Partida Rol por web

Ajustas la mochila a la espalda, compruebas los cierres y la planta de energía, fluyendo sin problemas en la armadura. Sin embargo, un grupo de runas ambar titilando del sistema de control del retro no te deja tranquilo. No sabes exactamente QUE le sucede, y no tienes a ningún Tecnomarine cercano para que lo verifique... tal vez alguno de los presentes tenga arcanos conocimientos de tecnología?

Hermanos, quizas no sea nada, pero el espiritu de mi jetpack da unas lecturas confusas,¿Alguno de vosotros esta versado en la comunión con las máquinas?

Después de ajustarse los cargadores de munición extras para sus hermanos, siguiendo la sugerencia del capellan, Lukas se acerca a Rennard para inspeccionar su equipo.

-Yo tengo conocimientos sobre los ritos y comuniones, intentare ver si puedo aplacar a la maquina.

Desgraciadamente para Rennard las acciones de Lukas no parecían aplacar al espiritu maquina, y finalmente Lukas lo declaro fuera de su conocimiento y desistio por miedo a encolerizarla aun mas.

El jet-pack escupió y se quejó en su aguda voz. En el display de Rennard, y según lo que pudo verificar Lukas, la alimentación de energía estaba perfecta, los propulsores libres y sin obstrucción, los controles direccionales totalmente funcionales... pero esas molestas runas ambar persistían. Sus símbolos arcanos, recordando tal vez a un triángulo grande con otro menor dentro, no tenían sentido para los Marines...

Micah dejó al sargento como él se lo pidió sin llegar a completar el escaneo. Algo oculta Cleptus... pero él sabe por qué lo hace. Sin perder más tiempo fue a pertrecharse. Tomó el lanzallamas, lo cargó y guardó en su cinturón los cuatro contenedores de Promethim restantes. Si iba a estar en el frente, mejor que fuera preparado.

Cargadores de cualquier tipo que necesitemos, si quieres bolter bolter, si quieres otra cosa, pues otra cosa, sino los tendremos que llevarn en las cajas.

Czorf abandonó los peligrosos y cambiantes mares del Inmaterium y regresó a la realidad. Sin embargo una mueca de extrañeza se reflejaba en su rostro cada vez mas visible a medida que la escarcha psíquica se fundía en la capucha.

Con presteza recogió el equipo adicional que pudiese portar aunque se detuvo un instante para consultar con sus hermanos.

- Hermano Capellán, Hermano Sargento... Si es necesario puedo colaborar a portar munición para las armas mas pesadas sacrificando parte de la munición bolter adicional que tenía pensado recoger, ya que puedo dar un uso mas directo y combativo a mi adoctrinamiento psíquico para blandirlo como un arma contra los enemigos del Imperio.

Listo Sargento. Equipo comprobado y funcionando. - dice Rennard una vez el Hermano Lukas ha mirado su jetpack.

litilus con la caja tiene ocupado un brazo, asi que a su pesar no puede llevar el bolter adicional que deseaba, incluso dejaria mas equipo si fuera necesario, ya que lo mas importante es "la caja".

-Czorf, debes moverte con normalidad, lleva lo que puedas desplazar, pero no desestimes el poder que nos da el emperador mediante el espiritu maquina, y eso es algo que nuestros enemigos deben aprender bien y pronto,

Acomodando a los Hermanos caidos bajo los amplios y generosos árboles de los bosques de Inanna IV, el grupo se prepara para partir. Instintivamente, siendo Cleptus el Hermano de mayor graduación, comienzan a numerarse a partir de él, siendo Cleptus "Uno", Lucius "dos", etc*

Praetus toma un Auspex y analiza su pantalla de datos. Sargento, el puesto de comunicaciones más cercano se encuentra a 14 kilómetros, en Colina Agujas.

Señala la dirección, no hay un camino pero los grandes árboles no dejan crecer la maleza bajo sus copas, y la separación entre los troncos es suficiente para caminar sin sobresaltos.

(sigue...)

- Adelante, cubran los flancos, intentemos no llamar mucho la atención, dice Cleptus avanzando.

Inmediatamente y sin dudas, los Marines comienzan a recorrer camino tras el Sargento.

Lentamente avanzan entre los árboles. El cielo se tiñe de flores violetas, rojas y naranjas. Esporádicamente el viento acerca el sonido de explosiones, lucha y chillidos inhumanos.

Sin embargo, bajo el manto de las hojas, todo es silencio...

Lukas avanzaba con cuidado junto al resto de su escuadra. Sus ojos buscaban sin descanso una posible amenaza y el resto de sus sentidos superdesarrollados estaban alertas ante cualquier señal de problemas.

Empuñando firmemente su Bolter Pesado mientras lo mueve lentamente para apuntar a los posibles escondites de los hipoteticos enemigos, Lukas continua su camino.