Partida Rol por web

Los jardines de Afrodita

La iniciación

Cargando editor
28/10/2010, 18:23
Director

- Siempre somos así - afirmó Adrienne. - Nos gusta la fiesta, pero sobre todo nos gusta honrar a Afrodita, su culto trae felicidad a nuestra pequeña isla. Suelen venir muchos visitantes por estas fechas, y casi no hay delincuencia... Aunque debes llevar cuidado con los seguidores de Poseidón - advirtió con cierto desagrado. - Hay una chica que está especialmente... tratornada por él - se rió.

Cuando llegaron a la taberna, los camareros sirvieron el vino que Sísifo pedía y Adrienne aceptó acompañarle en la comida.

- Está bien, pero debo regresar para empezar a preparar la comida durante la cena. Si quieres puedes ayudarnos, ¿sabes cocinar?

 

Cargando editor
28/10/2010, 18:32
Cloris

Cloris estudió la pregunta de Cadrolón durante unos instantes.

- En realidad, uno es totalmente libre de adorar a Afrodita, aunque un verdadero sacrificio lograría llamar la atención de la diosa y obtener de ella parte de su poder divino. Pero, por supuesto, Afrodita es libre de entregar sus dones a quién ella desee y a veces un sacrificio no es correspondido. Nuestro culto adora las creencias de Afrodita, ella es la diosa del amor, del mar y de la belleza, pero no hacemos sacrificios para obtener beneficios, sino para que ella se sienta correspondida en amor y belleza...

El acercamiento de Etheokles no hizo cambiar el gesto de la sacerdotisa. El muchacho estaba ansioso, pero ella se mantenía totalmente indiferente, como si estuviese acostumbrada a tales arrebatos.

- ¿Qué es lo que deseas comunicarle a Afrodita, extranjero, qué es tan urgente?

Notas de juego

Cuidado con los destinatarios, estáis los dos solos.

Cargando editor
28/10/2010, 18:41
Director

- Claro que es bonito tener amigos... - dijo Casiopea. - Ven, vamos a la ciudad y comemos algo, ¿te parece bien? Creo que están organizando fiestas en el templo, así decides que te gusta más...

Al cabo de un rato, Zenobia paseaba por la ciudad de Citerea, llena de gente bulliciosa que iba de aquí para allá con prisas organizando un montón de cosas. Había flores por todas las calles, guirnaldas colgando de las casas, pequeños teatros callejeros y un mercado dónde los comerciantes anunciaban a voz en grito sus mercancias.

- ¿Te apetece algo dulce? - le preguntó Casiopea. Zenobia pudo darse cuenta de que la gente miraba a su amiga de forma torcida. Algunos, incluso con desconfianza. Pero ella no parecía darse cuenta. - ¿Quieres ir a ver el templo?

Cargando editor
28/10/2010, 18:56
Zenobia
Sólo para el director

Una de las golosinas que vendían en la plaza me hubiera gustado y habría saciado el hambre que sentía. Pero me sentia algo cohibida todavía. El estómago me gruñó con furia.

- Podríamos ver el templo. ¿De quién es? - dije temerosa.

Casi prefería que fuera el del fiero Posidón. Afrodíta me daba otro tipo de miedo. Uno que no sabía porqué sentía.

- ¿Hay mucha gente dedicada al culto en Citerea?

Cargando editor
28/10/2010, 18:54
Director

Urania le ofreció a Laertes la mejor de sus sonrisas y, llevándolo de la mano, tiró de él para llevarlo al interior del templo. Rechazó ofrecerle un beso allí. La sala principal contenía una enorme escultura de Afrodita, una talla de más de diez metros de una mujer completamente desnuda. Subieron unos pequeños escalones y cruzaron unas columnas, adentrándose entonces en unos pasillos de paredes doradas iluminados por fuegos sobre pedestales de bronce.

A la luz del fuego, Laertes pudo apreciar el cuerpo de Urania bajo los pliegues de su blanca túnica, sus redondos hombros desnudos y sus largos y delicados brazos. Su melena de rizo castaños resaltaba con el naranja de las luces y sus caderas eran dos curvas que no dejaban de moverse. El aroma a inciensos iba aumentando a medida que se adentraban y a oídos del extranjero llegaron ruidos apagados, que provenían de algunas cámaras y habitaciones.

- Son muchos los que realizan ofrendas a la diosa - explicó Urania de forma misteriosa.

Entraron en un pequeño habitáculo de mármol blanco y tintes anaranjados. En el centro había un pedestal, una especie de altar, rodeado de velas y varillas de incienso. A un lado colgaba un brasero de cobre y las paredes estaban adornadas con dibujos de hombres y mujeres. Urania soltó la mano de Laertes y abrió el brasero para depositar unas hierbas aromáticas.

- Ponte cómodo... - susurró melosa.

Cargando editor
29/10/2010, 04:02
Laertes
Sólo para el director

Seguia cada movimiento de sus curvas, de su paso sensual y de como la luz incidia en su belleza.

Con un suave movimiento me quite el cinto de la espada y lo deje caer en el suelo. la armadura me pesaba y tambien me deshice de ella, quedandome con la camisa de lino que protegia mi piel del frio metal.

Me sente en el pedestal, observando lo que hacia, deleitandome con su belleza.

Eres la mujer mas bella que he visto nunca- Sonrei seductor, deseando el momento de poder besarla,  acariciar su piel. y oler su aroma mas cerca.

 

Cargando editor
29/10/2010, 09:29
Sísifo
Sólo para el director

Degusté el vino paladeándolo bien – Ummm… delicioso

- ¿Cuidado con los seguidores de Poseidón? – ya en la mesa sentado frente a ella - ¿Qué hacen? ¿Qué es lo que debo de temer? – Pregunté interesado

- De acuerdo, bueno… no se cocinar, pero se me da bien cortar y llevar las cosas de aquí para allá, si eso os sirve… - mientras esperaba a que nos trajesen la comida me atreví a decirle – Eres preciosa…

Cargando editor
02/11/2010, 05:12
Etheokles

La firmesa de la sacerdotisa la hizo mas atractiva aún. Un bella mujer con un caracter fuerte era algo poco común.

Necesito saber acerca de... de mi sangre. Ella debería entender a que me refiero...

Notas de juego

Nota de la Master: No lo voy a decir más, ¡ten cuidado con los destinatarios!

Cargando editor
02/11/2010, 14:34
Etheokles
Sólo para el director

Notas de juego

Perdón master! Eso pasa cuando escribo los post a las 4 am medio dormido, jeje.

Cargando editor
18/11/2010, 10:32
Director

Mientras Urania dejaba caer las hierbas y jugaba con las brasas, un fuerte aroma empezó a cargar el ambiente. El humo subía en volutas hacia el techo y poco a poco, una neblina se apoderó de la estancia y el aire se volvió pesado.

- La camisa también... - dijo ella con voz seductora. Laertes sonrió, sus sentidos empezaron a nublarse, aunque seguía siendo perfectamente consciente de la situación. El tacto de la camisa se hizo más intenso, la punta de sus dedos se había vuelto más sensible, igual que su piel y todos sus músculos. Cuando la prenda quedó tirada en el suelo, Urania cerró el brasero. Entre brumas, se aproximó al muchacho. - Túmbate sobre el altar...

El cuerpo de Urania se veía más hermoso, insinuado bajo los pliegues de la túnica. Deshizo el intrincado moño y sus cabellos serpentearon sobre sus hombros, sus labios se humedecieron y su piel se veía más suave, como de alabastro.

Notas de juego

Buenas. Aquí empezaría el pequeño juego. Hay dos opciones, seguimos narrando y nada más, o utilizamos tiradas y usamos las reglas. Particularmente, no me gustan los dados en RPW, pero tu decides ;)

Cargando editor
18/11/2010, 10:40
Director

Gracias al cumplido, la chica se sonrojó hasta las orejas por enésima vez.

- En realidad, los seguidores de Poseidón no son peligrosos... - explicó cuando les sirvieron la comida. - Es solo que están... locos - dijo bajando la voz. - Pero no podemos ir diciendo eso por ahí, uno de los sacerdotes de Afrodita es el hermano de la suma sacerdotisa de Poseidón. Seguro que has visto esa casita que hay en el acantilado, pues ahí vive Casiopea. Parece una buena chica, pero dice que es amante de Poseidón y por eso casi nadie la toma en serio... aunque hay algunos que la creen y la acompañan en sus baños... pero a saber que hacen bajo el agua tanto tiempo...

Cargando editor
18/11/2010, 10:45
Director

- Oh, ¿el templo? Es el de Afrodita - le señaló Casiopea con una sonrisa. - Ahí vive mi hermano, ¿sabes? Es un sacerdote, el más importante - dijo con orgullo. Zenobia observó como algunas personas se apartaban al paso de Casiopea. En verdad, la chica desentonaba un poco en todo aquel ambiente. Todos vestían túnicas de lino y flores, ella portaba únicamente dos piezas de tela, una para el pecho y otra colgada de la cintura, y numerosos collares y pulseras fabricadas con conchas y caracolas adornaban su cuerpo. Ni siquiera utilizaba sandalias, iba completamente descalza.

- En Citerea se rinde culto a Afrodita, todas las fiestas son en honor a ella... y yo soy la única que rinde culto a Poseidón... ¿Quieres entrar? Seguro que a Orión no le importa...

Cargando editor
18/11/2010, 10:49
Cloris

Cloris mantuvo la misma expresión en todo momento, miró a Cadrolon y luego a Etheokles.

- Afrodita no es adivina, joven extranjero. Es una mujer inmortal poseedora de muchos dones, pero no lo sabe todo sobre todos. Me temo que ella no puede saber nada de tu pasado, salvo la diosa Laquesis, la que hila tu destino... ¿Qué es lo que desconoces? ¿Tus orígenes? Tal vez el druida Herodías pueda ayudarte con eso, más que yo o Afrodita...

Cargando editor
18/11/2010, 11:15
Sísifo
Sólo para el director

No me casaba de verla rojita, estaba encantadora, pero tampoco quería abusar de ello.

- Si, vi la casita cuando llegué en la nave… menuda historia – miré el plato que tenía ante mí, tenía muy buena pinta, definitivamente Adrienne había acertado con el sitio – Buen provecho – dije de forma educada

- Háblame de los servidores de afrodita... ¿Cómo son, y que cosas han de hacer? – mientras pensaba que tan mal no se tenían que llevar si hermanos podían ser sacerdotes o lo que es más, la suma sacerdotisa de las distintas creencias o facciones.

Ella era servidora de afrodita, le sonreí animado esperando su respuesta y comencé a probar la comida.

Cargando editor
18/11/2010, 11:29
Cadrolon

" ¿un druida por aqui?" es interesante, tendre que informarme sobre este Herodías y visitarle, pero de momento dejo que Etheokles siga hablando

Notas de juego

M: destinatarios... ¬¬

Cargando editor
18/11/2010, 23:19
Laertes
Sólo para el director

Me tumbe en el altar y no pude evitar soltar un jadeo al notar la piedra tibia en mi desnuda espalda.Notaba mi piel, mas sensible, todo lo que tocaba me daba placer. Mire a la preciosa saterdocisa mordiendome el labio inferior, me notaba excitado y con ganas de sentir su calido cuerpo junto al mio.

Me embelese con su belleza, con el juego de la luz que silueteaba su sensual figura y la cascada de sus cabellos sueltos se me antojaron que tenia ante mi a la mismisima Afrodita.

No podia articular palabra, solo miraba comiendote con los ojos, deseando poder beber de tus labios y sentir tu piel en mis manos.

¡Eres preciosa Urania!- Sonrei seductor, mientras notaba como unas mariposas se atenazaban en mi estomago.

 

 

Notas de juego

Nunca he probado el sistema de libido y cierta curiosidad tengo ^^

Pero en estas escenas estoy mas acostumbrado a la narracion y no tirar dados. XP

asi que sinceramente, estoy contigo...narremoslo y asi no nos complicamos XDD

 

 

 

 

 

Cargando editor
21/11/2010, 18:13
Etheokles

Etheokles se alejó un paso, dubitativo. No sabía si revelar mas de acerca de su busqueda, o esperar un poco. Finalmente dijo:

No, no entiendes. No es adivinación lo que necesito, el druida no servirá. Lo que llevo en mi sangre solo Afrodita me lo puede decir. Ella entenderá si logro comunicarme...

Cargando editor
22/11/2010, 09:27
Cadrolon

 Decido intervenir en la conversación -mi conocimiento de los dioses griegos es bastante limitado, sin embargo en mi tierra raramente los dioses se dignan a hablar con aquellos que no son parte de su sacerdocio, y solo lo hacen tras los adecuados rituales y sacrificios, no ante exigencias. Tal vez deberás buscar un modo de honrar a la diosa antes de presentar unas peticiones así-

Cargando editor
30/11/2010, 04:48
Etheokles

Las palabras de Cadrolon distrajeron a Etheokles, quien estaba casi hipnotizado en los ojos de la sacerdotisa hasta aquel momento.

No exijo nada solo... he honrado a Afrodita toda la vida, prro es hora de encontrar respuestas certeras. Tal vez si paso paso un tiempo aqui... Quizas consulte con el druida.

Parecía un poco decepcionado. Pero ahora se daba cuenta que la respuesta que tanto anhelaba no llegaría de pronto.

Cargando editor
30/11/2010, 10:07
Cadrolon

 Asiento a las palabras de Etheokles, mas por cortesía que por darle la razón ya que no se si ese druida podrá ayudarle, aunque yo también tendré que visitarle aunque solo sea para presentarle mis respetos

-yo, aunque disfruto enormemente con su compañía, dejare de importunarle suma sacerdotisa Cloris, sin duda estaréis muy ocupada con el inminente festival, pero os pediría que me dejaseis estudiar los textos sobre sanación del templo, o si no tenéis textos que me permitáis hablar con alguien instruido en la sanación, ya que es mi deseo aprender y perfeccionar tal arte, en el que tengo valiosos conocimientos que compartiría encantado-