Partida Rol por web

Abajo la Basílica — Orígenes

3. Nido de Ratas Negras.

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15/05/2013, 19:12
Narrador

Anduviste el resto de la tarde ocupada en tus quehaceres. Cuando te tumbaste en el jergón de paja estabas rendida, y hubieras deseado que no tuvieras que dar un paseo nocturno a la embajadora. Te mantuviste despierta a duras penas, y cuando estabas empezando a dar cabezadas escuchaste un levísimo tintineo proveniente de la calle. Alguien estaba bajando un pequeño vial con un hilo de seda por la ventana de tu habitación. En el vial estaba adherida una etiqueta con caracteres drache que no sabías leer.

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15/05/2013, 20:49
Rowane

Rowane se frotó los ojos y parpadeó. Bien,de todo lo que podría haberse imaginado, un vial furtivo era lo último. bueno, no, eso directamente no se lo había imaginado...

Se puso en pie despacio y se acercó para cogerlo. La etiqueta en drache, era un buen método para reconocer de quien era, aunque se habría sentido más tranquila de saber qué rayos ponía ahí. ¿Tenía que beberse eso o algo así? Abrió la boca para preguntar pero se la tapó enseguida. Había tanto silencio que tenía miedo que se pudieran oír hasta lo susurros.

Lo destapó y lo olisqueó. Tenía una roma extraño a... hierbas o algo así, y era incoloro.

«E... En fin. De perdidos al río... »

Cogió aire y se lo bebió.

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15/05/2013, 21:30
Narrador

Durante unos eternos latidos de corazón no sucedió nada. Después notaste un vacío en el estómago y de pronto te sentiste mucho más ligera. Perdiste la sensibilidad y cuando te miraste las manos viste que empezaban a difuminarse. Te convertías cada vez más deprisa... ¡en un jirón de neblina!

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15/05/2013, 22:49
Rowane

«¡¿P-POR TODOS LOS?!»

A Rowane estuvo a punto de darle un infarto, ¡se estaba disolviendo en el aire! Tres segundos después se dio cuenta de que... no dolía. Aquello no le estaba haciendo daño. ¿Magia? ¡La magia era increíble!

Una vez se hubo convertido en... niebla, literalmente, no supo cómo avanzar. ¿Cómo se avanzaba sin piernas? Suspiró si es que tal cosa era posible y se concentró en acercarse a la ventana para salir por ella.

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15/05/2013, 23:04
Akiko

Descubriste que tu voluntad era suficiente para hacerte flotar lentamente hacia la ventana. Te colaste sin problema entre los barrotes y, del otro lado, te esperaba una drache desconocida. Te costó varios latidos de corazón darte cuenta de que era Akiko, pero la diferencia era notable entre verla con el shemi tradicional y así. Llevaba pantalones granates, botas y guantes de piel, bufanda de color rojo, una chaqueta negra cruzada y un fajín ancho con varios viales. Pero lo que más llamaba la atención era su bastón: de madera de cerezo estaba rematado por una cabeza de dragón de cobre en uno de los extremos, mientras que la contera habían montado una daga del tamaño de tu antebrazo.

Más que una diplomática parecía una aventurera.

Akiko te hizo un gesto para que la siguieras para alejaros de las cercanías de la Casa Hawald.

—Ahora quiero que te concentres es volver a ser sólida. Trata de imaginarte cómo te sentirías si fueses una estatua de piedra y recuperarás tu forma.

 

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15/05/2013, 23:41
Rowane

Aquello era lo más terrorífico y a la vez lo más fascinante que le había pasado a Rowane en su vida, estaba tan asombrada como inquieta teniendo la sensación de ser aire. Siguió a Akiko por la calle hasta que le dijo aquello.

Rowane se esforzó por imaginarse siendo una estatua de piedra y a los pocos segundos volvió a sentir los pies sobre la tierra. Soltó el aire que había estado conteniendo y se miró las manos. Sus manos volvían a estar ahí. Luego se palmeó el cuerpo como asegurándose que no le faltaba ningún trozo o algo de eso.

Como todo estaba en orden, terminó por mirar a Akiko con los ojos abiertos de par en par.

Guau—fue lo único que pudo decir tras parpadear dos únicas veces.

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16/05/2013, 00:24
Akiko

Akiko no le dio demasiada importancia, como quien está acostumbrado a prodigios como ese.

—Ya. Ahora sabes por qué los revrainos temen tanto a la magia. Porque no te equivoques, el odio es sólo un tipo diferente de miedo —dijo.

La drache extrajo un cuchillo largo de detrás del fajín y te lo tendió. Era parecido a las espadas cortas revrainas, y a la vez era distinta. Esta era curva, y el mango era ligeramente más largo. Era de buena factura, pero era como si el herrero considerase la forja de la espada como un arte y no como una mera fabricación de instrumentos de muerte. Resultaba inapropiado coger un arma de este tipo. La hoja tenía alma, y no había sido fabricada para ti. De algún modo lo sentías.

Ajena a todo esto, Akiko te tendió un segundo vial, idéntico al anterior.

—Toma. Por si nos separamos.

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16/05/2013, 01:12
Rowane

A Rowane le costó no pellizcarse para cerciorarse de que en realidad no se había dormido en la celda y estaba soñando todo eso. Aunque le costó más todavía no quedarse mirando el cuchillo que le tendían, ¡qué espada tan bonita! Levantó las manos dubitativa, mordiéndose el labio inferior, como si no quisiera "mancillar" aquello pero a fin de cuentas... la embajadora se la estaba dando así que no podía decirle que no.

Gracias...—fue lo único que atinó a musitar mientras lo cogía (y el vial también) aunque era un gracias de corazón.

Ningún drow en su sano juicio habría esperado que aquella mujer fuera a molestarse en traer algo para que pudiera defenderse, lo normal sería que, de haber problemas, la arrojase de una patada a ellos como cebo mientras ella huía.

No tenía ni idea de cómo iba a acabar aquella peculiar ruta turística por Port Coeur pero por alguna razón que no comprendía, quería hacerlo.

Cogió aire y comenzando a guiar a Akiko. Si el hecho de que los esclavos durmieran en jaulas la había descolocado... con el Nidal iba a alucinar.

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17/05/2013, 13:41
Narrador

Decidiste que la mejor forma de enseñar a Akiko la auténtica Port Coeur era llevarla al Nidal. No llevabais ni cinco minutos cuando de unos de los callejones llegó el grito de terror de una mujer. La drache no pensó: reaccionó al grito corriendo como una flecha en aquella dirección. Aunque las callejuelas del Nidal eran tortuosas y era fácil perderse, no os resultó demasiado difícil seguir los gritos de la mujer hasta un callejón de mala muerte y sin salida.

Un elfo oscuro se desangraba despatarrado en el fango, y tres malhechores malcarados tenían acorralada a una drow contra la pared. Una drow que estaba a todas luces embarazada.


Saber local CD 14 para identificar la banda a la que pertenecen estos malhechores.

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18/05/2013, 00:28
Rowane

Rowane siguió a Akiko por el laberinto de calles del Nidal y cuando giraron la última esquina y se encontró con aquello, la sangre le huyó del rostro.

—¡NO!

No sabía quienes eran aquellos humanos, no sabía quienes eran aquellos drown por le daba igual. Eran elfos oscuros como ella y los iban a matar. Pensó con la parte irracional de la mente, por inercia, y se agachó para coger guijarro del suelo. Sintió un escalofrío por la espalda cuando su voluntad transmitió algo oscuro, gélido y tenebroso a aquella pequeña piedrecita que empezó a tragarse la luz como si "brillase con oscuridad". Nunca había sabido cómo es que era capaz de hacer aquello, simplemente... podía. Todos los drow podían.

Acto seguido, la lanzó a los pies de los asaltantes para, al menos, no pudieran atacar a ciegas.

- Tiradas (1)
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18/05/2013, 12:07
Akiko

En cuanto te vio reaccionar, Akiko se llevó una mano a la parte interior de su fajín. Extrajo un cuadrado de cuero flexible y lo frotó con la mano libre mientras musitaba una y otra vez:

—Tahan... seperti... kulit...

- Tiradas (2)
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18/05/2013, 12:12
Malhechor

—¡Malditos sean todos los elfos oscuros! —gruñó uno de los malhechores.

—Te vamos a despedazar por esto, zorra entrometida —dijo otro.

Los malhechores salieron a trompicones, empujándose entre ellos, de la zona oscura de tu sortilegio hacia la entrada del callejón. Habías conseguido desviar su atención de la elfa oscura, pero ahora recaía toda sobre ti.


Plano de combate: http://i1052.photobucket.com/albums/s447/Arparrabi...

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18/05/2013, 16:53
Rowane

Rowane se apartó un poco del camino de Akiko, no tenía ni idea de lo que estaría haciendo la drache pero no quería estorbar.

La parte buena era que al menos había logrado captar la atención de aquellos maleantes sobre un objetivo que no estaba indefenso. Desenvainó la espada que le había prestado y adoptó una posición defensiva.

Ella no iba a atacar a alguien porque no disfrutaba derramando sangre, ella iba a defenderse de alguien que la atacaba porque mucho se temía que no iba a tener más remedio.

Una casilla a la derecha, defensa total.

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18/05/2013, 17:23
Akiko

Akiko encadenó un conjuro con otro: guardó el cuadro de cuero y sacó un trozo de algo resbaladizo que semajaba manteca.

—Ast menciptakan lemak —dijo, señalando delante de ti con la palma abierta.

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18/05/2013, 17:26
Malhechor

Los matones se abalanzaron sobre ti... pero a mitad del camino empezaron a bracear como si estuvieran tratando de recuperar el equilibrio en el hielo. Dos de ellos cayeron de bruces en el suelo. El tercero pisoteó a un compañero y te lanzó una estocada. Calculaste mal la defensa debido a la inercia que llevaba tu oponente y consiguieron abrir un hueco en tus defensas.

- Tiradas (5)
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18/05/2013, 18:11
Rowane

Rowane apretó los dientes en lugar de gritar, estaba acostumbrada a las heridas. ¿Por qué aquellas personas querían hacerle daño a una mujer embarazada? ¿Porque era drow? ¿Y querían ahora matarla a ella por el mismo motivo?

«¡No es justo!»

Aquel pensamiento cruzó fugazmente su cabeza haciéndola soltar un gruñido antes de devolverle una estocada curva al ratero. Se sentía extraña con algo que no fuese su pesado mandoble en las manos pero aquella hoja era cómoda y ligera como una pluma. Una pluma tremendamente afilada...

9 de daño.

- Tiradas (2)
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18/05/2013, 18:24
Akiko

Akiko señaló con un dedo el charco de grasa que había creado tras de ti.

—¡Menangkap!

Un brevísimo rayo de fuego brotó de su dedo extendido y prendió la grasa. En un abrir y cerrar de ojos, el fuego se extendió a uno de ellos convirtiéndolo en una aullante tea. El otro consiguió apagar las llamas a tiempo, pero chillaba de puro terror.

- Tiradas (4)
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18/05/2013, 18:28
Malhechor

—¡Piedad! —pidió el único matón que quedaba en pie, mientras sus compañeros agonizaban.

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18/05/2013, 18:31
Beleana

—¿Has tenido tú piedad con Traven? —escupió la elfa oscura embarazada, saliendo de la esfera de oscuridad—. ¿La habrías tenido conmigo o con mi hijo no nato? ¡Humano hijo de puta!

Estaba herida, y caminaba apoyándose en la pared. Se agarraba el vientre.

—Dame tu espada y lo mataré yo misma.

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19/05/2013, 00:35
Rowane

¡¿Hace un momento queríais matar a una mujer embarazada que ni si quiera podía defenderse y ahora pides piedad?!—Rowane estaba tan nerviosa como... ¿enfadada? No, harta. Estaba harta de no entender por qué su raza estaba condenada a soportar todo aquello—. ¡¿Y luego la "escoria" somos nosotros? ¿Por qué hacéis esto?!

Apretaba con fuerza la empuñadura de la espada drache. Quería darle una patada a aquel tipo, una parte de ella le pedía que le cortase el cuello como él había hecho con el elfo oscuro que ahora yacía en el barro. Se lo merecía. Y sin embargo su corazón era demasiado blando como para matar a nadie.

No obstante, en cuanto vio salir a la otra drow sangrando de la oscuridad, se olvidó completamente de él y corrió a su lado.

¿Es... estás bien? ¿Dónde te han herido?