Partida Rol por web

Los demás se han ido, el tiempo parece una masa gris e indefinida, las nubes ocultan el sol y bajo la monótona lluvia solo percibes que el día acaba cuando la grisacea luz empieza a menguar.

Nada ni nadie te ha molestado en todo el día

La rutina gris y sin forma de tus pensamientos es interumpida por un rayo que vuelve a caer muy cerca, de hecho te parece que ha caido en el mismo lugar o casi que aquel rayo que convencío a los Fang para marcharse

Arrebujado en los restos raidos de la manta, protegiendo al rifle de la humedad con su propio a afiebrado cuerpo, Jim se aprieta contra el árbol. Sus ojos se estrechan, sabe que si algo, lo que sea, viene hacia él, solo tiene una oportunidad, un disparo, si acaso él es quien primero lo advierte. Y en su cabeza comienza a pensar en todos los animales que pueden percibir a un hombre sin que este se de cuenta... tiene a la lluvia a su favor, claro: nadie puede rastrear por el olfato en un aguacero.*

Las horas transcurren indistinguibles con la monotonía gris de la lluvia. El horizonte parece confundirse con el cielo y conforme pasa el tiempo te da la impresión de que nadie va a venir por aquí, que el cazador se ha olvidado de ti.

Entonces lo ves. Una figura humana que corre sola en tu dirección. ¿es pequeño para ser el cazador?¿o te engañan tus ojos cansados?

Con cuidado, Jim llevó el rifle al hombro, concentrándose en la figura, su movimiento, la cadencia de su trote... la figura. Era muy pequeña! Y si era un niño? No podría matar a un niño!

La figura sigue corriendo en tu dirección, no es tan pequeño como te pareció al principio, aunque no te parece tan grande como Chango, ¿será un hombre o te engaña la vista?

Si no es un niño...

Jim se lleva el rifle al hombro. No es ajeno a matar, o morir... y la duda puede ser peor que la certeza.

La figura se acerca a ti aunque no parece ir exactamente en tu dirección. Poco a poco distingues a un hombre, blanco, aunque sus ropas están tan desgarradas y sucias que al principio dudas.

Debe estar a unos 15 metros de ti cuando te da la impresión de que lo conoces, hay algo en el familiar, sin embargo antes de que puedas descubrir su identidad el hombre mira en tu dirección y debe ver el cañón del rifle apuntandole ya que suelta un chillido de sorpresa y se tira al suelo desapareciendo de tu vista

Con el arma lista, entre la nube de dolor Jim aprieta el gatillo cuando la figura se pierde de vista.

No puede ver si le ha dado o no, puesto que cae, aunque posiblemente solo haya hecho cuerpo a tierra. Jim sin embargo murmura una maldición, mientras mantiene los afiebrados ojos donde debería estar, y apunta. Cualquier movimiento recibirá plomo.

- Si no me gusta tu cara voy a dejarla de adorno en la savanna, masculla entre dientes en inglés.

Tras tu disparo pasa un tenso momento de silencio, luego una voz se eleva desde el punto donde desaparecio el hombre.

No entiendes lo que dice al principio, habla en otro idioma y te cuesta entender que es frances. Al fin sigue hablando en ingles

-no disparen, estoy herido por amor de dios-

Finalmente reconoces a quien tienes delante oculto, ni mas ni menos que el oficial de la legión que os saqueo

La cara que se asoma es la del francés... el puto francés que se llevó lo que tenían. La herida caliente, la fiebre, le recuerda que ellos se llevaron las medicinas, la comida... y las mujeres aún caminando en esta lluvia buscando su seguridad...

A través de los labios pastosos, Jim consigue articular la respuesta. Arroja las armas que tengas hacia aquí, y sal con las manos en alto o pierdes la cabeza en cuanto se me acabe la paciencia, francés.

El caño de su escopeta no desciende en ningún momento. Y ante cualquier movimiento brusco o que le genere desconfianza, disparará... Jim sabe que lo mataría en un parpadeo. Aún no se ha decidido si lo hará de todas formas, pero antes quisiera conocer su historia.

Tras un momento de tenso silencio el frances se levanta sin arrojar ningun arma pero con los brazos en alto. Su rostro está demacrado por el agotamiento y su uniforme esta desgarrado y cubierto de manchas de barro, ¿y tal vez sangre?

-no tengo armas, pero tenemos que huir- su voz también denota un agotamiento extremo

Jim se recostó en el árbol, el rifle apuntando al hombre. Por qué? Estoy muy cómodo aquí, usted no? Acaso tiene miedo de algo, valeroso legionario? 

Para qué quitar el filo del sarcasmo de su voz? Para qué tanto trabajo?

El hombre te mira sin comprender por un momento, ves en sus ojos que no esta del todo bien de la cabeza

-la selva.. la selva me persigue, ya mato al capitán y a todos los hombres, y también a los ingleses. Tenemos que huir o nos alcanzará-

- Tranquilo que no te entiendo. Mató a los ingleses? Qué ingleses? 

El hombre gesticula al aire y te da la espalda como si por un momento hubiera visto algo, pero luego se gira de nuevo hacia ti

-los ingleses, y el doctor frances, no entendieron que teníamos que huir. Nos ataco en el campamento y ellos fueron a por eso. Escuche los disparos y los gritos y me fui corriendo-

Mira hacia los lados y camina hacia ti, se retuerce las manos y parece totalmente ajeno a tu escopeta

- Cobarde, solo eres valiente contra mujeres o cuando tienes un ejército detrás? farfulla Jim mientras descarga un disparo a quemarropa sobre el francés. Hijo de puta! Los abandonaste, verdad? Los dejaste como perros! Deberías haber muerto allí! Ahora voy a corregirlo.

Alain cae de espaldas cuando le disparas, girando a causa del impacto mientras se derrumba al suelo ahullante y evidentemente vivo, ya que se pone a maldecir en frances, sollozante

Llega un nuevo amanecer, el cuerpo del oficial de la legión yace muerto, en su mano un machete ensangrentado indica que no se fue sin luchar. Pero de Jim no hay ni rastro.

Cuando los soldados de la Royal Niger Co. encontraron este sitio solo pudieron conjeturar que el guía debía haberse ido, o alguien se lo llevó. Pero nunca mas volvió a vérsele por las tierras de los blancos