Mientras acabas, te dejo las opiniones que Mireille ha escuchado de su sire y de su mentora en términos de los otros clanes. Mireille puede tener sus propias impresiones, pero esta es la primera aproximación para saber que opinan los vástagos que frecuenta.

Brujah: Han sido responsable del caos político de nuestra estirpe. Suelen influenciar para mal, con sus discursos grandilocuentes y su afán de violencia. Harías bien en cuidarte de relacionarte con uno.

Gangrel: Nómadas salvajes. Poco les interesa la ciudad o la política. Déjalos tranquilos y te dejarán tranquila.

Nosferatu: A veces, el “Abrazo” tiene horribles efectos secundarios. Retorciendo cuerpo y mente de a quienes se les otorga nuestro don. Considérate afortunada, y recuerda siempre: lo que ves es lo que son.

Toreador: Son una elección sensible para dirigir nuestra ciudad. Sus obsesiones son más bien adorables y su autoridad es preferible a la de otros clanes. Sé respetuosa, compórtate con gracia. Ellos son el clan más importante en Lyon.

Tremere: Se precavida. Sus artes arcanas son capaces de ver a través de mentiras y decepciones. Sé respetuosa, pero no te mezcles con ellos.

Ventrue: No hay nada peor que alguien que cree tener el derecho divino a dirigir y que no dirija. Esos son los Ventrue, son peligrosos, manipuladores. Pero no dejes que sepan que tú lo sabes.

La Camarilla: Nuestro hogar, nuestro baluarte. Sin ella, habría caos y el salvajismo andaría rampante. Nuestra humanidad se la debemos a ella, con sus méritos y defectos.

El Sabbat: Vástagos monstruosos que buscan acabar con su humanidad, nuestra humanidad y la humanidad. Son violentos, brutos y salvajes, no intentes razonar con ellos.

Los Anarcas: No conozco verdaderos anarcas, pero te puedo decir con certeza sea lo que sean los que están en Lyon, no son anarcas.

Nosotros, los Malkavian: Los Toreador podrán tener la influencia, los Ventrue el dinero, pero nosotros… nosotros somos los arquitectos de Lyon. Ha sido nuestra visión la que la ha traído al futuro y a la Camarilla con ella. Tenlo presente: mientras los otros se burlan de nosotros, nos tildan de locos y lunáticos, la realidad es que a través de la ciudad le hemos dado forma a sus no-vidas. Que no te convenzan de lo contrario.

El reflejo de la pérdida

El tiempo comenzó a desgranarse con lentitud alrededor de Mireille, como si toda su existencia se hubiera congelado en un segundo eterno y elástico. Su rostro seguía siendo fino y pálido como la porcelana, sus cabellos seguían rizándose en bucles dorados y perfectos y sus ojos seguían brillando tan azules como cuando la sangre aún corría por sus venas. Su cuerpo entero estaba detenido en un instante, anclado a esa camilla en la que había cambiado.

Sin embargo, su mente... Ese era otro asunto bien distinto. Aprendía cada día, espoleada por una infantil curiosidad que nunca terminaba de abandonarla del todo. Seguía siendo caprichosa como sólo un niño puede serlo, pero desde la noche en que todo se había teñido de granate había ido poco a poco perdiendo la inocencia. 

Era una niña y no lo era.

La perfección congelada en un instante en el tiempo, eso había pretendido conseguir Stanislas, pero la muñequita andante que había creado maduraba dentro de esa cáscara de infantil perfección. Tenía ansias y necesidades, carencias que rascaban en el fondo de su cráneo, brotando con exasperante lentitud del mismo lugar donde habían nacido las voces. 

Las voces... La primera vez que las escuchó fue la noche que mató a sus padres. Allí, acuclillada en la escena inundaron su mente, paseando por ella como si la conociesen bien, tal vez mejor que ella misma. Susurraban, a veces comprensivas, a veces sibilinas, y Mireille poco a poco aprendió a escucharlas y dejar que la guiasen. 

La pequeña aprendió y creció, atascada perpetuamente en un cuerpo demasiado pequeño, anclada a unas emociones demasiado volátiles, atrapada en un papel que cada vez era menos real y más una pose. Y en cuanto fue capaz de controlarse, volvió a salir.

Al principio era cuidadosa al escaparse. Trataba de cazar con sigilo, saltando sobre sus presas en lugares oscuros. Pero no tardó en darse cuenta de que su apariencia era una baza a su favor. Al fin y al cabo, ¿quién no querría socorrer a una niñita en apuros? Oh, y a partir de ahí todo cambió. Empezó a divertirse, bien sûr. Salía a la calle con un lazo en los cabellos y un vestido con volantes, se colocaba debajo de alguna farola y ponía su expresión más desvalida. Sólo era cuestión de tiempo que alguien se parase y le ofreciese ayuda. Era sencillo conseguir que la llevasen a su coche o a su casa y allí saciar su apetito. Siempre tenía hambre. Salvo cuando se saciaba hasta el hartazgo, pero esa sensación duraba muy poco, demasiado poco, y enseguida volvía a sentir esos aguijones punzando bajo su piel, esa sensación salvaje rebullendo en su estómago y los colmillos cosquilleando bajo sus encías. Siempre estaba hambrienta. 

···

Aquella noche Mireille iba vestida de azul y los recuerdos de la noche cinco años atrás en que lo había perdido todo asaltaban su mente con cada paso que daba, cogida de la mano de aquella policía que se había parado a socorrerla. Chloé había dicho que se llamaba y por algún motivo que la niña no era capaz de definir, le recordaba a Anaïs.

Recordaba el momento en que se había acercado a ella y Stanislas en el bouchon, con expresión severa, para después regresar junto a su jefe. También cuando ambos se habían ausentado para ir al baño. No lo había comprendido en el momento, pero lo comprendía ahora. Dependía demasiado de su sire como para permitirse guardarle rencor, pero en el fondo de su consciencia sabía que todo lo había provocado él. 

La mujer hablaba con suavidad y a Mireille le gustó el tacto de sus dedos firmes rodeando su mano. Parecía preocupada por ella, dispuesta a protegerla. La pequeña no lo sabía en aquel momento, pero esa mujer había perdido años atrás a su pequeña bebé y desde entonces tenía debilidad por los niños. Mientras la llevaba a su coche patrulla, intentó preguntarle por sus padres y cómo se había perdido. Mireille sólo respondió con preguntas, queriendo saber más de ella, si tenía un marido o si tenía hijos. Parecía tan sincera y agradable, tan maternal, que Mireille la quiso para sí. Al fin y al cabo se merecía tener una madre, n'est-ce pas? Stanislas le había robado a la suya y por muy agradable que fuesen las lecciones con Éléanore, ella no podía ser una mamá. Era una de ellos. 

Por aquel entonces Mireille ya había aprendido mucho sobre la Estirpe. Ya sabía qué había hecho mal con sus padres, movida por la inexperiencia, y había aprendido que su sangre podía convertir a un humano en su juguete. Éléanore tenía muchos de esos juguetes humanos siempre a su alrededor. ¿Por qué no iba ella a poder tener una, solo una? Stanislas se lo debía, se repitió una y otra vez, convenciéndose de que no había nada de malo. 

Así fue como Mireille usó las artimañas que había aprendido de su sire y su mentora y convenció a Chloé para que la llevase a su casa en lugar de ir a buscar a sus padres. Tenía hambre, como siempre, pero esa noche la necesidad de una figura femenina que la cuidase y protegiese era mucho más fuerte. 

La casa de la mujer era un apartamento no muy grande en un edificio antiguo. Lo había decorado con cojines y telas de colores vivos que le daban algo de alegría, pero el grifo goteaba y las contraventanas no terminaban de encajar del todo en sus marcos. 

Allí fue donde Chloé probó por primera vez la vitae y daba igual lo fuerte que fuese la mujer, no estaba preparada para resistirse al sabor que se deslizó por su garganta, ligando su existencia a la de la pequeña malkavian. Y antes de que llegase el día, Mireille se la llevó al refugio de Stanislas con ella. Entró, llevándola de la mano y con una sonrisa en los labios. 

La mujer no dejó su trabajo y siguió siendo policía durante el día. Sin embargo, las noches eran para Mireille. La peinaba, la ayudaba a escoger sus vestidos, o revisaba sus lecciones. En definitiva, cuidaba de ella. Mireille la convenció para que la enseñase también a conducir y a disparar, pero nunca se atrevió a pedirle que buscase en los archivos policiales información sobre la muerte de sus padres. Lo pensó una y otra vez, pero había una barrera en su mente que le impedía dar el paso. Quería y no quería saberlo al mismo tiempo. 

Chloé Jouvet

Chloé fue feliz hace mucho tiempo, mucho antes de conocer a Mireille. Tuvo un marido y una pequeña niña que fue toda su vida durante los dos años que permaneció a su lado. Murió una noche, simplemente dejó de respirar, sin que los médicos fuesen capaces de explicar por qué. A partir de ahí la mujer perdió la cabeza y pasó varios meses en tratamiento. Su camino se separó del de su marido y poco a poco perdieron totalmente el contacto. 

Con el tiempo logró superarlo en parte, al menos lo suficiente como para recuperar algo parecido a una vida. Vivía en un pequeño apartamento y dejó su trabajo como paramédico para hacerse policía. Llevaba un par de años en el cuerpo cuando conoció a Mireille y encontró en ella un nuevo motivo por el que vivir. 

Se instaló en el refugio de Stanislas, aunque nunca llegó a entender del todo a ese hombre. Tenía una habitación junto a la de Mireille y se volcó en la pequeña como si fuese la suya. Porque... ¿no lo era? ¿O sí? Tal vez el destino le había puesto a esa niña delante para que ocupase el lugar de su Marianne. Alguna vez llegó a confundirlas, mezclando sus recuerdos y anhelos con lo que tenía ante sus ojos. Sin duda Chloé estaba menos cuerda que antes de empezar a beber la vitae de Mireille, pero ahora era más feliz. 

Chloé es una mujer fuerte, no tan firme y autoritaria como lo era Anaïs, pero sí tiene en ocasiones una forma de mirar parecida. A veces se porta como una madre con la malkavian, en otras ocasiones como una amiga y otras como una marioneta con la que Mireille disfruta jugando. En apariencia es fría y distante, pero con la niña se vuelve cálida y cercana, muy protectora. 

 

Vampiro: La Mascarada
PERSONAJE
Nombre	Chloé Jouvet
Clan	Ghoul Malkavian
Tipo	Vasallo
Naturaleza	Soldado
Conducta	Protectora
Concepto	Policía con complejo de madre
Refugio	Casa de Stanislas
Domitor	Mireille Bettencourt-Dumah

ATRIBUTOS
Fisicos 6		Sociales 3+1		Mentales 4
Fuerza	••ooo	Carisma	•••oo	Percepción	•••oo
Destreza	••••o	Manipulación	••ooo	Inteligencia	••ooo
Resistencia	•••oo	Apariencia	••ooo	Astucia	••ooo
HABILIDADES
Talento 11+1		Técnica 7+3		Conocimiento 4+3
Alerta	••ooo	Armas C.C	••ooo	Academicismo	•oooo
Atletismo	••ooo	Armas Fuego	••ooo	Ciencia
Callejeo	••ooo	Conducir	••ooo	Finanzas
Consciencia		Etiqueta		Informática	•oooo
Empatía	••ooo	Hurto	••ooo	Investigación	••ooo
Expresión		Interpretación		Leyes	••ooo
Intimidación	•oooo	Pericias	•oooo	Medicina	•oooo
Liderazgo		Sigilo	•oooo	Ocultismo
Pelea	••ooo	Supervivencia		Política
Subterfugio	•oooo	Trato con animales		Tecnología
VENTAJAS
Trasfondo		Disciplinas		Virtudes
Recursos	••ooo	Potencia	1	Conciencia	••••o
Contactos	•••oo	Auspex	1
				Autocontrol	••ooo
				Coraje	••••o
Meritos/Defectos		Humanidad		Salud
		• • • • • • o o o o		Magullado	[ ]
		⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ o o o o		Lastimado (-1)	[ ]
		Fuerza de Voluntad +2		Lesionado (-1)	[ ]
				Herido (-2)	[ ]
		• • • • • • o o o o		Malherido (-2)	[ ]
Otras habilidades		⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ o o o o		Tullido (-5)	[ ]
		Sangre (2xturno)		Incapacitado	[ ]
				Debilidades
		• • • • • • • •
		⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗ ⊗
Notas
Gasto PG (21pg): -2 puntos en FdV (2pg) -3 puntos en Técnicas (6pg) -3 puntos en Conocimientos (6pg) -1 punto en Talentos (2pg) -1 puntos en Atributos (5pg)   Arquetipos: Soldado El Soldado no es un seguidor ciegamente leal. Aunque existe para recibir órdenes, no las acepta incondicionalmente. Más independiente que un Conformista pero demasiado vinculado a la idea del mando para ser un Solitario, el Soldado aplica sus propias técnicas a los objetivos de otros, aunque quizás algún día –o una noche– busque el mando. Sus ambiciones se encuentran dentro de la jerarquía y estructura establecida. El Soldado no tiene escrúpulos a la hora de usar los medios necesarios para hacer lo que tiene que hacerse, mientras las órdenes vengan del sitio adecuado. Los Vástagos Soldados a menudo son valiosos a las órdenes de figuras de autoridad, pero también pueden ser líderes capaces, dispuestos a hacer lo necesario –o lo que consideran necesario– para mantener el orden. —Recupera un punto de Fuerza de Voluntad cuando consigas los objetivos de tus órdenes. Cuanto más difíciles sean de cumplir las órdenes mejor te sientes al llevarlas a cabo. Según el criterio del Narrador, la obtención de un éxito espectacular o el cumplimiento de una misión larga pueden valer la concesión de puntos de Fuerza de Voluntad adicionales. Protector Todo el mundo necesita consuelo y un hombro en el que poder llorar. El Protector encuentra satisfacción consolando a los demás, y la gente a menudo acude a él para contarle sus problemas. Los vampiros con este Arquetipo suelen hacer todo lo posible por proteger a los mortales de los que se alimentan. Las enfermeras, doctores y psiquiatras son ejemplos de posibles Protectores. Los Vástagos Protectores a menudo son el estereotipo trágico que Abrazan a los mortales que amaban en vida tratando de suavizar su pérdida, o incluso los que crean situaciones de dolor para poder intervenir y así conseguir mérito ante sí mismos. —Recupera un punto de Fuerza de Voluntad cada vez que logres proteger o consolar a alguien.   Contactos: - Comisario de la comisaría donde trabaja. - Psiquiatra que la estuvo atendiendo cuando murió su hija. - Jefe de la unidad de paramédicos donde trabajaba antes de que muriese su hija.

Por favor, haz una tirada oculta de Inteligencia+cultura de la Estirpe a dif 5 por aquí. ;)

Bien. Cazar en Villefranche podría ser arriesgado si Malabeste considera a todo el pueblo como sus dominios. Básicamente si cazas y te pillan, podría hacer las cosas más difíciles con el barón, o peor aún, tener un problema por ir en contra de la segunda tradición de la estirpe. El curso normal para poder alimentarte sería solicitarlo primero al vástago responsable, y esperar que fuese tan gentil de permitírtelo.

Ahora, si nadie se entera... ¿qué mal puede haber en ello?

Ha llegado el momento de otorgar experiencia.

Este capítulo fue como una segunda introducción en la que justamente se presentó el conflicto, y tuvisteis la oportunidad para empezar a desarrollar vuestras relaciones con los demás pjs. Por lo que todo giró alrededor de vuestras impresiones e introspecciones por ahora. El siguiente capítulo llegaréis al conflicto de la trama y tendréis entonces la oportunidad de ser mucho más proactivos.

Habiendo dicho esto, tienes 4 puntos de Experiencia por esta escena.

No tengo nada negativo que decir, la pequeña Mireille se robó todas las miradas ciertamente, es intrigante a la vez que inquietante, y creo que dará mucho juego en la siguiente porción de la historia. A nivel narrativo e interpretativo sabes que sólo tengo adjetivos positivos y flores para ti Morg. Sigue con esa excelente interpretación, y disfruta de todas las cosas que tengo en reserva para vosotros.... BWAHAHAHAA.

Lo que me dicen las voces <3 

-L'ambition vous surveille de très près- 

La voz y el tono son irreconocibles, mujer u hombre, es imposible de decir. Las palabras parecen existir independientemente del remitente, pero sabes que son para ti, porque llegan con claridad y tocan a tus propios pensamientos como algo ajeno y externo que, extrañamente, estás segura de no haber imaginado tú.

—Chapitre I (al recibir le Service).

¿Qué es bien?

Tout ira bien... pour quelqu'un

SoLo cAiN cOnOcE lAs ReSpUeStAs

Get off my head!

—Chapitre II (antes de entrar en la casa del terror).

Te lo dejo por aquí:

¿Tu plan es hacerlas mirar los papeles hasta cierto tiempo en particular? ¿Mandar a la una a mirar? ¿Hasta cuando piensas hacerlas quedarse?

A ver, por mí las tendría ahí castigadas hasta que terminemos, pero tampoco quiero forzar demasiado para que no me terminen odiando XD. 

Así que Raphaëlle que se vaya con Chloe (le mandaré un sms para que lo sepa) a echar un vistazo por el pueblo y si ven algo raro que nos llamen.

Y mientras, Clemence y yo revisaremos los papeles hasta que acabemos o hasta que sea la hora de irnos para que nos dé tiempo de volver a Lyon, lo que pase antes. 

Escríbeme el SMS que envía Mireille a Chloé.

Chloé, todavía me queda un rato aquí. Estoy con Clemence, no te preocupes. Va a salir Raphaëlle, quiero que la acompañes a revisar que esté todo en orden por la zona. Hazle caso y ayúdala. Yo te aviso cuando acabe aquí. 

Una respuesta llegó casi de inmediato.

C'est compris. ¿Cómo estás ma petite? ¿Está todo bien?. Paul está aquí también y quiere estar en el coche. ¿Qué hago?

Estoy bien, pero tengo hambre. Luego a lo mejor me tienes que llevar a comer algo antes de ir a casa. Dile a Paul de mi parte que no tiene permiso para estar en los dominios de Malabeste, que es mejor que nos espere fuera del pueblo. Pero si no te hace caso pues déjale que haga lo que quiera. Es su responsabilité, no la tuya. Tú haz lo que te diga Raphaëlle y ayúdala. Te dejo, que tengo cosas que hacer aquí.

Estamos vivas. Tenemos q hablar.

Es hora de repartir la experiencia, Morg, y te corresponden:

8 puntos de Experiencia.

Tengo la impresión de que te gusta llevar al personaje y se nota. Y más aún cuando es el más proactivo en la partida, con las mejores ideas y el que más repelús debe dar (y aún así los demás se le lanzan a seguirla ciegamente). Mireille es amena de leer, tiene vidilla y parece encarnar ese horror personal de una vida destruida tratando de encontrar lugar entre la aparente humanidad de la Camarilla. Disfruta tus puntos, te los mereces por completo :).

Te dejo a cambio algunas preguntas sobre la partida, as usual:

1. ¿Qué parte fue la que más te gustó del capítulo?

2. ¿Qué parte fue la que menos te gustó del capítulo? ¿Por qué? ¿Qué le cambiarías para mejorarla?

3. ¿Qué te gustaría ver en los siguientes capítulos que crees le de juego a tu personaje?

Bieeeen!! Px!! Tengo que mirar si hago algo con ellos, que ya tengo bastantes acumulados. ¿Para subirme alguna disciplina tendría que buscar la manera de justificar ese aprendizaje onrol o vale con que de practicar he mejorado sin más?

Muchas gracias por las cosas bonicas que me dices :3. La verdad es que Mireille es un personaje muy agradecido de llevar, tan pequeñita y tan creepy XD.

1. ¿Qué parte fue la que más te gustó del capítulo?

Me gustó sobre todo toda la interacción con Malabeste. Es un personaje horrible y desagradable, pero también muy interesante. Me chiflan tus nosferatus, la verdad. Me gustó también el punto de complicidad y entendimiento que encontró Mireille con él, ella tan cuqui y él tan feo, pero sabiendo ambos que comparten maldición.

Me encantan las voces de la red. Tenga razón o no con su iluminación, fue genial el momento de hilar unos mensajes con otros y pensar "¡Ajajá! ¡Ya sé quién es el chungo!". Vamos, que me divierte mucho buscarles dobles y triples sentidos a los mensajitos, aunque luego no encaje nada y sean inventadas mías xD.

2. ¿Qué parte fue la que menos te gustó del capítulo? ¿Por qué? ¿Qué le cambiarías para mejorarla?

Lo que menos me gustó creo que no es algo que puedas cambiar tú. La verdad es que notaba a mis compañeros algo desligados de la misión, poco implicados. Como que si lo hacíamos bien y si no lo hacíamos pues bien también. Sobre todo en la parte final.

A veces narro o digo cosas y me da la sensación de que simplemente les resbalan, no hacen mención ninguna, ni siquiera para narrar que pasan de mí. Me gustaría verlos más sumergidos en la historia para poder interactuar con ellos de un modo menos superficial. 

Es una visión subjetiva, claro está.

3. ¿Qué te gustaría ver en los siguientes capítulos que crees le de juego a tu personaje?

Pues la verdad es que Mireille se entretiene con cualquier cosa, no es difícil sacarle jugo XD. Me gustaría encontrarme con algún otro Malkavian (ella va a hacer por investigar el nombre que creó el silencio en su cabeza) y profundizar un poco en su relación con el Clan, pero no sé si se saldría mucho de los márgenes de la partida. Por lo demás, creo que cualquier cosa que plantees le va a dar juego.

¿Para subirme alguna disciplina tendría que buscar la manera de justificar ese aprendizaje onrol o vale con que de practicar he mejorado sin más?

Siempre que hayas usado la disciplina, es más fácil justificarlo que una nueva, o algo que no hayas empleado ni siquiera. ¿Qué tienes en mente?

No lo tengo claro en realidad XD.

Estaba pensando gastarlo en Disciplinas o en Tiempo Malkavian que lo he usado bastante. Acepto sugerencias, pero tal vez subir Tiempo Malkavian al 4 (6px) y Dominación al 2 (5px) con lo que me sobraría uno. O quizá subir Auspex al 3 (10px), que me sobrarían 2, o quizá Dominación al 2 (5px) y Presencia al 2 (5px), que me sobrarían 2. No sé, acepto sugerencias.

Lo que veo es que Dominación lo tienes claro xD.

Quizás quieras subirte Liderazgo para ayudarte con la reserva de Mesmerismo (y porque vamos, has sido líder de este grupo xD). Y ahorrar para las otras disciplinas. Casi que prefiero que te subas una disciplina a la vez, pero como lo veas. Has usado las 3 muy parejo y no vería problema con cualquiera de las combinaciones que tienes a la mano.

Mmmm, y lo de Liderazgo me pega con el narcisismo conseguido, que ahora Mireille está más mandona. Me has convencido :3. 

Pues entonces sería Liderazgo al 1 (3px) + Dominación al 2 (5px)=8px. Y me sobrarían 4px para la siguiente. Cuando me digas me lo subo en la ficha ^^.