Partida Rol por web

Carne Picada

5. Secuelas

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22/10/2010, 23:33
Director

Seguís escuchando. Oís cómo se mueven por la zona hasta que escucháis que se detienen. -Ahí hay un hombre mayor. Parece herido. Voy a bajar. ¡Oiga! ¡Oiga! ¿Está bien?-

No se oye respuesta alguna, pero sí mucho ruido cuando el agente aparta ramas y pide ayuda a su compañero para bajar al fondo. Por fin, el ruido vuelve a detenerse.

-Un hombre mayor, coincide con la descripción. Tiene un fuerte golpe en la cabeza, producto de la caida a la piscina. Y varias heridas, como de mordiscos. No se puede hacer nada por él. Creo que murió hace un rato.-

Un silencio tan frío como un jarro de agua helada e imposiblemente seca. Elagente que está con vosotros responde. -Tomad nota del lugar y volved. Tenemos mucha gente a la que ayudar primero. Enviaremos una ambulancia a recogerle.-

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25/10/2010, 04:42
Ernesto Crocce

Un silencio cunde en el patrullero, pero más que nada, cunde en el interior de Ernesto. Un silencio que, como el Pampero, ha soplado en su pecho y ha detenido su aire, su corazón, la adrenalina, todos sus pensamientos. Un vacío se forma en el único resquicio de esperanza que le quedaba, esa locura, con la que intentaba negarse algo que ya de algún modo sabía. No cabía para él la esperanza de aquella frase de mientras no aparezca el cuerpo, no podés dar nada por sentado. No cabía para él. No, no cabía. No podía caber, aunque él mismo había sido uno de esos cuerpos desaparecidos, y había vuelto. Los demás no lo habían hecho. Sabía que Frantisek no lo iba a hacer. El vacío dentro suyo toma lentamente la dimensión de un universo, y termina de matar aquella bacteria inocente, ese virus que había amenazado con reproducirse masivamente dentro suyo, negando toda su experiencia, negando su instinto, negando las probabilidades y la realidad, y diciéndole que había una posibilidad de que estuviese vivo. Se apaga, desaparece. Se absorbe. Adiós.

- Ya está. Gracias, agente - dice, con voz casi neutra, firme y fuerte pero neutra -  Es cierto. Primero están los vivos.

Se da vuelta para mirar a Diego y a Camestres. Ellos están ahora. Y Facundo. Las sumas de los vivos y restas de las bajas son para Estados cuando intentan justificarse, no para personas como ellos. No hay consuelo en pensar que le quedaron tres de los cuatro, que se le podrían haber muerto todos, que él mismo podría haber quedado ahí sin que lo encontraran nunca. Sabe que, de haber un segundo mejor resultado para lo que ha sucedido, ese es el que viven. Pero había uno más arriba. Todos vivos. Había otro posible, y no es ese. Pero tampoco cabía para él llorar por lo que podía haber sido, y no fue. No, justamente no para él. Ahora, hay que seguir.

- La hija de puta la pagó. Eso no nos va a devolver a Frantisek, pero la pagó. Si el viejo tenía razón, con eso se terminó todo esto. Ya está.

Se vuelve hacia el agente.

- Había un flaco también. No puedo describírselos bien, era un chico como él - señala a Diego - Joven, no sé, un chico, con ropa como sucia. Quizás también esté herido, aunque no creo. Estaba con Frantisek la única vez que lo vimos a él. Hay que tener cuidado con él, estaba enajenado por lo de los lobos y todo. Pero quizás necesite ayuda. Si no lo vieron, es que está escondido y no va a salir. Bueno, apúntenlo para cuando vengan con la ambulancia. No creo que puedan ni podamos hacer otra cosa por él - Ernesto hace una pausa. Su tono sigue igual de neutro - Supimos que el pueblo estaba bajo ataque de los lobos o de los "perros", ¿sigue así? ¿A dónde nos van a llevar?

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25/10/2010, 11:59
Director

-Parece que se ha calmado todo un poco. Al menos llevamos un rato sin informes de ataques, quitando este. Están eviando fuerzas especiales a la zona y a ustedes los vamos a trasladar al hospital de Segovia, por autopista son quince minutos.-

Los vehículos, de hecho, aceleran y pasan bajo dos túneles antes de llegar a una rotonda donde giran a la derecha, en dirección "Madrid" y "A Coruña". Atrás quedan los baches del terreno y comienza una vía más llana, previa a la entrada a la autopista. Cerca veis edificios de pisos y una estación de autobuses que os da la clave de que habéis llegado a San Rafael. Pasásteis por aquí mismo ayer, cuando llegásteis en dirección a El Espinar.

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29/10/2010, 06:29
Raúl Camestres

Camestres se había sumido en un silencio absoluto. Miraba por la ventanilla del patrullero con gesto ausente, con los hombros caídos y el cuerpo casi hundido en el asiento trasero. En sus ojos ya no brillaba aquella irreductible chispa tan propia de la bendita alegría que solo puede brindar la estupidez más infinita. Como un niño pequeño que ha descubierto a edad muy temprana el auténtico significado del dolor, el asistente parecía demasiado golpeado como para asimilar las noticias.

Aquel viejo desquiciado ya no estaba entre ellos. El mundo entero se perdería para siempre de escuchar sus desvaríos. Justo cuando empezaban a ponerse interesantes.

Camestres todavía no había tomado posición con respecto al truco del círculo de sal, aunque un sentimiento extraño había comenzado a tomar fuerza en su corazón. Ya no estaba tan seguro de que hubiera sido la simple casualidad la que ahuyentara a la terrible bestia…

Desgraciadamente, el Profesor se había ido, llevándose consigo todas las respuestas. Y lo mismo había hecho esa vieja maldita de Henar. Lástima que el precio había sido demasiado alto.

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30/10/2010, 19:31
Diego Hess

Diego miraba por la ventana aun con los nervios circulando por su torrente sanguíneo, y con su nervioso pie que golpeaba suavemente pero a un ritmo alto el suelo del coche con su talón.
Escucho la voz provenir de la radio pero no le prestaba mucha atención no quería escuchar lo que ya sabia sobre el viejo, estos son los momentos en que en las pelis al sobreviviente le agarran ataque de culpa por no poder haber echo anda por el otro, pero no a Diego, sabia que había echo lo mas natural del mundo sobrevivir como sea... después de todo el karma por haber salvado a Ernesto y "haber" dejado a su suerte al viejo, lo dejaba en total neutralidad espiritual.
Pero no había razón para llorar las perdidas, en este momento no comprendía que había perdido al viejo del todo, tuerce un poco su columna para acercarse a la reja* que separa los asientos de detrás con los de delante.

-Che... esta clase de cosas pasaba con Franco?

Notas de juego

*Supongo que hay una reja divisoria