Partida Rol por web

Hoy es un dia importante para los Tremere de la ciudad, como es sabido los Tremere de cada ciudad se reúnen una vez cada tres meses, en la tercera semana del mes y ese dia es hoy.

La capilla del Gran Regente es la sede de la reunion a la que cualquier tremere puede ir por voluntad propia y en esta ocacion tu y tu sire estan presentes asi como gran cantidad de Tremeres de toda la provincia de Buenos Aires.

La noche es joven y poco a poco van llegando los miembros del clan que toman un lugar en la gran mesa donde el Gran Regente esta sentado a la cabeza.

Toda la sala esta lleno de conversaciones entre miembros mientras se espera que comienze la charla.

Gabriela esta sentada a tu lado, seria como siempre mirando siempre hacia donde esta el Gran Regente.

Llegado un momento te mira y te dice -Finalmente llego esta reunion, es hora de tratar el problema de los Malkavian-

Parte de lo que Gabriela había tratado de enseñarme era a moverme en sociedad, en la sociedad de los Vástagos, y específicamente en mi clan. Aún así consideraba una molestia que me hubieran hecho salir del laboratorio, un retraso en una investigación que por fin, después de dos años, comenzaba a dar frutos. Sonreí e incliné la cabeza ante el saludo de uno de los recien llegados, irónicamente uno de los mas antiguos del clan, el Sire de mi Sire. No soy tonto, sé lo que me conviene y soy lo suficientemente inteligente como para saber que no soy ni remótamente el más inteligente de la sala, aunque sí el de las ideas más claras. Retiré la silla de Gabriela y esperé a que se inclinara para acercarla ala mesa, un pequeño gesto de caballerosidad, una muestra de respeto y sumisión, parte de nuestras costumbres, de la pátina de civilidad que disfraza nuestra naturaleza bestial. Un interesante juego el que me toca jugar, una danza sutil entre las criaturas más temidas por el imaginario de la humanidad. El premio, más tiempo de vida, o de no-vida según nuestras propias definiciones, el castigo por fallar, una muerte aún peor de la que podría imaginar, y soy médico.

Tomé un par de copas y le ofrecí una a Gabriela antes de sentarme a su lado, la sangre estaba ligeramente especiada, un detalle casi Toreador que de no ser por lo que sabíamos de nuestro Regente, resultaría ostentosa. - Supongo que sí, y te prometo escuchar bien aunque todavía no entiendo que podría hacer yo en esta guera. - Mentira, sabía exactamente lo que hacía por que hacía seis meses que analizaba muestras de diferentes miembros del clan de los lunáticos. Diferentes potencias y edades, y finalmente comenzaba a detectar un patrón que, de tener algunos datos estadísticos, podría utilizar para detectar sus debilidades y fortalezas.

¿Sabes adrian? Siempre te he apoyado en tus cosas, pero pareciera que estas mas interesado en tus experimentos que en la lealtad al clan. Gabriela siempre es asi, en todo momento y todo pequeño  detalle que pueda ser tomado como una falta de respeto hacia el clan es rapidamente criticada, con el tiempo te has ido acostumbrando pero de todas formas puede resultar molesto.

Mientras tanto se siente una gran tension en el salon, todos estan algo nerviosos por lo que puede o no salir en esta reunion, los Tremere no son conocidos por despreocupacion.

Arqueé una ceja y dudé un instante entre responderle como correspondía o como debía hacerlo. Finalmente me decidí por un intermedio, una respuesta mordaz envuelta en sedas, la cruda verdad dentro de un dulce apaciguador. - Perdoname Gabriela, si te doy esa impresión, sabés que la lealtad al clan es lo primero y que gustoso dejaría todo por complacer a mis mayores. - el caramelo estaba listo, dulce y complaciente, ahora había que inyectarle el veneno - ¿Pero no es acaso la investigación que me encargaste algo que el clan necesita? Sé que si, de otro modo ni vos ni Von Wallerstein, tu Sire, hubieran invertido tiempo y recursos en ello. - susurré. Mi sonrisa inocente debía estar molestándola, Gabriela era lo suficientemente inteligente como para entender lo que le estaba diciendo, y que también había captado su mensaje. Si algo salía mal, la culpa recaería sobre mi, la investigación sería mi exclusiva responsabilidad. Si teníamos exito, si encontrábamos el vector y descubríamos cómo usarlo, entonces la gloria sería de ellos, y sinceramente no me molestaría en lo absoluto.

- Sé cual es mi lugar Gabriela - dije con una sonrisa que ocultaba el acero tras mis ojos - me enseñaste bien, no te preocupes, no voy a defraudarte. - podía perdonarle todo, e incluso esto, pero no podía evitar que me molestase el que me tratara como a un nene. Desvié la mirada para saludar a alguien y aproveche para respirar, un acto innecesario pero que tenía el mismo efecto que cuando estaba vivo, cuando volví a mirarla estaba nuevamente en control total de mis emociones. - Perdoname, eso estuvo de más.

Gabriela parecia molesta, no demasiado pero obviamente no le habia gustado mucho tu forma de contestar. De todas formas no tuvo oportunidad de contestarte ya que todos tomaron aciento y el Gran regente comenzo a hablar.

Nunca supiste cual es su verdadero nombre, cuando no esta presente todos lo llaman alto regente y luego suelen dirigirse a el como Señor, aunque no lo has visto demasiadas veces.

Estaba vestido adecuadamente para la ocacion aunque sin demasiada formalidad, un traje normal sin corbata y unos pantalones en conjunto, era agradable ver que no es de esos tipicos señores tan anticuados y excentricos.

En el momento que comenzo a hablar, toda la capilla hizo silencio Hermanos mios, como sabran esta no es la mejor epoca para nuestro clan en este pais ni tampoco lo es para la camarilla, estamos viviendo tiempos dificiles y tenemos demasiados enemigos. Luego de decir esto se callo por un segundo y empezo a caminar por detras de la gente sentada al rededor de la gran mesa, con una mano en su barbilla como meditando Como sabran la amenaza del Sabbath esta cada vez mas cerca, tenemos informes de fuentes muy confiables que ahora mismo estan planeando como introducirse en la ciudad para atacar al principe, pero esto no es realmente ninguna novedad.

Se detiene un segundo para ver si alguno de los presentes queria agregar algo antes de continuar.

Adrián observó la respuesta de su Sire y supo que, una vez más, se había pasado de la raya. Se maldijo internamente, acababa de darle una excusa más a Gabriela para retenerlo a su lado con la excusa de que necesitaba más educación.

Luego llegó el regente y Adrián se dedicó a escucharlo. Lo cierto era que las noticias no eran buenas, pero tampoco eran nuevas, y tampoco auguraban nada bueno para los neonatos cómo él. Eran carne de cañón, un escudo temporal para darse tiempo a escapar de la ciudad si el Sabbath conseguía entrar. De todos modos eso no era lo preocupante ahora, si el clan habia sido reunido, no era por meros rumores, y si el Alto Regente decía que la fuente era confiable, entonces podían escribirlo en piedra.

Ahora debía esperar, ver que seguiría contando el Alto Regente, y ver si alguien tenía algo que añadir. Cuando todo terminase, a le le esperaba una larga noche con gabriela y sus eternos sermones acerca de la leltad. Adrián se preguntaba cuándo entendería Gabriela que lealtad no era sumisión.

Un Hombre alto se para por un momento, es Damian Aguilar, una vez tu sire te conto algunas cosas sobre el, un hechicero poderoso sin duda.

Señor creo que todos estamos al tanto de eso, pero hay asuntos mas importantes que tratar. Obviamente los Lunaticos se estan volviendo en una verdadera pesadilla y todavia no hemos discutido sobre nuestra lealtad a este principe... Ultimamente se le ha dado por amenazar a la primogenitura de los clanes y hasta tiene el tupe de obligar a la gente a obedecerlo por medio de...

Gabriela rapidamente se para e interrumpe al hombre.

Damian, creo que todos estamos al tanto de las artimañas del principe, pero esta claro que en esta ciudad alguien tenia que poner mano dura, hace tiempo que hemos estado pidiendo algo de orden en esta ciudad y creo que no es de importar demasiado que utilice a algunos neonatos poco importantes para lograr esto.

Toda la sala rapidamente se ve envuelta en susurros, el Gran Regente mira con atencion la escena pero sin interrumpir, parece estar meditando en silencio...

¿Justicia? ¿Llamas justicia al hecho de que no mueva un pelo para hacer que los Malkavians se detengan en su lucha por destruir nuestro orden? Ademas creo que con lo ultimo que has dicho te has contradecido a vos misma. Dice con una mirada de placer, como si el encontrar un error en la otra personas lo pusiera realmente contento Estoy seguro de que si a tu chiquillo le arrancaran el corazon y lo obligaran a usar su torpe lengua para limpar las medias del principe...

¡Alto! Dice el Alto Regente y al segundo todos se quedan completamente callados, dejando en silencio total la capilla por unos cuantos segundos hasta que vuelve a hablar. No quiero que esta reunion se convierta en una discusion sin sentido, tenemos cosas mas importantes de las que hablar y por el momento dejaremos al principe en paz. Dice mirando a Damian Mientras no se meta demasiado en nuestros asuntos no es una amenaza.

Toda la sala vuelve a quedar nuevamente en silencio, la cara de Damian no demuestra mucha alegria, pero extrañamente se calma rapido. En ese tiempo el Gran Regente vuelve a tomar asiento.

Es claro que los Malkavians son una amenaza, pero lo cierto es que poco sabemos sobre ellos. Hay muchas incognitas que todavia quedan sin respuestas y nisiquiera mi red de espias pudo conseguir nada Concreto. Le pedi al mismisimo Primogenito del Clan Nosferatu si podia ayudarme con esto... Me dio algo de informacion util pero todavia no puedo llegar a ninguna conclusion.

De lo que si podemos estar seguros es que no solo los lunaticos de la Camarilla nos atacan, si no tambien los anarquistas y lo mas extraño es que no parecen estar aliados ni nada por el estilo... Esos locos siguen siendo un total misterio hasta para nosotros.

Dejare que Franco lo explique mejor. Al decir esto un hombre de anteojos que estaba sentado al lado del Gran Regente se pone de pie.

Franco se acomoda los anteojos y empieza a hablar en voz alta mirando hacia el centro de la mesa. Hace 6 dias capturamos a otro Malkavian, esta vez uno de la camarilla que curiosamente se mostro un poco mas hablador que el resto.

Al escuchar esto la cara de los presentes parecio ilusionada por un momento, el conseguir un Malkavian que revalara los planes del clan seria un gran paso adelante y todos los sabian, pero Franco al ver ese gesto en todos se apresuro a decir lo siguiente

Lamentablemente, todo lo que decia eran incoherencias... La cara de ilusion rapidamente desaparece en todos los presentes Pero por lo poco que entendimos, parecia que este sujeto no tenia la mas minima idea de ningun plan para dañar a nuestro clan ni nada por el estilo, el lo llamo... toma una hoja de papel de la mesa y lee una parte de su contenido "La obra del caos colectivo pero individual para llegar a un estatus de exitacion" Rapidamente aparta la hoja poniendola denuevo en la mesa, como si le diera asco tocarla y luego se sienta.

Adrián escuchaba y aprendía, sabía por experiencia que Gabriela era una fanática del orden y de las pirámides de poder. Para ella conocer y mantener su lugar en la misma era el único camino seguro de ascender. La autoridad era incuestionable, y el escalafón insustituible. Adrián no pudo evitar sonreir mentalmente al imaginar qué le pasaría a Gabriela si el Alto Regente diera la orden de  oponerse al principado.

Luego se centró en lo que decía el Regente, y en la información de Franco, la frase le resultaba conocida, o al menos el concepto de la misma, si es que lo entendía bien. - Efecto mariposa. - susurró casi para si, pero dejando que Gabriela lo escuchara. Habia buscado información acerca de la teoría del caos despues de haber leido Jurassic Park, de Crichton, y si bien no terminama de convencerlo el que una mariposa pudiera provocar un huracan, estaba seguro de que muchos buiitres agitando las alas a un mismo tiempo podían provocar un buen vendaval.

Derrepente un ruido estruendoso se hace escuchar en toda la capilla, todos y absolutamente todos se quedan callados. Por una milesima de segundo todo parece estar en silencio, hasta que grandes pedazos de hormigon y marmol empiezan a caer. Estaba claro, algo habia explotado y generado que justamente se rompiera la parte del techo bajo la que se encontraban los presentes.

La mesa rapidamente se parte en varios pedazos al no poder resistir todo lo que se le cae encima, por su parte los Tremeres presentes se apartan a una velocidad increible de la zona de peligro, la mayoria se pega a las paredes mientras otros salen por las puertas mas cercanas hacia otras habitaciones. Algunos gritos se hacen escuchar pero la mayoria conserva la calma...

Puedes escuchar la voz de alguien diciendo ES IMPOSIBLE, NADIE PUEDE SUPERAR NUESTRAS DEFENSAS. obviamente esa persona no estaba en lo correcto, porque alguien acababa de volar el techo de la Capilla tremere mas importante de Sur America, en medio de una importantisima reunion. Estaba muy claro que los malkavians tenian algo que ver.

Pero eso fue aun mas obvio cuando de las puertas empezaron a salir enormes perros con sonrisas dibujadas con lapiz labial rojo en todo el rostro... estos perros no eran simples cusquitos si no que variaban entre razas como San Bernardos, Dogos, Ovejeros Alemanes y Doberman.

Estos perros no se limitan simplemente a deambular por ahi, si no que se dirijen a morder a los confundidos tremeres. Varios se defienden y logran eliminarlos sin mucho esfuerzo, pero son muchos... y los pobres vastagos estan un poco confundidos por la situacion.

Afortunadamente para vos, ningun perro parece tenerte en la mira por el momento y fuiste suficientemente rapido como para no salir herido en el derrumbamiento del techo, lamentablemente no se puede decir lo mismo de tu Sire.

Su pierna derecha esta totalmente aplastada bajo una columna gigante de Marmol, no esta muy lejos tuyo... lo mas correcto seria ayudarla, ya que no es famosa por su fuerza...

Caos, definitivamente la herramienta de una mente perturbada, o quizá lo sufcientemente clara como para entender que era la mejor arma contra un enemigo organizado. Tan sólo el esperar lo inesperado le había permitido a Adrián saltar a tiempo fuera el alcance de los escombros, y la suerte lo había llevado lejos de los perros de guerra que sus enemigos habían enviado a terminar el trabajo.

Sin embargo no había tiempo para lamentaciones, si quería seguir vivo, o no vivo, tenía que salir de allí. Buscó una salida con la mirada y entonces la vió, Gabriela forcejeaba con una columna que había atrapado su pierna. Sabía que nisiquera entre cuatro de los mas fuertes entre los de su clan moverían la columna, y mucho menos ellos dos que eran de la rama de pensadores. La decisión era sencilla, la misma que correspondía tomarse en caso de derrumbe de acuerdo con defensa civil. Sólo que en este caso era mucho más fácil, despues de todo una persona común no podría regenerar la pierna.

Mientras se acercaba buscó algún elemento cortante, sabía que probablemente Gabriela lo mataría luego, pero no había otra forma de salvarle la vida. Se acercó a ella y la miró a los ojos, en sus manos tenía un trozo de vidrio largo con una parte envuelta en su saco, un cuchillo crudo y peligroso, pero era lo único que tenía. Le ofreció el cinturón para morder, y tras acariciarle el pelo le sonrió. - Va a doler, pero necesito que guardes tu sangre para curarte una vez que termine. No me mires así, no hay otra forma, después podés hacerme lo que quieras, pero como médico y como tu chiquillo no te puedo dejar morir. Mordé y no grites, no quiero tener que pelearme con los perros.

Tenía que cortar cerca de la articulación, no había forma de cortar el hueso, palpó lo que había libre de la pierna para ver si tenia suerte, y una vez estuvo seguro de cual era el lugar más seguro para amputar, comenzó a hacerlo. Al menos no tenía que preocuparse porque Gabriela se desangrase, una vez estuviera libre podría huir hasta su refugio y lamerse las heridas.

No puedo creer que esto este sucediendo, hace escasos minutos estabamos en una... no es tiempo de palabrerio. si coinsideras que es la unica forma, hazlo. Dice mirandote, con la esperanza de que se te ocurra otra manera menos dolorosa...

Instintivamente miras varias veces hacia todas direcciones, el lugar en donde estas en una pequeña parte de lo que era el gran salon, por culpa del derrumbamiento quedo dividido y es imposible pasar al otro lado, puedes escuchar gritos, ladridos, gruñidos... es una verdadera lucha lo que se vive del otro lado.

Por otro lado puedes ver que en una de las ventanas a escasos 20 metros de donde estas, hay un grupo de 3 jovenes al parecer vastagos mirando tranquilamente por la ventana, probablemente sean Malkavians en busca de victimas o tambien podrian llegar a ser unos pobres tontos que estan de mirones.

- Hagas lo que hagas, no grites, hay unos lunáticos en una ventana a veinte metros y no los quiero encima nuestro. - Se desabrochó el cinturón y se lo puso entre los dientes, doblado para que aguantara la mordida de Gabriela - Mordé esto. - y después empezó a cortar, rápido y buscando la articulación.

Con habilidad logras amputarle la pierna a Gabriela, la cual parece sentir un gran dolor pero luego se calma. Rapidamente le envuelves la pierna con un pedazo que cortas de tu ropa.

Los ruidos se aproximan en todas direcciones, no hay muchas salidas posibles, vuelves a ver por la ventana y ves como esos tres sujetos que miraban por la ventana comienzan a golpear el vidrio, pero no logran romperlo. Ahi es cuando recuerdas que la capilla poseia vidrios con una magia tremere que nunca llegaste a comprender para que las ventanas solo fueran rompibles por dentro y no por afuera. ¿Que extraño que eso funcione mientras que todo se derrumbe? Pero bueno, no importaba, seguia siendo una posible salida... el problema eran esos supuestos malkavians, que de todas formas parecian no haberte visto.

Unos segundos mas tarde desaparecen de la ventana, parecen haberse dado cuenta que no podian entrar por ahi y buscaron otra salida. Los ladridos se escuchan cada vez mas fuerte, en cualquier momento pueden aparecer unos cuantos perros entre los escombros y encima tenias la dificultad agregada de tener a tu sire sumamente dañada, sin condiciones para protegerse a ella misma.