Partida Rol por web

Si lo que cuentas es cierto... ¿por qué me metieron una sonda por el ano en el 87?

-Hay dos explicaciones posibles- Se ajusta las gafas, antes de dar explicaciones como experta en la materia.

Eso no ocurrió realmente y simplemente se trago el mando de la tele sonámbulo durante una siesta y luego se lo saco del culo medio digerido.

O por la respuesta más evidente… ¿Por qué un niño destruye un hormiguero? ¿Por qué un jefe isulta a su becario? ¿Por qué los EJA invaden todos los países que se le pone en el shosho al presidente? Por el mismo motivo que los aliens le metieron una sonda por el orto… simplemente porque pueden.

-¿Acaso no vieron Evil aliens?- Añade haciendo un guiño al espectador. -Yo en su lugar me compraría una cosechadora, aunque los cerdos se cosechen de forma diferente al maíz, una buena cosechadora es una forma excelente de protegerse– Vuelve a giñar el ojo al espectador.

Lo que hacemos todas las noches Candance, ¡tratar de salvar el mundo!

-Eso esta bien, porque si mis cálculos son correctos las medusas mutantes intentaran hacerse con el control psionico del presidente de los Estados juntitos…¡DiOX SALVE A LOS ESTADOS JUNTITOS DE AMERICA!... Y atacar con nuestro arsenal nucelar a Frusia …¡buuuuu! ¡Frusia caca!... comenzando una guerra que matara a la humanidad y les permitirá hacerse con el mundo y entonc… ¡Oh dios mio!– Grita cuando ve como el sectario riega a su mascota con refresco alienígena. Se lanza hacia el con un salto mientras grita:

“Nooooooooo”

Pero ya es tarde, RIP Pancho ha ingerido el liquido .

-Pero seras hijo de la gran puta de babilonia, suelgtame suelgtame iras al planoj de la lejía, el infiernoj del dios mohoj de la neveraj- (Habla raro porque le estan sujetando la boca).

Empieza a combulsionarse, temblando y echando espuma verde por la boca.

La doctora Cachorra no ha llegado viva a los treinta y cinco, una edad que casi bate records entre los de su clase (“científicos chiflados que manipulan ADN con alegría y bajo presupuesto”) haciendo heroicidades. Cuando la primera gota de PUAJ entra en la boquita de RIP Pancho gira sobre si misma a mitad de un salto y continua corriendo, pero en otra dirección, alejándose del lugar.

-Me despido, asumindo que al no avisar con quince días pierdo el finiquito y otros derechos…- Le grita al dire-guia. Luego, sin dirigirse a nadie en concreto añade: -¡Jhony!¡Jonhy dame la salida!

Entre música de pianola la científica abandona la fabrica de Puaj, el refresco más consumido de la galaxia.

Pancho ya no protesta solo gruñe y engorda. Saltándose las leyes de la física, al hacer tragar 5gr de refresco  a un ratón de 50gr, el peso de pancho se multiplica, en un instante pasa a ser una gran bola de pelo del tamaño de un balón de baloncesto con ojos rojos. Cuando, en unos segundos, crece al tamaño de un bebe humano y pesa más de veinte kilos de puro musculo, colmillos ansiosos de roer carne humana y pelo monstruoso que le da valor de armadura, Jhon debe soltarlo y la criatura que antaño fue pancho se arrastra veloz hasta esconderse entre recovecos y tuberías. Se escuchan gruñidos y cosas caer.

Una música tensa anuncia un inminente ataque contra los protagonistas.

Se aproxima el ataque... la musica se pone aun más tensa... el ataque es inminente...

El telefono movil del Sheriff suena, dando un gran susto. El identificador de llamadas le anuncia que no es otro más que su jefe: El alcalde.

El plano enfoca una bonita casa con jardín.  La buena ciudadana que vive en ella tararea una canción inocente mientras saca de un armario una bolsa de pan de molde. Pone dos rebanadas en la tostadora mientras, de la nevera, saca un hermoso y sabroso queso de cabra de medio kilogramo.  Mientras su atención está en retirar el pan del electrodoméstico, el queso vibra un segundo. Lo mira confundida. -¿Felicity eres tú? ¿Es una señal para tu profeta?- Pero no se trata de una charla inocente con el más allá, el queso sale volando, rompiéndole la ventana de la cocina. La vecina contempla como el queso vuela dirección hacia la fábrica química de bien que no contamina y solo produce plástico ecologico. A su viaje se le unen varios quesitos minibabibel que salen volando del colegio como en el anuncio, un bocata envuelto en papel de plata, un arco de leche líquida que emerge de la vaquería. Cuando la puerta de su nevera se abre de golpe y unos yogures salen volando en la misma dirección se indigna y con cara de limón se cruza la mano sobre la rebeca…

… y llama al sheriff, directamente a su móvil personal. Pero le sale comunicando -¿Qué gordo cabrón, corrupto, traficante de influencias y apropiador indebido le estará llamando ahora?- Gruñe enfadada. Mientras ve como una vaca pasa volando, boca abajo, cerca del tejado del vecino. Aunque, más que volar, parece agarrada por las ubres.

-John, John. Debería matarte, paro ahora lo entiendo. Tú eres la virgen que va a parir al hijo de un dios de verdad, el dios de los quesos que vive y reina en la sección de los lácteos. Resulta que la deidad más poderosa que conoceras nunca vivia en tu bolsillo.

Steph cuando ve al adorable ratoncito del loco convertirse en una versión macabra, hipermusculada y sexualmente inestable de superratón decide probar con la ametralladora otra vez. A estas alturas la escritora había guardado todas sus anteriores creencias y sapiencias sobre leyes físicas, cuánticas matemáticas y su horizonte de lo posible se había ampliado un par de continentes. Si salía de esta con vida sabía que tenía muchas posibilidades de acabarí hiperdependiente de algún psicólogo de pacotilla, enganchada como su tío a los casposos pogramas de TeleFive y quemando todas las horas de su vida restantes espiando a sus vecinos y vecinas desde destrás de las cortinas o de los arbustos del jardín. Pero si no era así y tras esta demencial y amigablemente mortal aventura sobrevivía y era capaz de contar sus vivencias ¡¡se convertiría en una escritora de culto!! Sí, seguramente su novela Terror Tentacular Dos: Confeti viral, sería un nuevo tipo de escritura ¡¡Una segunda parte de un libro de ficción que, al contrario que el primero, estaría basado en hechos reales!! La estudiarían durante siglos, milenios, y cuando el mundo se convirtiera en ceniza solo guardarían una copia de su libro y otra del gran ligro de petete, ¡lo mejor pa cuando vas al retrete!!
Steph pensaba todas estas cosas mientras intentaba apuntar a aquel ser hibridomonstruoso que tenía intención de tener una escena X zoofílica con su loco particular. Si Steph quería conservar aún unas mínimas posibilidades de conservar su entereza mental sabía que no podía dejar que aquello ocurriese...y disparó

John tuvo un momento (breve, muy breve, para qué engañarnos...) de lucidez:

- ¡HACED ALGO! ¡UNA SUCIA RATA QUIERE PROFANARME EL JUJU!

Mientras caminaban por la planta y la doctora Cachorra iba contando cosas para que el espectador medio pudiera encajar las piezas del cubo de rubik que era la apasionante trama, Douglas iba pensando en el brebaje que se envasaba en las latas de aquella fábrica. ¡Qué sed le estaba entrando por momentos! ¡Si solo pudiera tomarse como tentempié uno de esos "PUAJ" con una cazuela XXXXL de huevos rotos con morcilla...! 

El sheriff ya casi babeaba, alzando las manos cual zombie hacia una de esas latas, soñando con beber y comer al mismo tiempo (sí, ambas acciones a la vez) para no perder tiempo en estúpidos protocolos sociales como limpiarse la boca o tragar lo que uno ya tenía en ella, cuando de repente John Alone le dio un sorbito a su ratón.

En una escena interminable de efectos especiales cutres en donde se oían chillidos y gruñidos a la par, y donde los cromas del antes y el después de Pancho se alternaban rápidamente en una burda manipulación hecha con el Windows Movie Maker, el pequeño roedor apareció como un monstruo maligno sediento de sangre... de humanos en planta química.

"Por todos los diablos, si con un sorbo de PUAJ un pequeño animal de 50 gramos se ha transformado en una bestia de 500 kilos de tamaño reducido... ¡Con un sorbo de PUAJ, un respetable policía de 5000000 kilos como yo acabaría con un tipín de 80 kilos y pectorales de acero!", el hambre y la sed le producían al sheriff Morrigan una lógica tan aplastante como desquiciada. 

- Debo... beber... -murmuró alzando de nuevo los brazos hacia las latas de la cadena de producción. Y en ese instante justo sonó su teléfono móvil. El sheriff miró lobotomizado a las latas... y miró preocupado a su teléfono, que sonaba insistentemente... y volvió a dirigirle una mirada vacía a los PUAJ... y volvió a mirar su teléfono, en cuya pantalla decía con letras brillantes ALCALDE.

- ¡¡¡EL ALCALDE!!! -exclamó exaltado Douglas, y descolgó el móvil rápidamente, olvidándose del PUAJ, del ratón, de todo el mundo dando gritos y hasta de su estómago vacío- Dígame, señor alcalde, me encuentro en la planta química que-no-contamina demostrándole a un grupo de escépticos que aquí no hay nada que contamine.

Nunca le habían hablado tan claro a Robert. La doctora Cachorra le había abierto los ojos. Si le habían sondado en el 87 era porque Ellos podían. Había sido un simple entretenimiento. No se trataba de ningún experimento encubierto del gobierno de los Estados Juntitos de América ni nada por el estilo. Los judíos no tenían nada que ver y al parecer tampoco los nazis. El universo de Rob se desintegraba a pasos agigantados a medida que la trama se iba descubriendo.

No le importaba demasiado que aquel ratón se hubiera convertido en un superratón, como tampoco le importaba que pretendiese robar todos los lácteos de Tranquility Town, o quisiera violar a John. Seguramente si Pancho conseguía eso último, John le estaría eternamente agradecido por haber perdido la virginidad por fin.

Ante una tromba de acontecimientos como aquellos Rob solo podía hacer dos cosas. Ponerse a llorar, que hubiera sido lo lógico, o salir corriendo tras la doctora Cachorra. No iba a llorar, un granjero no llora. Así que solo podía tratar de agarrar a esa científica para que le contara más cosas a cerca de Ellos. No quería creer que todo lo que pasaba fuera causado por una multinacional.

Así que eso hizo, salió tras la científica Cachorra en busca de sabiduría.

Observé con especial atención al ratón de John transformarse e un ser macabro capaz de acabar con la humanidad en cuestión de siglos. "Madre mía, ese ratón se va a convertir en el sex symbol de todas las ratitas... ahora, no se como se van a meter ese pedazo de..." antes de que llegará a pensar del todo aquella frase su teléfono móvil le descargó una sacudida eléctrica en la pierna que intento disimular como pudo haciendo como que bailaba.

Ellos le habían recordado su misión, la cual había olvidado por momentos con la escena del ratón. Hubiera estado más gracioso que hubiera sido el propio John el que hubiera bebido, pero bueno, algo es algo. La cosa es que parece ser que estaban regalando el PUAJ porque todo el que lo quería lo estaba cogiendo sin ningún tipo de pudor.

-Yo también voy a coger un poco de ese PUAJ. Tengo varios ratones en casa que quiero convertirlos en amigos como el que acaba de aparecer aquí al lado. Vaya John, eres afortunado por tener una mascota como esta.- dije mientras me dirigía a coger una lata pequeña de PUAJ.

Observo divertida cómo el ratón quiere violar al viejo.

–Si estaba tan salido como para meterse entre Steph y yo mientras nos besábamos, un poco de amor no puede hacerle mal.    

Lejos de intervenir, saco una bolsita de pipas Tijuana (Pipas Tijuana, el auténtico sabor de México, patrocina este post)  y me siento sobre un palé ya embalado de “puaj” dispuesta a disfrutar del espectáculo.

Me la juego todo al verde...

Ante la más que posible situación de que su antiguo amigo Pancho, ahora convertido en una versión roedora de los Village People, le pudiera dar mandanga de la buena, y visto que los demás apoyaban dicha violación zoofílica, John decidió hacer lo único que podía hacer.

En realidad, podía hacer muchas más cosas, pero el trocito de neurona que le quedaba no daba para mucho más, así que se lanzó hacia el palé de PUAJ sobre el que estaba sentada Candance y con sus uñas afiladas y mugrientas desgarró el plástico protector. Cogió una lata con una mano y la abrió, mientras con la otra mano sobó descaradamente el culo de la rubia.

Encomendándose a sus dioses, que todavía le quedaban algunos, se tragó el contenido de la lata, esperando poder transformarse en algo parecido a Gamera para poder luchar con el Ex-Pancho.

Stephany apretó el gatillo con expresión de apretar un gatillo, dos segundos y medio después sonó un disparo que sonaba misteriosamente parecido a todos los disparos de la peli, independientemente del arma que se dispara o la acústica del lugar. ExPancho soltó un gruñido lastimero y miro a la asiática con cara de odio. En ese momento la chica recibió en la cabeza el impacto de un queso de cabra de medio kilogramo quedando atontada unos segundos. Las ventanas se rompían mientras más y más productos lacteos entraban en la fábrica.

Totalmente despreocupada por el hecho de que una armadura de leche y yogurt se estaba formando alrededor del cuerpo de ExPancho, envolviéndolo por completo a excepción de una ranura para los ojos, Txiki atrapo al vuelo el queso que había golpeado a la escritora y evito que siguiera volando. –Qué pena que no tengamos pan- dijo, mintiendo descaradamente mientras daba el primer bocado. No cabía en sí de gozo y comenzó a cantar la que sería la canción estrella de la BSO del film: “it,s raining Cheese. Aleluya!” Una creación totalmente original, como Ricky mouse o el pato Monald.

ESTAN LLOVIENDO QUESOS

La humedad está aumentando.
El barómetro está bajando.
De acuerdo con todas las fuentes
La calle es el lugar adonde ir.

Porque esta noche, por primera vez,
A eso de las diez y media,
Por primera vez en la historia
Van a empezar a llover quesos.

Están lloviendo quesos, Aleluya.
Están lloviendo lacteos, Amén.
Están lloviendo quesos, Aleluya.
Están lloviendo lacteos, Amén.

La humedad está aumentando...

Porque esta noche, por primera vez,...

Están lloviendo quesos, Aleluya.
Están lloviendo lacteos, Amén.
Voy a salir.
Me voy a quedar
Hasta estar totalmente saciada.

Están lloviendo quesos, Aleluya.
Están lloviendo lacteos, Amén.
Todos los ejemplares,
frescos, curados, semicurados y promedios,
de cabra y de vaca y gruyeres y goudas.

Dios bendiga a la Madre Naturaleza,
Ella también es tragona.
Se encargó del cielo
E hizo lo que tenía que hacer.
Le enseño a cada ángel
A cuajar en el cielo
Para que todas y cada una de las mujeres
Puedan encontrar a su lacteo ideal.

Están lloviendo quesos.
Ve y zampalos, chica.
Yo sé que quieres hacerlo.

Siento un clima lacteo acercándose,
Está por comenzar,
Escucho el gratinar.
No pierdas la cabeza,
Arranca el techo y quédate en el comedor.

Están lloviendo quesos, Aleluya...

John trago el liquido. Por activa y por pasiva les habían avisado que no era bueno para las formas de vida de este planeta. El director pensó como hacer un “director ex machine” para salvarlo. Pero el productor judío se opuso por motivos económicos, a menos protagonistas menos coste de personal. Además la muerte de uno de los protagonistas siempre viste mucho. -Haga un montaje lacrimógeno y continúe adelante.-

Y así ocurrió:

John termino de paladear el refresco cuando soltó un sonoro eructo. El espectador adicto al cine escombro sabia que se acercaba uno de esos momentos lamentables que tantas carcajadas provocaban entre el público de este género. El espectador serio tuvo que seguir mirando el film, amenazado por el gordo en arnés y mascara de cuero.

Una musiquita nostálgica (“it,s raining Cheese. Aleluya!”, pero a piano y violín) nos lleva al flasback.

John termino de paladear el refresco cuando soltó un sonoro eructo.

(Flashback)Jhon abre la puerta de su casa y se encuentra en el felpudo una minicesta con un ratoncito (/Flashback)

John tiembla y grita de dolor

(Flashback) Jhon en su cama de mantas y cartones escucha, chupándose el pulgar, el cuento que pancho sentado en un dedal le lee. (/Flashback)

Una línea de sangre aparece en el medio exacto de John

(Flashback)Pancho y John montan un pequeño altar en la repisa del famoso frigorífico que no funciona (/Flashback)

Las dos mitades de John empiezan a separarse saltando a la pata coja, los órganos siguen latiendo y palpitando.

(Flashback)John y Pancho reparten panfletos de “el fin se acerca” en el centro comercial. La gente se aparta de ellos pero les da igual son felices y se meten en la fuente a jugar, cuya agua se tiñe inmediatamente de negro (/Flashback)

La cámara enfoca como el ojo de Jhon se divide en dos más pequeños, la nariz se mueve, regenerando el trozo que le falta.

(Flashback) Jhon da un discurso en el rincón del debate del parque, nadie le escucha y empieza a llover. Pero Pancho aplaude la intervención. Ambos bailan en círculos bajo la lluvia. (/Flashback)

Hay dos pequeños John (nunca más Alone) donde antes había uno. Sorprendidos, se miran entre sí. Pero uno eructa y el otro le imita. Una línea roja de sangre aparece en la mitad de cada uno.

(Flashback)John, joven y en uniforme, sale a la pizarra y escribe con la tiza, la profesora niega con la cabeza (/Flashback)

Hay cuatro minijhons, cada uno de ellos ocupa una cuarta parte del tamaño del original

(Flashback) El ultimo flashback está hecho con trozos de esta película: Jhon metiéndose en medio de un beso lésbico sin invitación, John enfrentándose a Felicity, Jhon metiéndose en medio de un beso lésbico sin invitación, Jhon paseando por esta fábrica, Jhon metiéndose en medio de un beso lésbico sin invitación, Jhon corriendo delante del árbol loco mutante, Jhon metiéndose en medio de un beso lésbico sin invitación, Jhon metiéndose en medio de un beso lésbico sin invitación. (/Flashback)

Un nano jhon, montado sobre una hormiga, envalentona a su ejército de nanojhons y comienza una carga. Las fuerzas de la sagrada fe del moho bendito embisten al ejército del moho ortodoxo. Es una batalla cruenta, aunque cada golpe no mata a los nanojhons, sino que los divide en dos cento-jhons

Excelente, excelente, demuéstreles con toda la contundencia y violencia necesaria a esos escépticos que nuestra planta química no contamina… ¡Mi muy querido amigo! Tengo grandes noticias. El mismísimo… está usted sentado? El mismísimo presidente negro, presidente de los EJA, va a visitar nuestro encantador y tranquilo pueblecito esta tarde, para visitar nuestro encantador rastrillo de trastero. Le he garantizado su seguridad, así que ya sabe esta tarde tiene que ser todo perfecto y seguro. El mismísimo jefe del estado en nuestro pueblecito. Eso es propaganda, dinero y prosperidad. La comitiva llega en media hora. La reconocerá por la limusina con la bandera de los UJA escoltada por cuatro motos.

En la escena de al lado...

El granjero fue el mejor parado en esta situación, pues salió por la puerta de emergencia que había usado la doctora y la vio fumando un cigarrillo, ya más tranquila de estar fuera de escena de acción. Al ver salir a Robert le ofreció un piti. -A poco me involucran en una escena de acción.

- ¡Oh, no…! – Dijo Robert con cara de asombro y decepción. - …no fumo. Y usted tampoco debiera jovencita.

Robert no soportaba el olor de ese vicio tan extendido entre la población. No podía entender que estimulo veía la gente en algo tan asqueroso a su juicio. Desde luego aquello le quitaba todo el morbo a esa joven científica. Aunque recordó una frase que su madre le dijo de joven. - Aprovecha Rob, su fuma chupa… - Pero no le convencía ese olor a cenicero.

Robert aprovechó que se encontraba fuera de cámaras para rascarse el culo y expulsar ventosidades por el mismo. Desde el 87 le pasaba muy a menudo tener los intestinos muy cargados y él tenía un dicho. – Mejor fuera que dentro. – De eso no había duda. Por otra parte pensó en John, una lástima que su contrato se hubiera acabado. Pero le había ayudado a él mismo, pues su idea principal antes de que la doctora Cachorra saliera corriendo del plató había sido la misma que la de John. Ese Puaj tenía muy buena pinta y si tanta gente lo consumía debía ser por algo.