Partida Rol por web

El grito de la bestia hace que me ponga muy tenso y conenga el aliento pero al verlo tan cerca de Eden es cuando me asusto de verdad -¡Corre, maldita sea! -le grito para que se mueva, disparando cerca de la bestia para atraer su atención pero sin arriesgarme a impactar cerca de mi amiga así que los más probable es que solo le roce.

Después de eso, si puedo, correré al igual que ella.

Cuando escucho el grito de Chris no tengo mas pensamientos si no huir. Mis piernas se estiran y salgo disparada hacia atras poniendo distancia entre la criatura y yo, o al menos eso creo. Se que Chris a disparados pero no me detengo a ver si le dio o fallo, solo corro con el corazon en la boca cuidando de dañar la lampara.

-¡Tony!- grito al ver al ser ese acercarse a él y casi atraparle. No me puedo creer que nos vuelva a estar pasando todo esto otra vez, hasta el punto de quedarme prácticamente bloqueada durante unos instantes tan solo reaccionando al escuchar el disparo, que enseguida me hace moverme a toda prisa.

Sujeto la mano de Tony y corro a toda prisa a través del pasillo en un intento por alcanzar la puerta principal, procurando dar manozatos a las mesitas y lamparas de pie que encuentro a mi paso en un intento de que al caer puedan entorpecer la carrera de ese monstruo. Ahora en lo único en lo que pienso es en salir fuera de este edificio -¡Corre!- grito a Tony corriendo ya al aire libre en un intento de llegar a la cabaña.

La criatura cae muerta, con un disparo entre ceja y ceja. Aunque apenas si la veis pues ya estáis corriendo. En el pasillo, despejado, advertís que hay movimiento abajo. Salir no será sencillo.

Porque es la mejor idea, salir ¿No?

El wendigo cae a un lado, como si le hubiesen dado un mazazo en lugar de ser un disparo de escopeta. Por más que sea de refilón...está claro que no es algo natural. Ambos aprovecháis para correr. Aunque la mala fortuna de Eden la hace caer  de bruces golpeándose la cabeza con fuerza*.

Aunque puede ponerse en pie rápidamente. Eso sí, se la nota mareada y con ciertas dificultades. Pero puede correr.

Toca huir.

He logrado salir corriendo y me he dado con una de las piedras del techo en la frente. Caigo al suelo pero mi preocupacion es proteger la lampara que afortunadamente no se apaga y me levanto para salir corriendo. Aun confundida por el golpe logro sortear con cierta destreza a traves de las demas rocas y aunque siento mi frente algo humeda, estoy segura que me he hecho daño y me duele la cabeza.

Llegue a una encrucijada y llamo a Chris, no puedo creer que lo haya perdido, yo tenia la lampara, no podia perderme.

- Chris? ... CHRIS?

Alce un poco la voz sin llegar a gritar. Estaba segura que estaba detras de mi asi que avance un poco mas para poner distancia en contra el peligro pero no mucho mas. Estaba convencida de que Chris me conseguiria.

- Chris por dios, no me dejes! susurre casi temblando de miedo.

Era mi culpa. El bicho se habia detenido por mi culpa y habia perdido a Chris cuando me cai, y Cloud cayo de la torre conmigo, si hubiese podido encontrarlo, y ahora estaba perdida en la cueva.

Era mi culpa.

Mire con angustia la lampara.

No te apagues, no te apagues.

- Chris? pregunte al aire vacio.

Empezamos a correr todo lo que podemos. Si conseguimos dejar a ese monstruo atrás y escondernos momentáneamente sin movernos es posible que le esquivemos y podamos llegar hasta el riachuelo, y de ahí al exterior, pero por desgracia las cosas no son tan fáciles.

Las heridas y el cansancio de Eden le juegan una mala pasada que me corta la respiración. La ayudo a levantarse y después seguimos corriendo pero repentinamente, cuando ya escucho el rumor del agua, me doy cuenta de que no hay luz ni más pisadas siguiéndome -¿Eden...? -giro sobre mí mismo, todavía jadeante, y después de tragar pesado enciendo la linterna intentando dar con ella.

¿Esa cosa la habrá atrapado? No puede ser, no estábamos tan separados... así que deshago parte del camino para dar con ella pero contengo las ganas de volver a gritar su nombre para no darle más pistas a la bestia.

Un horrible grito resuena en los túneles, de nuevo. Rebota tanto que es imposible precisas su procedencia. Lo que está claro es que la criatura sigue ahí. ¿Bastará con no moverse para que no os vea? 

Estás sola, en la oscuridad...salvo por la lámpara y la linterna. ¿cuanto durarán? Chris no está a tu lado, te ha dejado sola. Puede que con la idea de que la bestia se entretenga contigo y así el pueda tener una oportunidad de escapar. Aunque...no haría eso ¿No?

Puede que simplemente te hayas equivocado al correr. Que hayas girado don de no es. Ahora tienes tres opciones. Quedarte quieta con las esperanza de que él te busque y que la criatura no te vea. Tratar de regresar...o seguir avanzando.

La luz de la lámpara tiembla. Pronto estarás a oscuras si se sigue debilitando. PEro al menos...al menos no estás encerrada. ¿No? Eso sería fatal.

Por la flecha en el suelo hecha con piedras, sabes que has tomado el camino correcto. Pero no hay rastro de Eden. Ella se ha equivocado. Eso podría darte el tiempo que necesitas para escapar. Si la bestia se entretiene con ella no te perseguirá a ti. Podrías salir. Aunque fuese cruel abandonar a alguien que confía tanto en ti. Pero....

Comienzas asentir sudores fríos. Pete, probablemente Cloud. Y ahora ¿también Eden? Una de las cosas que más has temido nunca se va cumpliendo...tienes que regresar. No puedes concebir hacer otra cosa.*

Tienes que regresar, aunque las opciones sensatas sean huir o quedarse muy quieto. PEro tienes que salvarla. Tras unos pasos, ves algo de luz, lejana pero eso tiene que venir de Eden. Sin duda.

Escojo la opción de saltar desde una ventana y alejarnos de allí corriendo. El aterrizaje es suave y en mi caso no sufro ningún daño. Echo un vistazo a mi alrededor escudriñando para lograr una ruta de huída hacia donde está mi hermana y así poder entregarle la medicina...

Salto justo detrás de Tony, casi sin pensarlo, porque de haberlo hecho habría tenido demasiados reparos a hacerlo. En una circunstancia normal ni se me habría ocurrido, pero ahora mismo era eso o darme por vencida, y al parecer tengo un mínimo sentido de supervivencia.

-¡Corre, corre!- pido tirando de Tony en un intento de ganar un poco de distancia con esa cosa, y llegar cuanto antes junto a Shannon.

Ambos saltáis por la ventana. Tony cae bien, o sus piernas aguantan mejor, y se puede incorporar al momento. Helen en cambio no sale tan bien parada. El impacto, pese al colchón, es duro y su tobillo lo sufre. No es probable que se haya roto pero el latigazo de dolor la tira al suelo. 

Se hace un momento de quietud en el que podéis ver como una de esas criaturas está colocada justo sobre la puerta. Si hubieseis salido por ahí...habría sido muy peligroso. Claro que, igual que lo veis, él os ve. Gruñe, sorprendido, y se cae. Se levantará pronto, hay que correr.

Pese al dolor de su tobillo Helen logra apretar los dientes y adquirir un buen ritmo, el que marca Tony. El ímpetu de Tony le pasa factura en una de las curvas del camino. La toma demasiado rápido. La nieve cede bajo su pie y resbala, a la velocidad que iba, para estrellarse de pleno contra un tronco. Una rama le atraviesa el brazo izquierdo, otra le araña muy cerca del ojo.

Por si fuera poco, cuando consigue recuperarse y echar a andar/correr de nuevo con Helen es empujado violentamente desde detrás y cae al suelo. Os han alcanzado.* La criatura se echa sobre Tony que consigue mantenerla a raya con sus piernas a duras penas.

Hay piedras y ramas cerca para poder defenderse. Y sigue teniendo su pistola.

El brazo izquierdo lo noto débil, parece que lo tengo dañado. Noto como me tiran al suelo y el ser quiere acabar conmigo, lo mantengo alejado con las piernas y le apunto para ver si puedo apartarlo de mí. Le disparo pero veo que mi disparo no le impacta en la cabeza, la situación se vuelve demasiado peligrosa...es posible que no salga de esta....así que le grito a Helen.

- ¡Huye! - ella puede salir de esta con vida, yo seguramente no salga de esta. 

Apunto una segunda vez para ver si puedo acertarle y acabar con él, seguramente sea mi último intento de salvar la vida...

El sonido del animal me deja paralizada hasta que veo la llama de la lámpara parpadear.

Oh dios, dios mio.

No puedo quedar a oscuras en ese lugar. Comienzo a andar hacia atrás buscando por donde regresar. Solo espero que Chris pueda ver la luz de la lámpara y me encuentre.

Estoy muy nerviosa y la lámpara tiembla en mis manos.

El miedo y las dudas nublan mi juicio durante unos segundos valiosos y escalofriantes. Definitivamente no quiero volver a sentirme así, no puedo dejar a nadie más atrás y menos todavía cuando se trata de Eden, que ha dejado claro múltiples veces que no quería que nos separásemos ni quedarse sola. La verdad es que yo tampoco quiero y no puede andar demasiado lejos.

En cuanto distingo esa luz entrecierro un poco los ojos, ¿pero qué otra cosa podría ser si no Eden? Me dirijo hacia allí apresuradamente, guiado por la esperanza de poder reencontrarnos y salir de estas cuevas a las que nunca debimos bajar, como ella tantas veces me pidió.