Molly se siente feliz por haber logrado que el muchacho viaje con ellos, y así se lo hace saber a Lady Cottonwell en cuanto puede, con una alegre mirada cargada de agradecimiento y un leve apretón en su mano, mientras se retiran a ver los que serán sus nuevos aposentos. Mentalmente se promete a sí misma velar por la seguridad del muchacho en la madida de sus posibilidades.
Herbert se había mantenido en un segundo plano de la discusión hasta ahora.
- Espero que eso de la mala suerte y demás no sea cierto - dijo en tono burlón - Yo no creo en esas cosas pero.. - luego miró hacía los que habían conseguido que ese chico subiera al barco, si pasaba algo sería culpa suya.
Luego se giró hacía los demás. - En fin, ¿Cuánto decíais que duraba este trayecto por el río? - dijo para cambiar de tema y aligerar un poco las tensiones.
el viaje en barco suele durar unas dos semanas, a veces tres, aunque el capitán os ha asegurado que el Niger puede hacer el trayecto en 12 dias
esto lo sabéis vosotros, el capitán no esta presente ahora mismo asi que sois libres de responder a Herbert como querais, o no responder y ya lo aclarara luego el capitan
- Se le metió el pantalón en el culo, que le hagan a él un Inglaterra... aunque es el que paga. Jim está muy pero muy molesto por la intromisión del Lord. Para William es evidente en la curva de su boca, los ojos, la postura general de su nervudo compañero. Para el resto... bueno, no lo conocen. Aún.
- Busquémosle un lugar apartado. Si lo tiran por la borda vamos a oir a las mujeres por varios días. Si pudiera lo encerraría en algún lugar apartado y lo alimentaría por una rejilla. El tono es duro. La mirada aún más. Luego se aparta para contestar en voz alta la pregunta del inglés.
Tras intercambiar unas palabras en voz baja con Bill, Jim se toma los tirantes mientras supervisa la carga y saluda a Costigan con la cabeza. Una tres semanas, señor. Esperamos que el buen Niger lo haga más rápido aún, sin embargo... solo lo mejor para Lord Cottonwell y sus acompañantes.
Llama a Tembaqui a su lado luego.
- Amigo, el muchacho es un problema. Intentamos dejarlo, pero ya has visto la terquedad de algunos blancos. No nosotros, dice señalando a Bill y a él, nosotros entendemos. Pero ellos no. Y ellos pagan.
Espera un segundo a que las palabras sean entendidas completamente por el guía y, en definitiva, quien tiene el control de los porteadores. Busquémusle un rincón. Que nadie siquiera le hable; si llega sano y salvo a su destino va a valer la pena para tí, Tembaqui. Entiendes?
Tembaqui asiente a tus palabras aunque se le ve algo preocupado
-entiendo amigo, diré a los hombres que lo dejen, pero hay señales extrañas para este viaje, los hombres están nerviosos y ahora esto. Espero que no pase nada mas-
Cuando algún porteador levanta la voz a vuestras espaldas se va gritándole en su idioma para continuar con la carga del barco
El enorme hombretón resopló. Luego se encogió de hombros.
- A cruzar los dedos... Mal empezamos pero no te preocupes, seguro que empeora.- le dijo William a su compañero antes de bajar para comprobar que no se destrozaba nada en las labores de carga del barco.
Las tareas de carga prosiguen hasta media tarde, entonces, una vez estáis todos a bordo el Niger empieza a navegar por el rio de igual nombre, dejando atrás la ciudad de Port Harcourt
Una fina lluvia empieza a caer cuando dejáis atrás las últimas casuchas siendo rodeados en su lugar por la selva impenetrable.
Aun quedan muchos días de navegación antes de llegar a Mukardi, que es donde empezara la cacería realmente, sin embargo rodeados por los sonidos de la selva empezáis a notar como Africa os recibe*
*evidentemente los guías y Costigan no notan eso
Dejo abierta esta escena por si alguien quiere hacer roleo libre para conocerse, pasarán 7 días hasta el comienzo del Capitulo II
Llegué al puerto con bastante mal humor, el comandante habia ignorado mis peticiones por lo que decidí enviarle la solicitud que le habia hecho a Lord Luggard directamente con el objetivo de que el comandante se llevara un buen disgusto. Ademas de darme solo 5 soldados uno de ellos no era mas que un salvaje con un rifle. El resto no eran malos chicos pero estaban verdes. Lord Cottonwell y sus acompañantes se alojaban por separado asi que hice montar a los soldados en la barcaza y me acomodé en la cubierta sin apenas cruzar palabra con nadie salvo para gritar a los porteadores.