Partida Rol por web

La visión de los dinosaurios cerca de la valla y el posible riesgo para nuestros cultivos me hace pensar en como sería posible protegerlos de una manera más efectiva. Tanto Oswald como Edge plantean la posibilidad de llamar su atención desde otro lugar para que, siguiendo el estimulo, se alejen de nuestros cultivos. Creo que resultará mas efectivo el efecto contrario... pienso mientras le doy vueltas en la cabeza a la idea de poder fabricar algún tipo de repelente.

¿Algo físico... sonidos tal vez? ¿O será mejor un repelente químico?

Tengo que darle más vueltas...

Una vez que volvimos a la civilización me tranquilizo completamente recomponiendo la cordura arreglo mi chaleco y respiro normalmente.

Definitivamente debía de aprender a sobrevivir en la naturaleza,después de todo solo sabía disparar un poco pero en la naturaleza no existen las armas mas que las que uno pueda fabricarse.

Detestaba mi debilidad que solo pudiera ser muy bueno hablando me podría costar la vida en la naturaleza.

Hasta ahora solo sobrevivía por que algo o alquien quería que así lo hiciera.

-Definitivamente teniente,quedo demostrado que debo de aprender a sobrevivir,¿hay alguna posibilidad que alguien o alguno me pudiera enseñar?,realmente se lo agradecería caballero.

El grupo había vuelto ya al campamento, dejando atrás a su suerte los cultivos. Vincenzo entendió que aquel grupo no era el encargado de resolución de problemas, sino que meramente se dedicaban a actuar de vigías, como él había hecho.

Sin embargo, las palabras de aquel señor con bigote captaron su atención y le extrañaron un poco.

¿Sobrevivir? Pero eso es lo que has hecho. Seguir tu instinto de supervivencia. Has huido de los hervíboros, como el resto de nosotros. El instinto de supervivencia parece fuerte en ti.

Asiento a lo que dice el tal Vicenzo para luego de meditar mis palabras decir:

-Le agradezco enormemente sus palabras,pero incluso si el instinto de supervivencia me permite escapar,usted pudo observar que incluso los grandes herbívoros salen a buscar su comida,y si hay algo que recuerdo bien de mi època de primaria y secundaria,algo muy básico es que no todo lo vegetal que los herbívoros puedan comer significa que los humanos lo podamos procesar,por evoluciòn nos adaptamos a comer de todo pero en mas de un milenio nos adaptamos a comer mayormente carne,incluso las cucarachas se arriesgan a salir de sus escondites por comida,y eso que ellas son expertas en supervivencia,¿cual es mi punto?,que saber huir solo por huir si puede hacer que sobreviva otro dìa,pero si no aprendo a cazar,colocar trampas y otras cosas básicas de supervivencia no puedo garantizar mi propia supervivencia...aunque consiga agua pero no alimento,de todas maneras moriré por no probar bocado.

Sabìa que estaba siendo muy extremo con mis ejemplos pero querìa darle a entender el porque me era necesaria el aprender a sobrevivir,y habìa aprendido que en la vida,uno no puede hacerlo todo solo,necesita de los demàs,es por eso que pedìa ayuda.

Miro a Arturo y a Vincenzo, caminaba hacia la ciudad sin dejar mi arco y en la ultima posicion ... estaba costumbrado a la lucha ... y aunque esto fuera seguro tampoco me sentia perfectamente

- Piquito de oro ( Arturo)... tu estilo es perfecto para que la Presa ( Vincenzo) te entrene ..., huir no es una mala tecnica si no es tu fuerte la supervivencia pero tienes otras habilidades que usar para conseguir otras cosas ... -

Por fortuna los cultivos no están del todo en peligro; los dinosaurios no se percatan de nuestra presencia y siguen su camino hacia otra parte. Pero el susto no me lo quita nadie, todavía siendo mi corazón latir fuertemente contra mi pecho. Finalmente nos movilizamos para regresar y dar informe de lo ocurrido a los guardias, ¿es que no tenían ojos en la cara? Frunzo en entrecejo y ya abro la boca para darle una de mis majestuosas respuestas, pero el doctor se me adelanta.

— Revisaros la vista. Seguramente aún exista en esta agradable comunidad algún oftalmólogo. — Al final les digo algo, porque si no lo hago reviento. Suelto el aire por la nariz notablemente frustrada, desvío la mirada y me topo con la de Arturo, el maldito cobarde. Le escucho preguntar si alguien le puede enseñar, lo que me provoca una ligera risotada. ¿No ha tenido tiempo estos quince años?

— Supongo que te las habrás pasando huyendo todos estos años, por eso no has aprendido. No todo se consigue hablando, si lo dudas, te invito a negociar con un velociraptor, a ver lo bien que se te da… — digo con el sarcasmo bien marcado en mi voz.

El “Stalker” muestra su apoyo al que se marchó con el rabo entre las piernas dejándonos al resto vendido. Le dedico una mirada llena de desprecio. — No nos hemos marchado hasta asegurarnos de que esas criaturas no se comieran los cultivos — Corrijo a Vincenzo. — Y huyó dejándonos al resto atrás. Si va a seguir por ahí, mejor que se convierta en nómada. Para bien o para mal... estamos juntos en esto. Y lo que haga uno puede afectar negativamente al resto. 

Los guardias pasaron del "insulto" de la única mujer del grupo. Os indican que paseis a refrescaros y recuperar fuerzas para la tarde.

Esa tarde, cuando os refrescasteis, descansasteis y estabais más recuperados, os dirigis a ver al comandante Samuel. El edificio de los militares estaba en el centro de Manhattan, y sinceramente era el más protegido y dificil de acceder en caso de invasión. Los guardias os dejan pasar para que recibais las asignaciones. En plena sala estaban Samuel y Sannon discutiendo.

Samuel: Yo pienso que es demasiado arriesgado mandar gente para allá sin sabes qué ha ocurrido.

Sannon: Y si no la mandamos, probablemente todo lo que hemos conseguido se vaya a la mierda.

Samuel: Controle ese tono, Teniente. Sin saber qué demonios ha pasado no voy a mandar una misión suicida.

En eso los dos notan vuestra presencia, y Sannon sale de allí echando humo.

- Lamento esto. Hemos tenido un percance y tenemos distintas visiones de lo que tenemos que hacer. (se sienta y se toca el pelo) Entiendo el punto de vista de Sannon, y en otras circunstancias le daría la razón, pero en este caso, hay varias circunstancias que desconocemos y que podría orillar a la muerte de la gente que mande.

En ese momento veis que el hombre que está al mando, realmente está cansado, pero que debe ser un fiel pilar para todos, para que no se convierta la ciudad en anarquía pura y dura.

- Ya me han contado lo de las vallas. Buen trabajo. Aunque hubieran aparecido ahí esa manada de Stegosaurus, es bueno saber que las investigaciones de Billy están sirviendo, por ahora. Tengo una misión para vosotros; aunque discrepo con Sannon, quisiera saber qué demonios ha pasado en el cuadrante Gamma-123, al norte de aquí. Un equipo estaba instalando allí un difusor de radiofrecuencia para "desalentar" a los carnívoros a meterse en esta zona. (en la mesa, activa un holograma donde se ve la ciudad y un perímetro) Estamos ampliando la valla elecromagnética para que los carnívoros no pasen, al menos los grandes; los pequeños y medianos los vigilamos por radar. Quiero que vayais para allá con uno de nuestros camiones y con Sannon para ver qué ha ocurrido allí. (Pulsa un botón) Llamar a Sannon, lo quiero ver de inmediato (centra su atención en vosotros, cuando a los 10 minutos aparece Sannon) Sannon, irás al lugar con estas personas en uno de los camiones. Solo investigación, no quiero rescates ni aventurarse en la jungla, he sido claro Sannon? Cuando averigüéis que ha pasado allí, solo entonces podré hacer alguna misión de rescate. Alguna pregunta?

Vincenzo suspiró. Era bastante probable que si no recibían señales fuese porque el dichoso aparato no funcionase bien.

¿Cómo procedemos al llegar allí si nos encontramos con unos cuántos saurios? ¿Algún objetivo secundario? ¿Tenemos una ruta de escape asegurada?

Echó un vistazo al Bocas y la Paranoica. Ambos parecían tener una lucha interna y muchas ganas de jarana, pero se preguntaba qué podrían hacer contra una manada de dinosaurios con un arco y unas flechas. Vincenzo se encogió de hombros y volvió a mirar hacia Samuel. En cualquier caso, sería divertido.

- Puede que sin más haya un problema en los equipos de comunicación, señor - dije pensando en voz alta. - Sería conveniente llevar material de reparaciones en el camión - 

Continuo dándole vueltas al asunto de la disuasión de los animales y cada vez me parece mas interesante y pausible...

Escucho con atención lo que dice el comandante Samuel y lo que luego se dice para pensar detenidamente todo para decir:

-Puede que muchos no estén de acuerdo pero,señor Comandante es necesario crear en un futuro cercano un cuerpo de exploración,a la corta o a la larga todos moriremos no se puede evitar,como el buen doctor sabe,el tema es ¿como nos dirigiremos a los brazos de Hades?,al día de hoy es difícil decir que ¨queremos morir en una cama tranquilos y de viejos¨ en los tiempos que corren y para que la humanidad pueda avanzar habrá sacrificios que deben de realizarse,espero no morir hasta encontrar a mis hijos,pero que no le quepa duda señor que si los amenaza uno de esos dinosaurios a ellos tres que daré mi vida para salvar las de ellos.

Con esto quería dar a entender que realmente quería formar parte de ese ¨escuadrón suicida¨ que proponía el teniente,después de todo mientras mas sobreviviera aprendería ¨por las malas¨ tanto técnicas básicas de supervivencia como a pelear y otras cosas mas.

Ya se me hacía raro que nos designaran misiones tan tranquilas últimamente, no era que nos disfrutara de la paz y el poco peligro que había en ellas, pero sentía que mis conocimientos podían ser de mayor utilidad en otro tipo de misiones más parecidas a la que nos estaba encomendando Samuel. 

Mis compañeros comenzaron a manifestar sus dudas y comentarios respecto a la tarea que debíamos realizar, los cuales fueron bastante válidos y acertados. Necesitaríamos alguna forma de defendernos si nos encontrábamos algún animal hostil y el material de reparaciones que solicitaba Kevin podía ser de bastante ayuda. Pero lo que más llamó mi atención fue lo que dijo Arturo. Me sorprendió que el lo propusiera, teniendo en cuenta la forma en que había huido dejándonos a todos atrás, pero era una buena idea. 

-Señor, yo apoyo esa idea. Un cuerpo de exploración establecido y entrenado para ese propósito podría beneficiar de gran manera a la comunidad. Y si llega a formarse considéreme voluntario, ellos necesitarán un Doctor que pueda atender las posibles heridas que vienen con una tarea tan arriesgada. Yo podría capacitar a una o más personas para que se queden atendiendo las necesidades de la comunidad mientras yo esté fuera.

Justamente eso estaba haciendo con Evolet, al transmitir mis conocimientos me aseguraba que en caso de que algo me pasara quedara alguien que pueda continuar mi labor. 

Me doy cuenta que ignoran mis comentarios, ni siquiera me dedican una mirada de desaprobación o incluso de pasividad. Es como si fuese invisible. Lo mismo ha sucedido con el   del bigote corto y piernas largas. Lo peor de todo es que ya he vivido esto otras veces y con diferentes grupos. Digo las cosas claras sin filtro pero claro, debe ser que de nuevo tener tetas y ovarios resta valor a tus palabras y actos. Es como si hubiésemos regresado atrás en el tiempo en ese sentido (y en otros tantos, a decir verdad).

Esbozo una descarada sonrisa después de escuchar la discusión entre Samuel y Sannon en la cual el primero se niega en rotundo seguir su recomendación. Y esa sonrisa viene a cuenta de que se ha negado delante de ella… porque tras su marcha nos comenta que sí que vamos a ir al lugar. Solo investigar, claro… hasta que algo salga mal.

Escucho la intervención de Kevin y asiento la cabeza. Él en este caso sí que nos vendrá bien sabiendo las habilidades que tiene. Luego “pico de oro” o “el del bigote corto y piernas largas”, no sé con qué mote quedarme, habla y se me escapa un bufido cuando termina.

— ¿Perdona? Por Dios… si te ha faltado tiempo para correr en cuanto viste esos herbívoros, ¿qué dices que darás tu vida por nosotros? — Hipocresía barata para quedar bien frente al comandante, o puede que tenga una profunda distorsión de la realidad. Estas cosas me cabrean y mucho. Bufo por la nariz y aprieto mis manos convirtiéndolas en puños. La molestia no me deja reparar en la buena idea que ha tenido, pero a Oswald no le pasa desapercibida. 

La molestia que Evolet sentía era evidente y tenía razón, yo tampoco estaba feliz con lo que Arturo había hecho pero la diferencia era que yo actuaba de forma menos explosiva. Temiendo que las cosas pudieran escalar decidí intervenir para tratar de evitarlo. 

Me acerqué a Evolet y me puse frente a ella para que centrara su atención en mi e ignorara a Arturo. -No vale la pena. Le dije en voz baja señalando el puño que se había formado en sus manos con la esperanza de que lo relajara y para tratar de desviar la atención de Samuel hacia algo más positivo decidí comentar sobre el entrenamiento de Evolet.

Vi a Samuel y comencé a hablar. -Evolet ha aprendido bastantes cosas de medicina, todavía no está lista pero pronto lo estará. -Luego volí mi vista nuevamente hacia mi aprendiz y continué. -Yo confío en que con sus habiliades en la herboristería  y lo que está aprendiendo en medicina, pronto podrá estar salvando muchas vidas y será mucho mejor que yo. 

Demostrando la importancia que ella podía tener para la comunidad esperaba que Samuel ignorara cualquier otra cosa negativa sobre ella. 

escucho al capitan y las palabras de mis compañeros, sin emabrgo no les prestaba demasiada atencion ... estaba pensando el camino y el entorno de aquella zona ... las amenazas y peligros y que podria venirnos bien ...

- Bueno ... deberiamos ... ponernos a trabajar ya ... cuanto antes lo solucionemos mejor y asi ... podremos descansar y tomar una comida ... copiosa? - digo de forma sutil con la esperanza de tener una adecuada recompensa

Mi mirada furibunda y despechada sigue clavada en ese tipo cuando Oswald se pune delante. Aprieto los dientes, frunzo más el ceño y ahora es el doctor el objetivo de mis ojos. Me llega su susurro y aunque sé que tiene razón, no es capaz de contagiarme toda la calma que él querría. Sigo con los puños bien cerrados pero al menos soy capaz de no seguir buscando con la mirada a ese idiota. Pero ojalá esto hubiera acabado aquí para irnos de una vez a esa misión, porque repentinamente Oswald hace mención de mis capacidades y de estar enfadada paso a estar avergonzada.

¿Recordáis esa sensación de cuando tu madre o padre comentaba a sus amigos o vecinos (delante de ti, por supuesto) las buenas notas que has sacado aquel trimestre y exagerando otras capacidades que podrían llegar a destacar sobre la de otros algún día? Una vergüenza que nace de la humildad académica y profesional, no tengo de otro tipo y ha tenido que ser Oswald quien saque a la luz. Hubiera preferido que me sigan tomando por una sinvergüenza únicamente engreída y arrogante.

No sé a qué ha venido esto pero ha ayudado a calmar mi furia, básicamente porque la ha sustituido por el bochorno. Ya me da igual la reacción que Samuel pueda tener a eso, no la quiero oír aunque seguramente la ignore, como de costumbre. Con los labios sellados y sin echar mirada alguna a nadie me marcho de allí para irme con Sannon.

Sannon llegó a la sala un poco malhumorado, pero cuando el comandante le comenta su nueva misión con ustedes, suspira algo aliviado.

¿Cómo procedemos al llegar allí si nos encontramos con unos cuántos saurios? ¿Algún objetivo secundario? ¿Tenemos una ruta de escape asegurada?

Samuel: Tranquilo hijo, según nuestros radares no hay ningún saurio carnívoro ahí. Pero por si acaso, llevaréis algunas lanzas y arcos. En caso de peligro, meterse en el camión y salís pitando de allí. Nada de heroicidades, de acuerdo Sannon?

- Puede que sin más haya un problema en los equipos de comunicación, señor - dije pensando en voz alta. - Sería conveniente llevar material de reparaciones en el camión - 

Samuel: Ya he previsto eso, tendréis el material necesario para reparar la baliza, si es ese el problema claro.

-Puede que muchos no estén de acuerdo pero,señor Comandante es necesario crear en un futuro cercano un cuerpo de exploración

Samuel: Si la investigación de Billy sale bien, eso es lo primero que haremos, ya que con más suministros, podre quitar algunas normas que aunque necesarias, no me parecen justas.

-Señor, yo apoyo esa idea. Un cuerpo de exploración establecido y entrenado para ese propósito podría beneficiar de gran manera a la comunidad.

Samuel: Creame Doc, en cuanto tengamos buenos suministros, los grupos de exploración podrán traer más materiales y plantas para hacer medicinas y demás, cosa que andamos bastante escasos sinceramente. Tendrá que formar a más médicos, ya que ahora mismo los que tenemos los puedo contar con los dedos de las manos.

— ¿Perdona? Por Dios… si te ha faltado tiempo para correr en cuanto viste esos herbívoros, ¿qué dices que darás tu vida por nosotros?

Samuel: La disposición está bien, pero a veces un herbívoro es tan peligroso como un carnívoro señorita Evolet (se señala las cicatrices) Esto me lo hizo un Garras, o como lo llama Grant, un Therizinosaurus. Menos mal que era un macho joven, uno adulto me habría arrancado la cabeza.

Vi a Samuel y comencé a hablar. -Evolet ha aprendido bastantes cosas de medicina, todavía no está lista pero pronto lo estará. -Luego volí mi vista nuevamente hacia mi aprendiz y continué. -Yo confío en que con sus habiliades en la herboristería  y lo que está aprendiendo en medicina, pronto podrá estar salvando muchas vidas y será mucho mejor que yo. 

Samuel: Todo el mundo salvará vidas Doc, y esta mujer, aparte de curtida, adquirir esos conocimientos estará muy bien. Mi intención es que todo el mundo tenga unos conocimientos básicos para emergencias.

- Bueno ... deberiamos ... ponernos a trabajar ya ... cuanto antes lo solucionemos mejor y asi ... podremos descansar y tomar una comida ... copiosa? - digo de forma sutil con la esperanza de tener una adecuada recompensa

Samuel: Créame, cuando podamos aumentar los suministros, seré el primero en proponer un banquete a toda la población.

Cuando vais a donde está el camión, os sorprendeis de ver que está bastante bien a pesar del tiempo. Un tipo sale de debajo del camión.

Sannon: Cómo está el pequeñín Tej?

Tej: Este amiguito seguirá dando guerra, pero como no encontremos piezas... Soy mecánico, no hago milagros, y los componentes no llueven del cielo.

Sannon: Si encontramos algo, ya sabes que serás el primero en verlas.

Tej: Más te vale. Samuel me mandó vuestro equipamiento. Tios, no quisiera estar en vuestros zapatos. (levanta la parte trasera del camión) Lanzas, arcos, flechas, incluso se ha acordado de tí Sannon (saca una ametralladora M60) No desperdicies las balas amigo, no tenemos ningún especialista que pueda hacer más.

Dicho eso, Sannon se sube al aparato y se dispone a arrancarlo, pero no hace nada.

Sannon: Maldita sea Tej, esto no arranca.

Tej: Tranqui macho, dale un poco de cariño, lo tratais a patadas. (se sube y mira el contacto, lo saca y lo vuelve a colocar) Prueba ahora. (Sannon arranca el aparato y efectivamente...) Lo ves? Dales cariño y ellos te lo recompensarán.

Tej se baja del camión y os indica que subais.

La cosa parecía tener buena pinta, en apariencia, repito. Todo estaba bien calculado y con previsiones positivas por lo que estaba oyendo en aquella sala. No se esperaba velociraptors pero de haberlos tocaba correr, porque esas criaturas no son de las que se tumban muy rápidamente con lanzas y flechas. Yo en ese sentido soy bastante inútil, no se me da muy bien el combate, a fin de cuentas no es a eso a lo que me especializo.

Yo ya sé que cualquier herbívoro te puede matar, no fue mi intención infravalorar a esa criatura, solo señalé un aspecto de su especie para echar en cara como nos dejó vendidos pero asentí con la cabeza, quiero irme de aquí y si lo aclaro lo voy a atrasar más.

Después de que hable Oswald me voyi pitando de allí con la vergüenza acompañándome y me tomo con Sannon que está en un camión, por suerte, presentable. Espero al resto y mientras lo hago escucho su conversación. Mal augurio siento en el momento que escucho sobre la falta de componentes y por los futuros problemas que nos puede dar el camión en el peor de los momentos.

— Espero que este cacharro no nos falle en un momento crucial, si no… estamos muertos. — digo después de haberle echado un ojo a una de las lanzas y subo para tomar asiento en su interior. Que se den prisa porque no me gusta estar encerrada por mucho tiempo.

Vincenzo se encontraba algo nervioso tras la charla. Hacía ya mucho tiempo de la última vez que había participado en una misión en grupo, y no se terminaba por decidir si le desagradaba o no.

Cuando llegaron al camión, un hombre lleno de grasa entabló conversación con el líder sobre el estado del vehículo. Aunque aquel tipo aseguraba que estaba en buenas condiciones, a Vincenzo no le hacía gracia subir a uno de esos aparatos. Se sentía encerrado y completamente vendido en su interior.

¿Puedo usar el asiento de la ventana? preguntó con toda la cara del mundo.