Partida Rol por web

El profesor terminó de torturar a Jaycee para dejarlo ir a jugar algo más tranquilo y los juegos transcurrieron sin su intervención por alrededor de media hora.

Observaba con una gran sonrisa cómo Shiro y Aimi jugaban con tanto ánimo, ya que él consideraba que lo más importante de todo era ejercitarse y no darse por vencido.

Sonó la campana que indicaba el receso y el profesor dijo - ES HORA DE QUE SE DUCHEN Y CAMBIEN DE ROPA. RECUERDEN QUE LOS ESPERAN PARA IR AL MUSEO, Y AHORA PODRÁN DISFRUTAR LA VISITA SIN TENSIONES. JA JA JA JA JA - su risa hacía temblar los vidrios del gimnasio otra vez. Parecía un monstruo.

En ese momento, escuchan unos agitados pasos. Cuando voltean, Koichi está entrando con lo que parece un periódico en su mano.

- No pude llegar a clase - suspira triste pero luego los ve y se dirige a todos entusiasta.

- ¡Chicos! Deben ver esto, yo mismo lo escribí - dijo desenvolviéndolo.

Pudieron notar que en la primera plana, el titular era bastante llamativo.

ATAQUE EN LA PREPARATORIA

Muchos fueron los estudiantes afectados por semejante suceso, pero hay algunas figuras importantes que destacaron en este lugar, merecen un especial reconocimiento por su labor. Primero, quiero resaltar la valerosa acción de Katherine Tempus, quien luchó fuertemente contra las bestias, segundo decir que Reimu Hakurei salvó la vida de un integrante de la banda Red Stones y ayudó a muchos heridos y personas afectadas. Aunque sé que hay muchos héroes que aún se encuentran escondidos, hay una chica a la que este reportero debe agradecer personalmente: Naoko Niimura. Ella salvó mi vida, además de una chica con una armadura extraña y cabello blanco y largo. A ellas, si están leyendo esto, les agradezco lo que hicieron.

Por último, quiero mostrar el retrato hablado de uno de nuestros héroes anónimos, una chica que fuentes confiables afirmaron que poseía poderes mágicos y luchó contra las bestias. Cualquier persona que tenga mayor información sobre todo lo sucedido en ese fatídico día, los animo a acercarse a mí, Koichi Ayase, para hacer una crónica exacta de todo.

Imagen: chica con poderes mágicos, retrato hablado, Koichi Ayase.

Los miraba emocionado, buscando una opinión al respecto. 

Genial, Kitsune-kun prometo no decepcionarte.

Irisu asiente emocionada, por alguna razón estar en el comité parecía alegrarla, semblante que se borró ante la noticia de Koichi.

¿…?

La sorpresa e incredulidad se reflejó en su rostro conforme leía.

Ayase-kun, este… ¿Es el periódico escolar o es...? 

Había perdido la partida, no por falta de tiempo ni tampoco por que Katherine hubiera matado al rey. Cuando Reimu perdió la reina, hizo balancear el rey haciéndolo caer y dando asi por terminada la partida. -Sin su reina, el rey no puede moverse. Eres buena jugando Katherine, la has acorralado y no me has dejado moverla. Sonríe Reimu dándole la mano a su contrincante, deportividad ante todo.

Se quedo mirando el periódico con una sonrisa en los labios. Como mínimo alguien había visto el esfuerzo que había puesto con todo aquel asunto. -Pues a mi me gusta y buen dibujo de la chica mágica.

Katherine movió la última pieza de ajedrez mientras el profesor Daidouji  daba por finalizada la clase y una sonrisa cansada se asomó en su rostro, pues le aliviaba que ahora podían concentrarse en su viaje al museo. Cuando se percató de los resultados del ajedrez, torció su boca en un gesto que le asemeja a una victoria vacía porque le habría gustado durar más.

-También jugaste bien-le toma la mano en señal de satisfacción-. Para la otra hay que jugar más tiempo y descansadas.

Cuando arribó Koichi, la pelinegra le saludó con la otra mano libre y leyó con atención la nota. Sintió cómo sus mejillas se colorearon, agarrando el papel con fuerza y evitando miradas. Ella había tratado de mantener un perfil bajo, pero ahora eso será difícil de mantener.

-Ko-Koichi…  tratas de exponer la verdad… pero… but thanks for transmitting information, I hope that helps... but I must go take a shower ... See you .

La ojiazul hizo una torpe reverencia a modo de despedida y con su rostro rojo se retira para refrescarse y cambiarse. En el fondo esperaba que esos datos fuesen tomados en serio, mas duda que la mayoría acepte un hecho que en primera instancia quiere olvidar y en segundo que se manejen tópicos fuera de lo ordinario. Miró por arriba de su hombro a Koichi y le sonríe aún sonrojada para darle apoyo.

El rato que quedaba de clase, se divirtió con Shiro jugando a pasar el balón de volley. Cuando el profesor dio la orden de ir a la ducha porque la clase había terminado, cogió el balón y sonrió a su compañera -ha sido divertido, espero que tu también te lo hayas pasado bien - guardó el balón y entonces vio a Koichi acercarse con lo que parecía la portada de un periódico. Lo releyó por encima y miró a sus compañeras que parecían algo nerviosas. Se encogió de hombros y siguió a Katherine hacia las duchas.

Habia pasado un buen rato desde que acabo el ejercicio, todos se entretenian jugando y charlando, Mamoru en cambio no hacia otra cosa mas que.......dormir, si, Mamoru estaba durmiendo tranquilamente con la toalla cubriendo su cabeza, el ejercicio combinado con su exigente trabajo repartiendo periodicos en la madrugada habian acabado con sus fuerzas. No estaba soñando en nada, solo en un eden muy hermoso cubierto de flores y mariposas, pero sus sueños fueron arruinados cuando los fuertes gritos del profesor lo despertaron.

Mamoru se seco la baba que le habia salido de la boca por el sueño, miro de reojo de un lado a otro esperando que nadie lo hubiera visto, en eso llego un chico de cabellos claros mostrando un periodico y en el la imagen de la chica que nos habia salvado. Mamoru casi se hecha a reir al ver el poco realista retrato de la chica magica, el la habia visto con sus ojos y ella no parecia una figura sexy de una carta de mostruo de duelo, tenia su propia belleza pero ella no parecia un esteriotipo sexy.  Se tapo la boca para evitar parecer que se burlaba del esfuerzo del chico de cabellos claros.

Viendo que todas sus conocidas estaban ocupadas en otras cosas Mamoru simplemente se fue en silencio hacia los casilleros para cambiarse, pronto tendrian que ir al museo y no pensaba salir con esa ropa sudorosa.

Después del tormento de correr y los juegos al fin termina la clase, nada más dar la instrucción salgo casi al trote, si las piernas me respondiesen para hacerlo, a las duchas y me quedo debajo del agua caliente mas tiempo del necesario, esperando que así, se destensen los músculos doloridos , que a esta altura eran todos.

Me cambie con rapidez y salí para reunirme con los demás, estaba exhausta pero por alguna razón , la idea de salir al museo ya no me parecía mala sino todo lo contrario, la vida seguía adelante, y no podía quedarme atrás. 

- Bien jugado, Aimi, ¡ha sido divertido! - y no muy cansado, pensó para ella.

Escucharon al sensei finalizar la clase, y cuando Shiro se dirigía a las duchas, Koichi vino con el periódico. Al ver la portada, le dio un vuelco el corazón. Se me olvida con facilidad lo que pasó...

-E-está muy bien escrito, Koichi-san. Felicidades. Aunque creo que no se lo va a creer mucha gente.

Dicho esto se dirigió a las duchas con muchas dudas en su mente y poco ensimismada.

Jaycee no podía respirar libremente, estaba demasiado agotado con el castigo del Profesor Daidouji, mientras veía a sus compañeros jugar trranquilamente, él se dirigió al baño a tomar un poco de agua, abogando porque el profesor no se diera cuenta. Al regresar pudo ver uno de sus compañeros regresaba con información en el periódico escolar sobre lo que había ocurrido el otro día en el gimnasio, eso que los había marcado a todos, hablaba de una chica mágica...sería...?

Pronto irían al museo, así que esperaba las indicaciones de la maestra para hacerlo, por ahora se sentaría a jugar con alguno de sus compañeros, quizás Tempus.san le recibiese para una partida.

- ¡Sí, Kaichou! - respondió emocionado a Irisu - Quiero que todos aquellos que tengan detalles o su historia que contar de lo ocurrido, se acerquen y digan qué es lo que saben para que, entre todos, logremos mostrar que no estamos locos - esta última parte la dijo algo triste.

- Esas personas salvaron mi vida y siento que es lo menos que puedo hacer para pagarles - bajó la página, no sin antes darle un ejemplar a cada uno.

Después de una ducha y de vestirse nuevamente con los uniformes del instituto, todos se dirigieron al receso, donde pudieron comer algo en el restaurante o simplemente pudieron haber llevado su propia comida.

Tras este descanso, se dirigieron al parqueadero donde el autobús estaba esperando y la profesora se encontraba parada en la puerta esperando que se reunieran con una planilla en su mano.

Esperó a que todos subieran al autobús para decirles - Como lo prometido es deuda, hoy saldremos para el paseo al museo. Lo importante es que cada uno escoja una obra que cautive su corazón - dijo - Pero también, es importante la seguridad, así que nos mantendremos en los grupos que nombraré a continuación. Irisu-san se quedará conmigo para supervisarlo todo. Espero que muestren decoro y dejen el nombre de la institución por lo alto - sonrió para leer los grupos a continuación.

Katherine con  Yuuko

Kenta con Koichi

Mamoru con Jaycee y Shiro Kuroryuu

Aimi con Naoko

Reimu con Shiro Kasumi

- Espero que se organicen en los grupos para el viaje en autobús y disfruten su estadía. Cada uno debe velar por el bienestar de su grupo - sin decir más, tomó asiento y el autobús comenzó su camino. 

Jaycee estuvo escuchando atentamente las indicaciones de la maestra en el autobús, sí que estaba ansioso de salir del ojo vigilante de sus guardaespaldas, así que sin poner problemas al asunto buscó a sus compañeros con la mirada para comenzar la excursión al museo.

-Mamoru.kun, Shiro.san!!!!!! - los llamó,  - es hora de ponernos en marcha!

Katherine se demoró un poco en el baño para que el agua la relajase lo suficiente para no sentir el cansancio por el ejercicio impuesto por su maestro de Gimnasia y estar descansada para ir al museo. Se cambió tranquilamente evitando ver a sus compañeras más que nada por pena y fue por sus cosas en el casillero. Antes de partir miró a las chicas con una sonrisa cansada.

-Espero que hoy podamos divertirnos en el museo…

<< And we distract ourselves with art>> , pensó sin llegar a decirlo. Koichi hizo bien en querer informar lo que realmente sucedió en la escuela, pero no sabe si alguien le hará caso y si lo tomarán en serio, pues los ojos ajenos no podrían comprender cómo es que ellos se sintieron ese día.

Sumida en sus pensamientos se encaminó en al camión y la voz de su maestra la vuelve a la realidad. Cuando escuchó a quién le tocó de compañera le inquietó porque no ha hablado con ella lo suficiente. No negaba que es una buena oportunidad, mas en su interior le hubiese gustado ir con alguien… << Like Jaycee…>>. La pelinegra negó con su cabeza y aunque se ruborizó un poco, intentó buscar a Yuuko para sentarse con ella en el recorrido.

Irisu se puso a lado del asiento  de la profesora, obviando que estaba aún interesada por la noticia de Koichi.

…

Entrelazo sus dedos por la espalda, estirando su cuerpo un poco, debía estar lista para monitorear los grupos.

Al terminar saco sus notas, estaba segura de haber anotado algunas esculturas interesantes, se detuvo a la mitad de su escudriño.

Sensei Setsuna, una duda ¿También deberé escoger una escultura? 

Al fin el momento de la excursión había llegado. Con aire pensativo, se preguntó que tipos de obra habría allí y si de verdad habría alguna que pudiese llegar a gustarle tanto. Se encogió de hombros, había que hacer el trabajo, ya se las apañaría. Cuando vio quien le tocaba de compañera se acercó a Naoko y sonrió un poquito.

- Espero que lo pasemos bien, Naoko. ¿Conoces alguna obra del museo?

Lista para partir, me apetecía salir del lugar soy consciente de la presencia de Koichi – Hola – sonreí haciendo un gesto con la mano y acto seguido cogí un periódico que iba repartiendo. Había esperado otra cosa, algo mas ligero, mas…alegre, pero al leer lo que había puesto todos aquellos recuerdos volvieron a mi mente con fuerza, leí mi nombre entre lo que había escrito el chico y ms mejillas se sonrojaron, tampoco había sido para tanto – emm me alegra que estés bien – le comenté doblando el periódico y guardándolo en la mochila, con un poco de suerte nadie habría notado que mi nombre salía ahí.

Intentando volver al presente, escucho lo de los grupos y el trabajo ,así que sacudo mi cabeza borrando fantasmas con cadenas y pelos de colores – Seguro que si Aimi – le respondo a la chica sonriéndole ampliamente – Si, conozco varias, paso mucho tiempo ahí, así que seguro que encontramos algo que te encante – le digo entusiasmada. 

Despues de una buena ducha Mamoru salio de los vestidores lleno de energia, ahora tocaba irse de excursión. Salio a reunirse con los otros y en eso oyo la mujer de aspecto diabolico que era su profesora decir los nombres de los grupos para la excursión al museo, lo habian enparentado con el chico de aspecto exitoso y la chica con los listones-bueno, pudo ser peor- Cuando el joven rico que respondia al nombre de Jaycee lo llamo Mamoru se reunio con el, disimulo una sonrisa y le dijo intentando parecer casual:

-Hola Jaycee, espero que lo pasemos bien.

Dicho esto Mamoru paso a esperar a la chica de los listones con Jaycee, no le caia mal pero no le gustaba estar con gente con dinero, la sensación lo ponia nervioso, Mamoru aguantaria como pudiera.

Jaycee miró a Tempus.san subir al autobús...  <me hubiera gustado ir con ella...la conocería mejor>; vio entonces que su nuevo compañero de excursión, Mamoru, se acerba y lo saludaba amablemente.

- Mamoru.kun!.. hola! - dijo tratando de no asustarlo con su actitud, le era un poco difícil socializar con los demás - también espero lo mismo... ehh.... y cómo.. cómo has estado? - dijo tratando de comenzar una conversación ...normal.

Se acomodó la capucha y miró por la ventana, sus guardaespaldas le hacían señas extrañas indicándole que estarían en el museo también.... <malditos!... les dije que no fueran!>

 Miró a su compañero y trató de sonreír.

Arreglada y lista para marchar, Reimu llevaba como siempre su peluche en el regazo ya sentada en el autobús y su mochila con bastantes dulces para el camino. Cuando se acerco Shiro, la miro sonriente y le acerco el paquete de Pokies que se estaba comiendo en ese momento.

-Quieres uno? Una excursión sin dulces no es ninguna excursión....ni clase de hecho. Dijo divertida sacudiendo un poco la caja. -No hemos tenido hablado mucho pero espero que nos llevemos bien. Alguna pintura o escultura que te interese?