Partida Rol por web

Tsubasa esbozo una pequeña sonrisa, su amiga era un desastre, pero, dentro de ese desastre tenia buenas intenciones y útiles ideas - Musculos-kun lamentablemente Tomoyo esta en lo cierto, no deberíamos usar este lugar, podría estar contaminado, y enfermarnos en estos momentos no es parte de la lista de quehaceres de nadie - Tsubasa toma el otro brazo del grandote y ayuda a su amiga - Nemo, tu también, ven!, cambiemos de lugar, usemos los papeles que no sirven o que ya no necesitemos para hacer un aislante del suelo, lo mejor es que estemos juntos - dice mirando primero a Nemo y luego a los demás - Estan de acuerdo?

Durante un rato Yuri se evadió de la realidad y se quedó con los ojos cerrados y sus propios pensamientos, solo hasta que escucho las quejas o mas bien exigencias de aquella chica que volvió a la a prestar atención al lugar y la conversación que estaban teniendo los demás.

Aunque no sabían que podían encontrar por el lugar o si alguno de los animales de las isla había tomado algún bungalow como su madriguera, pero era mejor eso que todos empezáramos a enfermar, si eso pasaba caerían como moscas, así que dijo- Por mi de acuerdo, pero con cuidado de no encontrarnos con algo poco deseado- dicho esto empezó a buscar algo que les sirviera para poder descansar mas cómodamente y si tenían suerte algo con lo que abrigarse del frío de la noche.

Tras escuchar lo que dijo Yuri, asintió con la cabeza diciendo -No se preocupen, estuvimos con Tsubasa revisando los otros bungalows, y solo vimos mugre y libros inútiles, excepto por este-  dice señalando el libro que trajo, con cuidado para que no se caiga Akira de su hombro. Se nota que le cuesta señalar con el muchacho encima.

-Al menos no vimos cadáveres en los otros bungalows, y tampoco encontramos monstruos, ni tampoco este asqueroso olor- Dice poniendo cara de desagrado.

Es tal como dice Tomoyo, las otras van a estar bien, solo tengan fe y hagamos turnos por la noche, es lo mas seguro para todos - dice Tsubasa reforzando el punto de su amiga - mantenernos en este lugar es la peor decisión, necesitamos estar todos sanos - pensaba, mantenernos todos sanos era lo mas vital

Akira sintió el dedo en su frente y entrecerró un poco la mirada viéndole hacia arriba un instante. No estaba de muy buen humor para aguantar los comentarios de Tomoyo, pero la escuchó.
—Sí, bueno... —dijo algo apagado y al notar el brazo enarcó una ceja.
Luego ella intentó ponerlo de pie y él la miraba extrañado. Tsubasa se acercó a tomarlo también de su otro brazo y se puso de pie con ayuda de ellas.
—Puedo caminar... No hace falta molestarse —comentó algo extrañado.
Cuando Yuri habló, se le quedó mirando. Era una de las primeras veces que escuchaba su voz.
Finalmente se despegó con cuidado de ellas y se quedó apoyado en la pared, estaba cansado pero podía andar de lo más bien. No eran mordiscos muy severos.
—Gracias —expresó para ambas.

Os vais a otro de los bungalows, el cual tiene dos plantas. Aunque tenía papeles y de todo tirado por el suelo, al menos parecía que no había nadie muerto por ahi. La noche la pasais con relativa calma, salvo por algunos ruidos en la lejanía.

A la mañana siguiente, os despertais todos en cuanto el sol aparece en el horizonte.

Tsubasa se levanta y se estira, un pre calentamiento típico de todas las mañanas - mm.. donde estoy? - mira sus alrededores - Rayos, es verdad, maldita sea... tenia fe de que todo fuera un maldito sueño - pensaba - Buenos días a todos, hora de amanecer!!!, y pensar en comida y buenas ideas para poder seguir viviendo!!! - bueno, el comportarse de una forma tan despreocupada puede sacar de quicio a varios, pero no quita que es mejor mantener los ánimos calmados.

Orphen había guardado el mapa y el libro antes de seguir al grupo hasta los otros bungalows que les sirvieron de cobijo. Debido al cansancio acumulado se durmió rápidamente, pero despertó de igual forma con los primeros haces de luz de la mañana. Sin esperar al resto, salió de la cabaña y observó alrededor, verificando que no hubiese ningún dinosaurio por la zona. Mientras se encontraba en con esta tarea escuchó la voz de una de las muchachas y se acercó a ver de que se trataba. Al perecer solo intentaba despertar al resto.
- Buenos días. - Dijo Orphen observando a la peliverde por unos segundos. Pensó en decirle que sería mejor no hacer tanto alboroto, pero no necesitaban seguir llevándose mal entre ellos. Decidió dejarlo pasar y continuó con su tarea de verificar la seguridad de la zona.

Tomoyo escuchó a su amiga gritando para despertar a todos, y entre sueños la confundió con la voz de Laura, la criada que siempre la despierta en la mañana con su desayuno. Se estiró un poco y dijo -un rato maaaas, tengo sueeeeño-

No paso mucho hasta que escuchó a Orphen entrar y cerrar la puerta. Abrió los ojos al escuchar una voz masculina en su cuarto, eso era extraño. Al despertar, estaba en el bungalow rodeada de gente extraña, con su ropa algo rota y su pelo hecho un desastre. -no fue un sueño...-

Nunca deseó tanto estar en casa, con los criados... Se hizo bolita antes que noten que había despertado y una lágrima rodó por su mejilla. Respiró hondo e intentó no llorar, luego se quedó acostada en esa posición... Hoy sería un laaargo día.

Por suerte la noche había sido bastante tranquila y habían descansado medianamente bien, aunque dormir algo más de tiempo les hubiera venido de perlas, al menos a Yuri.

Mientras comenzaba a desperezarse pudo escuchar lo que dijeron los demás y dijo- Buenos días, me apunto a lo de buscar comida, se piensa mejor con el estómago lleno, ¿en alguno de esos libros decía algo la flora local? Solo faltaría que nos intoxiquemos al comer algo que no debamos, bastante tenemos con los posibles animales de la zona- podía sonar algo pesimista, pero si tenían alguna posibilidad de salir de aquella isla era estando todos juntos y en buenas o al menos en medianas condiciones.

Mmmm.... tu punto es totalmente válido y razonable, por desgracia no hemos encontrado nada sobre eso, solo datos del jefe, capas cazar algún animal no tan grande podría ser lo mas seguro, solo sería lograr hacer fuego - el punto del peliblanco era muy importante, intoxicarse, es peligroso, mas aquí - capas que encontremos cocos o algo así, son islas no?, y estamos en una jungla con muchos árboles, algo conocido podemos encontrar - decía desviando la mirada y rascándose la cabeza.

Voltea a ver a su amiga - Tomoyo, te encentras bien?, Oye es hora de levantarse, siempre contabas algo de que tu padre te llevaba a cazar, ahora te necesitamos mas que nunca amiga!! - le dice sentándose al lado de ella y hablándole bajo, su amiga era muy altanera, su comportamiento le pareció raro, le preocupaba y mucho

Tsubasa nunca la había visto llorar, y esta no sería la 1era vez. Respiro profundo, y se estiró completa mientras fingía un bostezo.

-uaaaaahhh!!! Buen día Tsubasa, te levantaste con energías hoy- miró hacia los lados como si buscara algo y luego a su amiga nuevamente -parece que seguimos en esta isla.. Mi padre seguro sabría salir, si hubiera sabido que terminaba en una isla así, hubiera prestado atención a sus lecciones-

Tomoyo esboza una sonrisa fingida, esta claro que algo esconde pero no esta lista para dejarlo salir... No ahora, no con tantos extraños alrededor...

-Peeeero, si de cazar se trata, sé algunas cosas- al mismo tiempo que termino la frase se levantó y sacudió su ropa, hoy sería un laaaargo día...

Los ánimos elevados de Tsubasa y gritos le despertaron de repente y se sentó en la cama. ¿Le estaba pasando algo? No obstante al ver que era para que se levanten todos y trabajar, soltó un suspiro pesado y volvió a recostarse. No tenía ganas de absolutamente nada, no en ese momento. Él por las mañanas salía a correr y entrenaba pero no estaba de humor.

Escuchó acerca de lo que Yuri dijo de la comida y había estado viendo que tonteaban con libros el día anterior, pero no se había acercado a leer ninguno. Ahora sí que al menos suspiró y se sentó en el sitio en el que había estado durmiendo.
—Tengo hambre ciertamente —dijo con tono bajo, sin alzar mucho la voz y manteniendo la seriedad que lo caracterizaba.

Tsubasa habló de lo que podían encontrar y él no tuvo más remedio que soltar un bufido y levantarse haciendo resonar los huesos de su espalda, cuello y brazos. Se estiró un poco arrugando el ceño y revisó que las pequeñas heridas de sus piernas sean sólo eso. Se movía con desgana y hacía las cosas a media. Su pelo largo estaba todo despeinado, pero él se pasó una mano por la cara y lo corrió hacia atrás, dejándolo a medias.
—Antes de aventurarse a cazar sin conocer el lugar, recomendaría comenzar por lo más fácil. Tenemos el mar cerca, podemos hacer alguna lanza con maderas y pescar o —suspiró antes de brindar la opción—... puedo trepar a un árbol a bajar cocos y plátanos o alguna otra fruta.
Sus ojos se mostraban en una sempiterna entrecerradez, viendose más pequeños de lo que realmente eran.

Me desperté algo más tarde que los demás, algo desorientado. Un rápido vistazo a mi alrededor me hizo recordar lo que había pasado... y no pude evitar que un par de lagrimones se me escaparan: en estos momentos tendría a Menta encima mía saltandome para que me despertara... no quise pensar más en eso. Me limpié las lagrimas y me dirigí donde estaban los demás.

No estaba presente, pero me pareció oír algo de que iban a buscar comida -Hola...- dije sin muchas energías al grupo -Habláis de ir a por comida... ¿no?- dije no muy motivado -¿Puedo ayudaros en algo?- les pregunté; no tenía ganas de quedarme quieto sin hacer nada, eso solo me daría tiempo para recordar a Menta. Aunque no aportara nada, ya que era un escúalido con narcolépsia, prefería que me encargaran hacer algo, lo que fuera.

Cuando Tomoyo observó la cara de Nemo, no pudo evitar sentirse mal. No porque le tuviera lastima, sino porque ambos amanecieron llorando...

-Yo quizás logre volver a casa y recuperar a mi familia, pero él... No podrá recuperar nunca a su amiga...-

Tomoyo se dirige a él con un tono suave, es la 1era vez que se dirige a alguien así, al menos en este viaje, pero verlo derrotado y solo, hace que se sienta en sintonía con él.

-Claro... Siempre viene bien una mano extra... Que te gustaría comer??- preguntó con una sonrisa. Claramente era fingida, no estaba de humor, pero su amiga Tsubasa siempre la anima con sus sonrisas y buen humor, quizás pueda ayudar a Nemo ahora...

Me quedé un rato mirando la sonrisa de Tomoyo... se notaba a la legua que era fingida, al menos para mí, pero el hecho de que intentara animarme sonriendo cuando no parecía estar de humor me dio cierta tranquilidad, aunque aún me mostraba algo apático -Me da igual... la verdad. Me conformo con algo de fruta, que creo que llevará menos trabajo comerla que ir y cocinar el pescado- dije con calma.

-Bueno, decidme que... debo de... hacer y... zzz... zzz...- iba diciendo hasta que de nuevo me quede dormido de pie. Ya estaba tardando en venirme de nuevo la narcolepsia.

Hicisteis dos grupos: uno recolectaría fruta y otro pescado. Por fortuna, al mediodía todos volvisteis al bungalow con bastante comida y aparte uno de los chicos encontró un río, el cual se podía beber tranquilamente y no estaba lejos. Ahora bien, cual era el siguiente paso? Podríais aventuraros en la selva intentando ir a la población más cercana, o investigar más los alrededores para poder defenderos.

Luego de una fuerte comilona, todos comenzaron a debatir cual seria su siguiente movimiento en esta isla, algunos con mas ánimo que otros. Sin embargo solo sobresalían dos opciones: explorar los alrededores y defendernos de los atacantes o buscar el poblado mas cercano.

-BUSQUEMOS EL PUEBLO!!- gritó Tomoyo al oír la opción. Quería tomar un baño, arreglar su cabello, y comprar ropa nueva. En su mente, todo eso era posible en el pueblo

Bien... encontramos comida, algo era algo. Comí lo justo, un poco de fruta. No quería comer demasiado no fuera ha ser que me sentase mal o que la comida estuviera en mal estado. Tenía que vigilar mi alimentación, si no podría sufrir retortijones o cosas por el estilo.

Nos estábamos repartiendo que tareas hacer. Tomoyo dijo algo ilusionada lo de ir al pueblo, puede que en su cabeza se imaginase un centro comercial en medio de la selva -Yo... también prefiero ir al pueblo... si no os importa, claro...- dije con tono indiferente; se me da bien buscar cosas, y para preparar defensas... no sabría ni por donde empezar.

Por suerte ya tenían agua comida, ahora solo les faltaba un modo de trasportarlo, por le menos el agua, pero eso a priori no era muy importante.

Cuando escucho el grito de aquella chico dijo- ¿Que esperas encontrar allí? No creo que este en mejores condiciones que este lugar, esta claro que en este lugar hubo vida humana, pero parecer ser que se fueron todos o acabaron todos como el que nos encontramos ayer, yo voto por buscar alguna especie de puerto y ver si hay alguna embarcación que se puede usar o al menos reparar, siendo una isla lo mas normal es que tenga algún puerto o embarcadero-  no es que quisiera ser pesimista ni nada de eso, pero quería salir de aquella maldita isla antes de encontrarse algo peor que los bichos que se encontraron el día anterior.