Partida Rol por web

Daniel decide averiguar qué está merodeando cerca del grupo.

En ningún momento pierde de vista dónde y qué está haciendo Santiago.

El Señor me manda una difícil prueba, pero seguro que con mi fe y con mis habilidades lograré superarlas y ser digno de Él.

Os concentrais sobre vuestro caballo y podeis escuchar gruñidos, extraños gruñidos que no te son familiares provenientes de ambos lados del sendero y que parecen moverse rapidamente de un lado a otro

Tras un intento para concentrarme concentrarme, decido que tiene que haber algo ahí, agudizo la vida y el oido e intento identificar lo que es
Aquí hay algo, qué demonios será...

Daniel decide desenvainar su espalda. Está muy acostumbrado a pelear y a montar a caballo, por lo que está en su hábitat natural.

Haríais bien en sacar vuestro acero, condenados. No creo que lo que está en el bosque esperándonos quiera nuestro bien.

Daniel se tensa en el caballo esperando el combate, pero aún así quiere comprobar primero qué es lo que acecha en el bosque, no va a atacar sin antes comprobarlo.

Lucius logra divisar en medio de la oscuridad y haciendo un maximo esfuerzo, dos sombras moviendose agilmente y arrastrandose por entre los arboles...estan al acecho y parece que ustedes son su presa

Todos estain tensos y cada uno se concentra lo suficiente para lograr percibir cosas, extrañas cosas que puenen no tener sentido pero si las unen y las relacionan puede mostraros que es lo que sucede.

Francisco examina el bosque a su alrededor, pero la oscuridad y la espesura le impiden percibir los posibles peligros que le rodean.

Sigues internandote entre el espeso bosque, los arboles son cada vez mas siniestros y gruesos asi como el sonido de la noche opacado, pareciera un territorio muerto...

De pronto ois algun ruido tras de ti a lo que volteas y podeis ver a una mujer mirandote de forma amenazante.
es bajita y musculosa, su rostro es bellamente salvaje, lleva extrañas pinturas en los pómulos y en la frente, su cabello es rubio, lleva escasos ropajes confeccionados con pieles de animales, una falda muy corta, un chaleco que apenas cubre sus hermosos y pálidos pechos, una capa corta y unos botines atados con cuerdas hechas de ramas de árboles.

Junto a ella descansa un lobo babeante y gruñon..

¿habéis venido a cazarme? Pregunta y se arrastra hacia ti como una bestia fallareis como lo hicieron otros, ¿venís ha hacerle daño al bosque? moriréis como lo hicieron otros

Su espiritu es salvaje y se asemeja a un animal

El amanecer está cerca pero la noche se ha hecho mas oscura y la luna mas grande. No conozco magia alguna que pueda realizar semejante acto. No sé si vuestras armas serviran contra lo que sea que nos acecha.
Lanzo rápidas miradas a mis compañeros ... Situo mi caballo de forma que quedo protegida por todos los flancos por los cuerpos de mis congéneres. Nuestras respiraciones agitadas son contenidas sólo por el temor a lo desconocido. Es irónico que los demonios de la oscuridad, aquellos a los que los mortales temen, aquel peligro del que guardan a sus hijos cuando se oculta el sol se encuentren aterrados por aquello que les acecha en las sombras. ¿El cazador cazado?
Qué listo ha sido aquel condenado que nos ha abandonado...demasiado listo.
Miro hacia el bosque que nos rodea intentando calcular si sería más sencillo dar marcha atrás o procurar alcanzar la salida del bosque. Don Fernando, tenemos más cerca el castillo o la salida del bosque? Hay que intentar trazar un plan para que escapemos con vida, apenas vamos armados, estamos en un lugar desconocido y con el sol acechando en el horizonte, no podemos perder tiempo. No será tan sencillo cazar a los cazadores.

Notas dos siluetas moviendose y arrastrandose por entre las sombras de los arboles, son agiles y gruñen por momentos..

Don Fernando, compañeros, allí hay dos siluetas, entre los árboles. No sé si en esta región hay lobos ...u algo similar aunque más extraño. Sea lo que sea gruñen como bestias. Hemos de decidir si les hacemos frente o intentamos salir de aquí! hablo a mis compañeros sin desviar mi mirada del lugar donde percibo las extrañas presencias. Vos debéis saber que ocultan estos bosques, Don Fernando, nuestra vida y la vuestra depende de ello! Ricards está aterrorizado, tiene plena confianza en mí, pero no consigue entender que es lo que está ocurriendo.

Fernando da algunos pasos alejandose de vosotros y empuña con fuerza su espada.

Justo en ese instante dos siluetas se hacen frenta ustedes gruñendo y lanzando garrazos al aire

¡Lupinos! Exclama Fernando ¡Son malditos lupinos! ¡Nos han tendido una emboscada!

las sombras, ambas de casi de tres metros os observan con cuidado mientras respiran agitadamente.No podeis distinguir sus rostros pero se haen una idea.El pelaje cubre por completo sus cuerpos, Una larga cola se mueve de un lado para otro y sueltan de vez en cuando un aullido

¡¡Lupinos!! se demasiado de los lupinos para permanecer impasible. Me coloco en una actitud agresiva. Una vez más la oscuridad se arremolina a mi alrededor está vez de forma muy rápida y violenta. Me situo cerca de Don Fernando, dispuesto a apoyarlo y sin perder de vista al caballero Daniel.

Al ser consciente de la escena, reculo en mi montura y me sitúo cerca de Lady Maeve. Sois unos estúpidos si creéis que podréis acabar con dos lupinos... Estaríais locos si decidís pelear contra semejantes criaturas, debemos retirarnos grito claramente exaltado desde mi caballo.

Miro a Lucius con atención y susurro: Y si son de una tribu noble, y si pudiéramos negociar? Tal vez no seamos lo bastante rápidos para huir.