Partida Rol por web

Alfred García y Encarna Navarro se subirán al escenario con una canción de Álvaro Soler y Jennifer López... «El mismo sol».

Y así es como los dos os encontráis en el Box 6, donde hay todo lo necesario para empezar a preparar la canción: un piano, una guitarra, las partituras, un buen equipo de sonido con sus micrófonos y todo... ¡Y hasta un sofá de dos plazas por si os cansáis!

Pero lo mejor de todo es que el box está insonorizado y eso quiere decir que nadie podrá escuchar lo que habléis mientras estéis aquí dentro. Nadie... salvo las cámaras, por supuesto.

—¿Ah? ¿Pero es contigo? Y yo que pensaba que me tocaba con David — dice la Encarna, con un aire de decepción inocultable —Mira tú, qué falta de seriedad, ya han cambiado la canción otra vez. ¿El arrebol? No la conozco, ¿será de Nino Bravo o algo? mira que prefiero las que están en inglés, aunque bueno, ya sabes, no es que se me de muy bien escribirlo. Y la verdad el "lis'ening" ni se diga. Aunque ahora que lo pienso, tampoco lo hablo. Pero lo canto, yo lo que sé es cantar inglés y me dicen que lo canto bien. O bueno, eso he escuchado, que la gente lo dice cuando me ve, y se emociona, y grita. Como la tía esta que me ha gritado, la Aitana. Parece maja, ¿no?—

—¿Habrá señal del móvil? voy a guglear la letra de la canción y tú miras el ritmo y me lo explicas. Que yo tengo buen oído musical, pero tienes que hablar claro, vocaliza, ¿vale? Es que me di cuenta que no entendía era porque todos estaban comiendo. La Rosa López ahí estaba, ¿la viste? todo el rato masticando la ensalada, como una tortuga. Tío, que aquí no se vino a comer sino a cantar. ¿A que sí estás de acuerdo conmigo?— y así iba Encarna, con la impresión de que estaba tratando de llenar ese silencio que había en el Box. 

Ver la decepción en la cara de la chica porque él fuera él no era lo mejor que le podría haber pasado, pero lo peor fue que hasta quiso disculparse por no ser David. Frunció el ceño aproblemado y se rascó la nuca agachando la cabeza, pero tampoco llegó a decir nada porque la rubia, para no entender nada, no dejaba de hablar. Subió la mirada a ella con la boca medio abierta, con la intención de participar en la conversación unipersonal que la chica mantenía, pero solo vio oportunidad cuando Encarna le pidió su opinión por fin. 

Aitana parece maja, sí. Es muy alegre, seguro que eso le viene bien a la casa. - no se podía negar que la chica era todo lo extrovertida, espontánea y feliz que se podía llegar a ser - Y no me fije en Rosa en realidad, pero la caprese estaba muy bien, así que normal que estuviese callada comiendo - sonrió con optimismo, no queriendo entrar a lapidar a nadie, que seguro al público no le gustaría mucho que hablaran mal de cualquiera por vicio - La canción que nos toca es El mismo sol - se preocupó de pronunciarlo claramente para que la chica se enterara - ¿La conoces? Tiene muy buen ritmo, así que si le ponemos ganas quizás hasta el jurado se pone a bailar - su sonrisa se amplió un poco más. 

—¿Cómo? ¿Que la han vuelto a cambiar? Pero mira, que indecisos son en este programa. Pero vaya, esa sí que la conozco. Pues nada, entonces será esa. En castellano es más fácil todo. Aunque claro, en inglés tendría más clase, sería todo elegante porque le das un aire internacional a las cosas que no te veas, y como igual no te entienden, o al menos yo no, dices 'a que debe ser buena cantante'. A mí me gusta esta balada, la que va '¡quiero un ramoooo!' ¿la conoces? Pero en inglés, vamos, te estoy traduciendo porque es más fácil— darle cuerda a Encarna era tener conversación por horas y horas y horas. Aunque sería más preciso llamarla "conferencia".

—¿Y quién se va a jubilar? Vaya, no me estás poniendo mucha atención. Perdona, pero no me acuerdo de tu nombre, no me enteré. ¿Cómo dices que te llamas?— pregunta ella —Mira, te voy a ser sincero. No me gusta no enterarme de las cosas, sí vas a hablar de lo tuyo y yo de lo mío, pues como que no nos irá muy bien, no. Entonces te propongo, tú me explicas que tiene que ver el que no-se-quien se vaya a jubilar, y si no tiene nada que ver nos concentramos en la canción. A ver...— y empieza a cantar un poco para calentar.

♪Nunca he sentido igual una derrota
Que cuando ella me dijo: se acabó.♪

—Jo, como me gusta Fito y Fitipaldis.— comenta emocionada.

Ainhoa Cantalapiedra y David Bustamante: Vivo por ella (Andrea Bocheli y Marta Sánchez).

 Y así es como los dos os encontráis en el Box 6, donde hay todo lo necesario para empezar a preparar la canción: un piano, una guitarra, las partituras, un buen equipo de sonido con sus micrófonos y todo... ¡Y hasta un sofá de dos plazas por si os cansáis!

Pero que canción más buena! Ainhoa estaba emocionadísima. ¡Y un compañero inmejorable! Añadió, guiñándole el ojo a Bustamante. A ver, la canción es sobre la marihuana, ¿no? Ainhoa leyó la letra otra vez.

Vivo por ella sin saber
Si la encontré o me ha encontrado
Ya no recuerdo como fue
Pero al final me ha conquistado

Asintió con la cabeza. Sí, aquí habla de la primera que el tío fumó un porro. Se pilló tal morón que no se acuerda ni que pasó.

Vivo por ella que me da
Toda mi fuerza de verdad
Vivo por ella y no me pesa

Ainhoa siguió cantándola y analizándola. La maría le da la fuerza, sin ella se siente débil. El mono, es evidente. Y no le pesa porque es ligerita, al fin y al cabo son hierbas. Asintió, convencida.

Y aquí entrarías tú. Ainjoa le había dado la parte de la chica a Bustamente, pero sin maldad. Simplemente creía que era mejor así para hacer el contraste y hacer la canción suya.

Vivo por ella yo también
No te me pongas tan celoso
Ella entre todas es la más
Dulce y caliente como un beso

Aquí vemos una pelea. Es evidente que se les está acabando la maría y el chico se siente celoso, porque se queda sin maría el pobre. Prosiguió. La chica siente la calidez del fuego del cigarro y la dulzura del sabor de la hierba.

Ella a mi lado siempre está
Para apagar mi soledad
Más que por mi por ella
Yo vivo también

La chica se siente sola, melancólica, pero cuando enciende el cigarro, apaga esa soledad. Ainhoa cada vez estaba mas convencida. Está muy enganchada la pobre. No puede imaginarse la vida sin los porretes.

Es la musa que te invita
A tocarla suavecita
En mi piano a veces triste
La muerte no existe
Si ella esta aqui

La toca suave, es una droga tranquilizante. Te quedas super relajado tras varias caladas. Además, el chico dice que es la inspiración. Cuando se fuma los canutos se le ocurran nuevas canciones y así el piano no se muere. Ainhoa se estaba sorprendiendo. Normalmente no se paraba a escuchar la letra, pero esta hablaba de porros, no podía evitarlo.

Vivo por ella que me da
Todo el afecto que le sale
A veces pega de verda

Pero es un puño que no duele

A veces se les va de la mano y se fuman más de la cuenta. Les pega un blancón de la leche, pero claro, el blancón no duele nada. Ainhoa asintió. Oye, Bustamante, ¿Qué te parecería salir al escenario fumados? Le preguntó, emocionada. ¡Seguro que así los espectadores se motivan muchísimo por nuestra inmersión en la canción!

La alegría había acompañado a David desde que se enero de que compartiría canción con su musa Ainhoa. Cuando la escuchó hablar asintió emocionado, moviéndose por el box con el nerviosismo que le caracterizaba.

-Yo estoy muy contento de que nos haya tocado juntos- sonrió.  Vamos a ganar esta gala juntos. Ya te digo yo que no te van a expulsar a mi lado- aunque precisamente habían echado de la academia a su compañero, pero no por la actuación. No entendían que Agoney fuese más silencioso.

La verdad es que Bustamante no estaba muy seguro de que la canción versara sobre lo que Ainhoa decía, pero era tal la emoción que le ponía a sus explicaciones que quiso creerla. Aun así, cuanto más avanzaba más dudas le iban naciendo al pobre obrero que tampoco tenía muy claro lo que pudieran analizando.

-¿Sí? ¿Tú crees que yo debería hacer la voz de la mujer? Se quedó reflexivo unos segundos hasta que al final asintió, pensando que no triunfaban quienes hacían siempre lo mismo. Bueno, así llamaríamos mucho la atención. Nuestra propia versión, ¿sabes? Yo creo que podemos hacer algo grande.  

Ainhoa leía bien y por su tono de voz Bustamante tenía claro que la canción sería un éxito. Tosió ligeramente  cuando le preguntó si podían salir al escenario fumados. Él era humilde y tenían amigos que se habían metido de todo delante de él, pero él era el chico sano, el deportista, el currante. ¿Qué imagen iba a dar a su padre si actuaba de esa forma?

-Hombre… Ainhoa… no sé. Yo es que nunca he fumado nada, ¿sabes? Dijo, encogiéndose de hombros- Vamos a ver, podemos pensar en algo. Algo reivindicativo, como un pin o los colores de la ropa, o un símbolo. No sé. ¿Tú fumas, Ainhoa? Hay que tener cuidado, que eso puede afectar a la voz.  En fin, yo sigo leyendo y analizamos.

Vivo por ella que me da fuerza, 
valor y realidad para sentirme un poco vivo...

-Aquí puede estar diciendo que para superar el día a día necesita su dosis, sí- analizaba en base a lo que había dicho su compañera.

Cómo duele cuando falta... 
Vivo por ella en un hotel... 
Cómo brilla fuerte y alta... 
Vivo por ella en propia piel... 
y ella canta en mi garganta mis penas mas negras de espanto...

Al final va a tener razón y todo. –Parece que aquí habla del mono, ¿no? Y de cómo ha acabado sin casa por la droga. La utiliza para olvidar el dolor y sobrevivir.

Vivo por ella y nadie más 
puede vivir dentro de mi, 
ella me da la vida, la vivo... 
si está junto a mí... si está junto a mí

-Ainhoa, colega, pero esta letra es muy fuerte para cantarla en horario infantil- dijo, mirándola con inocencia. Dice que existe solo para consumir y que solo puede vivir si ha fumado algo. No sé, a lo mejor la hicieron para decir que las drogas son malas.

Desde un palco o contra un muro... 
vivo por ella al límite... 
en el trance mas oscuro... 
vivo por ella íntegra... 
cada día una conquista la protagonista es ella también...

-Yo creo que aquí habla que da igual dónde se encuentre porque la necesita siempre a su lado. Al final todo lo que hace lleva el objetivo de conseguir una dosis más. Joder, qué fuerte, yo esto no lo había hecho nunca- dijo rascándose la cabeza mientras la miraba. Estoy aprendiendo un montón contigo. Así seré un gran cantante.

Y Encarna Navarro y Juan Antonio espero que estén en forma, porque van a cantar «Corre», de Jesse & Joy.

Entro al box y sonrío al escuchar la canción asignada. 

—Hola, chica. ¿Lista para empezar el ensayo?

—¿el uruguayo? ¿quién es el uruguayo? — pregunta Ainara confusa —¿Has visto? No tenemos nada, ni micrófonos, ni instrumentos, ni esas ensaladas ricas del primer día. A lo mejor ha sido uno de esos tíos que están haciendo trampa. ¿Tú tienes ideas? Yo no sé ni qué pensar. Mira que pensé que iba a venir aquí a relajarme y cantar y ser talentosa. Y ahora me toca partirme la cabeza y pensar quién o qué o por qué. A mí no me gusta Vicente. Vaya que me parece desagradable, tiene cara de empanado, ¿pero eso no es razón para votarle? ¿o sí? ay... que fuerte, que fuerte todo esto— dice Encarna en su habitual retahíla.

-Tranquila, mira que a lo mejor todo esto es un reto- digo pensando rápidamente en algo -a lo mejor es una prueba más para ver como nos las apañamos. Que cualquiera puede sonar increíble con los arreglos de una consola. Pero a capela...

Tras unos momentos de espera pico el anzuelo.

-¿De verdad tu crees que el Vicente ese tenga algo que ver en el desbarajuste este de las votaciones?

—¿De qué canciones me hablas? — dice confunda —Ay, no sé, no tengo cabeza para las canciones. Pero lo de las votaciones sí que me tiene nerviosa. La verdad sólo se me ha ocurrido Vicente, por empanado, es que no me agrada ni un poquito...— duda— ...pero tampoco parece mucho. No me decido. No sé. ¿Tú a quién le votarías? Yo es que no sé...—

-Cierto. - digo cuando ella señala lo de Vicente -En lo personal, tenía a una persona en mente, pero... -Desvío la mirada un momento hacia el vacío, generando una extraña tensión. -Tienes toda la razón. ¿Quién puede pensar ahora en la canción?

Miro directamente a los ojos de Encarna, me acerco lentamente y me siento junto a ella.

-La verdad, me da igual.- Volteo de nuevo a verla a los ojos -Ya viví esta escena, y con mucha pena te digo que no. Conmigo no.- Mi rostro refleja una extraña tristeza al levantarme hacia mi guitarra y girar de pronto hacia Encarna -Di lo que podía, pero...- mis pasos se encaminan ligeramente hacia la salida -pero a media puerta se quedó mi corazón...

Salgo un momento a tomar aire.

—¿Dónde se te ha quedado tu tazón?— pregunta confundida —Yo es que no puedo con todo el mundo hablándome de cosas que no entiendo. ¿tan difícil es hablar de una cosa a la vez? mira...— y se queda hablando sola porque no se da cuenta en principio que Juan Antonio ha salido. Decide salir detrás de él.

—¿Juan? ¿Estás bien? ¿Quieres que te ayude a buscar tu tazón? Mira que no es el tema, pero con esa carita que pones, me da como lástima. Seguro era importante para ti o algo— dice sintiendo como su corazoncito se sentía mal por su compañero.

Al ver que viene tras de mi, doy la vuelta y río un poco.

-Tranquila, chica no pasa nada, estaba bromeando. Pero a ver, cuéntame tu idea esa sobre los culpables.

La tomo de la mano y regreso con ella. -Anda, vamos de regreso al box, que hay mucho por hacer. Mira que lo que decías no suena tan descabellado.

—¿quién ha fallado? ¿Yo?— pregunta confundida —¿Lo de Vicente dices? Ay mira. Yo si te soy sincera, aunque él sea un empanado, me da más cosa los que se quedan callados y no hablan, ni cantan, ni participan, ¿sabes? Todos nos decimos cosas, y hablamos del tal Jacobo y ellos ahí, se ríen y se hacen los tontos.— se encoge de hombros. —Pensándolo bien, mejor votar por ellos, y luego si mirar quién es tonto y quién nos está jodiendo el concurso. ¿No?—

—¿A ti te suena alguien? Que yo hablo mucho y mira, que suelto nombres y luego si llego a equivocarme, habrá malos rollos y no quiero, ¿vale? porque pues, cargos de consciencia y eso. Pero es tan difícil todo mira... nos toca hacerlo todo a nosotros— se queja.

-Lo entiendo, no te preocupes. Solo que mira, no tengo nada de esto claro y prefiero escucharte. Oie, por cierto- me acerco más hacia ella -has escuchado eso de que los demás se ponen de acuerdo en los Box, para botar en conjunto. No se tú, pero eso como que esta medio...

—¿Bótox? ¿Quién se inyecta Bótox? cuenta, cuenta— dice ella, tan cotilla como puede llegar a ser. —Ay pues mira que a mí me parece que Juan se inyecta Bótox. Es todo tímido allí. Y pues con los que comparto box hemos hablado y demás, pero ya estuve con Chenoa y Agoney y mira que hubo silencio y poco más. La gente viene a lo que viene, ¿me entiendes?. Si se ponen a hacer otra cosa y no sé, se ponen de acuerdo para votar, igual y está sospechoso, ¿no? A mí no me gusta nada eso. Pero es que yo no me entero y no quiero que me saquen, ¿me entiendes? Es que esto es como mi sueño, y me da pánico. Pero vas y dices algo que no le gusta a alguien, y te votan tres y estás fuera. Y pues no.—

Suspiro.

-Chica, tienes toda la razón. Pero mira, ¿te parece si hacemos una promesa tu y yo? Una promesa para no votarnos, que mira que yo tampoco me quiero ir, yo vengo a lo que vengo... y tal vez un pco más , pero ese no es el punto.

Sabes, ese otro Juan no me parece trigo limpio. Mira que no tener abuela...