Partida Rol por web

Os apresuráis para salir del hospital lo antes posible, no sin antes revisar que todas vuestras armas están en perfecto estado y con munición. La idea de que cada vez que os habéis separado, ha ocurrido algo trágico os ronda la cabeza, pero habéis tomado esa decisión y ahora no os vais echar atrás.

Cogéis de nuevo el coche y ponéis rumbo a la parte central de la ciudad.

Al ser el primero en salir, soy el primero en llegar al coche, así pues me siento en el sitio del conductor. Mientras los demás entran, arranco. Una vez dentro todos, les pregunto:
¿HAcia donde exactamente quieren ir los señores?

Jens echa un último vistazo por la ventanilla al edificio del hospital, más desolador que nunca. El río será demasiado extenso como para encontrarse con lo que quiera que buscan de buenas a primeras.

- En el diario no había más pista que lo que decía Mario acerca de bajar hasta ahí - dice - Deberíamos probar a ir hasta el punto al que hubiera llegado él al salir del cementerio. - la idea es tan aleatoria y vaga como cualquier otra, pero era necesario un punto de partida.

Miro el sitio tratando de pensar...

- Bueno, Mario disponia de mucho tiempo para vagar... No tenía nada más que hacer, hasta que se inició como enterrador... Supongo que lo más acertado sería empezar por el lugar más cercano al cementerio, y seguir el curso del rio. Algo debía haber aquí para que lo nombrara en el diario.

OK, en marcha.- conduzco por el camino mas corto entre cementerio y rio.

Volvéis a mirar el mapa para ver la situación por la que, supuestamente, habría llegado Mario al rio. Dado que el cementerio se encuentra al noreste de la ciudad, pasáis el rio por el puente ubicado más al norte para llegar a la parte del rio más cercana al cementerio.

El trayecto apenas dura unos cinco minutos, debido a la cercanía del rio. Cuando llegáis, podéis observar un parque que linda, durante un par de kilómetros, con el rio en la parte más al norte. Un camino, marcado por una línea de arboles colocados en paralelo al rio, lo bordea creando un paseo muy parecido al utilizado en los paseos marítimos. Varias zonas infantiles observáis según avanzáis en paralelo al rio hasta que veis algo que os llama la atención. Junto al rio, en el camino que lo bordea que suponéis es para uso de los peatones, se encuentra aparcado un coche bastante antiguo.

Al acercaros, observáis que se trata de un extraño coche marca Azlk. No os suena el nombre, por lo que suponéis que no se trata de un coche estadounidense.

Paro al lado del coche abandonado. Desde el interior de nuestro coche, miro la marca del otro...
Azlk, Azlk,Azlk...
Chicos,¿en el diario de mario no hablaba de un coche de la marca Azlk?¿O son imaginaciones mias?

- Creo que sí..- dice. La marca del vehículo era demasiado extraña como para olvidarla.

Apresurando el paso, se dirige hacia el coche, movido por la curiosidad.

Me bajo del coche, pero no me muevo de al lado de la puerta, y dejo el motor en marcha. Mientras Jens se acerca al otro coche, yo oteo y observo a nuestro alrededor, vigilante.

Me bajo y camino tras Jens. Me giro para mirar a Cool, y asiento con media sonrisa cuando veo que deja el coche en marcha y se queda cerca.... Bien, muy bien... Saco mi arma, y la preparo para disparar, caminando unos pasos detrás de Jens...

No hemos encontrado nada bueno desde que llegamos a esta ciudad. El último vehículo llevaba los ataudes....

Los cuatro bajáis del coche y mientras Jens y Carrie se acercan al coche abandonado en el parque, Binnie y Cool se quedan junto al coche, con el motor encendido, por si hubiera que salir corriendo.

Al llegar al coche, observáis que está abierto. Tiene las ventanas bajadas y las llaves puestas. Parece que el que lo dejó aquí se despreocupó por completo de él. Observáis varias pisadas en el suelo que han quedado marcadas en la fina arena del parque. Intentáis seguirlas con la mirada pero se pierden en el césped.

Desde mi posición, veo como los dos miran hacia el suelo, como si estuvieran buscando algo.
Espera aqui, voy a ver qué pasa- le digo a Binnie.
Al acercarme a ellos, comprendo lo que pasa, están mirando, e imagino que intentando descubrir hacia donde se dirigen, una shuellas qeu se marcan en la arena.
Ah, es por esto- digo al aire.
Intento seguir el rastro.

Se acerca junto a sus compañeros, intrigado por saber lo que buscaban. Se da cuenta de que buscan algún rastro de por donde continúan las huellas que salían del coche. Se une a la búsqueda pero con poco acierto.

- A saber cuanto tiempo lleva esto aquí. Sin duda debe tratarse del coche que cogió Mario, pero, ¿Por qué lo dejó aquí aparcado?. -

- Solo podemos conjeturar - dice - Podría haber encontrado algo en este mismo punto, o tan solo parecerle un buen sitio para aparcar -

Las huellas no le dicen nada. Nunca había sido de los mejores siguiendo rastros cuando era niño, y estar en un lugar extraño tampoco iba a cambiarlo. Finalmente, decidió acercarse más al coche y comprobar su interior.

No sacamos nada en claro de las huellas, asi que me dirijo a abrir el maletero y registrarlo.

Las huellas desaparecen en el jardín y ninguno sois capaz de adivinar por donde continúan. Al final, desistís y volvéis al coche ruso en busca de alguna prueba o indicio que os lleve por el buen camino, pero no encontráis nada.

El coche se encuentra totalmente vacío, salvo por un mapa de la ciudad igual que el que tenéis vosotros y las llaves que s encuentran puestas.