Partida Rol por web

Todo es oscuridad a vuestro alrededor. Vuestro cuerpo parece retorcerse sobre sí mismo, hacerse pedazos y desaparecer en la nada, mientras sois conscientes de todo ello. Dejáis de sentir vuestros miembros, el calor del artefacto, dejáis de ver y no podéis siquiera gritar. Lo único que podéis notar es como todo se mueve a una velocidad endiablada. Os sentís arrastrados por una corriente más brava que nada que hayáis sentido a través de la nada.

En ocasiones os parece sentir como si golpeárais muros de piedra, pero no os frenan en vuestro camino. No sabéis nada de los otros, cada uno de vosotros está solo. Incluso los que sujetaban a Hubert se han encontrado en el vacío, sin más compañía que el dolor que supone esta sensación.

Entonces de repente todo se detiene, la fuerza desaparece y volvéis a respirar, como si fuera vuestro primer aliento. Es como si hubiérais muerto, os trasladaran a un lugar más allá de todo lo imaginable y naciérais una vez más. Es probablemente la sensación más desagradable y dolorosa que se pueda sentir, y alguno de vosotros ha sufrido heridas de guerra bastante complicadas. Nada que se pueda explicar describiría con exactitud las sensaciones que acabáis de vivir. No sabéis cuanto ha sido. No podríais decir si ha ocurrido en unos pocos segundos o habéis estado meses sometidos a ese "viaje". Lo único que sabéis es que ha terminado, y que ya no estáis solos en el vacío.

Podéis sentir nuevamente los miembros. Podéis moveros por voluntad propia, y escucháis la respiración de unos y otros. Los jadeos cansados de Saint, la respiración entrecortada de Hubert, en estado de shock, la voz de Paolo... Pero no notáis nada bajo vuestros pies. No hay ninguna superficie que os sostenga, sino que parecéis estar suspendidos en mitad de un estasis, en el vacío. Y además de vuestras respiraciones y voces, no hay ningún otro sonido... Ni ninguna luz que os ayude a localizaros.

Georgi no dice nada.

Ni siquiera entiende.

Lo que está sucediendo contradice abosulatemente todo lo que su entrenamiento e incluso su lógica le dictan. Deberían estar muertos. Todos.

Pero no...

Jeremy inspira hondamente, tan fuerte que le duele el pecho. Tose. A medida que va recuperando la conciencia de sus miembros, se da cuenta que le duelen por todos lados, sobretodo la herida de la pierna que le escuece más de lo normal.

Antes de despertar otros sentidos aparece el del equilibrio y da cuenta de la inestabilidad del cuerpo. Jeremy intenta agarrarse a cualquier cosa, pero sus manos y pies no dan con nada. Tampoco puede ver, la oscuridad lo envuelve todo y el sentimiento de estar cayendo aumenta.

Entonces empieza el vertigo y apunto está Jeremy de vomitar si no fuera por que su sentido del oido empieza a dar señales de vida. Empieza a oir ruidos a su alrededor, voces, respiraciones... Su mente decide agarrarse a esta prueba de realidad y escuchar detenidamente... Su mente se tranquiliza y inconcientemente su cuerpo se relaja...

- Ehh!... hay alguien ahí - Grita esperando respuesta... - Paolo!!... Georgi.... Hubert!...

Paolo comienza a flotar con el resto y cuando su mente comienza a comprender lo que parece esta ocurriendo, su cuerpo se agarrota incontrolablemente y comienza a ir sin control ni dirección.

Como un murmullo del más allá, el italiano oye unas palabras que vienen de alguien que considera cercano pero que no logra reconocer. Y cuando se dispone a responder, se queda horrorizado ante la incapacidad para comunicarse que presenta su cuerpo. 

La voz de Jeemy pareció llegar a los oídos del médico al cabo de un rato. De hecho cuando le miró su boca ya no se movía, mas no podía precisar si era por algún efecto o porque sencillamente había tardado demasiado en reaccionar. De todas maneras ese sonido sirvió como un diparador para activar su embotado cerebro y comenzó a decir:

Aver,estamosflotandoenmediodelanadayrespirandoynosoímos.Esoesquenoestamosenelespacio,aunqueloparezca.Nosedondeestamosperosihayunaentradatienequehaberunasalidaqueaunnosomoscapacesdeencontrar.deberíamosversisomoscapacesdemovernosoalgoalmenosparatantearsiestoesrealmentetaninmensocomopareceosisetratasolodeunailusióndebidoalaoscuridadyelsilencioquenosrodea.-

A Gerogi le parecía que se había expresado con una claridad meridiana, pero muy pronto la mirada de sus compañeros le demostraría lo contrario....

En un principio, la voz que oyó le sobresaltó, per empezó a calmarle enseguida que fue reconociendo la voz como la de Georgi. no entendia mucho lo que decía pero era reconfortante saber que no estaba solo.

- Hey!.. Georgi... tranquilo.. - quería explicar la situación, como siempre hacia, para tranquilizar a sus pacientes.. pero no encontró ninguna palabra más. de hecho sus nervios estaban muy alterados también.... - Ves algo?... Eh! Paolo!.. estas por ahí?...

Georgi escuchó la respuesta de Jeremy como si se tratase de un sonido lejano y tardó en entender qué era lo que le estaba diciendo. De todas maneras no fué capaz de hacer otra cosa que no fuese quedarse allí flotando, en silencio, con la mirada perdida en la nada.

Con los ojos vacíos por un instante Paolo comienza a mirar hacia todos los lados en el espacio como buscando la puerta de salida de esa sala en la que se encuentran. Tras varios intentos de intentar salir hacia algún lugar, el mismo comprende que debe de estar una sala de una nave espacial y como tal comienza a desplazarse en el espacio buscando salida del ese lugar.

SALGAMOS DE AQUÍ!!!! EL AIRE, SEGURO QUE EL AIRE SE ESTA AGOTANDO. NO PODEMOS SEGUIR EN ESTE LUGAR.

Georgi va flotando a la deriva mientras, incosncientemente, se encoge lentamente hasta quedar casi en posición fetal.

Hasta vuestros oídos llega un zumbido lejano. Algo que retumba, y va tomando una forma consistente. Podéis entonces oír la voz de Jeremy, que trata de hablaros desde la distancia. Sus palabras no os parecen coherentes, y al parecer no es consciente de que deberíais estar muertos. Incapaces de procesar qué está sucediendo a vuestro alrededor, os dais cuenta de que vuestro compañero se ha callado, pero el zumbido sigue sonando.

Un zumbido que de alguna forma os es familiar. Algo que ya habíais escuchado antes. En algún lugar, en algún momento de vuestra vida.

Vuestra vida... Los años que habéis vivido de alguna forma os parecen segundos, mientras que los últimos momentos que recordáis se os hacen eternos. El calor que emanaba la esfera de plasma, el artefacto, la aparición de la criatura, el viento, la noche que escapasteis en la Tierra, Marc, la Soyuz, la ISS...

La ISS. Allí siempre había en funcionamiento dispositivos electrónicos, sensores, ordenadores, sondas, baterías... Un conjunto de aparatos cuyo constante trabajo hacía que la estación tuviera un continuo zumbido casi imperceptible, al que el oído se acostumbraba.