Galería Umbriana

Subida por potty

Cuando comenzó la Umbrionada, una de las primeras cosas que hice, fue comentárselo a mis compañeras de oficina para ver si me podían dar una mano con algunas de las fotos. Mirando las listas me tiraron ideas para algunas cosas, me incitaron a otras pero lo importante fue que quedaron a la espectativa por si surgía la oportunidad de hacer alguna.

Una mañana de junio Nati P (a.k.a. "la" Nat) toda entusiasmada me cuenta que por correo le había llegado una oferta para hacer parapente y me la reenvía. Yo, miro por arriba, veo que la oferta vence en 24 hs pero que el cupón puede usarse dentro de los siguientes 6 meses. Sin esperar más, lo llamo a Willen para contarle y preguntarle si le parece que saquemos cupones para los dos. Él acepta. La mitad del problema quedaba resuelto. Ahora teníamos que ver como llegar.

Nosotros no tenemos movilidad propia pero una de mis buenas amigas (y socia en la PyME ya que estamos) acababa de comprarse el auto, así que apenas terminé la transacción para sacar los cupones, la llamo por tel para ver si ella, un sábado que estuviera lindo nos podía llevar. Al enterarse de que íbamos a hacer parapente, ella lo vio como la gran oportunidad de quedar super con su novio (no sabía que regalarle por el cumpelaños que era en esos días) así que sacó cupones ella también.

Pasó el tiempo, lo fuimos dejando porque hacía frío primero, luego porque las agendas no nos coincidían para poder ir los cuatro hasta que, después del día de la madre dijimos "vamos o vamos". Conseguimos turno para el 6 de noviembre. El día antes, pronostican lluvia para ese sábado XD

Sin embargo, la suerte (y la danza de la "no" lluvia) quiso que el día siguiente fuera un día excelente. Soleado, caluroso, ideal para estar al aire libre. Así que preparamos todo y nos fuimos.

Nos costó bastante encontrar el lugar... no había señal de teléfono en la zona, los gps perdían conexión y la gente del lugar no tenía muy en claro donde quedaba el aeródromo. Sin embargo, tras casi tres horas dando vueltas (el viaje de vuelta nos tomó una hora y cuarto) logramos dar con el lugar. Los turnos de vuelo eran por orden de llegada. Con la perdida que nos habíamos pegado, nos tocó quedar para lo último. Sin embargo, como dije, el día estuvo hermoso y el lugar era ideal para estar al aire libre así que tuvimos una grata (aunque larga) espera.

Cuando nos toca el turno, el instructor nos explica como tenemos que hacer antes de subir y me doy cuenta que no voy a poder llevar el logo del equipo en las manos porque durante el despegue tengo que sujetar la silla en la cual me sentaré cuando esté en el aire. Deseperada, empiezo a pensar como hacer (tanto lío y lo que falta es que no pueda validar la prueba porque no tengo el logo XD). Tras comentarlo con mi amiga y ver de que parte de la mochila se puede enganchar, veo el estuche de la cámara de fotos y su bonita tira para colgartelo. Cuestión que quito la tira e improviso una especie de cinturón y atravieso el logo con el. Contenta con la solución espero a que vuele el novio de mi amiga (por cuestiones de tamaño el instructor lo hizo pasar primero) y luego voy yo. El tipo me mira con cara de WTF? cuando me ve con el logo, así que más o menos le contamos de que va la cosa, nos preparamos, salimos y luego... guaaaaaauuuuu. Estar suspendida en el aire fue increíble; además me tocó ver el atardecer desde ahí lo cual fue genial. En cuanto se pueda, repetiremos ^^