Partida Rol por web

Que coño...

Corro y me lanzo sobre la chica para ayudar a Martin en su intento de apresarla.

- Yaaaaaa...

La verdad es que no se porque quiere retener al zombie, pero no puedo quedarme parado mientras observo una lucha...tengo que participar en ella siempre...quizá sea mi forma de ser...

Mientras martin y 57 pelean con esa cosa intentando reducirla otra de esas cosas aparece de entre la oscuridad aprovechando que el paso no ha sido cerrado.
Ambas cosas intentan agredir a martín y a 57 respectivamente pero debido a sus movimientos lentos no consiguen hacer nada.

¿Que hacéis?

LA lucha de martin con la criatura tumabada lo desespera y ademas ha entrado otra, mientras mira a martin y a 7.
Jilipoyas... si en vez de intantar inmovilizarla le hubieramos dado de ostias ahora no habria solo una que nos diera problemas
Y se mueve para atacar por una flanco a la nueva criatura que ha entrado en la estancia, para asi si la golpea no caiga encima de los otros contendientes, aunque el preferiria golpearla por la espalda.

Tenso mis musculos y empujo con todas mis fuerzas para cerrar el paso a esas criaturas y parece que con la ayuda de todos lo vamos consiguiendo.

Sigo peleando con la zombie pero sin soltar la pistola...es mi seguro de vida...creo.

- Podías dejar de quejarte y echar una mano ¡coño!- Digo en alto a 54.

Para ser su novia...no se acerca el cabrón...

La situación se ha complicado, y no han conseguido cerrar el paso, como yo esperaba.
Inmediatamente escucho una nueva criatura que se acerca. Puedo intentar hacer una presa sobre uno, pero no cuando son dos los enemigos. Es demasiado arriesgado. Así pues me reposiciono para no dar la espalda a ninguno de mis enemigos y abandono toda tentativa de continuar con la presa. Ágilmente mi mano se dirige hacia la pistola que sigue colocada en la cintura del pantalón del chándal y me preparo para atacar.

(¿1 asalto en hacer todo eso? En todo caso ahora 52 se ha puesto demasiado cerca y las balas perdidas pueden ser un peligro para su salud, así que atacaré con la culata)

La maquina vuelve a arrastrarse una vez más bloqueando la entrada. ¿Pero por cuanto tiempo?
Mientras tanto se inicia un rifi-rafe cerca de la entrada que deja aislado a 52, martín y 57 contra dos de esas cosas. Sin embargo esas cosas no son muy rápidas y si muy torpes por lo que no consiguen ni siquiera tocarlos.

La situación esta empeorando para vosotros...

El joven se negaba a dejarse coger por semejantes criaturas y estaba furioso por la forma de actuar de los demas, balanceba el bate dispuesto a repetir el intento sobre la segunda figura que habia entrado, el terror la rabia y la frustracion parecian haber mermado sus capacidades, os que lo de antes fue solo el chute de adrenalina y ya no le quedaba mas...

Coño y me deja aqui solo...la ultima vez que confio en un policia...

Intento zafarme de la zombie, me pongo de pie...veo que se acerca de nuevo...

- ¡Joder que pesaos!

Avanzo unos pasos y lanzo una patada al pecho de la zombie (creo que está delante), con la intención de hacerla retroceder y que caiga al suelo, y con un poco de suerte se tropiece también con su nuevo amiguito.

57 hace una exhibición de karate, quizás poco exitosa, para acabar con la chavala.
Debemos intentar dejar a este fuera de combate, y pronto, antes de que sigan entrando y quedemos en inferioridad numérica.

No hay esperanza. Son muchos. Uno solo ya nos está poniendo en grandes dificultades, con dos sufriremos, y si cae la máquina no tendremos escapatoria. Y encima el pecho me arde todavía por el golpe que me dio ese engendro.. Vamos, teniento. Un último esfuerzo piensa un concentrado martin para seguidamente intentar golpear de nuevo a la ya malherida joven.

El combate contra esas dos cosas parece no acabar. Una y otra vez son golpeados pero ellos siguen avanzando hacía vosotros. De pronto aparece 54 en escena que se agarra a la chica pero esta le muerde y el otro se abalanza sobre él.

De pronto os encontráis todos a mitad de habitación hacía atrás observando la escena. ¡Esas dos cosas se están comiendo vivo a vuestro ex-compañero!
Por lo menos parecen estar muy entretenidos con él. Pero, ¿Hasta cuando?

Mientras tanto los ruidos del interior de la habitación han menguado en intensidad al haberos apartado vosotros de la puerta.

Aunque la visión es cuanto menos terrorífica consigues mantener la cabeza en su lugar tras el susto inicial.

Oh, oh... vaya, que mala suerte
La visión resulta de los mas aterradora. Esas cosas destripando a tu compañero y llevándoselo a la boca. ¡QUE HORROR!

Te dejo interpretar la locura temporal que durará ocho turnos. Si no se te ocurre nada pues tiraré en la tabla haber como te comportas.

Al ver la escena dantesca que se desarrolla ante mí, me echo las manos a la cabeza y me pongo a llorar como una loca.

Estamos jodidos, vamos a morir todos, tengo que irme de aquí digo con chillidos histéricos.

Me pongo en pie y salgo corriendo como una loca hasta alejarme lo mas lejos posible de allí.

Master, decide hasta donde voy corriendo.

Alguien chilla, y muchos perderán los nervios ante tan dantesca escena. Quizás he trabajado en Harlem, o quizás antes de ser policía fui pinche de cocina en alguna cadena de hamburgueserías, porque la escena no me impresiona en absoluto.

Avanzo lo mas rápido que puedo, mientras con la pistola apunto a los atacantes de 54. Cuando tenga su pútrida carne a quemarropa, y siempre que no suponga un peligro para el chaval, vacío el cargador sobre su encantadora novieta.

El joven descarga el bate sobre el hombre/zombi aprovechando que esta sobre 54, mientras algo sale de su boca. El cercano Martin lo puede identificar como sollozos y puede ver como unas lagrimas que caen por sus mejillas.
Mierda mierda mierda

Martín vacía el cargador de su pistola sobre esas cosas a bocajarro. Los sesos salen disparados cubriendo de sangre y trocitos de cerebro la ropa de martín. Mientras tanto 52 golpea a una de esas cosas que ni se inmuta pues tras el disparo de martín parece que se ha quedado totalmente quieto.
Al acercaros a esas cosas los ruidos de la cocina se vuelven a escuchar y suben en intensidad.

Mientras tanto 54 sin un brazo, un trozo de una pierna y un agujero nuevo en el estómago por el que se escapan sus intestino tan solo puedo miraros con cara de cordero degollado antes de que la luz que se ve en sus ojos se apague poco a poco.

A todo esto, liz ha salido corriendo en dirección hacía el vestuario por lo que desaparece de vuestra vista. Aunque tampoco es que vierais gran cosa.

Las últimas palabras de 54 son algo así:
- Matar al cabrón del jefe de la secta

Al permanecer el otro zombi completamente quieto, el joven descarga el bate sobre la cabeza hasta que reaccione o se rompa, mientras que despues de la muerte de 54 fluyen abiertamente mientras se le escucha llorar.