Partida Rol por web

El frio y el meido me hacen temblar... aunque como vampiro no deberia afectarme el clima mi estado mental es tan fragil que no puedo evitarlo. Sin saber a donde me dirigia, de donde venia, o que me habia pasado, segui caminando por aquel oscuro callejon mientras la lluvia me bañaba sin piedad. Mis ropas raidas apenas cubrian mi cuerpo por el azote del agua, y mi pelo me tapaba un poco la vision, la noche oscura se extendia sobre mi oculta por una densa capa de nubes de tormenta... pero no podia frenar, tenia que escapar, seguir adelante y no mirar atras...

Voy mirando a mi alrededor, imaginando peligros en cada rincon y en cada sombra... no estaba bien, mi mente estaba ligada a la realidad por un fino hilo que estaba a punto de romperse. El ruido de la lluvia mezclado con otros sonidos del entorno me producian un miedo indescriptible... en la oscuridad se dibujaban monstruosas siluetas que me producian terror, los relampagos iluminaban fugazmente los alrededores y creaban mas figuras fantasmagoricas que mi mente confundia con enemigos. No podia hacerle caso a mi cabeza, tenia que seguir corriendo.... seguir... no parar.

De repente mentalmente escuchas la voz del anciano. Sigue tus instintos.

Cómienzas a correr lejos de esa casa. Estas tan desorientada que no sabes donde te encuentras, volteas por varias calles sin  dirección exacta, y de repente lo observas.

El rayo cruza delante de ti directo hacia una tapa de alcantarilla, la proyección del mismo, pareciera como sí te señalara un sitio.

 No lo pienso dos veces, un rayo habia sido lo que me habia liberado de mi prision y ahora me marcaba una ruta de escape del infierno en el que me encontraba. La voz del anciano retumba en mi cabeza... sus palabras son enigmaticas pero decido dejarme llevar, despues de todo el parecia ser mi unica luz en esta noche oscura. Sin saber que mas hacer ni donde ir, abri la tapa de la alcantarilla y me meti dentro esperando que el destino se apiadara de mi.

La alcantarilla es fácil de abrir, bajas la misma y cierras la tapa temblando.  La cloaca, esta limpia, no hay aguas negras, si hay acumulación de basuras y  barro seco que desprende un mal olor. Escuchas pasos apresurados encima de ti, en la superficie, pero lógicamente no quieres ser encontrada, así que comienzas a caminar por la cloaca  cuando de repente sin darte cuenta una especie de Jaula (lo creas o no), cae sobre ti.

Paralizada crees que tus captores te han encarcelado de nuevo, pero, no es así un nosferatu con una escopeta sale frente a ti.

Tienes un rostro muy bonito para estar aquí abajo.  Te apunta con un arma. Dame una razón válida para no matarte.

 Llego al fondo de las escaleras que parten de la alcantarilla... el lugar es humedo y asqueroso, pero seguramente estaria mas segura que en la superficie con mis perseguidores buscandome. Apenas logro dar unos pasos dentro de las cloacas, mis ojos no terminan de acostumbrarse a la oscuridad cuando escucho la voz de un hombre... al parecer me equivoque al pensar que estaria mas segura aqui abajo.

-Yo... estoy escapando, necesito un refugio y pense que podria encontrarlo aqui... no se quien eres pero si estas aqui abajo es porque tambien estas huyendo de algo. Por favor, necesito un lugar para pasar esta noche y el dia que la sigue, nada mas. Cuando vuelva a anochecer tras el proximo dia me ire si te soy una molestia...

No sabia si lo que recorria mi rostro y mis ojos era agua de lluvia o lagrimas de desesperación... no encontraba un respiro en ningun lugar, y cuando al fin pienso que voy a poder recuperar el aliento el destino se me rie en la cara. No podia morir alli, no despues de haber escapado, no sin antes encontrar a mis hermanos...

Cai de rodillas al suelo luego de mis palabras, baje la mirada hacia el mugroso piso de las alcantarillas y pose mis manos en mi rostro. Ya no tenia fuerzas para mantenerme en pie, ya no queria seguir luchando... solo queria descansar un poco. Era demasiado, todo era demasiado... sin poder evitarlo comencé a llorar... mi cabeza seguia doliendo, los flashes no habian dejado de atormentarme desde que habia abierto los ojos en esta maldita noche... Lo unico que queria era un momento de paz. No sabia por que, pero las ultimas palabras del viejo quien fuera mi compañero de celda volvieron a mi.

-Mis hermanos... debo encontrar a mis hermanos...

Dije finalmente, levantando la cabeza desde el suelo, encarando al hombre que me apuntaba con el arma.

El nosferatu se queda mirándote por un momento, un poco sorprendido por tu reacción ansiosa. 

¿escapando?, yo no, pero si hace muy poco ha amanecido... se queda mirándote y te dice de manera seria. ¡No intentes nada!, sí llegas hacerte la lista lo lamentaras.

 En ese momento hala una palanca y la  jaula sube.  Estabas en una trampa puesta ahí desde hace un tiempo.

Te toma fuerte del brazo y te aferra fuerte, y en ese momento puedes notar como tus vestidos empapados están llenos de sangre de tus lágrimas. Debes verte terrible al espejo.

Sigues al nosferatu, el cual te hala de manera algo desagradable, no sabes que esperar, si es amigo o enemigo.

Después de dar miles de vueltas, llegan a un sector, donde hay una puerta.

El vampiro horrible golpea, y  dice de manera automática. Buenas noches. No te suelta mientras te dice eso. Paolo, encontré esta mujer que parece  loca,  no sé por qué, pero pensé en traerla pues dice que está huyendo... pensé que podían conocerla.

Y en ese momento da unos pasos hacia adentro y te suelta.

Tú los observas, y caes de rodillas extremadamente ansiosa, murmuras lo mismo que habías dicho antes...

“Mis hermanos... debo encontrar a mis hermanos”

Tienes un temblor en tus manos, cuando de repente, notas que aquellos que buscas, estan al frente tuyo.

No puedes creerlo.

FIN DEL PRELUDIO.