Partida Rol por web

-Vamos, ¿Laura? -Dijo tomándola de la mano. -¿Cómo lo llevas?

El color de los ojos de Laura había vuelto a ser naranja, y se le notaba intranquila. Aceptó la mano de Theo mientras miraba hacia donde había señalado

- No lo se. Este sitio me da escalofríos. El Seto en general es un sitio extraño y peligroso, pero esto es totalmente... antinatural.

Avanzais por la salida, siguiendo otro enrevesado y estrecho pasillo, siempre rodeado de ese muro de espinas que amenazaba con tragaros por segunda vez, hasta que para vuestro alivio, os encontrais otro hueco grande similar al anterior, con mas estatuas e infectados.

Este sin embargo, aun hay estatuas en pie, aunque dañadas y erosionadas. Dos de las mas cercanas os llaman la atencion, haciendo recordar un sueño que tuvisteis hace poco.

La estatua de un joven satiro de rizos descontrolados, lengua fuera y ojos salidos y lujuriosos, arrancando y manoseando a una pobre ninfa aterrada, mirando con panico a la exagerada y caricaturesca ereccion del satiro.

Hay una placa de metal, con letras tachadas y otras escritas con lo que parecian garras.

Cita:

En frente suya, hay otra estatua, un espantapajaros sujeto por un palos en forma de cruz rodeado de cuervos, solo que habian modificado la cruz para que los brazos girasen en un angulo que le permitiese sujetar una segadora, y los cuervos estaban arrancando trozos de su cuerpo, para revelar bajo la paja una calavera y huesos que os miraban amenazantes, similar al temido Grim Reaper.

Cita:

Reconoces a Jack, como no reconocerlo, le veias cada vez que entrabas esa capilla, mirandote y juzgandote, pero este Jack no era el verdadero, solo una burda burla de su figura. Alguien hizo esta estatua, alguien que odiaba con intensidad a este.

Mientras que el otro, el satiro, te suena que Mangas Largas te ha hablado de el, pero no recuerdas nada sobre lo de ser un acosador o aparentar ser tan monstruoso. Lo que es mas, dirias incluso que Mangas lo describio como un niño, el avatar de la inocencia y la promesa de crecer y cambiar por siempre.

La corte del Amanacer no lo adora abiertamente como el Crepusculo hace con Jack de Los Cuervos, pero dirias que es su equivalente. Incluso has visto algunos del Amanecer llevar su simbolo sobre ellos, una flauta de Pan, la cual dicen que fue otorgada por el mismo Apolo al Primogenito y que cuando la toca, puede obligar salir el sol por el horizonte, incluso en los reinos mas tenebrosos y oscuros de las Hadas dentro de Arcadia. Ademas dicen que si contemplas un amanecer y oyes la melodia de este viajando en la brisa del viento, un cambio importante ocurrira en tu vida, empezando algo nuevo.

No sabes si todo esto es verdad, ya se sabe que el amanecer suele fardar y prometer mas cosas de las que quisieran demostrar o cumplir.

Theo no pudo evitar pasar de sentirse horrorizado a apesadumbrado a medida que examinaba con más detalle ambas figuras y algunos recuerdos de aquel extraño sueño emergían en su consciencia.
Apretó con más fuerza la mano de Laura y lanzo un vistazo nervioso a su otro compañero antes de murmurar con voz queda:

-¿Hay algo que podamos por ellos? ¿Han dejado de existir completamente...?

No estas seguro, pero has oido rumores sobre los dos mitos, pero muy pocos y leves.

El Primogenito es una figura que se le da al rumoreado hijo de Madre Susan, la fundadora de la corte de Primavera, el hijo que fue dado a la Primavera por el derecho a poder dar luz. Es una figura de esperanza y cambio, y se rumorea que tienes los poderes de un Hada pero la conciencia y mentalidad de un Perdido, sin llegar a ser del todo ninguno de ellos.

Jack de Los Cuervos, es la historia sobre un Perdido, que se sacrifico ante su Hada para liberar y salvar a otros Perdidos de un funesto destino, ganando en el proceso ascension a una existencia mas alla de la mortal. Se le considera un simbolo de sacrificio, mortalidad y cambio, pues todo lo que termina, empieza de nuevo.

Ambas son figuras bastante envueltas en misterio en el mundo de los Perdidos, solo habiendo unos pocos que conozcan o adoren tales seres, a diferencia de los fundadores de las Cortes Estacionales. Es raro ver a alguien que siquiera se haya molestado en esculpir tales estatuas.

- Lo ignoro. - respondo a Theo.

Todo eso no se me da bien así que ... es poco probable que saque nada en claro salvo el hecho de que nuevos recuerdos de eventos acaedidos recientemente invaden mi mente.

Desde luego, el que ha hecho estas estatuas no tiene en mucha estima a los nuestros, por lo menos a tenor de los comentarios escritos en las mismas.

Laura contempló las estatuas, con una mezcla de extrañeza y asco. Quien quiera que las haya hecho, estaba claro que no sentía mucho cariño por las figuras que representaban. Todo aquello le parecía la obra de un demente, y empezaba a sentirse verdaderamente asustada.

Si, asi es.