Partida Rol por web

La inseguridad, que bonita palabra con un monton de significados que cada uno puede darle hasta llegar a la poca certeza si lo que estas haciendo esta bien, La mujer respondio haciendo una reverencia y a los dos minutos trajo el sake y obsequio dos vasos a los hombres que estaban cerca suyo.

Ambos levantaron las copas y brindaron entre ellos, para luego tomar de un sorbo aquel vino de arroz.... sus miradas recayeron sobre ustedes nuevamente....

- Acerquense - Dijo uno.... - Compartamos un bebida y relatos - Dijo el otro.....

Poco acustumbrado a tratar con nobles, reverencie a mis interlocutores. Lo mejor era no hablar, asi que espere a que otros de mis companeros tomara la palabra. No queria bajar la guardia, asi que que apenas moje mis labios en la copa de sake. Despues de todo era mejor no relajarse... - Me pregunto quienes seran estos samurais ?

Musashi observa con una sonrisa de poker a los dos tipos, definitivamente, no eran trigo limpio, lo que no quitaba que no fueran interesantes... Tomó la palabra:

- Me uniré a tan grata compañía, quizás mis compañeros tengan algo de lo que hablar o algun asunto que atender. - Sus dos compañeros pudieron notar ahí la excusa perfecta por si no querian unirse, dando a entender que Musashi estaba dispuesto a saber lo más posible sobre estos dos tipos.- Y bueno caballeros, ¿Qué les trae por estas tierras? Si no es mucha descortesía por mi parte preguntar

Asenti ante las palabras de Musashi. No creia prudente dividirnos, asi que le segui... - Con gusto te acompano.

Seguí a mi compañero de viaje Mushashi hacía los dos hombres que nos habían invitado, pero dejando que mi compañero hablase, ya que poseía mas dotes de oratoria que yo, espere a ver lo que respondían aquellos dos hombres a las preguntas formuladas

Ambos sujetos sonrieron y esperaron a que los Samurai se sentasen junto a ellos; los miraron anciosos y espectantes de escuchar relatos de duelos o batallas.... Fue alli que un nuevo hombre se sumo a la mesa.

- saludos jovenes maestros de la espada, mi nombre es hashi - Sonrio ante ustedes - Que los trae por el pueble de Sakura -

Musashi sonrió:

- Buscamos la Fortuna de ser un dia Maestros de la Espada. Seré el mejor duelista de Rokugan, cuando haya derrotado a cuantos quieran batirse en torneos. - Aquello no era una provocación, parecía más que Musashi se lo estaba recordando a sí mismo que a esos hombres.- Pero no quiero aburrirles con mis sueños y metas, diganme gentiles guerreros que les trae a ustedes por aquí.

- Vivimos aqui - respondio Hashi con elocuencia - Veo que se aventuran en busca del destino? aquello que no estra escrito.... su pagina en blanco -

Musashi seguia atendiendo a los Samurais pero en su trance habitual, su sangre Dragón, tal vez:

- Hashi San, no hay pagina en blanco, solo capitulos sin leer... Pero sabias palabras de todas formas. ¿Algun suceso relevante en las ultimas semanas? - Preguntó con verdadero interés, queria saber más del mundo exterior.

- Tu lo crees asi? tan ferviente es tu creencia que dices que todo ya esta escrito ? - Respondi con dos preguntas - en las ultimas semanas? - Otra pregunta mas se hacia presente en el hablar de Hashi.

- Quizas, dicen que a las afueras del pueblo se encuentra la casa abandonada del untimo Señor que rondo por este pequeño pueblo - Fue alli que les cayo la ficha.... alguna vez el pueblo de sakura fue conocidop en toda rokugan..... pero luego de la muerte de su señor.... este desaparacio de las voces populares.

Musashi escucha pensativo a Hashi, definitivamente se llevarían bien si no tenían que cruzar espadas...

- El Destino es un ciclo hecho por los Dioses en el que solo los mejores conseguirán ascender y liberarse de la rueda interminable. Al menos siempre he puesto mi fé en ello... Y los Dioses nos demostrarán un dia quien tiene la razón. Si, preguntaba lo de las ultimas semanas por conocernos mejor, si la pregunta te ha molestado, mil perdones noble guerrero. - Al escuchar sobre la casa abandonada.- ¿Podrías contarme la historia de esa casa y su Señor Hashi-San?

Las cosas se ponían cada vez mas interesantes, podría ser que en la casa que ha dicho Hashi, conseguímos nuestro primer trabajo juntos, mientras nuestro compañero murashi seguía hablando yo estaba haciendo muy bien, yo me quede sentado y callado para ver como seguían las cosas, y si tengo que halar lo hare si se me permite la ocasión

- Dicen que esa casa, aun conserva el espiritu de su Señor... no la ha abandonado ya que las malas lenguas dicen que un gran tesoro se esconde en sus cimientos... - Pronuncio Hashi - Pero vamos creer en espiritus..... - Sonrio bebiendo un poco de sake.... los hombres que estaban junto a el se levantaron y se retiraron del lugar.

Musashi escuchó atento a Hashi memorizando lo que este decia, antes de añadir:

- Todo es cuestión de abrir los ojos, Sr Hashi, no los ojos mundanos, sino los del alma, como los monjes predican. - Dijo antes de dar un sorbo de sake.- Bueno, creo que puedo ser un poco descortés, pero... ¿Cual es vuestro cometido en este pueblo?

- Soy el que protege este pueblo, junto con mis dos compañeros - Respondio a tu pregunta - Ahora que los trae aqui a ustedes? - Sonrio mientras le miraba.

- Vuestro compañero, carece del habla? - Pregunto con interes

Musashi asintió y sonrió luego:

- Mi cometido aquí es conocer mundo, como ya dije. Esta aldea, no es para mí más que un alto en el camino para repostar y escuchar noticias... En cuanto acabe, iré a mi siguiente parada. Aunque quizás un dia vuelva a saludarle y tomar un té o un sake, Hashi-San. En cuanto a mi compañero... Es algo callado. Digamos que es de esas personas que prefieren observar el mundo que les rodea y meditar sobre ello, un hombre contemplativo.

Era el momento de hablar, ya que sino podría ofender al señor con quien hablabamos:

-Perdonad si no he hablado antes, soy una de las pocas personas que escuchan el mundo que nos rodean para así poder cumplir mis cometidos con mas vehemencia, yo me llamo Sugimoto, y el destino me ha llevado hasta aquí, para poder cumplir la misión de  ir a esa casa para saber lo que pasa, y si nos matan, pues que así sea.

Dicho eso me vuelvo a callar i así poder escuchar mas cosas sobre la casa

- Se ve que eres valiente Sugimoto-san - Dijo con una pequeña reverencia - Pero os advierto y para ti tambien va eso Musashi-san, lso que ingresaron en esa casa.... terminaron muertos o locos como el Viejo Tesuro -

Musashi miró a Hashi:

- Ciertamente Hashi-San puede haber peligro, pero ¿Acaso la vida del Samurai no es una senda sobre el filo de la espada? Agradezco su consejo y lo tendré presente en mi camino, no solo en la casa, sino en mi Senda. ¿Donde puedo encontrar a ese anciano que ha mencionado?

Siempre con energías, el joven Musashi no se iba a rendir, así tuviese que luchar contra Fu Leng para entrar en esa casa y salir victorioso.

- En una pequeña granja a las afueras de la ciudad.... aunas dos horas de camino, pero cuidado aquel anciano es muy territorial...... - Sonrio Hashi ampliamente