Partida Rol por web

A pesar de no ser un personaje carismático especialmente notable, el sith consigue abrir una breda en el arqueólogo con su palabrería y elocuencia. A Tim Rossdren se le veía un tipo culto, de biblioteca, pero su físico invitaba a creer que el trabajo de campo lo mantenía en forma.
Simpático y carismático, Tim se mostraba desconfiado frente al sith.

[...] Así que lo busca el Imperio, os habéis tenido que informar muy bien para dar con él en un planeta tan alejado de los sistemas del núcleo como Xandralis.

Habéis estado charlando un buen rato y ambos tomáis una copa de vin roth, una bebida dulce típica del lugar.

- En realidad se estuvo informando acerca de los antiguos habitantes de Xandralis y sobre sus ancestras leyendas. Estas leyendas se basan en culturas muy primitivas, y decían que era un publo muy poderoso, que podían hacer cosas increíbles com levantar objetos muy pesados, ser inmunes a venenos y cosas mucho más increíbles. Parecía un tipo culto, no sé exactamente qué esperaba encontrar, pero son solo leyendas. - Dice mientras toma un sorbo del vin roth.

Cita :
lo busca el Imperio

Enarco una ceja ante su afirmación y luego sonrío interesado

¿Qué le hace pensar que trabajo para el imperio, Tim? Si me permite llamarlo así.

Cita :
podían hacer cosas increíbles como levantar objetos muy pesados, ser inmunes a venenos y cosas mucho más increíbles

Escucho atentamente al tiempo que saboreo el vin roth

Usuarios de la Fuerza... Acaso... acaso ¿jedis o Sith? no estará de más preguntarle a mi holocrón...

Dígame Tim, de dónde venía el individuo y... ¿Cómo se veía?  Quizá pueda buscarlo en la holored

¿Hago bien en suponer que no posee conexión a la holored? Supongo que usted no es oriundo de Xandralis... Quizá supongo demasiado eh? pues, bueno, no lo molestaré consultándole por su pasado y origen.

Haciendo girar el recipiente para que el roth libere los taninos, su color y aroma en su máxima expresión, le doy un zorbo para volver a mirar al arqueólogo, que parece ser un tipo sumamente interesante.

En otras circunstancias hubiera sido muy constructivo intercambiar conocimientos del pasado... Hasta puede que sepa de nuestros ancestros Sith...

¿Adónde puede que haya ido su anterior visitante? En verdad me urge encontrarlo...

- Sí, tenemos acceso aunque muy restringido a la mayor parte de la holored, la distancia que nos separa del núcleo imposibilita su acceso total. El tipo era... era... - Tim piensa mientras su mirada se pierde - lo cierto es que no consigo... solo sé que iba ataviado en una túnica oscura e iba encapuchado... me temo que es lo único que recuerdo Larius. - dice apesumbrado.

Presientes el lado oscuro acechando desde la sombras. El anterior hombre que encontraste cuando entraste en la sala parecía dispuesto a llamar a la seguridad en cuanto apareciste, pero ahora el lado oscuro controla sus sentimientos y casi da la impresión de que os conocéis desde hace años, aunque el tipo mantiene su voluntad y se muestra respetuosamente distante.

- Le indiqué la situación de las tres excavaciones más importantes que hay sobre Xandralis, teniendo en cuenta su inexploración total. Seguramente haya ido a verlas en persona. - sorbo de vin roth.

Veo que el hombre parece cabilar cuando intenta recordar el nombre. Dejo la copa sobre el escritorio.

Bueno, supongo que podría facilitarme al menos la ubicación de esas ruinas ¿verdad? La conversación ha sido realmente enriquecedora y por ello le agradezco Tim.

Me paro con aire meditabundo

No recuerda en absoluto su nombre, su rostro, su raza... No percibo que se reserve alguna información que pueda comprar con dinero o alguna otra recompensa... No es mi intención insultarlo con esto, pero si acaso hay algo que pueda necesitar en pago por el nombre y demás... No tiene mas que decirlo Señor Rossdren.

El arqueólogo vuelve a cabilar, carraspeando y suspirando para sí.

- Lo siento no lo recuerdo, es como si jamás lo hubiera visto de cerca, su silueta envuelto en esa túnica y encapuchado... sí, no recuerdo nada más. - Dice alzando los brazos. - A ver que tengo por aquí - dice tras una pausa. De pronto empieza a rebuscar entre sus cajones y por encima de la mesa, hasta que saca un mapa genérico de Xandralis, y rodea tres zonas alejadas entre sí y de la ciudad capital, Larssis. - Aquí están, la ubicación de las excavaciones, pero le advierto del peligro de la jungla, Xandralis es un planeta aún incivilizado y la fauna nativa campa a sus anchas fuera de Larssis.

Aceptando que pudiera ser verdad o no la negativa sobre el recuerdo del individuo, asiento con la cabeza al tiempo que observo el mapa.

Perfecto.

Veamos, iré a la más cercana... Salvo que estén equidistantes...

Me acerco un poco más y miro al arqueólogo Por casualidad no le dijo a cual iría primero verdad?

Luego, respecto a la cuestión de las bestias salvajes vuelvo a afirmar con la cabeza

Agradezco la observación. Espero no toparme con mas animales... Digo con una mueca similar a una sonrisa en el rostro De camino a su despacho me he tenido que ocupar de algunos he he...

¿Puedo llevarmelo? Digo en alusión al mapa.

Estimo que esta será la última vez que nos veamos Tim Rossdren, le agradezco su ayuda. Tengo muy buena memoria, recordaré esto.

Digo ya caminando rumbo a la puerta de salida, pero sin dejar de estar atento a cualquier cosa, como un ataque por la espalda...

El arqueólogo asiente tu postura pero no sabe decirte a cuál fué primero, pues le contó lo mismo que a tí, y desconoce q a qué excavación acudió en primer lugar.

En cuanto al mapa, Sí, lléveselo, es todo suyo, tengo unos cuantos más por aquí.

Sin más, Tim se despide de tí, probablemente esperando perderte de vista para siempre.

Salgo sin prestar demasiada atención a la secretaria y algo picado por la curiosidad

¿Estará aún el motoquero o se habrá dado a la fuga?

Salgo en busca de "mi" speeder y porque no, de mi lacayo.

En fin, supongo que no me queda otra que ir directo a la mas cercana de las locaciones... Veremos que encuentro allí...

Cuando sales de la bilioteca, la calle levemente iluminada aparece húmeda, sin embargo aprecias que ha dejado de caer la llovizna que no había cesado prácticamente desde que llegaste. Es tarde, apenas hay ruido y únicamente ves en la calle tu speeder "prestada" y una enorme huella carbonizada desde donde seguramente se apresuró a huir el pandillero acobardado.

- Ya no se puede confiar en nadie. - susurras para tí mismo, esbozando una sonrisa irónica.

Subes al speeder y sonríes al ver que arranca sin problemas, al menos el muchacho se fué tan rápido que no tuvo tiempo de cortocircuitarte el transporte pero, será el speeder suficiente para llegar a los distintas excavaciones ?

La única salida de Larssis para llegar a la frondosa jungla es un fino puente de carbonita que atraviesa el gran lago hasta llegar a tierra firme. Conforme llegas hasta ahí, ves como va amaneciendo y haciéndose de día, apareciendo los primeros rayos de lo que parecía una especie de sol. Por el camino tienes tiempo para pensar, y recuerdas la masacre en el túnel de los pisos inferiores, en apenas unos segundos, acabaste con los pandilleros mutilando sus cuerpos con tu sable de luz carmesí. Recuerdas también las palabras del lord oscuro del sith, te has vuelto muy poderoso; sí, efectivamente el lado oscuro se hacía fuerte en tí a través de tu odio y tu ira. Sientes poderosamente el lado oscuro de la Fuerza, y pareces capaz de cualquier cosa con ella como aliada, cumpliendo su voluntad... te convertía eso entonces, en esclavo ?

Terminas con tus cabilaciones cuando llegas al otro extremo. EL sonido de distintas especies nativas de Xandralis inunda la jungla, y no oyes nada más. Sacas el mapa y le echas un vistazo divisando tu jungloso entorno.

El amanecer se me había adelantado como el venablo imparable de un poderoso titán. Poco había prestado de atención en ello ante la batalla que dentro de mi cabeza...

Un esclavo... Solo un necio desoiría la advertencia que resuena en mi cabeza pero... Pero sé que tanto poder puede ser contr...No, no controlado. Quizá, encausado sería mejor. Sí...

Había cruzado el gran lago y ante mí ya se dejaba ver el frondoso follaje. Debía ponerme en lo que me tocaba, pero no podía quitarme tamañas maquinaciones de la cabeza.

Tras frenar el speeder y observar el mapa, mi mente seguía en otro lado...

Sí, es peligroso el camino que recorro... Pero hasta el mismísimo Lord Darth Vader lo dijo... Puedo llegar a ser grande. Muy grande...

Entre tus pensamientos y el mapa, no encuentras hueco para observar adecuadamente tu alrededor. No encuentras camino ni senda alguna, pero siguiendo la orientación del mapa proporcionado por el arqueólogo, Tim Rossdren, siguiendo en dirección norte conforme estabas, sería suficiente para alcanzar el primero de los pueblos, el más cercano, al menos.

El camino está muy espeso y enmarañado y te cuesta avanzar con rapidez, aunque vas más rápido que si fueras a pie. El silencio es lo único qu se oye a parte e algún que otro graznido de alguna especie de animal nativo monstruoso.

Avanzas y sigues sin cesar...

Debe faltar poco ya... Supongo que Rossdren me habrá orientado a conciencia y no a algún tipo de trampa... Qué va, tampoco es mi enemigo... ¿O sí? Nah, se trata sólo de un arqueólogo en un primitivo y olvidado planeta... Más me preocupa encontrar al individuo demasiado tarde... Puede que haya encontrado algún tipo de arma... Sí. ¿Y entonces? ¿Qué tan poderoso me he vuelto? Debo poder con él... A todo o nada...

Sigo aferrado a los manillares del speeder, piloteando como mejor puedo...

... Y el Sith continúa batiéndose en la frondosa y espesa jungla por la que apenas puede pilotar su speeder.

De repente, entre tus pensamientos, "algo" detiene la speeder en seco y te lanza por los aires. Qué diablos... ?

Ante tí, un depredador de constitución compacta y cara de pocos amigos, ruge cual fiera delante de su próxima cena. En sus patas delanteras observas dos espolones capaces de decapitar el tronco de un árbol grueso.

Magullado y furioso observo a la criatura, sintiendo mi dolorido cuerpo clamando por venganza aún más que por supervivencia.

...Maldito sea... Lo haré pedazos... Mi speeder. Sólo espero que no lo haya destruído o roto de manera irreparable...

Pienso al tiempo que observo los espolones sabiendo que serán un problema.

Maldito bicho...

Me preparo para activar mi sable, pero al parecer él ya está preparado y yo en veremos...

Sin tiempo a pensar en la huída, el grotesco animal se abalanza sobre tí de un brinco, alzando patas delanteras y golpeándote bruscamente en el torso y en la cara, de lo cual intentas cubrirte, retirándote unos pasos atrás tras los impactos recibidos.

Tras recibir el golpe, ya herido caigo en la cuenta de que el bicharraco es asunto serio y me tomo un instante para entrar en comuniòn con la Fuerza para que me potencie en lo que viene.

Casi sin quererlo, un extracto del còdigo Sith parece salir a flote en mi inconciente, o no.

...Soy el fuego del odio y todo el universo se inclina ante mi...

En silencio, como si se tratara de una danza muchas veces entrenada, intento ejecutar un movimiento de ataque...

Apenas consigues dar al terco animal mientras maldices por dentro y la bestia vuelve a arremeter contra el invasor de su terreno, propinándole otro golpe con las garras de sus patas delanteras. Esta vez arrastra sus pezuñas por tu cuerpo desgarrando por completo la parte superior de tu túnica oscura, mostrando sendos arañazos profundos sobre tu piel.

Nada parecìa salir como debía.

La bestia era según los ojos del sith, una maquinaria de la naturaleza dotada de una inmensa destreza...

Maldita sea... No puedo darle... Arrrrghhh Tomaaa!!! Grita furioso al intentar propinar un golpe a su letal adversario.