Partida Rol por web

Camino por los pasillos de la tienda cuando una chica bien vestida y arreglada, aunque algo apurada me reconoce y me habla. La miro de arriba a abajo e intento reconocerla, aunque me cuesta un poco al principio -¿Ruby? joder, que buena estás... digo... que bien te sienta esa ropa, deberías vestir más así.-Intento no dejarla hablar para que no se note mi metedura de pata-¿y las gafas? aaah, ¿llevas lentillas, no es cierto?-la manía de frotarme las manos empieza a surgir, puede que esté nervioso o simplemente sea manía.-Si claro, son lentillas, si no no me habrías reconocido-mierda-bueno qué ¿vamos?

-¿Te echo una mano con eso? pareces algo agobiada, trae y termina de ponerte la chaqueta.-Le tiendo la mano intentado cogerle la bandolera.-¿Cinturón? ah, muy bueno Ruby-Sonrío y sigo hablando-no, no necesito cinturón se sujetan bien así, tengo un tope donde ya no bajan, tu me entiendes.-Le guiño un ojo-es más cómodo así, no tengo que estar atado como un salchichón. ¿Que tal el día?

Ante la primera afirmación no puedo evitar arquear ambas cejas sorprendida a la vez que aturdida pero acabo por reírme mientras niego con la cabeza.
-Claro que las llevo si no no vería ni dónde está la puerta- ya que se ofrece tan "amablemente" le paso la bolsa y acabo de ponerme la chaqueta sacando la larga melena castaña por fuera de la misma. En ocasiones llega a resultar un poco molesto llevar el pelo tan largo, pero me gusta así, por eso en clase suelo llevarlo en coleta.
-Gracias, gracias- recupero mi bandolera y miro de nuevo sus pantalones -No sé cómo puedes andar con eso sin que te entre complejo de pingüino, pero si tú estás cómodo...¡te veo los gallumbos!- exclamo sin cortarme un pelo con una ligera risa, ya que tampoco me gusta ser muy escandalosa.

-Hoy ha ido genial, acabo de conocer a Roger Daly y resulta que es muy simpático, buscan a alguien para trabajar en su empresa ojalá tenga suerte... crucemos los dedos porque supongo que no rezas- miro a la gente yendo de lado a lado apresuradamente porque están a punto de cerrar la tienda y de nuevo a él.
-¿Te ayudo a encontrar algo?- pregunto finalmente antes de que haya hecho el viaje para nada. Espero que no esté pensando en robar. O en golpearme por lo que acabo de decirle según los "brotes violentos" que mencionó Amanda.

Le sujeto la bolsa mientras termina de vestirse y de colocarse la melena. No sabía que había tanto pelo en esa coleta.-No, tranquila que no se caen y sí, es cómodo. Hay que aprovechar los pantalones, sólo porque den un poco de si no vamos a tirarlos.-Me levanto la camiseta por detrás cuando dice que se me ven los boxer y me miro el culo para ver cuanto se ven.-No es tanto, sólo se ve por detrás y están limpios.-Miro ahora por delante-bueno, por delante también se ven, pero por delante no se ve más de lo necesario.-Le saco la lengua y le devuelvo la bolsa.

No sé quién es el tipo ese, pero espero que tengas suerte si te hace ilusión-le doy unas palmaditas en la cabeza-y no gracias-digo recordando el dinero que llevo en la cartera y en que tengo que pasarme luego por el super.-Sabes que yo no uso los chismes esos, no nos llevamos bien. Será mejor que vayamos a tu casa a estudiar y aprovechemos la tarde o me va a caer una buena.-Pienso un momento y no sé si preguntarle-¿Han vuelto a meterse contigo o te ha dicho algo el director de mí?

-Es el propietario de una empresa de Informática y programación muy muy interesante, me encantaría poder acceder a ella pero no quiero aburrirte con los detalles, si lo consigo te aseguro que te enterarás- sonrío entusiasmada ante ésa posibilidad mientras salimos afuera.
La verdad es que ya empieza a estar un poco oscuro y empieza a refrescar así que hice bien en llevarme la chaqueta.
Camino un par de metros y ahí está mi querida bici anclada a un lado. Es bastante vieja, de hecho era de mi madre, pero me gustó tanto que me encargué de mantenerla y ponerla apunto para poder usarla ya hace tiempo. La cojo del manillar y la llevo a un lado mientras caminamos por la calle.

-Apuesto a que todavía no has abierto el libro de biología...-comento bastante convencida de ello mientras arqueo lo suficiente una de mis cejas como para que me dé una expresión suspicaz algo exagerada -Serán "chismes" pero cuando te dejo la PSP bien que te vicias... Aunque tengas que estar preguntándome todo el rato pro dónde ir y qué hacer- tras una pequeña pausa empiezo con la pequeña explicación.
-Pues no, hoy me han dejado muy tranquila, sólo ha venido una asistente social que me ha dicho que iría a verte para hablar contigo. Se creía que eramos íntimos o novios- me encojo de hombros quitándole importancia a ese detalle que resulta casi surrealista en realidad. "Si viera cómo me da golpecitos en la cabeza quedaría convencida de que no hay nada de nada" pienso para mis adentros antes de seguir.
-¿Fue a tu casa?, ¿qué te dijo?- le pregunto mirándole con tanta curiosidad que casi me como una farola que consigo esquivar por los pelos.

Escucho a Ruby pero no entiendo una mierda-Sí, ehm, parece guay.-Digo mientras me rasco la cabeza. Recogemos la bici de Ruby y comenzamos a andar hacia su casa. No tengo ni idea de donde está o con quien vive, pero será mejor que quedar en mi casa. Mientras tanto ella sigue hablando-El libro de biología... ya sabía yo que se me olvidaba algo. No lo he traído, perdona. Bueno, con el tuyo nos valdrá supongo.-No tengo valor para decirle que no tengo libros de texto, ni de ningún tipo, lo raro es que no se haya dado cuenta ya.

Ignoro el comentario de la PSP poniendo cara rara y se me hiela el cuerpo cuando dice lo de novios.-Jeje, ya ves que tontería-digo nervioso.-nosotros novios, jeje, que loca.-vuelvo a ponerle la mano en la cabeza para despeinarla un poco. Parece que con ella al menos si que no he tenido nada. La chica es guapa, pero es muy joven todavía y me puede traer muchos problemas, además, no la veo de otra manera. Aunque a Lindsay, si bueno, ella está buena y es mayor de edad, pero... tampoco... joder, no pensaba yo... ¿y si...? ay dios, no no, mejor no. A ver cuando vuelva, ¿y ahora que compro yo?... voy a tener que encerrarme con llave y tirarla por la ventana.

Salgo de mis pensamientos cuando veo que se dirige hacia una farola-¡la farol...!-la salva por los pelos-Me ha dicho que será mejor que vaya a una loquera, como si me hiciera falta. Dice que tengo que aprender a canalizar mi rabia. Le dije que la rabia no sé, pero canalizada estaba. Sólo le di un puñetazo en la nariz... no sé, más concreto que eso... pero bueno, iré a verla. Tampoco hay mucho que hacer por las mañanas cuando no estás en clase.

-Deja de hacer eso...- comento con fastidio, apartándole la mano, ceñuda por un instante antes de señalarte uno de los muchos bloques de pisos que hay frente a nosotros, cómo si quisiera que le prestaras atención mientras nos acercamos a él.
En realidad no es nada del otro mundo pero se conserva en buenas condiciones y no está lleno de pintadas así que ya es mucho, sobretodo si lo comparamos con el tuyo.

-Tú canalizas algo, sea lo que sea, ¿no? Quizá te venga bien expresarte con alguien de forma abierta, aunque si necesitas hablar de algo también puedes contar conmigo- le sonrío amigablemente cómo para animarle a ello pero lo dudo mucho, apenas sé algo de él aunque no se puede decir que nos conozcamos demasiado, supongo.
Entramos al portal y de nuevo tenemos que ingeniárnoslas para meter la bicicleta en vertical con nosotros en el ascensor.
-Cada día lo mismo, al final me haré experta en escapismo complicado- al llegar hasta la puerta de mi casa le miro los zapatos de reojo, bien por serte no ha llovido y no los lleva excesivamente sucios así que abro y le dejo pasar mientras apoyo mi bici en la pared del recibidor.

-Pues ponte cómodo, yo me voy a cambiar de ropa... Pero no pongas los pies sobre la mesa y esas cosas, ¿de acuerdo?- le advierto casi preocupada ante esa idea, espero que no desbarajuste mi "templo" del orden en los cinco minutos que voy a estar en mi cuarto...

A pesar de vivir sola y de que el piso es pequeño, todo está limpio y perfectamente en su sitio, incluso la cocina y las librerías en las que pueden verse los volúmenes ordenados por temática y autores.
Lo único un poco "fuera de lugar" en éstos momentos es el portátil montado en la amplia mesa frente a la cocina pero aún así es un sitio adecuado para ello así que no llega a llamar la atención.

Sonrío cuando se queja de que le revuelvo los pelos. Es curioso, pero aún no he encontrado a quién le guste el hecho de que se los remuevas, pero muchos agradecen el gesto de complicidad. Llegamos a su edificio y realmente tiene mejor pinta que el mío, pero parece que costará algo más.

Mete a duras penas la bicicleta en el ascensor sin que yo pueda ayudarla-escapismo complicado... hay veces que no sé de donde sacas las palabras-digo mientras suelto una carcajada. Entramos en su casa y me entero de que la tiene solo para ella. Está llena de posters y gente que no conozco o conozco de oídas tras leer sus nombres.-Tranquila, que no pongo nada encima de tu mesa. Ni te voy a robar nada.-Añado con un tonillo de asco al sentirme juzgado por mi apariencia o mi "fama".

Me deja a solas en el salón y va a cambiarse, en otra situación lo hubiera tomado como una insinuación, pero no con Ruby, es una chica inocente y creo que poco acostumbrada a tratar... íntimamente con las personas. Me doy una vuelta por el salón mirando libros y DVDs que tiene por las estanterías mientras espero que vuelva.¿Te dijo algo más la asistenta a parte de preguntarte si éramos novios?

Al curiosear mejor en las estanterías aprecias que en las más altas hay varios álbumes, probablemente de fotos, junto con algunos fascículos ya debidamente encuadernados sobre animales y otros sobre dinosaurios.
Al bajar hay varios libros informativos de las asignaturas que cursáis en clase, cómo si fueran "extras" y después de éstos diccionarios variados de inglés, japonés, sinónimos, frases hechas, citas célebres...
Después de éstos se encuentran varias colecciones y novelas de ciencia ficción y fantasía épica, algunas de ellas completas según parece cómo la saga de Harry Potter, Las Crónicas de Narnia, Dragonlance, Star Wars y bastantes de un autor llamado John Katzenbach.
Ya en las estanterías de abajo se encuentras un par cubiertas de libros de informática, ya sea de distintos lenguajes de programación o de software concreto y demás, aunque hay un par de robótica entre medio.
En la última se encuentran apelotonados y algo apretados varios videojuegos y películas, aunque puedes adivinar que no hay demasiados porque en realidad suele piratearlos.

-¡Poco más...!- exclamo desde mi habitación de forma amortiguada pero aún así del todo perceptible ya que sólo nos separa una puerta.
-Que tenía que comprobar si tenías algún tipo de desorden porque podrías ser peligroso... ¿Qué opinas de eso?- pregunto mientras salgo nuevamente al comedor dejando un par de libros y el estuche en la mesa, cerca del portátil.
Me he recogido otra vez el pelo para estar más cómoda al leer los libros, con unos pantalones anchos y desgastados al igual que la sudadera. Desde luego no estoy en absoluto guapa ahora mismo, pero es que tampoco lo pretendo, quiero estar cómoda.

Me siento en una de las sillas abriendo el libro y entonces me quedo mirándolo para que se dé por aludido y haga lo mismo, a lo cuál sonrío complacida.
-Te he hechado de menos en el insti, ¿sabes?- comento despreocupadamente ya que al fin y al cabo es la verdad. Es un poco raro y sé que me considera lo mismo, pero aún así es uno de los pocos amigos que he tenido en bastante tiempo y al menos me escucha cuando le hablo. O lo hace ver, me conformo con eso.

Miroteo por las estanterías y encuentro toda clase de libros de informática, DVDs de películas cuyos libros se encuentran en la estantería de arriba.-¿Poco más? pues si solo le interesaba si estábamos liados me parece un poco absurdo que te pregunte siquiera, cualquiera podría decirle que no. ¿Me intentan acusar de pederasta?-tuerzo la boca mientras pienso en esa posibilidad.

-Opino que es ella la que necesita un loquero. Yo lo único que tengo desordenada es la cocina, por culpa de la loca de Lindsay. Pero si yendo a ver a la tía esa me dejan en paz pues voy, echo el rato y me abro.-Veo como Ruby vuelve vestida con su estilo habitual y su pelo recogido. Parece mentira que debajo de esos pantalones raídos haya una mujercita.

Me insinúa de forma delicada que debería mirar el libro en vez de mirarla a ella así que me pongo cerca para poder verlo bien.¿Me has echado de menos?-digo en tono burlón mientras me arrimo a ella juntando nuestros hombros-tranquila, son 3 días, ahora ya 2, así que no te preocupes, a mi el tío ese no me puede echar mucho, sabe que llevo razón.-La miro a los ojos fijamente y le guiño un ojo para luego volver a mirar el libro mientras sigo pegado a ella.

-Quería que le confirmara tu dirección y le hablara de ti pero bueno, no le dije nada, básicamente...- después me quedo un segundo aturdida para reír sonoramente.
-No soy tan pequeña aunque sea menor de edad, ¿eh? Estoy emancipada y puedo tomar mis propias decisiones, mira tengo un piso- digo alzando la cabeza cómicamente demostrando lo orgullosa que me siento de ello.

-Quizá tienes suerte y es guapa, quién sabe... Diría simpática, pero todos los psicólogos se comportan cómo si fueran amigos tuyos les caigas bien o no- me encojo de hombros y cojo uno de mis coloristas lápices mientras paso páginas del libro.
-No vas tan desencaminado, me parece increíble que alguien que se pone a darte lecciones de cómo debes comportarte tenga un novio que le imponga cómo debe vestirse. Penoso- niego con la cabeza y mi ceño se frunce tan sólo un momento al acordarme de ese detalle que casi me resulta ofensivo. Machista me atrevería a decir... Y aún no tengo muy claro qué tipo de relación debe tener con esa Lindsay pero ya me lo acabará contando o espero. Adoro los cotilleos.

-Hmm... dos días, bueno, si he soportado varios años seguro que aguanto ésto también- le quito importancia al asunto aunque sé que van a ser dos días algo más aburridos. Detengo mi mano en una de las páginas y aparto el libro apoyándolo sobre mi pecho para que no pueda leerlo.
-A ver, dime todo lo que sepas sobre los paramecios... Y demuéstrame que no eres uno de ellos- río por el comentario aunque enseguida me doy cuenta de que es una de esas bromas que sólo me hacen gracia a mí. A veces comprendo como se siente Hermione Granger.

Miro el piso cuando lo nombra y lo recorro con la mirada-hombre, eso es cierto, parece que tienes piso propio. ¿Como puedes pagarlo tu sola? y la comida, las fiestas...-La miro de arriba a abajo-bueno, si que eres algo pequeña para mí, ¿no crees? tienes 17 años aún y yo tengo 21. Cualquier jurado me consideraría culpable si te tocara un pelo aunque fuera consentido.-le empujo un poco con el hombro para quitarle hierro al asunto.

-¿Le dice como vestirse? pues a saber lo que le dice cuando se desviste... digo... que habrá que verlos en la intimidad... bueno, entiéndeme, cuando están solos y no tienen que comportarse delante de la gente.-No sé si lo he arreglado pero al menos lo he intentado.-De todas formas ella poco puede hacer. Soy mayor de edad y no tiene poder para ordenarme nada, así que me da igual lo que piense.

-¿Has soportado dos años sin mí? vaya, ¿eso no es amistad?, yo diría que siii-¿O insinúa otra cosa?-No te preocupes, esos niñatos no te volverán a molestar y estoy allí antes de que te des cuenta.-¿Paramecios? ¿eso que coño es? ¿otra frikada? o es del temario. Pero si no tengo libro, yo que coño se de paramecios, no será un bicho de esos de estar guars, ¿no? como el chubaca o el alien ese raro que no paraba de hablar raro. "Misa" o algo así decía. Sería muy religioso o algo y siempre quería ir a misa. No, eso es una chorrada, se te va la olla, céntrate y piensa. Paramecios... paramecios, paramecios, peramecios, pera... espera, "espera necio", ¡ya está, es una adivinanza!. No, eso no iba así ¿Pancracio? dios, que aún está esperando respuesta. Vamos di algo... ehm... si... esto.. si no tienes ni puta idea, di algo gracioso o muestra tu ignorancia. Hmmm... ¿Eso que tiene junto al labio es un lunar? ah no, una mota de polvo en tu ojo, capullo. Me restriego los ojos y al final digo-Creo que voy a necesitar algo más de estudio, osea... que no lo he tocado aún.-Como lo voy a tocar si no lo tengo...

-¿Qué fiestas?- pregunto con una naturalidad abrumadora -Mi madre me echa un cable cuando voy a clase porque al trabajar menos horas... En fin, ese tipo de cosas- después entorno los ojos ante sus comentarios. Estos chicos siempre pensando en lo mismo, al menos intenta disimularlo que ya es algo, mientras no sea ofensivo la verdad es que me da igual.
-Qué guay, mi propio guardaespaldas, ya sólo me falta aprender a cantar- río de nuevo despreocupadamente y tras hacerle la pregunta mi ceja se empieza a arquear mientras él se lo piensa largamente y acaba por admitir que ni lo ha mirado.
-Muy mal sr. Smith, no tiene ni idea, habría que ver qué harías de encontrarte cara a cara con Neo- le doy un pequeño golpe en la cabeza con el libro y acabo por ponerlo en la mesa entre los dos, tendiéndole bolígrafo y folios para que tome apuntes, al menos a mí se me queda mejor si lo apunto, así que empieza la ronda de estudio en la cuál yo me dedico a explicarle lo del libro cómo si de un "traductor" se tratara.

Después de un par de horas algo largas resoplo sonoramente y cierro el libro de golpe con un ruido seco.
-Creo que es suficiente por ahora, vamos a descansar un poco, haré la cena...- me levanto de la silla y me voy a la cocina, ya que me puede ver sin problemas desde la mesa en la que todavía está gracias a la barra americana.
-¿Eres vegetariano o algo raro por el estilo?- pregunto mientras empiezo a sacar algunos utensilios de los cajones entre ruidos metálicos -Supongo que te quedarás a dormir- comento dándolo por hecho, ya que no me parece muy adecuado que vaya por según qué zonas por la noche... Y una de esas zonas es sin duda donde vive él.

Hehe, fiestas... no, tampoco hace fiestas... claro, así va como va, perdida en su mundo de cacharritos. Si se vistiera siempre como antes seguro que le salía algún pretendiente, la sacaba a la calle y fijo que disfrutaría un poco de la vida, en fin. No he entendido el chiste del tal Neo, pero no puedo quedarme.-Eh, Ruby, lo siento, no puedo quedarme. Mi compañera de piso está de mala leche y tengo que ir. Prometí pasarme por el super y comprar un par de cosas, y mira que hora es. Me pasaré por algún 24 horas de camino a casa.-Me rasco la cabeza-Gracias de todas formas por la invitación, pero es mejor que me vaya, podría darme algún ataque de esos no canalizados, buuuuuuuh-hago humor con las manos como si fuera un fantasma.

-Era broma, pero si, es cierto que tengo que irme, muchas gracias por todo-digo incorporándome y dirigiéndome hacia la puerta-Mañana quedamos otra vez, ¿no? te cuento lo que me ha dicho la loquera y quizás te acepte la propuesta-digo guiñándole el ojo.

Miro el reloj colocado en una de las paredes de la cocina, no es que sea excesivamente tarde pero sí para que haya anochecido y sea la hora de cenar.
-Vaya, no sabía que tu novia te ponía horarios... No creo que sea buena idea que vayas por "ahí" a éstas horas pero como tampoco creo que pueda convencerte- me encojo un poco de hombros y cruzo el comedor dirigiéndome a la puerta.
-No, mañana trabajo otra vez y no quiero que salgas de aquí tan tarde así que podemos quedar al siguiente que tengo fiesta, pero estudia en tu casa, ¿de acuerdo?- le abro con calma y me quedo sujetándola para, entonces sí, dedicarle una pequeña sonrisa.
-Ya nos veremos, ten mucho cuidado- espero a que salga para cerrar y poner todos los pestillos y cadenas que "adornan" mi puerta.

-Bueno, no es mi novia-creo-pero esta mañana estaba de mala leche y le prometí que iría esta noche. ¿Mañana no quedamos? ehm, vaya, tengo un problema. No, esto... no tengo el libro. Lo he perdido.-Mentira-Así que sólo tengo estos apuntes que me llevo-levanto la mano mostrando los folios que he copiado de sus explicaciones-Prefiero estudiar dos horas que nada, de todas formas, ya te digo mañana si pudiera quedarme hasta más tarde y te acepto la invitación a comer que te he rechazado hoy.-sonrío triste y me doy la vuelta hacia la escalera.

-Buenas noches.

-Tienes todo el día en tu casa para estudiar que yo sepa- contesto con sequedad distante mientras vuelvo hasta la mesa recogiendo el libro y se lo tiendo dándole un pequeño golpe con él en el pecho al hacerlo tan de golpe. No se lo merece porque se está aprovechando de mí para que le ayude a aprobar, me parece que empiezo a entender muchas cosas ahora, por eso me ha soportado hasta ahora.
-Buenas noches- contesto antes de cerrar con un portazo sonoro seguido de los chasquidos metálicos de los pestillos.
"Pues no hubieras rechazado la propuesta de hoy, imbécil. Seguro que mañana pondrías otra excusa"

Suspiro honda y largamente para aliviar la tensión acumulada en pocos minutos, controlándome y sintiéndome algo mejor. En fin, si sólo se ha acercado a mí para eso pues peor para él, no el daré el privilegio de darle más vueltas al asunto.
Vuelvo hasta la mesa que ni siquiera ha tenido la gentileza de ayudarme a recoger y me encargo de ello para después encargarme de la cocina, se me ha quitado el hambre.

Me voy directamente a la ducha dónde acabo de relajarme y despejarme las ideas, saliendo más animada de allí y sentándome en el portátil para chatear con varios de mis colegas virtuales, visitando webs con información interesante sobre nuevos códigos de crackeo que incorporaré a la nueva versión del firmawre de PSP que estoy haciendo para los nuevos juegos.
Con eso me paso toda la noche muy entretenida, dejándolo encendido para descargar algunas películas y leyendo un poco antes de dormirme definitivamente, agotada del todo.
Mañana será otro día, tendré que entregar los formularios para Daly y pedir las recomendaciones a mi tutora y el profesor de informática...

Despiertas cuando suena el despertador y sigues tu rutina antes de ir al instituto. Cuando llegas y aparcas tu bicicleta, te miran y comienzan a cuchichear entre ellos señalandote y dejando sitio para que pases como si te intentaran evitar por algo. Es muy raro como...no eso solo era un sueño nada mas, no habia arañas grises mirandote desde el espejo....

Al principio hago caso omiso de los cuchicheos y los dedos acusadores, pero todo empieza a resultar muy raro cuando compruebo que no se ríen, y todavía más sospechoso cuando además se apartan a mi paso.
Frunzo ligeramente el ceño mientras subo mis gafas mirando a los alumnos confundida a la vez que interrogativa pero nadie parece demasiado dispuesto a dirigirme la palabra, casi diría que... me tienen miedo. Lo peor es darse cuenta de que no estoy segura de que la idea me desagrade.
Niego con la cabeza enérgicamente cuando al abrir la taquilla me viene la extraña imagen de esas arañas, intentando sacármela de la cabeza mientras recojo varios libros. Esas pesadillas... al final voy a tener que tomar medidas e ir al psiquiatra como Ed, vamos no me jodas... Espero que no se alargue demasiado el insomnio.

Con este cambio de pensamientos me distraigo un poco y llego hasta mi primera clase de la mañana pero los alumnos parecen seguir mostrándose raros conmigo. O más de lo normal en todo caso.
-Qué pasa, ¿tengo monos en la cara?- acabo preguntando a Cynthia, la chica que se sienta delante de mí. Simplemente por curiosidad... Vale, o quizás necesidad, la intriga me va a matar.

Cynthia Pues... miro a otros de los compañeros ¿no has oido la radio hoy? tu amigo el loco le arrestaron ayer, parece que ha matado a su compañera de piso y que la ha devorado, por que no la han encontrado aun, esta siendo juzgado hoy por lo que dicen. Aunque tu sabias que era un sicopata por que los raritos se juntan