceptar. Pero, ¿podía permitirlo?

 Sólo era un hombre, frente a centenares. Sólo era un humano sin más habilidad que el uso adecuado de las formas del lenguaje natural, de la argumentación lógica, de la historia y su trasfondo, del conocimiento de la humanidad. Jamás pensó que pudiesen degenerar tan pronto. ¿Cómo explicar aquella conducta a través de la naturaleza humana? ¿Cómo el humano, en el salvajismo de la supervivencia, renuncia a toda su cultura y adopta otra? Estaba claro que aquello no era una mentira, la gente en las jaulas eran comida, todos allí eran partícipes de aquella atrocidad.

 - Tengo que vigilar... - se digo tan bajo que si tuviera alguien al lado no podría haberle entendido. Se las arreglarán. Desconfiaron de tí. Ya no está David. Y a la mínima sospecha Lin va a cortarlos en pedazos a ellos. Sabía de lo que era capaz una adolescente que hablaba de ese modo, aunque parte de la fuerza de su juventud se escapase por su boca. 

 Cubriré a Sam y el resto, cuando vuelva para que me releven les explicaré todo.

 Seguiría vigilando hasta que no pudiese vencer al sueño, sin arriesgar demasiado, y si volvía a tiempo, lo haría rápido y lo más silencioso posible, agachado. Si tenían vigías, no quería que le descubriesen a él.

Al reconocer a la niña bajo el arma y pongo el seguro, escucho atento la historia que relata. Samantha se acerca a ella y le pregunta, supongo que vinieron un trozo juntas, no entiendo bien de qué hablan.

Por su parte Cassandra empieza a ponerse un poco nerviosa temiendo que nos ataquen en cualquier momento, y clamando al juego sucio. Me recuerda a lo vivido hace apenas unas horas. De repente golpea una rueda del vehículo y parece calmarse.

Momento que aprovecha la niña para contar su historia, llenar los huecos de los que no vinimos con ella... ¡Mierda! - no sé si se refiere a los mismos con los que nos hemos cruzado. Miro a Cassandra de reojo, creo que tenemos que ponernos en marcha y agruparnos como decías. Se nos van a echar encima.

Oh Dios. – Comento al escuchar a la niña. Suma y sigue, comprendo la reacción de Cass porque esta mierda de día solo hace que empeorar por momentos.

La situación es mucho más mala de lo que imaginaba – ¿Iban en el camión en el que nos hemos cruzado? - Le pregunto llevándome una mano a la frente. -Si lo hubiéramos sabido… sin embargo hicimos lo más fácil, pasar de largo.  

Asiento a Tim, hay que reunirse con los demás.- A nosotros no nos atacaron porque las ametralladoras les intimidaron bastante. No creo que vengan abiertamente a por nosotros, pero nada nos garantiza que no lo intenten en cuento se haga oscuro.

Sacudo la cabeza enfadada conmigo misma, he intentado evitar el conflicto, he intentado no tener que luchar pero el destino quiere que acabemos a malas hagamos lo que hagamos. – Me niego a quedarme esperando a que nos peguen un tiro, me niego a ser la víctima.  Si hay que luchar, vamos a por ellos. Sigámoslos, los matamos y rescatamos a nuestra gente.

Me paso las manos por el pelo, si bien mantenerme ocupada parece un gran plan, mataría por poder mantenerme ocupada sin pensar en que puedo morir o en salvar a todos "Florida.. Florida habría sido un gran lugar" -Tenemos que buscar a los demás, en camino al gran rescate, el Chevy es mas rápido, así que puedo manejar como si una nave me persiguiera buscando al resto, que pueden que aun no hayan capturado- "O morir intentándolo"- Si alguno, no quiere esta nueva misión suicida, no tiene por que ir, puede esconderse y esperar a que pasemos a buscarlo si sobrevivimos- Miraría a Austin y su brazalete - ¿Lo has usado en humanos?- Miraría a los dos chicos con algo de preocupación -Saben que vamos a matar a nuestra especie, a otro humano y fuimos educados toda nuestra vida para saber que eso es moralmente incorrecto, les aseguro que aunque sepan que son ellos o ustedes no se sentirá bien, pero no pueden dudar...- No pretendía ser cruel, si no prepararlos.

Mi mirada ira a la niña, como diablos la protegeremos -No se si ella debería ir con ustedes, o esconderse en algún lugar- "Piensa, como ellos, no debes de precipitarte" - Creo que podríamos estar siendo observados, pueden estar divididos y tener alguna manera de comunicarse, Julia tenía un teléfono funcional, nosotros encontramos una radio también funcional, varios coches, no todo murió con el PEM, si yo fuera ellos, nos rodearía mientras estamos divididos y distraídos arreglando coches, confiados de que se alejaron porque tenemos un arma grande que asusta, estaría colectando información y esperando el momento oportuno para atacar- "Oh simplemente ya perdí la cabeza y me esta pegando la paranoia, con fuerza"

Los intentos de Emma y Lau de buscar algo de valor son infructuosos, parece que la zona ha sido registrada a fondo con anterioridad y no hayan nada de utilidad. Finalmente, pese a las reticencias de Lin parece que la mayoría estáis por regresar con el resto y eso hacéis, desandando el camino hecho.  

Al llegar donde están los vehículos y el resto del grupo descubrís a Helen, la niña rubia que guarda algún vínculo afectivo con Carmen, los demás están a su alrededor escuchando con preocupación, las caras largas no auguran nada bueno.

El único que no está presente es Vincent que se ha alejado buscando un punto elevado desde donde otea los alrededores con la mira telescópica del rifle.    

Lau, Emma, Lin y Etain vuelven con vosotros, caras largas y miradas de preocupación no auguran nada bueno.

Montones de chatarra hacen las veces de muro-empalizada rodeando el campamento, pero compruebas que apenas tienen vigías, parecen confiar en la fuerza de su número.

No sería difícil acercarse e incluso infiltrarse en el campamento, pero los prisioneros están en el centro del mismo, llegar hasta ellos para rescatarlos sin ser vistos por varios cientos de personas sería un milagro.   No consigues ver nada parecido a un guardián de las llaves.

A tu espalda consigues ver como regresan los cuatro que se fueron, hay también una niña pequeña. Puedes ver como hablan entre ellos acaloradamente, es obvio que están debatiendo el curso a seguir, si quieres estar presente o aportar algo deberías regresar porque no parecen dispuestos a permanecer allí mucho más tiempo.

Al ver a la niña bajo rápidamente el brazo dejando de «apuntarla», aunque no llego a sentirme totalmente seguro, no después de todo lo que ha pasado.
Me quedo también unos segundos de más analizando la situación y después niego con la cabeza.
—La n... chica— corrijo rápidamente, probablemente el no tratarla como una niña nos pueda hacer ganar puntos— ha dicho que cogieron los vehículos, y ese camión iba solo, así que, o no son ellos o luchar no nos serviría de nada. Tenemos que trazar un plan inteligente, y un plan inteligente no es salir armas en mano a luchar contr aun grupo que ha derrotado a militares formados. Somos menos, y no sabemos combatir como quienes ya han perdido — me quedo pensando otros segundos —. La única opción que se me ocurre es encontrarlos y después utilizar a los alienígenas, de nuevo, para rescatarlos. Si consiguiésemos «llamar» a los alienígenas para que los atacasen, en medio de la confusión dudo que presten atención a los presos. El problema es que si hacemos algo así y fallamos, estaríamos consiguiendo que pasaran a ser presos suyos, y eso dificultaría todo mucho. Sobre cómo avisar a los alienígenas... solo se me ocurre emtir alguna señal fuerte, aunque cadezca de sentido. Aunque ya de paso podríamos intentar comunicarnos de verdad con otros humanos que nos pudiesen estar oyendo. Podríamos emitir un mensaje primero en claro citando hechos o similares, y utilizas las fecha de ese hecho como una clave de un cifrado JWE con AES 128 GCM con el que cifrar el mensaje que queramos comnunicar. Si hacemos eso, debemos dar por sentado que los alienígenas recibirán la señal y su localización, por lo que probablemente intenten atacar el punto en concreto para evitar más emisión de señales. La parte negativa es que no podríamos descontar que cuenten con humanos capaces de darles la información sobre esas fechas, y más a tenor de lo sucedido hasta ahora— según comento todo esto voy evidenciando cada vez más la necesidad de hacernos con un sistema de comunicación seguro. Lo más seguro sería establecer comunicación con un algoritmo de clave simétrica para comunicar dos partes, y mediante compartición física de la clave. De esa forma no veríamos vulnerada la comunicación con el resto en caso de que una clave se viese comprometida. El mayor problema para eso sería cómo emitir la información de forma rápida, y el consumo de energía, claro. Quizás podríamos utilizar los teléfonos móviles, no debería ser complicado utilizar la propia señal de teléfono para en vez de realizar una llamada, emitir un mensaje cifrado, pero consumirían batería, y tendríamos que disponer de un receptor siempre encendido, con el evidente consumo que eso implica, además de que el envío de la señal comprometería la posición, así que solo serviría para casos de emergencia. Quizás lo más óptimo sería emitir por wifi. Si consugiésemos unas antenas lo suficientemente potentes podríamos alcanzar una distancia de unas 15 millas, e incluso podríamos establecer repetidores a medida que nos alejásemos para repetir la señal... Y así los alienígenas deberían estar bastante cerca para localizarla. El problema seguría siendo el consumo de energía... maldito consumo de energía... Y luego, la otra opción, es buscar un nodo de internet y comprobar si sigue levantado, alguno debería estar, ya que el impulso electromagnético no debería haber freído los servidores que estuviesen apagados, pero claro, el nodo también dependería de la energía... y no podríamos suministrarla etérnamente sin disponer de una fuente de energía de larga duración distinta a la electricidcad. Ahora mismo nuestro mayor problema es la energía, y los alienígenas parecen disponer de una forma de generar energía a bajo coste, si no el brazalete no podría hacer lo que hace.

Escuchar a Austin hace que un gesto de disgusto se me dibuje en la cara, aunque pudiera funcionar la idea de involucrar y atraer a los aliens no me gusta nada. Se puede crear una distracción y sembrar el caos sin necesidad de "llamar" a los aliens.
- Como si envíamos una señal de radio contando un chiste verde, no dudo que se pueda hacer, pero esque eso no nos ayudará en nada.- Le digo señlalando a Cass. - Nosotras emitimos una señal de radio desde lo alto del Empire State Building y la reacción de los aliens dejó un cráter de varios kilómetros...   Meter a los aliens en esto es salir de Guatemala para meterse en Guatepeor. 

De eso estamos hablando cuando veo que regresan Lau y los otros, por sus caras deduzco que las noticias que traen deben de ser tan malas como las nuestras. -Este día de pesadilla parece no acabarse nunca. ¿Habéis visto algo?- Les pregunto interesada en lo que puedan aportar.  

Llegamos apresurados para contar lo que hemos visto y nos encontramos a la niña, Helen con el resto del grupo, que se sitúan a su alrededor con caras de malas noticias. - Chicos?.. que pasa? - miro hacia la niña mientras nos acercamos sin detenernos. - Helen??... estás bien?... - la miro con preocupación y luego al resto, por un momento decido esperar pero las noticias que traemos no son buenas y hay que actuar deprisa - Los militares llegaron antes que nosotros. Vimos algunos restos que hemos reconocido... pero encontramos señales de lucha y los restos de algunas pertenencias como si les hubieran atacado y parece que les hayan llevado hacia el oeste. Igual que por donde marcharon los saqueadores... - hago una breve pausa, como si hubiera echado más agua helada a sus caras. 

Etain se había quedado sin habla al escuchar a la chica de la espada relatar lo sucedió en Europa con aquella falta de preocupación. Por alguna razón había supuesto que su familia estaría a salvo ya que vivían en una zona muy apartada, en el interior de la isla, pero la noticia de aquel desastre nuclear despertaba en ella una profunda desazón.

Aun andaba pensando en ello mientras exploraban el abandonado campamento, razón por la que apenas fue capaz de hilar un pensamiento coherente cuando recogió el casco manchado de sangre del suelo. No abrió la boca el resto del trayecto, y siguió a los demás abrazándose al casco con expresión ausente.

Poco a poco un pequeño destello de esperanza fue abriéndose paso en su estado de animo, ya que la zona afectada no estaba muy cerca de Irlanda, por lo que podrían haber tenido tiempo para ponerse a salvo y protegerse de lo que se les vendría encima.

Cuando llegaron junto al resto de los compañeros de viaje, se dio cuenta de que había algún tipo de discusión en marcha, pero cuando les preguntaron por lo que habían descubierto les mostró a todos el casco militar manchado de sangre, y su característica inscripción "Sonríe, mañana sera peor" que lo identificaba como propiedad de McKnight.