Partida Rol por web

Durante años, incluso cuando la economía de la zona empezó a resentirse hasta el punto de que cualquier cosa accesoria fue considerada algo a desechar, la productora Contacto Producciones ha sido la principal fuente de videos de temática ocultista y paranormal. Incluso cuando el hambre aprieta, a la gente le gusta creer en algo.

Ahora que la economía se está regenerando por un lado y que hay una creciente comunidad emigrante hispanoamericana en Europa por el otro, la oportunidad de filmar en exclusiva un acontecimiento paranormal en España no se debe desaprovechar, con la idea de vender el resultado a ambos lados del Atlántico.

La historia es realmente escabrosa. Hace diez años, dos familias amigas, en total cinco adultos y cuatro niños, alquilaron una casa de veraneo en el municipio Estación de El Espinar, un barrio en realidad del Ayuntamiento de El Espinar. La casa forma parte de un conjunto de cuatro llamado "Las Lunas" y esta que alquilaron ellos era la del Cuarto Creciente.

Decidieron dar una fiesta por todo lo alto para ellos nueve, con comida en abundancia cocinada en barbacoa y bastante bebida. Ahí se pierde el rastro de los acontecimientos. Los siguiente que se supo de ellos fue cuando la mujer de la limpieza llegó a la casa y se encontró allí varios cadáveres descuartizados. Inicialmente pensó que alguien había entrado en la casa y atacado a las familias, pero la sorpresa fué mayúscula cuando la policía certificó que los cuerpos pertenecían a tres niños y dos adultos de ambas familias.. y a dos adultos más, desconocidos y que aún hoy siguen sin haber podido ser identificados. Del resto de los veraneantes no se supo nada. Sospechando un secuestro, se dieron batidas en su busca, pero sin resultado. Aún hoy, abandonada ya la búsqueda, es un misterio absoluto qué pudo ocurrir con ellos.

Recientemente, las agencias de noticias han recibido una nota de prensa del representante de un grupo de música hardcore-fusión español de muy poco renombre, llamado Cianuro y apenas conocido más allá de los circuitos alternativos. Según la nota, el grupo va a celebrar una fiesta-concierto en la casa del Cuarto Creciente en conmemoración del décimo aniversario de los asesinatos. Dicen estar convencidos de que aquello fue obra del demonio o de otros entes sobrenaturales y que quieren que el concierto beba de ese ambiente y quizá incluso llegue a haber alguna aparición fantasmal.

"Nosotros, al menos" ha declarado Ramón Nieto, cantante y frontman de la banda "vamos a intentar invocar ALGO con nuestra música."

Al tener esta jugosa situación entre manos, vuestra productora ha negociado con el representante de los Cianuro y obtenido la exclusiva para grabar el reportaje en cuestión, aunque deberéis compartir la exclusiva con Televisión Española, que enviará un reportero de España Directo al evento. Haréis trabajos bien distintos, ya que él va sólo a hacer una noticia de cuatro minutos y vosotros un reportaje de cuarenta, por lo que técnicamente no es la competencia. Sin embargo, Pablo Faroni, director ejecutivo de Contacto Producciones, os ha dejado claro que como "los gallegos" filmen algo sobrenatural y vosotros no filméis algo igual o más interesante, "mejor que os quedéis en España".

Y en consecuencia, ahí estáis, preparando el plan de viaje, el equipaje, el aparataje técnico, los billetes de avión y el pasaporte. Tan solo os queda buscar alojamiento en la zona y podréis salir de viaje. Para discutir esto, os habéis reunido todos en la pequeña sala común de Contacto tres días antes de partir.

1 de septiembre de 2008. Sede de Contacto Producciones, sala de juntas. Os habéis reunido allí esta mañana, con todos los papeles por delante con mapas, información del viaje, opciones de billetes, lugares para la estancia y documentación sobre el pasado del pueblo y la casa que vais a visitar. El café está caliente y el tiempo es escaso, así que os ponéis a trabajar.

Facundo miró a los presentes con calma, sin perder la compostura. Como de costumbre, el locutor se presentaba atildado, como si ya mismo fuera a aparecer en la pantalla.

- Bueno, aquí estamos - la frase, obvia, solo sirvió para romper el hielo. Ya todos, en mayor ó menor grado se conocían, así que solo le quedaba organizar lo indispensable y retirarse a su domicilio a preparar las maletas.

- Ernesto, tu eres el que manda, ya nos dirás como quieres llevar esta reunión - Facu esbozó su ya famosa sonrisa. La misma que tantos réditos le daba en la pantalla - Cuando viajamos, como nos moveremos allá, que llevamos... las preguntas de siempre... las de todos los viajes -

Dejando caer sus dedos uno de tras de otra sobre la mesa, mientras mira su mano aburrido
-No entiendo porque me siguen tratando a estas reuniones... yo solo soy el camarografo... mientras haya una cámara de vídeo no importa el lugar ni la hora puedo hacer mi trabajo, de lo otro se encargan ustedes... pero... ya que me quieren aquí podemos hablar de aumentar mi sueldo??

- No. Esto no es la oficina de Recursos Humanos. El objetivo de esta reunión es el viaje, y no tu sueldo - contestó Ernesto, mirando a Diego; su tono de voz grave y seco parecía no encontrar ninguna emoción a estar ahí - Vamos a tratar de no complicarnos, ¿sí?

Si bien había terminado con una pregunta, su lenguaje corporal avisaba que no buscaba ninguna respuesta. Mientras hablaba, sacó su palm; la apoyó en la superficie y, con el pequeño lápiz, empezó a marcar en la pantalla sin hablar. Con los ojos fijos en lo que estaba haciendo, tanteó en su pecho hasta sacar de abajo del chaleco una lapicera, y agarró el anotador que había traído con él al entrar en aquella sala.

- ¿Alguno tiene alguna otra pregunta, duda existencial o algo, antes de que nos pongamos con las cuentas y el itinerario? - preguntó, levantando la mirada de la pantalla virtual. Sus palabras fueron coronadas por el girar de la lapicera, que quedó lista para su función.

Camestres urgaba diligentemente con su dedo índice en busca de cualquier mucosidad que su nariz pudiera aportar. Jamás había dejado el país, por lo que su experiencia en la materia era escasa (por no decir nula). Por otro lado, estaba persuadido de que su opinión sería insuficiente para movilizar a los demás. En rigor, no entendía siquiera por que lo habían citado. Sin embargo, era una oportunidad inmejorable para lamer algunas botas.

- Creo que lo mejor será que usted decida, señor Crocce.- dijo en tono afectado. - Es el que mejor conoce la situación financiera de la que disponemos y, después de todo, es su proyecto.

- Golazo.

- No gracias, las cuentas te las dejamos a ti - Resultaba extraño escuchar a Facundo con un tono tan jovial, probablemente se debía a que en este momento no había una cámara frente a el

- Los vuelos, los hoteles... de eso no opino, mientras estemos más o menos cómodos por mi estará bien - tras el intento de broma, el locutor se puso serio - Aunque quizás deberíamos pensar en como nos moveremos allí? - comentó - La última vez el tema de los taxis fue un desastre. Si nuestro experto-en-todo se anima a conducir, supongo que lo ideal es que consigamos algún transporte permanente cuando estemos allí. Quizás una combi? para llevar los equipos y eso -

Tras su opinión Facundo permaneció sentado pensando, antes de mirar al asistente y comentarle - Podrías servir unos cafés, no? - El tono había cambiado, ya no era el amistoso y servicial que había utilizado con Ernesto, sino el de alguien acostumbrado a ser obedecido - Para mi con crema - terminó, seguro de su pedido.

Camestres saltó de su silla al momento de oir el pedido.
- Si, seguro... igual, yo me arreglo con cualquier cosa, eh. Por mí, podemos viajar como sea. No tengo problemas. Y con el tema del hotel, lo mismo.

- Ya vas a ver de donde saco la crema, pedazo de pelotudo...

Batió sus palmas un par de veces y luego comenzó a frotarlas nerviosamente. Miró alternadamente a los presentes y con actitud servicial preguntó:

- Alguno más quiere algo. Te, galletitas... puedo ir hasta la cocina y traer lo que sea...Si quieren, digo...

Ernesto bajó la mirada de nuevo a la hoja en blanco. Contemplando la palm, empezó a hacer algunas anotaciones a tracción de sangre con la lapicera, sin prestar más atención. Cuando hubo rellenado la mitad del papel, recién ahí, volvió a hablar.

- Un cortado, Raúl, como siempre - dijo; y a pesar de la ausencia de "por favor" y la sequedad del tono, era un trato amable en Ernesto. Tras sus palabras, levantó un segundo la mirada para hacer contacto visual con el asistente, y completar el pedido.

Inmediatamente después, volvió a su papel y siguió anotando.

- Lo de la combi está bien, pero te olvidás que primero hay que llegar a España. Con el quilombo que hay en Ezeiza cada dos por tres, quizás hasta ni logramos llegar - Ernesto negó con la cabeza mientras seguía escribiendo furiosamente: parecía transcribir algunas cosas de la palm -. Y decí que Aerolíneas no tiene un vuelo conveniente para esa fecha. Es lo único que nos falta.

El anciano, con un rostro serio, pero no intimidante, miró al asistente. Se le apetecían una galletas, y un café no estaría mal. Pero estaba pensando en algo más importante. Qué sería el caso ocurrido en la casa de veraneo, esta vez se le complicaba la cosa. - Me parece que estamo tratando con un tema mayúsculo, de todos modos, pudo haber sido un impulso de un loco, ninguna persona cuerda querría haber atacado a toda esa gente. Dudo mucho que el niño desaparecido haya sido el asesino. Pero obviamente un ajuste de cuentas no es. Me parece que antes del concierto deberíamos hacer una psicofonía para confirmar la existencia de entes sobrenaturales.
El parapsicólogo hablaba con un acento muy extraño, el checo mezclado con acento español (ibérico), chileno y argentino no era común.

Camestres observó en silencio al venerable anciano por varios segundos. Sus ojos estaban desorbitados y su rostro entero era una divertida mueca de incredulidad.

- Oooooo-ckey. Voy por esos cafés.

- Sin azucar para el viejo, que ya está pasado de vuelta.

Salió raudo en dirección a la cocina de la productora.

- Por favor - Ernesto dejó de escribir, y le clavó los ojos al anciano. Se le empezaban a notar los músculos del cuello, que se iban endureciendo -. Eso lo vemos después. Ahora la prioridad es llegar a El Espinar con tiempo de sobra para hacer lo que nos convenga hacer para preparar el reportaje. - torció la boca en algo parecido a una sonrisa a medio camino -. Psicofonía previa incluida.

Volvió a la hoja. Miró su obra y asintió para sí mismo. La pasó al que tenía a la derecha, indicando con un gesto de la mano que la mirara y que el anotador diera la vuelta a la mesa.

- El vuelo de Air Europa que llega a las 5 AM españolas del 5 de septiembre me parece ideal. De ahí, o bien alquilar un auto para los equipos y los demás que se trasladen en micro, o bien tratar de alquilar una combi. Llegamos al Espinar, con mucha mala suerte, alrededor del mediodía. Me queda por averiguar el precio de la hotelería, pero no creo que la capacidad no me permita conseguir un lugar decente. Por el tema de los equipos, voy a averiguar qué clase de seguridad tienen.

Hizo una pausa.

- ¿Alguna pregunta?

Mira a Diego, sintiendo lástima por el chico. Luego se sienta al lado de Ernesto y comienza a hablarle un par de cosas en voz baja, sin que los otros escucharan.

- Bueno Crocce, yo creo que debes responderle bien al chico respecto a su aumento de sueldo. Me parece que se lo merece, bueno, por ahora no, pero tal vez logre hacer buenas grabaciones allá en El Espinar, si se lo das podrás motivarlo a realizar mejor su trabajo, también con el otro chico, Raúl. ¿No crees?

Se hace el sorprendido ante los comentarios así su pregunta y dice
-Tenemos oficina de recursos humanos?... valla lo que me vengo a enterar... resulta que somos una empresa mas seria de lo que pensaba
Riendo entre labios... para luego comienza a hamacarse en la silla, mientras escucha a los demás, asta la ultima pregunta de Ernesto, que levanta la mano
-Tendremos algún día libre allá??