Partida Rol por web

No era ésta una de tantas bochornosas tardes en las que, recorriendo la ciudad de Vilmiro en busca de un par de cobres con lo que amortizar las pérdidas por los absurdos impuestos que os eran cobrados cada día. Una ciudad autoritaria con unas leyes del todo ridículas para muchos en la que la comodidad y lujo de unos cuantos estaba subvencionada por el trabajo de muchos otros que tenian que vivir en la mugre.

Tan infructuosa era pasar siquiera unos dias en Vilmiro que deseábais abandonar la ciudad como fuere, más en aquella última tarde en la ciudad una nota en la puerta de la taberna en la que os hospedábais, bebíais, o tan sólo visitábais por casualidad, llamó vuestra atención como niño pidiendo auxilio.

"Se buscan espadas de alquiler, mercenarios fuertes y entregados para servir al Orden. Se ofrece comida, alojamiento, impuestos y una paga de 40 GB a la semana. Interesados preguntar dentro"

No estaba mal el sueldo que ofrecían, pero sois capaces de oler a un noble dispuesto a quedarse el trono del nuevo Rey de Vilmiro, un jovencito de 17 años recientemente nombrado, una marioneta en manos de los contables, jueces y burócratas que habían servido al anterior rey, su padre, y que ahora dejaban al nuevo rey como un patán, haciendo crecer cada semana más el número de gente que marchaba de la ciudad. Dicha situación no debía permitirse, era un total desequilibrio y hacia falta un cambio.

Con ánimo de contribuir, fisgonear, o tan sólo tener algun chisme con el que marchar de allí, todos acudís al posadero, quien amablemente os va indicando a todos la misma mesa alrededor de la que os reunís, pidiendoos amablemente, que aguardeis al anochecer, sirviendoos bebida fresca y aperitivos varios mientras vosotros, los pintorescos mercenarios, os reunís en torno a aquella mesa de superficie lisa, sobre la que quedará sellado vuestro próximo destino.

Situado en la mesa desde hace rato, el ya no tan joven Lucian espera la llegada de la noche en busca de todos esos lujos que prometia el anuncio.

Realmente, la idea de estar supeditado a alguien no le atrae para nada, pero debido a los fuertes impuestos, no ha conseguido apenas bronces trabajando en el puerto y esta es una buena oportunidad para remediarlo.

A simple vista, Lucian no parece del todo un guerrero... Ni siquiera lleva puesta una armadura... unicamente lleva encima ropa vieja e impregnada en serrin. A su lado, ligeramente apollada en la pared, esta su pequeña mochila, en la que sobresalen herramientas entre otras cosas.
Apollado encima, se encuentra un martillo de enormes proporciones que pocos de los presentes podrian manejar con soltura.

Su tez oscura y su semblante serio, junto a su poca aficion a hablar, le hace parecer alguien poco accesible y social. Apenas prueba nada de lo servido, pues al fin y al cabo no esta ahí para celebrar, sino por necesidad.

Dolbare tras preguntar al posadero se dirige hacia la mesa que le indica.En ella ya se encuentra un hombre de raza negra y rudo con cara de pocos amigos.

Dolbare es un hombre de aspecto atletico,de buen ver.Viste una armadura de cuero de color marron con pantalones y botas a juego.

A la derecha ala altura de la cintura porta un carcaj con dobre cavidad de la 1º sale plumas de color rojizo de la 2º la esquina de un arco corto que te puede averiguar por el tamaño del carcaj.

A la izquierda una bolsa de color negro el cual no se puede averiguar su interior.

De la espalda salen 2 enormes alas de blanca pluma.

Dolbare es un personaje risueño,bromista y charlatan.Solo le veras serio en los momentos justos.Sabe muy bien que la gente como el no es muy bienvenida en muchos lugares por lo que tiene que ganarsela con su buen comportamiento.

Sarkash silvo al ver la recompensa, andaba corto de dinero y no podía rechazar la oferta, así que sin pensarselo más veces pregunto al posadero y se dirigió hacia la mesa esperando nueva información abrió los ojos como platos al ver las alas, nunca había visto a un Myrrhn la verdad siempre había sido exceptico respecto a su existencia... otro personaje estaba sobre la mesa pero no le prestó mucha atención, supuso que sería un Pikariano... Buenas... se sentó sin pedir permiso y con la espalda recta.

Sarkash es un hombre bajo de estatura pero con una forma física excelente, la tez oscurizada y curtida por la interperie, con el pelo trenzado que reposa sobre el cuello y con un pañuelo sobre la cabeza... Jubón verde y camisola abierta se adivinan debajo de una labrada armadura de madera, a la cintura atada una hacha de los mares poco cuidada.

Algo... Se siente extraño.

¿Porqué es que me doy cuenta de algo por el estilo?

¿Acaso he... Me he... Sentido... Distinto... Antes... Ahora?

No. No tiene sentido, claro que no.

Si lo discutiera con el elefante azul que me ayudó a llegar hasta la ciudad... Me diría que no tiene sentido.

- Incoherencias!

Doy un golpe en la mesa.

Todos deberían mirarme raro, un silencio molesto que ocurre cuando no quieres...

Algo dramático, y cómico. Si, Dramacómico... Mmm... Que buen término...

De todos modos, lo único que hago es...

Beberme mi Sidra.

Quizá el Tabernero sea simpatico.

Le hablaré.

- Tomad, buen señor. Que vuestra cordialidad, pagada sea... Sí... Sí...

¿Porqué siento que pude usar palabras mejoras?

Lo mismo, lo mismo da... Termino dándole 4 cobres, sin dudar, de manera solidaria...

- Decidme, hay algun lugar por donde... No, olvídalo! Si quieres cómprate una Sidra para Tí mismo, y celebremos por la vida! Por el... Amor! Por la... Existencia! Si! Si!

Digo de manera efusiva. Casi invitando a todos, pero no queriendo "Invitarlos" en pago de dinero.

Usualmente tiendo a ser mal-entendido... Será porque soy como soy? Pero si yo no estoy loco...

Trago, hasta el fondo.

Tal cual macho cabrío, sudoroso, sensual, y...

Misterioso.

Cuatro compañeros en torno a la mesa reunidos, vuestras olivas y boquerones en vinagre os amenizan la tarde y os relaja pero no favorece presentación alguna, silenciosos, mercenarios, desconfiados. No son pocos los parroquianos que se acercan en torno al emplumado compañero observando las vistosas y grandes alas que de su espalda sobresalen, y entre murmullos y chismorreos se marchan de la taberna o vuelven a sus mesas.

Las luces anaranjadas del atardecer se reflejan a través de la ventana cuando se presenta, viste elegante, algunos anillos de oro y una capa escarlata, habla con la mirada desafiante, siempre directamente a los ojos con la barbilla alzada en un gesto de eterno desdén. Se sienta junto a vosotros y deja una tintineante bolsa de monedas al tabernero que se apresura a recogerla antes de traer una botella de vino y unas copas.

Habéis preguntado  por mi anuncio, buena nueva es

Aiximeno Collaredo es mi nombre y el suyo por discreción no preguntaré pues no es de mi incumbencia ni necesidad.

Todos ustedes se presentan afirmando tener hábiles espadas y pocas preguntas que hacer y yo a cambio un trabajo que proponerles. Necesitaria de sus servicios durante algún tiempo, realizar peligrosos encargos, de los cuales no duden que siempre obtendrán una remuneración mayor a la paga base del anuncio.

Tan sólo les pido a cambio, que  las lleven a cabo con discreción y sin hacer preguntas

El tipo habla claro, sin pausa, no se anda por las ramas, nada usual en un auténtico noble, por lo visto no lleva ningún tipo de seguridad adicional a la de un elegante florete con mano de plata que cuelga en su vaina.

Recibirán una primera paga tan pronto como lleven a cabo una facilisima y simple tarea

Todo suena misterioso y no puedo darles demasiados detalles, tan sólo alguien muy desesperado por conseguir dinero podría aceptarlo, pero también puedo ofrecer otras cosas que con dinero no puedan comprarse, si cumplen todo cuando les pida las siguientes semanas, les garantizo buena posición social, tierras, mansiones.... si antes... cuento con su ayuda

Esto último no deja lugar a dudas, busca hacerse con la posición de Lord de Vilmir, o una posición muy cercana, y la discreción de sus mercenarios es algo prioritario para él

¿Pero acaso cree que puede conseguirlo con tan sólo cuatro mercenarios?

¿Cuento con ustedes?

Dolbare se rasca la barbilla pensando.

Todos saben aqui,que gente como yo no es muy comun.Solo tienes que ver la de miradas que se dirigen hacia mi.Espero que mi seguridad este garantizada despues de este trabajo.

Conmigo puedes contar yo vine aqui buscando aventuras que me propociones grandes historias y como no,riqueza.

Se bebe el resto de su jarra de un trago.

Observó sin educación ninguna al cortesano, de arriba abajo, ostentaba pocas riquezas pero sus palabras prometían mucho más, de cualquier manera empezó a sonreir aquel hombre no parecía un fiel seguidor de la Ley que se instauraba en Vilmir, así que como mínimo sería divertido, ante la pregunta afirmó con la cabeza mientras mostraba el puño cerrado con el pulgar en alza...

Si la idea de trabajar de lacayo le era de poco agrado, estar bajo las ordenes de ese tipo le asqueaba sobremanera. Pero al fin y al cabo, sabía a lo que se exponia.

-Aunque digas que no es de tu incumbencia, me llamo Lucian. -hace una pausa mientra se levanta- Ya que por estas tierras no se premia el trabajo duro esta es mi única opción de vivir comodamente. Cuenta conmigo.

Acto seguido se calza su mochila y amarra su martillo, marcandosele musculos y venas...

-ENo quiero tonterias, exijo claridad... no me gustaria tener que clavar a nadie en el suelo...

Oh no... No puede... Ser... Una vez más, el mismo error... Otra vez... Todo otra vez...

¡Todo!

Pero no. Sólo es una auto-auto-auto-auto-inducción psico-psicológica. Pero claro que claro que sí.

Ahora mismo, todo está bien. Todo está...

- Perrr...fec...to!

Pronuncio alegremente, ya terminandome mi Sidra. Me gusta la Sidra.

Luego, miro a todos, y no veo problemas.

- Sea así... Sea como diga usted. Si proteccion tendremos, trabajo haremos...

No sean pobres aquellos que se esfuerzen. Porque en su corazon, un fuerte sentimiento de grandeza, les albergue...

Y aún si mis palabras, como mierda os sepan... Sabed que podeis, con gusto...

Todo sea, por decir, que ahora mismo, este trabajo, como cualquier otro trabajo, acepto...

Me... Callo.

Miro a ver como reaccionan los otros.

- Yija!

Agrego con efusividad, mostrando estar listo para lo que sea...

Que haya que estarlo.

Así, como si nada.

Observa con desagrado al ebrio enmascarado cuya voz gangosa se escurre cual bilis pustulenta desde debajo de la máscara metálica, sabe que no os conoceis, por o que de la misma manera que exige discreción no hace ninguna pegunta al respecto, tras unas muecas vuelve a dirigirse al grupo

No duden que riquezas tendrán y aventuras vivirán, más repito, su discreción es harta imprescindible.

No es prudente que yo me muestre por aquí antes del sutil anochecer, pero el anuncio llevaba ya un par de dias puesto y necesito premura en lo que a la faena se refiere. Necesitaria sus espadas prestas ésta misma noche

El trabajo es más que sencillo.

Collaredo saca una bolsa y comienza a sacar monedas amontonandolas en pilares de 40Gb.

Hay una finca a las afueras de la ciudad, saliendo por la puerta oeste siguiendo siempre recto los muros que separan las tierras de labranza, hacia el interior de la península, mi petición es que entren en una casa que allí solitaria hay, por la noche, a hurtadillas y le den un buen susto a su único ocupante.

No hagan ningún derramamiento de sangre, no tiene vigilancia y vive solo, ni mucho menos le hagais daño, es inofensivo, tan solo un buen susto, que le haga saber, que alguien va tras él.

Necesito vayan esta misma noche

Termina de amontonar las monedas y deja los cuatro montoncitos frente a él, dispuestos para quien desee aceptar el trabajo, ya tan sólo le queda esperar, vuestras respuestas.

Parece apresurado y mira a ambos lados evadiendo miradas ajenas mientras se pone en pie ya dispuesto para marchar tan pronto como reciba vuestra respuesta.

Dolbare tras ver el monton estira la mano y coge el suyo.Empieza a jugar con las monedas en su mano mientras piensa.

Interesante 40Gb por un susto,en mi vida tanto dinero por este trabajo tan simple.

Dolbare acaba dejando las monedas en su bolsa.

Coge el cayado y se prepara para levantarse.

Caballero con su permiso y teniendo en cuenta que el trabajo se tiene que realizar esta misma noche no hay tiempo que perder.Por mi parte partamos ya.

Al levantarse se acomoda todas sus pertenencias.

¿Quien sera este hombre?Enserio 40Gb por un susto...Todo me parece raro.Pero bueno el dinero no me viene mal...Tendre que estar atento.El hombre negro,me da miedo,se le nota que no nos traga a ninguno.Y el borracho?Presentarse asi a un "trabajo" o es muy estupido o realmente es una bestia.El otro es el unico que se le ve mas "normal".Es un grupo muy variado...me gusta en la variedad esta el exito.

Tras el parón de pensamientos.

¿Nos vamos?Una amplia sonrisa marca su cara.

Con el entrecejo fruncido observó la máscara del que parecía un loco, o por lo menos sus palabras lo demostraban, tenía un problema de dicción o cerebral de eso no cabía duda, esperaba que en momentos de discreción los otros tres se comportaran porque parecía que no iba a ser de esa manera...

Bien Aiximeno... decía mientras recojía el pertinente montón de monedas ... y quiere que su víctima sepa algo más como quien lo asusta o una razón?? o solo el susto por placer??

-Yo tambien estoy listo -dice seriamente mientras recoge el penúltimo monton-

Recorriendo la sala con su mirada, se fija en sus extraños compañeros, sobre todo en el tipo de la máscara y el alado. Espera que no le den muchos problemas, pues pese a que necesita el dinero, en su cara de pocos amigos se puede ver que no dudaria en machacarlos si la cosa se torciese..

Sólo un susto anónimo

Me pondré en contacto con ustedes lo más pronto posible

Buena suerte

Una última y despectiva mirada al borracho antes de marcharse

Lexnaedar puede advertir que no sólo es observado por el noble, toda la posada pone sus ojos en él murmurando improperios, aunque bien visto el grupo.... seguramente no hablen sólo de él....

Sale por la puerta con paso ligero cerrando tras de sí la puerta sonoramente y un silencio abrumador inunda el salón cuando las miradas se posan en el indiscreto grupo.

Queda el camino libre para ésta fácil empresa comenzar, una de muchas, un primer paso en una larga maratón.

¿Preparados? ¿Listos? ¡Ya!

Dolbare tras la marcha del hombre que los contrato.

Marchemos.Cuanto antes volvamos antes podremos descansar.No se vosotros pero yo he tenido un dia largo.

Dolbare abre la puerta invita a sus compañeros a pasar 1º ante todo es un caballero.

Sabe que va ser una noche larga...Un hombre de color, un borracho y el con alas...Espera no encontrarse con la guardia.La gente como ellos no son bienvenidos.

Os recuerdo que es un trabajo discreto no podemos llamar la atencion.¿Como se llama?Refiriendose ha Sarkash.

Creo recordar que no lo ha dicho.Solo le pido una cosa.En el caso de que nos encontremos con guardias tendra que hablar usted.Somos un grupo variado pero trabajando juntos podremos ser buenos.

Sarkash miraba hacia todos los presentes en la sala.... tal y como se imaginaba estaban llamando demasiado la atención... y decían un trabajo de discreción, esto iba a ser dificil... apuró la cerveza y se levantó en silencio hacia la salida de la taberna, observó significativamente al alado y los esperó fuera en un rincón poco iluminado y apartado, llamandolos al salir para que se fueran acercando...

No podemos salir juntos por las puertas, ni ir todos a asustar al granjero, sería demasiado evidente y mañana mismo seríamos esclavos, el alado y la máscara vuelven a la taberna, me da igual lo que hagais, como si os matais, mañana a media mañana nos buscamos por el mercado, busca algo para tapar esas alas... Lucian??... era así no??? vienes conmigo... nos encontraremos fuera de la ciudad, por el camino del oeste, cada uno saldremos por una puerta de la ciudad...

Acabó y con una ceja levantada esperó algún reproche de los presentes... si no lo había partiría sin demora hacia la puerta más cercana de la ciudad.

Justo cuando Viasu abandona el lugar, Lucian hace ademán de reprocharle violentamente, pero se muerde la lengua.
No aguantaba la presencia del alado y el borracho y ahora encima su otro compañero parece que se ha auto-nombrado lider del grupo.
Cuando se logra calmar por completo, reponde.

-Yo os esperare alli. Se cuidarme solo...

Acto seguido se marcha con el martillo al hombro, haciendo caso omiso a Viasu y sin querer saber nada del resto. Al fin y al cabo, ellos no le pagan y su misión es darle un susto a un tipo, no formar un grupo de amigos.

Dolbare se encoge de hombros.Como querais.Una amplia sonrisa sale de su cara.Se que llegara el momento que llegaremos a ser buenos amigos jajajaja.Creo que esta aventura sera larga y abra momentos que dependeremos unos de otros.

Bueno visto la idea que habeis tomado nos encontramos alli ¿NO?.

Dolbare sabe  que sera dificil conseguir llevarse bien con todos.Pero su forma de pensar se lo pide.Cree en la igualdad.

Despues de salir de la taberna y como han hablado todos menos el borracho,que seguramente con lo que a bebido no pueda decir mucha mas cosas.

Hasta luego.

 Mira a cada lado para saber que solo estan ellos.En un instante habre las alas y de un salto empieza a coger altura.Desaparece entre la oscuridad de la noche a la altura suficiente para que nadie le vea.

Llegara el 1º seguro no cree que corran tanto como para ganarle en velocidad.