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AKI y el misterio de los cerezos

Ambientación

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10/04/2014, 15:57
Sensei

JAPON

"Amo tus ríos y tus lagunas, tus ciervos blancos y tus faisanes y el campo triste con que tus lunas bañan la cumbre de tus volcanes."

 

Japón es un país insular del este de Asia. Situado en el océano Pacífico, tiene al oeste el mar del Japón, China, Corea del Norte, Corea del Sur y Rusia, al norte el mar de Ojotsk y al sur el mar de China Oriental y Taiwán. Los caracteres que componen el nombre de Japón significan «el origen del sol», motivo por el que el país también es conocido como la Tierra del Sol Naciente.

Japón es un archipiélago de 6852 islas. El Área del Gran Tokio en la isla de Honshū, dentro de la cual está la ciudad de Tokio, capital de facto de la nación.

Según la leyenda descrita en el Kojiki y en el Nihonshoki, Japón fue fundado en el siglo VII a. C. por el Emperador Jinmu. Durante los siglos V y VI, el sistema caligráfico chino y el budismo fueron introducidos junto con otras costumbres chinas a través de la península coreana o directamente desde China. Los emperadores fueron gobernantes oficiales, pero el verdadero poder permanecía generalmente en manos de poderosas cortes nobles, regentes o shogunes (gobernadores militares).

Geografía
El país está ubicado al noreste de China y de Taiwán (separado por el mar de China Oriental), levemente al este de Corea (separado por el mar del Japón) y al sur de Siberia, Rusia. Las cuatro islas principales, de norte a sur, son Hokkaidō, Honshu, Shikoku y Kyushu. La isla de Okinawa les sigue en magnitud. Cerca del 73% del país es montañoso, cada isla cuenta con su cadena montañosa. La montaña más alta es el Monte Fuji (Fujisan), de 3.776 m de altura y le sigue Kitadake, con 3.193 m de altura. Debido a que existe tan poco terreno llano en Japón, muchas colinas y laderas son aprovechadas en su totalidad para el cultivo. Como se encuentra situada en una zona de mucha actividad volcánica resultan frecuentes temblores de pequeña magnitud y actividad volcánica ocasional. Terremotos destructivos ocurren varias veces cada siglo, resultando a menudo en tsunamis.

Topografía
Las islas montañosas del archipiélago forman un arco desde las costas del este de Asia. La particularidad de que Japón sea un archipiélago produce que ningún punto de Japón esté a más de 150 kilómetros del mar.

Tiene aproximadamente un 84% de territorio montañoso, el 14% de la superficie se dedica a actividades agrícola-ganaderas, el 66% a bosques y el 20% restante está dedicado a otros usos, debido a que sus islas son una cadena montañosa en la parte sumergida de la plataforma continental, siendo las islas sus picos. Solo cerca del 25% del territorio es llano y es donde se concentra la población.

En la mitad del Pacífico hay escarpadas montañas, de entre 1500 y 3000 metros de altura aproximadamente, que forman profundos valles y desfiladeros. En el centro convergen 3 cadenas montañosas: las Hida, las Kiso y las Akaishi, las cuales forman los Alpes Japoneses.

Ninguna de las llanuras o valles habitados es amplia. La más grande es la llanura de Kanto, en donde está situado Tokio. La pequeña parte de tierra habitable sufrió diversas modificaciones en su terreno a lo largo de los siglos. Las tierras próximas al mar y a los ríos tiene numerosas construcciones de diques y drenajes.

Los ríos de Japón suelen ser rápidos y abruptos, sólo unos pocos son navegables y la mayoría suelen tener menos de 300 kilómetros de largo. El río más largo del territorio es el Shinano, el cual nace en la prefectura de Nagano hasta la prefectura de Niigata donde desemboca en el mar del Japón, pero solo tiene 367 kilómetros de largo. La mayor reserva de agua se encuentra en el lago Biwa al noreste de Kioto. La extensión de la costa navegable especialmente en el mar de Seto, compensa la falta de ríos navegables. La costa pacífica del sur de Tokio tiene la característica de ser larga y de aumentar su profundidad de forma muy gradual debido a la sedimentación.

Clima
Es un país lluvioso y con una alta humedad, posee un clima templado con 4 estaciones diferentes bien definidas, gracias a la distancia a la que se encuentra respecto del ecuador. De todas formas el clima del norte es ligeramente frío templado (Hokkaidō) con fuertes veranos y grandes nevadas en invierno, el centro del país es caliente, veranos húmedos e inviernos cortos y en el sur ligeramente subtropical (Kyūshū) con veranos largos, calientes y húmedos e inviernos cortos y suaves. El clima a veces es afectado por los vientos estacionales producidos por los centros ciclónicos y anticiclónicos que se forman en el continente y en el Pacífico, generando vientos desde el continente hacia el Pacífico en invierno y del Pacífico al continente en verano.

Fauna y flora
La fauna comprende gran cantidad de especies de mamíferos, aves y reptiles, batracios y peces. Así como osos negros y pardos, zorros y ciervos. El único primate es el simio de cara roja (el macaco de Japón) que puebla todo el territorio de Honshu.

La gran variedad de la vegetación japonesa se debe al clima y al relieve. Los bosques cubren el 67% de la superficie del país y se componen en su mayoría de árboles frondosos y coníferas: castaños, hayas, arces, tuyas, pinos rojos y laricios, junto con abedules y fresnos. Al oeste domina un bosque de coníferas que crecen junto a bambúes, magnolios y castaños verdes. Los ciruelos blancos y rojos, los cerezos de floración temprana, así como el bambú y los pinos se han convertido en símbolos tradicionales del país.

Geología
Las islas se ubican en una de las zonas geológicamente más inestables y complejas del planeta. En general, es un país altamente sísmico a causa de su ubicación en el Cinturón de Fuego del Pacífico.

Japón se sitúa en la zona volcánica denominada como el Cinturón de Fuego del Pacífico. Los temblores de tierra son frecuentes (con una intensidad reducida a moderada) y la actividad volcánica ocasional se siente en forma activa en las islas. Resultan sumamente destructivos los terremotos, a menudo dando como resultado los tsunamis, con una frecuencia de varias veces en un siglo.

Cada isla cuenta con su propia cadena montañosa, la cual sigue un eje transversal y las divide por la mitad. En Japón hay alrededor de 200 volcanes; sesenta de ellos están en actividad. El más famoso es el Monte Fuji (Fujisan), de 3776 metros de altura, coronado de nieves perpetuas. Le sigue la montaña Kitadake, con 3193 m de altura. El Asama es el volcán más activo de todo el archipiélago, y está situado en la isla de Honshu a aproximadamente 100 km de Tokio. Tiene una altura de 2542 m. Casi la tercera parte del país consiste de terrenos de origen piroclástico. La superficie es fundamentalmente montañosa: sólo la quinta parte (el 27%) está formado por pequeñas llanuras, la mayoría de ellas de tipo aluvial y sedimentario a lo largo de la costa.

 

EL FEUDALISMO JAPONÉS

"Las grandes obras de las instituciones las sueñan los santos locos, las realizan los luchadores natos, las aprovechan los felices cuerdos y las critican los inútiles crónicos."

 

Periodo Prefeudal

En el siglo VII d.c. se formo en Japón un sistema político imperial centralizado. La administración de este Imperio era un calco de la del imperio chino y se basaba en un monopolio imperial de la propiedad de la tierra. La burocracia estaba compuesta por una clase aristocrática civil que heredaba los cargos mas que se los ganaba, se construyeron ciudades imperiales y se instauro el Budismo como religión oficial. Este imperio comenzó a desintegrarse a principios del siglo IX, fuera de Kyoto la administración imperial se abandono, desapareció el reclutamiento obligatorio y las provincias se convirtieron gradualmente en propiedad de una nobleza militar de samurais. Con este panorama se intensificaron las luchas internas por el control interno del imperio.

Para finales del siglo XII, el imperio había dado paso al shogunato de Kamakura, el cual mantuvo la dinastía y la burocracia tradicionales pero creo un aparato militar de gobierno bajo el mando del shogun. La administración civil de las provincias quedo completamente eclipsada por los gobiernos militares que el shogunato mandaba a las provincias (shugo). Tras el shogunato de Kamakura vino el de Ashikaga que fue mucho más débil y permitió que los shugo se convirtieran en señores locales omnipotentes. Tras el hundimiento del shogunato de Ashikaga se produjo una oleada de anarkia en la que “los de abajo mandaban sobre los de arriba” y los shugo regionales fueron derrocados por vasallos usurpadores. Los aventureros de la nueva era Sengoku (el periodo más sangriento de la historia japonesa) se repartieron los principados que a partir de entonces se organizaron de una forma puramente feudal. Esto ocurrió a finales del siglo XV.

Periodo feudal

El territorio se dividió en daimyo (equivalente a la Baronia o Condado europeos), los samurais juraban fidelidad al señor. El vasallaje tenia un carácter semifamiliar y sagrado mas que legal. Esta forma cuasipatriarcal se hizo aun más autoritaria con la extensión de los derechos paternos a la adopción y a desheredar a los hijos, que impidieron con eficacia las insubordinaciones filiales tan comunes en Europa. Entre los principados daimyo fueron constantes las luchas violentas.

En la segunda mitad del siglo XVI tras una serie de importantes guerras civiles tuvo lugar la reunificación del país. Los daimyo no fueron desposeídos de sus dominios, pero se convirtieron en vasallos del nuevo soberano, a quien mandaban algunos parientes como rehenes en garantía de su lealtad. Se consolido la propiedad de la tierra en forma de pirámide. La población se dividió en cuatro ordenes cerrados: nobles, campesinos, artesanos y comerciantes. Los campesinos fueron privados de las armas y debían entregar dos tercios de las cosechas a sus señores, se prohibió a la clase mercantil la adquisición de tierras. El comercio se desarrollo con rapidez bajo la protección de los daimyo. En el año 1600 el poder fue conquistado por Tokugawa Ieyasu y se convirtió en shogun en 1603. Ieyasu fundó el Estado Tokugawa que habría de durar 250 años, para lo cual tuvo una gran importancia el cierre de fronteras, durante el shogunato Tokugawa Japón se mantuvo totalmente aislado promulgando la xenofobia en sus ciudadanos.

El Estado Tokugawa

El shogunato Tokugawa impuso en Japón la unidad sin centralismo. En realidad lo que hizo fue estabilizar una especie de condominio entre el régimen shogunal soberano y los gobiernos autónomos de los daimyo. El shogunato poseía sus propias tierras, las más estratégicas (llanuras centrales y las costas del Japón oriental). Además el shogunato podía contar en primer termino con unas 20 grandes líneas colaterales de los Tokugawa, en segundo termino estaban las casas de menor importancia que habían sido leales a Ieyasu. Estos últimos formaban los daimyo “de la casa” y de aquí procedían el grueso de los altos funcionarios de la administración. Ieyasu se preocupo por restaurar el aura religiosa que rodeaba al emperador y a la nobleza cortesana a la vez que los relegaba de las funciones políticas. El monarca estaba dedicado a funciones espirituales, y el shogun gobernaba en su nombre gracias a una función oficial que institucionalizaba el “gobierno en la sombra”.

Los ingresos del shogunato (o Bakufu) procedían básicamente de las cosechas de arroz. Los daimyo estaban obligados a tener una residencia en la capital del shogunato y a dejar rehenes de su familia cuando regresaban a sus feudos, esto era para evitar cualquier posible acción de independencia. Los daimyo estaban autorizados a mantener una sola ciudad-castillo y en las listas oficiales del shogunato se fijaba un techo a sus séquitos armados. Dentro de sus limites los daimyo poseían una autoridad sin limites: el control directo del shogunato se detenía en las fronteras de sus feudos.

El campesinado estaba atado jurídicamente al suelo y no podían ni emigrar ni intercambiar sus tierras. Las aldeas eran responsables de las cargas de impuestos (que generalmente se pagaban en especias) y eran recaudadas por los funcionario fiscales del daimyo.

Sociedad y política

Con el shogunato Tokugawa se estableció una estructura de poder equilibrado, conocido como bakuhan (el shogunato y los feudos), en el que el shogunato gobernaba de manera directa la ciudad de Edo, sede del gobierno militar, mientras que los daimyos gobernaban en sus feudos. Tras la pacificación, muchos samuráis perdieron sus posesiones y tierras, ya que sólo existían unos pocos daimyos, por lo que tenían pocas opciones: dejar sus espadas y convertirse en campesinos, ser vasallos del daimyō o ser vasallos del shōgun (volverse hatamoto). Los daimyos también fueron controlados estrictamente, ya que el shogunato les impuso la política del sankin kōtai, en el que la familia del daimyō debía vivir de manera obligada en la ciudad de Edo, mientras que el daimyō debía alternar su residencia anualmente entre Edo y su feudo, ocasionando gastos adicionales al mantener dos residencias y cuantiosas procesiones, limitando su poder económico y militar y evitando así algún intento de rebelión en contra del shogunato.

Aparte de los integrantes del bakuhan, el emperador y los cortesanos (kuge) tuvieron también una posición privilegiada. Debajo de ellos estaban las «cuatro clases sociales» en que se dividió la población: los samurái en la cima (alrededor del 5% de la población), luego los campesinos (alrededor del 80%), seguido por los artesanos y en último lugar los comerciantes. Los campesinos debían vivir de manera obligada en los campos, mientras que los samurái, los artesanos y comerciantes vivían en las ciudades que se formaban alrededor del castillo del daimyō y estaban subordinados a su feudo. Aparte de este sistema estaban los eta y los hinin, que eran considerados desde parias hasta «no humanos».

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12/04/2014, 11:21
Sensei

 

LOS PRECEPTOS DEL BUSHIDO

 

"Esta es la senda del guerrero. Cualquier hombre que se
llame a sí mismo samurái deberá medirse por ella. Los
que se aparten de esta senda perccerán. Los que sigan sus enseñanzas prosperarán."

 

En teoría, todos los samuráis viven de acuerdo con un estricto y exigente conjunto de principios éticos conocido como Bushido (literalmente "La Senda del Guerrero").

El Bushido está compuesto por siete Virtudes: Coraje, Compasión, Cortesía, Deber, Honestidad, Honor y Sinceridad.

Estas virtudes representan la forma adecuada en que un samurái debe vivir y servir a sus señores. En su forma ideal, el Bushido valora por igual cada una de estas virtudes, y se espera que un samurái que cumpla todas ellas con la misma vehemencia. Sin embargo, en la práctica, pocos samuráis son capaces de vivir vidas tan inmaculadas.

 

Compasión (Jin)
"Mediante el entrenamiento intenso el samurái se vuelve rápido y fuerte. No es como los demás hombres. Desarrolla un poder que debe ser usado por el bien de todos. Tiene Compasión. Ayuda a sus hermanos hombres en cualquier oportunidad. Si la oportunidad no se presenta, hará lo posible por encontrar una."

Coraje (Yu)
"Álzate sobre las masas de gente que temen actuar. Ocultarse como una tortuga en su caparazón no es vivir. Un samurái debe tener un valor heroico. Es absolutamente arriesgado. Es peligroso. Es vivir la vida de forma plena, completa, maravillosa. El Coraje heroico no es ciego. Es inteligente y fuerte. Reemplaza el miedo por el respeto y la precaución."

Cortesía (Rei)
"Los samurái no tienen motivos para ser crueles. No necesitan demostrar su fuerza. Un samurái es cortés incluso con sus enemigos. Sin esta muestra directa de respeto, no somos mejores que animales. Un samurái recibe respeto no solo por su fiereza en la batalla, sino también por su manera de tratar a los demás. La auténtica fuerza interior de un samurái se hace evidente en tiempos difíciles."

Deber (Chugo)
"Para un samurái, haber hecho o dicho "algo", significa que ese "algo" le pertenece. Es responsable de ello y de todas las consecuencias que le sigan. Un samurái es intensamente leal a aquellos bajo su cuidado. Permanecerá fervorosamente leal a aquellos de los que sea responsable."

Honestidad (Gi)
"Sé preciso y honesto en tus tratos con todo el mundo. Cree en la justicia, pero no en la que emana de los demás, sino en la tuya propia. Para un auténtico samurái no existen las tonalidades de gris en lo que se refiere a honestidad y justicia. Sólo existe lo correcto y lo incorrecto".

Honor (Meyo)
"El auténtico samurái solo tiene un juez de su propio honor, y es él mismo. Las decisiones que tomas y cómo las llevas a cabo son un reflejo de quién eres en realidad. No puedes ocultarte de ti mismo."

Sinceridad (Makoto)
"Cuando un samurai dice que hará algo, es como si ya estuviera hecho. Nada en esta tierra lo detendrá en la realización de lo que ha dicho que hará. No ha de "dar su palabra" no ha de "prometer". El simple hecho de hablar ha puesto en movimiento el acto de hacer. Hablar y hacer son la misma acción."

EL SEPPUKU

"Como un árbol fosilizado
del que no se esperan flores
triste ha sido mi vida
destinada a no producir ningún fruto."

 

El Seppuku era una parte clave del bushidō. El acto podía ser voluntario, usado por los guerreros para evitar caer en manos del enemigo o para expiar un fallo al código del honor, u obligatorio, por mandato de un señor feudal (daimyō), shōgun o tribunal en caso de que un samurái cometiera un delito de asesinato, robo, corrupción, etc.

Previamente se bebía sake y se componía un último poema de despedida. El practicante se situaba de rodillas en la posición seiza, se abría el kimono, envolvía cuidadosamente la hoja del tantō, y procedía a clavarse la daga en el abdomen.

El ritual completo consistía en clavarse el tantō por el lado izquierdo con el filo hacia la derecha, cortar hacia la derecha firmemente y volver al centro para terminar con un corte vertical hasta casi el esternón. Se ponía a disposición del practicante un ayudante en el suicidio, kaishaku en japonés. Su misión era permanecer de pie al lado del practicante y decapitarlo en el momento apropiado. Ese momento solía ser establecido de antemano a voluntad del suicida. Lo más habitual era acordar una señal que tendría que dar el que se disponía a morir, tras la cual el ayudante actuaba con rapidez mortal.

 

EL ALMA DEL SAMURÁI: LA ESPADA

"Clara como el cristal, aguda y brillante,
la espada sagrada no admite sitio
para alojar el mal".

 

La espada, un símbolo del poder divino del emperador, ha sido venerada por los japoneses desde los tiempos antiguos.

Tokugawa Ieyasu (1542-1616), uno de los jefes samuráis más importantes, llamó a la espada «el alma del samurái». En la época de Ieyasu sólo al samurái le estaba permitido llevar dos espadas. La más larga, la katana, era el arma principal en la batalla. La espada corta, la wakizashi, se usaba también en combate y, de ser preciso, en el suicidio ritual.

Para el orgulloso samurái, no había posesión más preciada que su espada. Se colocaba una espada en la habitación del samurái el mismo día de su nacimiento y también se depositaba una espada en su lecho de muerte al morir. A lo largo de su vida, el samurái acostumbraba a dormir con su espada cerca de su almohada y la llevaba consigo dondequiera que fuese.

Las espadas eran siempre tratadas con respeto. Cuando se visitaba a otro guerrero, el samurái podía colocar su katana en un armero especial cerca de la puerta o bien se le permitía a un criado llevársela sobre un paño de seda, pero siempre se quedaba con el wakizashi en su cinto.

Las espadas de los samuráis pasaban de generación en generación. Cualquier falta de respeto a la espada de un samurái era vista como un insulto hacia toda su familia. Se consideraba una grave ofensa tocar de cualquier forma la espada de otro sin su permiso, una afrenta que podía resultar en un cruento duelo. Por este motivo, los samuráis tenían que tener cuidado para no rozarse entre sí al andar por la calle por ejemplo.

Los samuráis también creían que las mejores hojas de los mejores fabricantes de espadas tenían poderes espirituales en sí mismas. Las espadas que habían sido usadas en combate eran especialmente apreciadas.

Se pensaba que la personalidad de un espadero pasaba a formar parte de sus obras. Así que antes de forjar una espada, un maestro forjador ayunaba para purificarse.

La espada de un samurái estaba hecha de hierro y acero, calentada en la forja y enfriada sucesivamente, o templada en una mezcla de aceite y agua. El acero era trabajado con el martillo, modelado una y otra vez hasta conseguir cuatro millones de láminas de metal. La hoja de la espada de un samurái era muy dura y extremadamente afilada, pero el cuerpo de la misma era más suave y flexible.

A la manera de un artista, un maestro hacedor de espadas solía firmar su trabajo. Pero el más famoso de todos los espaderos, Masamune (1264-1343), fabricó espadas tan peculiares que no necesitaba firmarlas. Masamune era tenido por un hombre profundamente religioso y se decía que sus espadas poseían un gran poder espiritual.

El principal rival de Masamune, Muramasa, fue también un hábil espadero. Pero Muramasa amaba la guerra. Sus espadas eran tan fuertes que podía cortar un casco como si fuese un melón. Sus armas tenían sed de sangre. Se decía que los samuráis que poseían las malvadas espadas de Muramasa se volvían locos, incapaces de parar de matar, hasta que finalmente volvían las espadas contra sí mismos.

 

EL RONIN

"Sin armadura, sin derramar sangre, pero recorriendo mi camino, el camino del guerrero.
Los días de tatami pasaron ya, hace mucho...
No hay jinetes en la niebla ni un maestro; recorro yo solo la senda."

 

 

Bajo los sogunes Tokugawa muchos de los daimios menores fueron exiliados y sus ejércitos fueron disueltos, dando lugar a una clase de samuráis sin señor. Éstos recibieron el nombre de ronin, que significa «hombre ola», alguien que va de un lugar a otro como llevado por las olas del mar.

El ronin no tenía ni clan ni señor y con frecuencia se les trataba como marginados. Tenían que arreglárselas solos y recorrían el país en busca de trabajo. Pero al estar libres de la obligación de servir a un señor, muchos ronins se hicieron tremendamente independientes. En esto eran diferentes a cualquier otro samurái cuya lealtad estaba siempre comprometida con su señor.

Algunos ronins aterrorizaban a los campesinos en las aldeas. Otros eran contratados para proteger los pueblos o servían a adinerados mercaderes como guardaespaldas. Algunos daban lecciones de bujutsu, artes marciales. Y algunos alcanzaron la fama como maestros espadachines.

 

LA RELIGIÓN DEL SAMURÁI

"La flor de loto Sus hojas y las marchitas
flotando en el agua."

 

 

La religión más antigua de Japón es el sintoísmo, «el camino de los dioses». Los seguidores del sintoísmo adoran a los espíritus, o kami, que viven en muchos lugares: en los ríos, bosques, montañas y las cuevas. Los kami no son realmente dioses, son más bien los espíritus de los lugares y de los objetos que permiten a las personas sentirse conectadas con todas las cosas. Los templos sintoístas, marcados por una puerta roja, o torii, fueron construidos en cada pueblo japonés para honrar a sus dioses y a sus ancestros.

El budismo fue llevado a Japón desde China en el siglo VI. Pronto encontró el favor de la familia imperial que deseaba disminuir el poder de los sacerdotes sintoístas. En el tiempo de los samuráis había varias sectas budistas. La mayor parte de los samuráis eran budistas Zen. El Zen enseña a sus seguidores a buscar la iluminación y la salvación dentro de sí mismos a través de la meditación, no de la adoración de un dios o de unos dioses. La meditación Zen implica una gran disciplina. El objetivo es la armonía espiritual, la unidad con el fluir de la vida y de la muerte.

 

ETIQUETA DIARIA

«Cuando se domina bien algo, no se detecta en nuestro comportamiento: una persona así es educada».

 

Además de los rituales importantes como las bodas y los funerales, los samuráis siguen también muchas otras reglas y rituales menores es en sus vidas. Estos rituales conforman la tradición a la que los samuráis llaman "etiqueta" y que guía todos los detalles de sus vidas. Seguir la etiqueta, no sólo en los sucesos importantes sino también en los menores, es una forma importante para los samuráis de demostrar su naturaleza civilizada y honorable, apartándose de los plebeyos y bárbaros. De hecho, un samurái que no siga estos rituales diarios demuestra ser grosero e inculto, tal vez incluso indigno del titulo de "samurái".

El saludo

Los samuráis son siempre educados, incluso con enemigos encarnizados. Utilizan los nombres familiares o de clan para tratar con extraños, y los nombres completos (familiar y personal) para hablar con alguien al que conozcan. Sólo un amigo íntimo, un miembro de su familia o un niño puede dirigirse a alguien únicamente por su nombre personal. Además, casi siempre utilizan sufijos formales al hablar con los demás; estos demuestran buena educación y un conocimiento adecuado de las forma de dirigirse a la gente.
El suftjo "-san'' es el más común y extendido, y se utiliza con cualquier persona de rango y estatus similar. El más respetuoso "-sama" se utiliza al hablar con superiores sociales, o al hablar con alguien del mismo rango en un entorno muy formal (por otro lado, utilizar "-sama" en un contexto no apropiado puede resultar muy insultante). El sufijo "-dono'' implica tanto respeto por la persona a la que se dirige como una gran humildad por parte del hablante, y por ello se utiliza no sólo con daimios, sino también con cualquier persona por la que se sienta una gran admiración. El sufijo "-kun'' sólo suele utilizarse al hablar a inferiores sociales, o al hablar con niftos varones. También lo pueden utilizar las mujeres al hablar con un varón de su misma edad o más joven que sea pariente o amigo íntimo. Por último, el sufijo "-chan" se utiliza normalmente para hablar con niños, pero también puede utilizarse para dirigirse a mujeres jóvenes de una manera informal o cariñosa (como al hablar con una hermana o compañera de clase, por ejemplo).

El no utilizar un sufijo de ningún tipo denota una gran familiaridad o incluso una intimidad afectiva, y nunca se hace de forma abierta o a la ligera.

Saludar o presentar conlleva una inclinación. Cuando el saludo es entre personas de un estatus social equivalente (como dos samuráis, o dos campesinos), ambos se inclinan agachándose desde la cintura, haciendo la inclinación más profunda aquel que sea de estatus inferior. Cuando existe una diferencia de estatus importante, como en el caso de un campesino que hable con un samurái, de un samurái que salude a un daimio, o de cualquiera que hable con el Emperador, la persona de estatus superior simplemente inclina la cabeza, mientras que la persona de estatus inferior se arrodilla y toca el suelo con la frente. Inclinarse de forma no adecuada, o incluso no inclinarse, es un insulto importante que puede dar como resultado un castigo o incluso la ejecución.

 

Visitas

Normalmente visitar a otro samurái conlleva cierta etiqueta bastante elaborada. Cuando un samurái visita la residencia de otro, se espera que presente su chop personal (un sello inscrito con su nombre) y que explique quién es y el morjvo de su presencia, ya sea a un guardia o al primer sirviente de la casa al que vea. Si el anfitrión no desea ver al visitante, un siervo le avisará educadamente de que el anfitrión se encuentra ocupado ese dia "-Por favor, vuelva mañana y pruebe de nuevo-" Aunque esto parece dej ar el camino abierto para una futura visita, un samurái experimentado se percatará de que esto es simplemente una negativa educada que permite a todo el mundo mantener las apariencias.

Al visitar a otro samurái, cuando se visita una casa de geisha, o al entrar en una posada o casa de té, se considera educado dejar todas las armas a un lado, especialmente las espadas, colocándolas en un atril para daisho en una habitación privada, dejándolas al cuidado de un guardia, o en algún armario preparado para tal propósito. Esto asegura que no existirá la tentación de ejercer una violencia impropia. Normalmente se espera de todo samurai que visite a alguien de un estatus significativamente superior (como su daimio) que deje todas sus armas, aunque se pueden hacer excepciones en el caso de alguien en el que se haya depositado una gran confianza.

En algunas circunstancias se pemlitirá al amurái conservar el wakizashi, el símbolo de su estatus como samurái, pero no la katana; sin embargo, es igual de probable que se espere de él que deje todas sus armas, como gesto de pacífico respeto. Si se llevan espadas en presencia del anfitrión, normalmente se dejarán en el suelo en lugar de en el cinturón. La elección del lado en el que se dejen las armas resulta significativa. Colocarlas a la derecha implica confianza, mientras que colocarlas a la izquierda (el lado por el que se desenvainan en combate) sugiere hostilidad o falta de confianza.

 

LA CEREMONIA DEL TÉ

"Sobre las hojas verdes, que cubren la montaña, el sol pasea."
 

 

La ceremonia japonesa del té es una forma ritual de preparar té verde o matcha, influenciada por el budismo zen, sirviéndose a un pequeño grupo de invitados en un entorno tranquilo.

La ceremonia del té requiere años de práctica y aprendizaje... con todo, el conjunto de este arte, en cuanto a sus detalles, no significa más que hacer y servir una taza de té. El asunto supremamente importante es que dicho acto debe realizarse de la manera más perfecta, más educada, más graciosa y más encantadora posible.

Dado que quien realice la ceremonia debe estar familiarizado con la producción y los tipos de té, además del kimono, la caligrafía, el arreglo floral, la cerámica, incienso, suiseki y un amplio abanico de otras disciplinas y artes tradicionales además de las prácticas de la ceremonia en el colegio, el estudio de las mismas toma muchos años, a menudo una vida completa. Incluso para participar como invitado en una ceremonia del té formal se requieren conocimientos de los gestos y posturas adecuados y las frases que se esperan, la manera apropiada de tomar el té y los dulces y la conducta general en la sala del té.

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13/04/2014, 16:11
Sensei

EL SAMURÁI

"Las cinco cualidades de mi forma pasajera
Y sus cuatro elementos vuelven a la nada.
Ofrezco mi cuello a la espada desnuda,
Cuyo tajo no es sino una ráfaga de viento."

 

Dentro de la línea feudal, en la que estaba constituida en la antigüedad la sociedad japonesa, los samuráis jugaron un papel importante. Al principio, fueron soldados imperiales encargados de la defensa del emperador, o guardias personales, de donde nació la palabra saburai (sabuna= estar al lado), y que más tarde derivó a samurai “servidor”. Este término se aplicó a todos los militares de cierto rango, que pertenecían a las clases guerreras. Sus armas principales, en los primeros tiempos, fueron el arco y la flecha.

La jerarquía militar estaba encabezada por el emperador, seguido del Shogun, los nobles (propietarios de tierras, y que recibían el nombre de daimyos), y finalmente los samuráis, que a su vez se dividían en distintas categorías. Por debajo de los samuráis, se encontraban los campesinos, encargados de trabajar las tierras de los nobles.

Los samuráis eran los únicos que podían llevar armas, y llevaban ceñidas a su cintura dos espadas, una más larga llamada katana, y una más corta llamada wakisashi. El alma del samurai, era su espada, a la cual le rendían respeto, y era una de sus posesiones más valiosas.

LOS SOHEI

"No busquéis el camino en los otros,
en un lugar lejano;
el camino está bajo nuestros pies.
Ahora viajo solo…"

 

Un sōhei es un monje guerrero japonés. Estos monjes guerreros llegaron a tener un importante poder durante el período feudal.

Los sohei eran muy variados en armamento. Normalmente solían llevar consigo la naginata una larga lanza con una hoja unida a su extremo. Su largo alcance la hacía muy efectiva contra caballería e infantería, además de ser bastante fácil de usar.

También se sabe que solían utilizar el arco, e incluso durante algunas batallas utilizaban unas flechas especiales que al ser lanzadas emitían un fuerte sonido, parecido a un silbido, que servía para espantar a los enemigos o como señal.

Los sohei solían tener grandes conocimientos de artes marciales y exponer al máximo su resistencia física, siendo los Monjes de Hiei los más importantes. Los monjes maratonianos del monte Hiei profesaban la escuela budista de Tendai.

LOS SHINOBI

"La lluvia sólo es un problema si no te quieres mojar."

 

Los ninjas o shinobi son un grupo militar de mercenarios entrenados especialmente en formas no ortodoxas de hacer la guerra, en las que se incluía el asesinato, espionaje, sabotaje, reconocimiento y guerra de guerrillas, con el afán de desestabilizar al ejército enemigo, obtener información vital de la posición de sus tropas o lograr una ventaja importante que pudiera ser decisiva en el campo de batalla.

Para sus propósitos utilizaban una amplia gama de armas y artefactos como espadas, shuriken o cadenas, además de ser expertos en la preparación de venenos, pócimas y bombas. Del mismo modo, eran entrenados en el uso del «arte del disfraz», que utilizaban a menudo para pasar desapercibidos dependiendo de la situación imperante en el lugar en el que se tuvieran que introducir.

Los ninjas fueron tanto temidos como utilizados por los líderes militares debido a que su naturaleza era totalmente contraria a los ideales del samurái. En el caso de los samurái, el daimyō no podría exponerlos a trabajos como el espionaje o asesinatos encubiertos, debido a que si eran descubiertos su reputación quedaría destrozada. Por ese motivo preferían contratar a ninjas, que generalmente procedían de clases sociales bajas, para que realizaran ese tipo de trabajos.

LA GEISHA

"El agua como flores a tu piel
de tu rastro los sentidos hipnotizas
belleza en porte y estructura
melancólica singularidad de mi querida dama.

 

Las geisha se originaron como profesionales del entretenimiento; originalmente la mayoría eran hombres. Las geisha usaban sus habilidades en distintas artes japonesas, música, baile, y narración.

Tradicionalmente, las geisha comenzaban su entrenamiento a una corta edad. Algunas jóvenes eran vendidas a las casas de geisha en su niñez, empezando una etapa de trabajo en la que se las llamaba shikomi; en esta etapa debían hacer tareas de limpieza y obedecer todo tipo de órdenes que les encargaran. Luego, comenzaban su entrenamiento en varias artes tradicionales.

La apariencia de una geisha cambia a lo largo de su carrera, desde la femenina y maquillada maiko, hasta la apariencia madura de una geisha mayor y consolidada.

LOS ONMYOJI

"Ni tan lento que la muerte te alcance, ni tan rápido que des alcance a la muerte."

 

Onmyōdō es una cosmología esotérica, mezcla de ciencias naturales y ocultismo que, muy influenciada por la cultura china, se originó en Japón en torno al siglo VII. Se basa en las teorías chinas de los Cinco Elementos y del Yin y yang. Fueron aceptadas por mucha gente como un sistema práctico de adivinación. Estas prácticas se vieron más tarde influenciadas por el Taoísmo, Budismo y Sintoísmo. Los profesionales de esta disciplina reciben el nombre de onmyōji.

El onmyōdō se mezcló con otras creencias y muchas prácticas ocultistas, incluyendo elementos mágicos como el katatagae, monoimi, henbai, y las ceremonias a los dioses taoísticos como el Taizan Fukunsai. Algunos elementos del feng shui y las artes médicas del jukondō se incorporaron también.

Los Onmyōji eran especialistas en magia y adivinación. Sus responsabilidades en la corte abarcaban desde preparar calendarios hasta tareas místicas como la adivinación y la protección de la capital de los fantasmas malvados. Podía buscar significados benignos o dañinos en los sucesos naturales. Se dice también que los onmyōji podían invocar y controlar a los shikigami.

LOS YOKAI

"Es de los enemigos, no de los amigos que las ciudades aprendan la leccion de construir murallas altas."

 

Yōkai ("apariciones", "espíritus", "demonios", o "monstruos") son una clase de criaturas que van desde el malévolo oni al travieso kitsune o la mujer pálida Yuki-onna. Unos poseen parte de animal y parte de rasgos humanos (por ejemplo Kappa y Tengu). Los Yōkai son generalmente más poderosos que los seres humanos, y debido a esto, tienden a actuar con arrogancia sobre los mortales. Son generalmente invulnerables al ataque humano, pero pueden ser derrotados por monjes budistas con la bendición de Buda.

Generalmente habitan áreas aisladas lejos de viviendas humanas. Otros yōkai, sin embargo, deciden vivir cerca de asentamientos humanos conviviendo en buena armonía. Algunas historias cuentan que los yōkai crían con los humanos para tener han'yō, o “Humanos mitad demonios”.

Hay una variedad amplia de Yōkai. En general, el Yōkai es un término amplio, y se puede utilizar y abarcar a virtualmente todos los monstruos y los seres supernaturales uniformes

 

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14/04/2014, 13:27
Sensei

GLOSARIO

-AIKIDO: Arte marcial japonés. «El camino de la armonía con el ki».

-AMATERATSU: Diosa del sol de la mitología japonesa. Su nombre significa «Diosa gloriosa que brilla en el cielo».

-ASHIGARU: Literalmente, «pies ligeros». Los ashigaru conformaban las fuerzas de soldados rasos al servicio de un señor feudal.

-BAKUFU: «Gobierno sobre la tienda». Así se conocía al gobierno militar que rigió Japón entre finales del s. XII y la Restauración Imperial Meiji de 1868.

-BOKKEN: Sable de madera usado en la práctica de diversas artes marciales japonesas, especialmente en el kenjutsu o esgrima. Es usado como sustituto del sable real.

-BUJUTSU: «Bu», guerra; «jutsu», arte. El arte de la guerra.

-BUSHIDO: «Bushi», guerrero; «do», camino. El camino del guerrero.

-CHAWAN: Taza empleada para preparar y servir el té.

-DAISHO: Proviene de la fusión de los términos daito (espada grande) y shoto (espada pequeña) y significa literalmente «Grande y pequeña». Hace referencia a las armas tradicionales del samurái, la catana y el wakizashi.

-DAIMIO: Señor feudal al frente de una provincia.

-DOJO: Lugar de práctica de las artes marciales tradicionales japonesas. También hace referencia a un lugar de meditación y práctica del Budismo zen.

-EDO: «Estuario». Es el nombre que tuvo Tokio hasta 1868. En 1603, el sogún Ieyasu Tokugawa estableció allí la sede de su gobierno y la convirtió en capital defacto, mientras que Kioto seguía siendo la capital oficial y el lugar de residencia del emperador.

-FUSUMA: Puerta corredera típica para separar las estancias en las casas japonesas.

-GENKAN: Área de entrada de una casa. Su función es servir para quitarse los zapatos antes de entrar en la vivienda principal.

-GI: Uniforme parecido a un pijama de dos piezas que se utiliza para practicar artes marciales.

-HAIKU: Poema tradicional japonés formado por tres versos de cinco, siete y cinco sílabas. Los haikus se basan en el asombro que provoca la simple contemplación de la naturaleza. Su objetivo es atrapar la belleza efímera de un instante.

-HAKAMA: Falda pantalón ancha utilizada por los samuráis y por los estudiantes de artes marciales.

-HAN: Feudo perteneciente a un daimio.

-IAIJUTSU: Arte marcial japonés relacionado con el desenvainado rápido y posterior envainado de la katana para defenderse y atacar.

-FINA: Salón principal de la casa.

-INUGAMI: Espíritu animal, comúnmente un perro, usado para llevar a cabo una venganza.

-JO: Bastón medio de madera, de entre 120 y 130 centímetros, usado en algunas artes marciales japonesas.

-JUDO: Arte marcial basado en la flexibilidad y la lucha.

-JUJITSU: Otro estilo de judo.

-JUTTE: Arma tradicional japonesa cuyo nombre significa «Diez manos» debido a su efectividad y a que puede manejarse de hasta diez modos diferentes. Era usada generalmente por los agentes de policía de a pie durante el Periodo Edo.

-KABUKI: Forma de teatro tradicional japonés caracterizado por el uso de elaborados maquillajes por parte de los actores.

-KABUTO: Tipo de casco usado por los samuráis en batalla y generalmente decorado con el símbolo de su portador.

-KAKEJIKU: Pintura o caligrafía japonesa flexible y enrollable para colgar en la pared como decoración.

-KANABO: Bastón o garrote de madera de roble recubierto con hierro o acero y usado como arma en el Japón feudal.

-KANJI: Son los caracteres usados en la escritura de la lengua japonesa. Cada kanji expresa un concepto y tiene un significado. Dependiendo de su contexto, su uso combinado y su posición dentro de la frase, sin embargo, puede tener diferentes pronunciaciones y, por lo tanto, referirse a cosas distintas.

-KATA: Conjunto de secuencias de movimientos de las artes marciales.

-KATANA: Sable japonés de filo único y curvado usado por los samuráis. Suele medir en torno a un metro de longitud y pesar alrededor de un kilo. Era considerada el alma del guerrero.

-KENJUTSU: Arte marcial, «el camino de la espada».

-KI: Fuerza vital interior o energía.

-KIAI: Grito poderoso utilizado por los artistas marciales.

-KOI: Carpa de color usada para decorar los estanques de los jardines.

-KOKU: Medida de volumen. Fue definido como la cantidad de arroz necesaria para alimentar a una persona durante un año entero. Un koku equivale a 278,3 litros y pesa aproximadamente unos 150 gramos. Se usaba en el Japón feudal para medir la riqueza de un feudo.

-KUSARIGAMA: Arma compuesta por una hoz (kama) atada al extremo de una cadena (kusari) que podía alcanzar entre 1 y 3 metros de longitud.

-KYUDO: Un arte marcial, «el camino del arco». El arte del arco y de la flecha.

-METSUKE: Servicio de inspectores del gobierno Tokugawa. Se encargaban generalmente de delitos de malversación, prevaricación y corrupción por todo el territorio, tanto a nivel público, como privado.

-MITAYAMA: «Casa de almas». Pequeño cofre de madera blanca donde se coloca el Tamashiro durante un funeral.

-MON: Emblema de una familia o clan.

-NAGINATA: Arma usada por los samuráis y los monjes del Japón feudal. Consiste en una hoja curva, del tamaño aproximado de una katana, colocada al final de un largo palo.

-NINJA: Guerreros encubiertos empleados por los samuráis como espías o asesinos.

-NINJITSU: El arte del ninja.

-NODACHI: «Gran espada o sable de campo». Es un tipo de espada de longitud superior a la katana y que se maneja a dos manos.

-ONI: Espíritu malvado del folclore japonés. Generalmente se les representa como gigantescas criaturas de forma humanoide, uñas afiladas, pelo enmarañado y cuernos en la cabeza. Su arma favorita es el kanabo.

-OMETSUKE: Servicio secreto del gobierno Tokugawa.

-ONMYOUJI: Maestros del Ying y el Yang. Eran especialistas en magia y adivinación y estaban agrupados en la oficia de Onmyo. Sus responsabilidades iban desde preparar calenda ríos, hasta tareas místicas como la adivinación y la protección de la capital de los fantasmas malvados. Se dice también que podían invocarlos y controlarlos a su antojo.

-ONMITSU: «Los guardianes del jardín». Eran espías ninja utilizados para proteger el castillo del sogún en Edo durante el Periodo Tokugawa. Además de sus labores de protección, se infiltraban entre la gente para mantener una red de espionaje e informar al sogún de todo lo que sucedía a su alrededor.

-OSHÜRE: Armario destinado a guardar el futón y las almohadas (makura) tras su uso.

-ROKUROKUBI: Espíritu del folclore japonés, generalmente femenino. Durante el día parecen seres humanos normales, pero por la noche adquieren la habilidad de estirar su cuello a grandes longitudes como una serpiente. A menudo, son seres verdaderamente siniestros que se comen a la gente y beben su sangre.

-RONIN: Samurái sin señor durante el periodo feudal japonés.

-SAMURÁI: Miembro de una clase guerrera de Japón.

-SAI: Arma tradicional japonesa usada en artes marciales. Al igual que otras, empezó como apero de labranza. Su forma básica es la de una daga sin filo, pero con punta, con dos largas protecciones laterales también puntiagudas unidas al mango.

-SEIZA: Literalmente, «correcto sentar». Define la forma tradicional japonesa de sentarse de rodillas.

-SEKIGAHARA: Batalla decisiva en la historia de Japón. Tuvo lugar el 21 de octubre de 1601. Durante este conflicto se enfrentaron los ejércitos de las dos principales facciones del país: por un lado, quienes consideraban que Hideyori, hijo de Hideyoshi Toyotomi, era el verdadero sucesor por derecho y debía convertirse en el dirigente del país. Por otra parte, la facción de los que apoyaban al daimio Tokugawa Ieyasu, uno de los señores feudales más poderosos y uno de los Cinco Consejeros del propio Hideyoshi, para que fuera él el elegido. Tras la victoria de Ieyasu, se inició la dinastía Tokugawa que dio nombre al también conocido como Periodo Edo, que duraría hasta 1868, con la Restauración Imperial Meiji. El ascenso de Ieyasu Tokugawa al poder trajo más de 200 años de paz ajapón.

-SENSEI: Término japonés que designa a un maestro, un sabio o a una persona docta.

-SEPPUKU: Suicidio ritual.

-SHABUSHABU: Cazuela llena de tallarines, verduras y camarones o delgadas lonchas de vacuno hervidos en caldo suave.

-SHURA: Espíritu enfurecido. Los shura son reencarnaciones de guerreros muertos en combate y personifican el espíritu del odio y la venganza.

-SINTOISMO: Nombre de la religión nativa de Japón, basada en la adoración de los kami o espíritus de la naturaleza. Algunos kami son locales y conocidos como espíritus de un lugar en particular; otros, en cambio, representan objetos naturales mayores, como Amateratsu, la diosa del sol.

-SOGÚN (Shogun): «Comandante del ejército». Rango militar y título concedido directamente por el emperador de Japón. Desde el s. XII y hasta la Restauración Meiji de 1868, el shogun se constituyó como el señor defacto de todo el país. Aunque el emperador seguía siendo el legítimo gobernante, depositaba su autoridad en él para gobernar en su nombre. Durante este tiempo, se vio obligado a delegar completamente cualquier atribución o autoridad civil, militar, diplomática y judicial a quien tuviera dicho título.

-SOBA: Tallarines finos tostados con varias coberturas. Pueden comerse en caliente o en frío.

-SUKIYAKI: Mezcla de tallarines, vacuno en finas lonchas, huevo y verduras hervidos en una salsa especial hecha de caldo de pescado, salsa de soja, azúcar y sake.

-TAMASHIRO: «Marca de almas». Tabla de madera blanca en la que, según la religión sintoísta, debe entrar el alma del difunto. En ella están escritos los nombres de cada antepasado.

-TANTO: Cuchillo en forma de pequeña katana.

-TOZAMA: Término usado para referirse a los daimios o señores feudales de provincias alejadas de la capital, y, por tanto, difíciles de controlar, así como a los considerados una amenaza potencial por el shogun.

-UIRO: Pastel dulce de harina de arroz al vapor.

-WAKISASHI: Sable corto que portaban los samuráis, con una longitud de entre 30 y 60 centímetros. Junto a la katana, formaba el daisho (las dos espadas) auténtico símbolo distintivo de clase durante el Periodo Edo.

-YARI: Lanza de punta recta y uno o dos filos usada habitualmente por los ashigaru en la batalla.

-YOKAI: El término yokai abarca a todos los monstruos y seres sobrenaturales de la cultura japonesa, desde los malignos a los simplemente caprichosos. Son generalmente invulnerables al ataque humano, pero pueden ser derrotados por expertos exterminadores (taijiya) y algunos monjes budistas.