Partida Rol por web

-BRIGHT- El caso del asesino de Elfos.

Prólogo: Briefing en un frío día de Febrero. El asesino de Elfos

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29/12/2017, 19:42
Celarian Vaamar

-Lista. Podemos irnos.

Dándose un último vistazo frente al espejo y acabándose de abrochar los últimos botones de la camisa del uniforme emprendió a paso rápido el camino hacia la sala de briefing, siguiendo de cerca los pasos de la humana.

Se miró el reloj de pulsera de su mano derecha y suspiró aliviada.

-Llegamos bien. Sentenció

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29/12/2017, 20:21
Jeaninne Courier

Si, por suerte. No es buena idea llegar tarde y ponerse en la mira del jefe. 

Miro a su alrededor, estaban casi todos. Se preguntaba quien de todos sus compañero sería tan descuidado de llegar a tarde a una cita con el comisario McGee.

 

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29/12/2017, 22:37
Corbulo

Justo tras Courier y Vaamar entraron en la sala de reuniones O'Malley, Jefferson y Raynor, separados por apenas 5 segundos. Y justo ese tiempo fue el que pasó hasta que la manecilla del reloj que presidía el atril, aún vacío reservado para el comisario, se posó sobre el 3 metálico que marcaba las 06:15.

Los cinco tomaron asiento en la primera silla vacía que encontraron. Aquella sala enorme  de techo alto se encontraba amueblada únicamente con dos hileras de 5 sillas separadas por un pasillo central, todas mirando hacia el atril de caoba en el que resaltaba un relieve del  escudo del departamento de madera del mismo color, flanquado por dos banderas estadounidenses.

La gran mayoría de las sillas estaban ocupadas, las vacías se podían contar con los dedos de una mano y es que el turno de mañana era el que lograba juntar a más de 80 agentes de servicio.

Las conversaciones y murmullos pararon en seco cuando la puerta secundaria de la sala, en la zona del atril, se abrió de golpe, para dar paso a un enano entrado en años vestido de un uniforme lleno de galones dorados y de un andar severo y decidido. Si su rostro fuese reflejo de su estado de ánimo se diría que no había tenido muy buena noche.

Precediendo al comisario McGee apenas unos pasos tras de él entró una integrante de la raza de los medianos, vestida de oficinista y con gafas de pasta, de unos treita años de edad, el pelo recogido púlcramente en una cola de caballo  y portando un maletín. Su expresión facial era casi tam severa como la del comisario.

El comisario McGee subió los tres escalones que lo elevaron justo por encima del atril y se aclaró la garganta mientras la mediana se quedó depié algunos metros detrás de él.

 

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29/12/2017, 23:08
Khorlin McGee

-No tengo tiempo para perderlo con vosotros, así que más os vale que me escuchéis atentamente.

Sus ojos bajaron directamente hacia los folios que tenía apoyados en el atril.

-Smith y  Bronson, os toca Lima doce, secotres 1, 2 y 3. Tidirium y Thomson tenéis el Lima catorce, apoyo para Lima 12... Copperhand y Gronk os vais al sector 4 con la motorizada... Revisad las motos antes de salir. Hightower y Mahoney, junto con Harris y Lassard os tocan las scooters y os encargáis de los colegios de la tercera, la cuarta, la séptima, la novena y la décima.

Pasó a la segunda hoja y volvió a aclararse la garganta.

-Gatsu, Julius, Esteban y Chacopinos, os toca policía de proximidad, y ya sabeis lo que significa: Bermudas y Segway-Los quejidos y lamentos de alguno de los nombrados se acallaron en cuanto el comisario se limitó a levantar la mirada de su papel en dirección al grueso de agentes.-Como decía, revisad las baterias de los Segway antes de salir.Como me vuelva a enterar que a alguno se le acaba la batería a media jornada os juro por los nueve ejércitos que lo hago volver arrastrando ese puto trasto. Y si... ¡Lo digo precísamente por usted, Julius!

Volvió a centrar sus ojos en los folios grapados que sostenía en las manos. A medida que había ido nombrando agentes, estos se habían ido levantando para pasar junto a una funcionaria que les entregaba las hojas de servicio, colocándose en fila encarando la puerta de salida, dispuestos a salir por la puerta para a afrontar una nueva jornada laboral. Durante más de cinco minutos, y como si de un sermón se tratase se limitó a ir nombrando agentes para asignarles tareas y zonas, los cuales iban engrosando la fila de a dos, en una cola que se extendía hasta el fondo de la estancia. Cuando aún restaban 7 agentes por asignar dobló las hojas  y las dejó sobre el atril.

-Está bien, muchachos. Como de costumbre, el Inspector González y el Subinspector Matesanz estarán al cargo como Oscar uno y Oscar dos respectivamente. Haced lo que ellos digan y probablemente regreseis a mediodía con los mismos agujeos con los que ahora saldréis por esa puerta. Suerte a todos-se cuadró militarmente,a lo que los agentes que hacían cola respondieron de igual modo, para luego empezar a salir ordenadamente por la puerta de dos hojas.

-Johnson, Vaamar, O'Malley, Jefferson, Courier, Woods y Raynor, les quiero en quince minutos en mi despacho-dijo desde el atril dedicándoles una mirada aparentemente severa- Eso es todo. Y sin más abandonó el atril y abandonó la estancia a paso apresurado,siempre seguido por la mediana.

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29/12/2017, 23:48
Lyara Woods

Lyara se mantuvo bien erguida en su asiento según las asignaciones eran anunciadas. Miró de soslayo a sus compañeros, a algunos los conocía de nombre, mientras que otros de vista. No pudo evitar repiquetear ligeramente con el pie en el suelo, en un extraño tic reprimido, pero sin llegar a hacer ruido de ninguna clase al ir frenando su impulso cuando la suela iba a impactar contra el pavimento.

Terminó por tranquilizarse y esperó pacientemente a que las directrices le fueron dadas. Por una vez no le tocaba regular el tráfico frente algún colegio. Ladeó un poco la cabeza al atar cabos cuando Johnson fue nombrado.

-Así se hará, señor. -dijo con apenas un murmuro, pues el comisario ya se había volteado.

Miró después a los demás, sabiendo que compartían destino.

-Será mejor que no le hagamos esperar, ¿no? -sugirió con una ligera sonrisa, cabeceando discretamente hacia la puerta. No parecía de la clase que se entretenía al último momento, aunque no por ello abandonaba su expresión amigable.

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30/12/2017, 00:05
Don O'Malley

Don se quedó de una pieza. Había estado en el despacho de McGee solo una vez, cuando le recibió en el Distrito hace tres semanas. Empezó a repasar mentalmente todos sus últimos informes... si, había baches, pero los de siempre... no concebía razón para que lo llamaran al orden. Y pensándolo mejor, ¿por que junto con los otros agentes? 

Que el Lord Oscuro me lleve si esto tiene buena pinta... 

Se retiró del salón para mandarle un whatsapp a Daisy.

Hola mi flor. Mi compañero esta “all in” para el sábado así qué ya no te quedan excusas. Por suerte no pidio ver una foto de ella, jejeje. Pasamos por ustedes a las 8. Ya veremos si quieres que te regrese a alguna hora ;)

Tras ello, regreso a la sala con el resto; seguramente fueran juntos a ver al jefazo.

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30/12/2017, 00:19
Ryan Raynor

Raynor se sentó y escucho lo que McGee tenia para decir. Casi se le escapo una risa, pero logro mantenerse a tiempo de hacerla. El había sido uno de los participes de cambiarle la batería al Segway de Julius, y él nunca revisaba las cosas. En el Ejército te enseñaban a preparar las cosas y si estaban listas, volverlas a preparar. Eso y viajar ligero.
Cuando termino el briefing y los llamo al despacho, sabía que tenían tiempo de sobra para llegar hasta allí, de modo que continúo con la conversación que tenía en suspenso con el Enano. Era divertido estar con el, la mayoría de los miembros del departamento no tenían intelecto para un duelo de pullas.
Mientras la Señorita perfecta quería esperar catorce minutos en la puerta del Comisario firme y haciendo nada, el se giro a responderle a su amigo con problemas de empinado de codo.
- Más que el bueno, el malo y el feo, creo que nosotros clasificaríamos para una sitcom. Si, una remake de “Dos hombres y medio” seria más apropiada. Yo haría el papel de Sheen. Además…- dijo, acercándose a la máquina de café, donde se hizo su Latte y le pasó uno negro, completamente cargado al Enano.- ...En este mundo, tu serias de los que cavan. Bébelo. Apestas a ese matarratas barato que tanto que te gusta, y el jefe te echara una bronca. -

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30/12/2017, 00:27
Peter Johnson

Algo confuso miró al resto de los "excluidos", tratando de establecer algún tipo de relación entre ellos.

Estaba claro que tenía relación cercana con Woods. Y que había entablado algunas conversaciones con Courier o con Rynor en alguna pausa del café, Conocía de oidas a Jefferson como uno de los cinco únicos orcos que prestaban servicio en Nueva York, pero no había trabajado con ninguno de ellos, ni siquiera con Woods. Estuvo tentado de pedir explicaciones en voz alta al resto, pero sus expresiones confusas denotaban que sabían tan poco como él mismo, y como el oficial  de mayor rango de los presentes debía mantener la compostura frente al resto.

-Ya habéis oido muchachos,  en quince minutos en el despacho de McGee.  Os recomiendo que aprovechéis para espabilaros con un café en la máquina-dijo en voz alta para que todos lo escuchasen. En una voz más moderada, dirigida hacia Woods murmuró-Voy a intentar enterarme de que diablos va todo esto...dicho lo cual, Johnson abandonó la estancia con paso decidido.

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30/12/2017, 00:35
Don O'Malley

Don tomó el cafe que le ofrecía Ryan.

Ahh hombre de buen corazón... gracias camarada. Casi me dan ganas de obviar tu comentario de mi bebida. Este sábado ya hay planes,¿verdad Frank? pero en el próximo partido de los Knicks contra los Celtics te haré probar lo que es un verdadero whisky. El jefe McGee estarí de acuerdo conmigo...

Bebió el café con gusto, por mas gusto industrial que tuviese. 

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30/12/2017, 00:42
Lyara Woods

Lyara asintió ligeramente a las palabras de Johnson, aunque no parecía mostrarse del todo preocupada en ese momento, sólo curiosa. Dió algunos pasos hacia la máquina de café aguardando pacientemente su turno, mostrando una ligera sonrisa a los compañeros que allá se encontraban.

-Algo me dice que hoy será un día interesante. -comentó con una vaga intención de no permanecer en silencio. Una vez libre la máquina de vending, terminaría con algo de té, posiblemente desentonando más de lo que ya hacia.

Mataría el rato allí hasta que fuera la hora de marchar.

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30/12/2017, 00:50
Jeaninne Courier

Jeaninne no se sorprendió poco al escuchar quienes habían sido citados para esa extraña reunion, que tenía que ver con ellos? Los conocía sí, pero nunca había formado pareja con ninguno. Había hablado en ocasiones con ambas elfas, pero nunca más allá de dos palabras en los vestuarios.

Al orco a decir verdad no se le acercaba nadie, y al enano lo había olido más veces que las que lo había visto. Con Ryan sí se conocían, habían entrenado muchas veces juntos, era un buen agente, aunque a veces le molestaba el exceso de confianza que demostraba.

Se acercó a la máquina de café, Dios sabía cuanta falta le hacía un café aquella mañana. Pasó por delante de Ryan que la dejó pasar para que pudiera servirse. Tomó su café, lo miró y le preguntó:

Tienes idea de que se trata todo esto? -  e inmediatamente le extendió un paquete de chicles a O´Malley. - Ten, con suerte esto ayude a tapar un poco el olor.

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30/12/2017, 00:57
Ryan Raynor

En lugar de desocupar la máquina de Café, el Exsoldado siguió sacando bebidas, deposito al lado de la muchacha un Cha Verde, y en lugar de pasarle el azúcar, le ofreció un poco de Canela, sacada oculta de atrás de la maquina, del pozo de dinero que hacían para que la maquina no fuera demasiada basura. Le paso ese fuerte te sin mirarlo, al tiempo que murmuraba “pruébalo”. Su tiempo como Barista en una empresa de café le habían enseñado un par de cosas. Buena época, fácil conseguir mujeres. Aquí era algo mas lioso.
Luego observo a Frank, y hizo una mueca. A pesar de que sabía que quería cada uno, el Orco era difícil de Leer. Pensó en su espantoso gusto por sombreros y aposto. Eligio Grey Tea, el más sencillo, pero quizás el más clásicos de los tes.

- De acuerdo. ¿Estamos hablando de algún billete o solo hablamos por hablar? -
Luego la otra mujer. También difícil de leer. Intentaría algo. – ¿Skinny Vainilla Latte Quizas? – pregunto en voz alta.

Se relamió los labios, pensando que su latte se enfriaba, y respondió a Jeaninne.
- Ninguna Idea, Nueve.- dijo, haciendo un juego de palabras con las ultimas letras de su nombre. - Pero si me aleja del frio de la calle, no me quejare, aunque tengamos que perseguir a un asesino serial. Ademas, iremos con el Detective moderación y ...- Señalo a la elfa - "Srta Todo segun el libro" asi que no puede ser una reprimenda-

Notas de juego

Lo siento, ahi me edite, 9

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30/12/2017, 01:47
Lyara Woods

Después de que el té se enfriara lo suficiente dió un pequeño sorbo, y con inmediatez asintió en señal de conformidad, dándole el visto bueno a Ryan. Se alisó el uniforme con la diestra y escuchó la conversación, interviniendo cuando creía no interrumpir.

-Con el recién ascenso de Johnson y el asunto de los asesinatos... -señaló con el pulgar una de sus orejas, en un gesto discreto- Es probable que haya algo de trabajo de campo. Aunque es extraño que nos escojan a nosotros -se frotó ahora el cuello, pensativa- Quizás sólo tengan interés en ver como funcionamos como equipo.

Se encogió de hombros al decir lo último, a fin de cuentas también había descartado la posibilidad de reprimenda, y sus últimas labores no habían sido particularmente interesantes como para recibir algún tipo de mención positiva.

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30/12/2017, 08:07
Celarian Vaamar

A nadie le gustaba tener que presentarse en el despacho de McGee y menos a esas horas de la mañana de un helado ventiocho de febrero.

Pero así había sido y tendría que soportar a ese desagradable hombre una vez más. Ya había estado en su despacho en más de una ocasión.

McGee le había convocado  hasta en tres ocasiones frente a él. Las dos primeras fueron para abroncarle. Una por llegar tarde dos mañanas consecutivas y otra por solicitar un arma que no se encontraba entre las reglamentarias del Departamento. No había vuelto a llegar tarde, sabía lo que le convenía.

En cambio la tercera vez que fue convocada al despacho del comisario fue para recibir su HK P30 Compact. Vaamar sabía luchar por lo suyo y gracias a una buena argumentación y un estudio costeado por ella de un anatomista, obtuvo lo que había pedido.

La elfa esperó pacientemente a que Raynor se alejara de la máquina para sacar un chocolate caliente. No tomaba café. No tomaba té. Pero si le gustaba el dulce y a la vez amargo sabor del chocolate derretido. Tampoco le gustaba Ryan. Parecía un tipo que pretendía destacar por su simpatía. Un hombre que cultivaba su cuerpo como si de un templo se tratara, pero no por el mero hecho de sentirse bien consigo mismo, sino con el claro objetivo de atraer al sexo contrario. Como si de un gorila espalda plateada se tratara.

O'Malley tampoco era demasiado de su agrado. Su olor etílico desvelaba como era su desestructurada vida. Celarian no bebía. Odiaba de hecho la bebida. Sus nefastos efectos eran posiblemente una de las mayores lacras de la historia de las nueve razas. Aunque a su vez, era quizás el motivo del que ella tuviera trabajo. Sin alcohol se necesitarían muchos menos agentes para salvaguardar la paz de Nueva York.

Johnson le parecía muy similar a Raynor. Estaba convencida de que gustaba de seducir mujeres con tal de llevárselas a la cama y si al día siguiente seguían ahí, ya comenzaban a serle un estorbo.

Frank le era indiferente. Parecía de los cuatro agentes convocados el más íntegro. Lo cual decía muy poco de aquel cuerpo, si era un piel verde el agente del que Vaamar tenía mejor impresión.

El caso de Woods era diferente. No sabía si era debido a que compartían raza, pero lo cierto era que aquella muchacha le resultaba simpática. No había hablado demasiado con ella la verdad, pero las pocas conversaciones que habían tenido, le habían resultado agradables. Era una lástima que Johnson hubiera puesto su mirada rapaz sobre ella. No sería ella quien le advirtiera de los peligros de aquel halcón. Sil la ratoncita Woods no veía el peligro que la acechaba, era problema suyo.

Celarian golpeó disgustada la máquina cuando su moneda se quedó atascada en su interior sin proporcionarle lo que había pedido. Chasqueó la lengua disgustada. - Tampoco es para tanto... Con lo malo que es éste chocolate, seguramente me he librado de tener que hacer de vientre en breve. Una de las cosas que más odiaba de la profesión era tener que defecar de uniforme. Tener que quitarse el cinturón cada vez que iba al baño era en trabajo que resultaba extenuante. Cuatro sujeciones anclando el cinturón exterior al interior más otras dos hebillas anudando el arnés de su pernera a su pierna derecha. Dejar el cinturón en el suelo del baño sin que se mojara con alguna sustancia maloliente era toda una proeza.

Celarian saludó finalmente a sus compañeros con la cabeza antes de dirigirse al despacho de McGee. No era persona de muchas palabras. No solía hacer demasiados amigos y esa mañana no estaba para bromas. Sólo esperaba que el comisario no le faltará al respeto, pues de lo contrario emprendería mediante medidas legales. Ser el comisario no le otorgaba el poder para descalificar a sus agentes de manera reiterada y sin motivo aparente.

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30/12/2017, 17:55
Frank Jefferson

Jefferson hizo caso omiso del comentario de Raynor sobre sus gustos sobre las mujeres fuertes, de piel verdosa y con buenos colmillos, así como de la mención de Don acerca de que ellos podían ser "el bueno, el feo y el malo" de la comisaría. En lugar de responder, el policía orco se limitó a gruñir varias veces y dar leves carcajadas cuando sus compañeros decían alguna broma. A pesar de que los miembros de su clan orco le consideraban prácticamente un humano y una deshonra para su raza, aún le costaba mucho captar la ironía y el sentido del humor de los pieles-rosas.

En la sala de reuniones, escuchó en silencio las palabras del comisario Mcgee, quien terminó por designarlos a los tres, junto a otras tres agentes, para que acudiesen a su despacho. ¿Sería para algún tipo de reprimenda o para encargarles un caso tan importante que ni siquiera había querido decirlo en presencia del resto de los policías?

En cuanto a sus compañeras, una de ellas era una humana, mientras que las otras dos eran elfas. Una de ellas era muy habladora y a Jefferson le parecía divertida, aunque la otra se mantenía callada como una tumba. Supuso que sería mucho más seria que el resto del variopinto grupo.

Cuando Raynor le tendió el Grey Tea, Jefferson puso cara de circunstancias y extendió su mano para agarrar el vaso. No le gustaba demasiado el té en general, pero aquel tenía buen sabor. Se lo bebió de apenas un trago y reprimió el impulso de dejar escapar un exabrupto proveniente de su estómago. Era una suerte que fuera té y no cacao. Nunca le sentaba bien por las mañanas.

-¿Qué creen que quiere Mcgee? -preguntó el orco, apoyándose en la pared, junto a la máquina de café que había empleado Ryan-. ¿Quizá un nuevo caso o será alguna movida rara de esas para promover la igualdad racial? -Miró a sus cinco compañeros, un tanto pensativo-: Quiero decir, somos dos elfas, dos humanos, un orco y un enano. Formamos un grupo de lo más peculiar.

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30/12/2017, 18:36
Ryan Raynor

Ryan siguió el camino de la elfa cuando empezó a dirigirse hacia la oficina del comisario, acentuando el seguimiento de la zona lumbar de la misma. No le costó mucho imaginársela agarrando esa trenza color madera y dándole palmadas. Movió la cabeza de un lado a otro para despejarse. Golpeo la máquina de una forma especial, pero no ocurrió nada. Se saco la imagen mental que se había formado. No quería empezar así la mañana. A pesar de que había prestado atención al redondo trasero de la engreída mujer, también había escuchado lo que decía Frank. - Seremos siete, Sherlock. – dijo en referencia al Orco.- el Detective Segundo Jhonson vendrá con nosotros y seguramente será el agente a cargo de la misión. – Termino de apurar el chocolate, acomodo de nuevo los pantalones y les hizo un gesto de que lo siguieran. Su reloj interno le había dicho que habían pasado buena parte de los quince minutos, así que el empezó a dirigirse a las oficinas. Bebió la última gota de la bebida, y lo arrojo, casi sin mirar a un cesto de basura, golpeando al borde del mismo para luego salir fuera- Hoy será un buen día. Lo presiento.-.

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30/12/2017, 20:11
Corbulo

A medida que el grupo se iba internando en el pasillo de los despachos de los jefes, empezó a ser audible una discusión en un todo de voz más alto del que se consideraría cordial. Fue cuando estuvieron a pocos metros de la puerta de cristal ahumado del despacho de McGee cuando se pudo escuchar la voz de Johnson -Con todos mis respetos señor...Cortada de golpe por la voz malumorada del comisario, que experimentó una súbita subida en el tono -¡No tientes a la suerte, Johnson! Porque si yo digo que eres un caballo, pues relinchas, y si yo digo que ahora eres el puto actor de una comedia familiar pues te lees el puto guión y haces la interpretación de tu vida, porque para algo yo soy el  comisario de esta ciudad y tú un subordinado de ¡oh, sorpresa! del comisario de esta ciudad¿ Está claro, Johnson?

Al parecer el detective respondió con un gesto , pues no se pudo escuchar una respuesta afirmativa desde el exterior del despacho.

tras alisarse una vez más el uniforme y aclararse la voz, Woods tomó la iniciativa golpeando dos veces con los nudillos sobre el cristal, con un ceremonioal "¿Da usted su permiso, Comisario?" respondido inmediatamente con un escueto "-Adelante" del malhumorado enano.

 

Todos habían pasado en algún momento por el despacho de McGee y no había cambiado demasiado de como lo recordaban en su cabeza. Una gran mesa cuadrada de caoba barnizada oscura delicadamente tallada en estética enana, con algunas runas grabadas en sus patas obtenía la atención de aquel que pudiese entrar en el habitáculo por primera vez. Un asiento de piel  ocupaba el centro de la mesa y, como de costumbre, estaba ocupado por el enano.

Sentada a su lado estaba la mediana que habían visto antes, que seguía con una expresión seria y casi desprovista de emoción alguna y,  frente a ellos estaba sentado Jhonson, que les daba la espalda. Mantenía una postura rígida y si bien no podían verle  el rostro, el como apretaba los puños bajo la mesa demostraban cierto grado de frustación. A ambos lados de Johnson se encontraban 6 sillas vacías.  Por lo demás, el despacho mantenía una decoración bastante elegante. Todo el mobiliario era de madera oscura barnizada y en la pared colgaba de forma solemne un retrato pintado de McGee ataviado con sus mejores galas.

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30/12/2017, 20:13
Khorlin McGee

-Tomen asiento-ordenó

En cuanto estuvieron todos sentados, se acomodó en la silla de cuero que ocupaba  y apoyó los codos en la mesa, juntando las manos.

-Bien, les presento a la señorita Lina Goodfood, ella es la directora de relaciones públicas del Ayuntamiento.

La mediana se limitó a dar un lijero golpecito de cabeza, como dándose por aludida.

-Como todos sabréis, desde principios de mes parece que nos enfrentamos a un asesino en serie con predilección por la raza de los elfos... En tres semanas hemos registrado tres víctimas, y las pruebas apuntan a un mismo asesino.- Lanzó sobre el escritorio una carpeta con fichas en su interior para que pudiesen leerlas.

-Voy a seros sinceros, muchachos... desde el incidente del orco adolescente abatido por dos de nuestros agentes el mes pasado, se ha creado todo eso del "Orc lives matter" y nos han puesto en el punto de mira de medio mundo. y eso no es bueno ni para mi ni para vosotros...

dejó de hablar por un instante como si estuviese buscando la mejor manera de hilar todo aquello.

-Tengo a todo el departamento de homicidios ocupado con el caso  de los cuatro orcos pandilleros tiroteados el día 3 por la banda rival y al parecer no se muy bien por que -dijo con algo de retintin- No puedo destinarlos al caso del asesino de elfos.

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30/12/2017, 20:14
Lina Goodfood

Interrumpió al comisario aclarándose la voz deliberadamente.

- No se pueden retirar recursos municipales destinados originariamente al caso de las muertes de los ciudadanos de raza orca en favor de un caso en el que las víctimas son ciudadanos élficos porque la opinión pública se nos echaría encima, como es normal. Desde el lamentable incidente del mes pasado miden cada paso que damos al milímetro y este ayuntamiento no está dispuesto a más escándalos.

Dijo de forma severa casi de carrerilla, como si estuviese leyendo un guión en su cabeza.

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30/12/2017, 20:14
Khorlin McGee

-Si, lo que sea, dijo el enano a desgana,  haciendo aspavientos con los brazos.

-La cosa está en que las élites tampoco aceptarían que dejemos aparcado  el caso del asesino de elfos, por lo que vamos a ponernos a ello, al menos de cara a la galería, claro- aclaró.

-El asunto es sencillo, los muchachos de homicicios no  tradarán demasiado en dejar finiquitado el caso de esos pieles de puerco- La mediana tosió de forma teatral y dedicó una mirada exajeradamente severa al comisario, tras sus gafas de pasta- De esos ciudadanos orcos, no te ofendas, Jefferson..., por lo que simplemente necesitamos ganar unos cuantos días. Para quedar bien de cara a la galería...

-Esta mañana hemos convocado una rueda de prensa para presentar oficialmente el caso del Asesino de Elfos y ustedes serán presentados como la nueva unidad especializada en crímenes raciales, responderán algunas preguntas a la prensa, sonreirán a las cámaras y en cuanto acabemos se tomarán el resto del día libre. Sencillo, ¿Verdad? Ahí tienen los archivos de los tres asesinantos, les recomiendo que se los repasen a fondo por si les preguntan algo relacionado al respecto. ¿Alguna pregunta?

El ceño del enano se frunció casi como retándoles a preguntarle algo.

Notas de juego

Los archivos del caso los tenéis disponibles el la sección "Archivos de los casos"