Partida Rol por web

Tranquilo en tu mansión, bueno, en la de tus padres, estás leyendo uno de los libros de transformaciones que tanto te gustan. Tu mascota aún continúa siendo una tortuga, pero crees que si te aplicas lo bastante, podrás convertirla nuevamente en la serpiente tan mona que era antes. ( Era tan mona xD )

Practicas con una de las ratas que tiene su padre en su laboratorio, en el sótano de la mansión. Estás moviendo la varita con presteza, te dispones a realizar un hechizo. Tu padre se ha encargado de que tu cuarto esté protegido para que puedas hacer magia con tranquilidad, aunque tu no sabes como lo ha hecho, seguramente ha sido utilizando magia oscura. De las más oscuras que él pueda conocer.

Mueves la varita... pronuncias unas palabras y...

Valdruk se concentro en la rata, en la rata y en la varita, en la varita y en las palabras, en las palabras y en como su padre habia sido capaz de proteger su cuarto contra magia...Y antes de que pudiese darse cuenta estaba pensando en demasiadas cosas para que el hechizo surjiese con efecto.

Observo a la rata y se alegro de haver decidido pobrarlo con el roedor antes de con la buena de Savra, sabia que tenia que concentrarse para que los hechizos le surjiesen bien pero a veces le costaba tanto...

Ups..Seguro que a la proxima me saldra mucho mejor...Seguro.

El roedor estalla en mil pedazos cuando la transformación sale completamente mal. Ahora te tocará recoger y limpiar todo el estropicio, ya que no deseas que un elfo lo haga y después le comente lo sucedido a tu padre... ¿o sí?

Valdruk comenzo a limpiar todo a "la antigua usanza" podria hacerlo mucho mas rapido con magia o avisando al elfo, pero sabe que asi su padre se acabaria entendiendo.

En realidad no le asustaba que sus padres le castigaran o le gritaran, a decir verdad podia contar las pocas veces que sus padres habian hecho algo asi y siempre lo habian hecho con alguna buena razon. Pero normalmente no le solian controlar demasiado (Lo que no queria decir que estuviese desatendido) solo le aconsejaban y le decian que de la prueba y el erro se conseguian los resultados.

Lo que de verdad le daba miedo era lo competitivo que era su padre, y no queria que llegase y le preguntase con su sarcasmo como le habia marchado el conjuro. Aunque sabia que despues de esas charlas normalmente llegaba un buen consejo, simplemente hoy no tenia ganas. Asi que continuo limpiando lo mas rapido que pudo.

Rapidamente limpias todo lo que has dejado perdido de rata y continúas leyendo el libro de transformaciones. En ese momento, unos golpes en tu puerta te sacan de tu concentración. Miras tu reloj y te das cuenta que casi es hora de comer, y que esos golpecitos no pueden ser más que los del elfo doméstico de la familia que viene a avisarte que la cena está srevida.

Que rapido que se pasa el tiempo, en fin, veamos que rico plato tenemos hoy.

-Enseguida voy, como mucho 5 minutos -Dice con un tono de voz un poco alto con tal de que su voz sobrepase la puerta y el elfo pueda oirla.

Y una vez dicho termina de leerse el parrafo del libro y dobla ligeramente la punta de la pagina para bajar al comedor.

Cuando bajas, la mesa está servida. Los elfos domésticos ya han dejado el primer plato sobre la mesa y ahora están sirviéndole un vaso de vino a tu padre.

Te sientas en la mesa, justo a la izquierda de tu padre. Frente a ti tienes a tu madre que te mira sonriente. Tu padre, en cambio, tiene la misma cara de serio de siempre, sin embargo sus ojos brillan con una cierta satisfacción cuando te observa sentarte a su lado.

- ¿Has ordenado ya tu cuarto, Valdruk...? -, te pregunta tu padre mientras esboza una extraña media sonrisa.

Tu madre parece reir ante el comentario de tu padre.

Valdruk no puede evitar poner cara de fastidio al escuchar el comentario de su padre, aunque trata de disimularla lo mejor que puede.

Mierda..¿Como demonios se habra enterado? Asi no ahi manera.

-Si papa..Esta todo en orden.. -Pero pronto su expresion cambia a una sonrisa picara- ¿Y tu arreglaste el jardin como te pidio mama hace dos dias?

Apunto consciente de que su padre siempre solia retrasar las tareas domesticas que el mismo tenia que hacer lo maximo posible.

- Es verdad... gracias por hacerme acordar, Valdruk... -, dice tu madre mientras bebe un sorbo de vino. - Pero tu padre está muy ocupado últimamente, así que te pido por favor que si puedes, lo hagas tu después de la comida. Te recompensaré bien. -, continúa tu madre guiñándote un ojo.

El muchacho sonrie con satisfaccion.

Bueno, al menos he conseguido un "empate" con papa.

-Claro mama, yo me ocupare, seguro que no me lleva demasiado tiempo y hasta que empieze el colegio tengo bastante tiempo libre.

Y dicho esto, comienza a comer de su plato.

-¿Por cierto donde esta mi querido hermano? ¿No nos acompañara hoy en la comida?

- Tu hermano está haciendo un trabajito para mí, Valdruk, del cual no te conviene saber nada hasta que termine. -, te dice ahora un poco más serio. - Con respecto al jardín, le diré al elfo doméstico que te ayude. -

-¡Oh lala! Cuanto misterio -Dice para restar seriedad a la seriedad de su padre- pues mejor, Mijail siempre acapara los filetes mas grandes. Si quieres puedes avisar al elfo pero que sepas que no me hace falta ayuda para limpiar el jardin.

Y continua comiendo con tranquilidad.

Tras terminar de comer, tu madre se levanta y te da un beso en la frente. Tu padre, en cambio, te mete un "suave" trompazo en uno de tus hombros que te hacen moverte como un flan en la silla.

- Recuerda el jardín... espero que puedas sin la ayuda del elfo... -, te dice tu padre sonriente.

El muchacho sonrie al sentir el calido beso de su madre, pero pronto se estremece por la "muestra de cariño" de su progenitor.

-¡Ains papa! ¿Cuando aprenderas que ya es hora de que dejes paso a las nuevas generaciones? Alli donde tu fracasaste (En el jardin) yo triufare.

Dice Valdruk levantando su varita triunfante para culminar su mini-discurso.

¡En marcha!

Tan pronto como termina su plato se levanta y sale al jardin a ver el trabajo que le toca realizar.

Sales al jardín, sin la compañía de tu elfo doméstico y ves que las matas están creciendo un poco desparejas. Vas hasta el lugar donde tu padre guarda la máquina muggle de cortar el cesped pero en ese momento, por el rabillo del ojo ves pasar varias criaturitas corriendo por entre las matas.

¿Que demonios son esas cosas?

Recuerdas haber leído algo en los libros... son Gnomos del Jardín... pero... pero... ¿Cómo se destruían?

Valdruk observa a las pequeñas criaturas, gnomos de jardin...Si algo asi...Les apunta con la varita pensando cual seria el mejor metodo para sacarlos de alli pero lo unico que viene a su mente es la risa de su padre cuando se entere que no a podido con el dichoso jardin.

Mierda, ¿No se da cuenta de que eso de reirse de mi es totalmente contraproducente a la larga? Bueno, ya la he fastidiado asi que papa ya se reira de mi pero al menos...

El muchacho se lleva los dedos a la boca lanzando un fuerte silbido señal para que su elfo domestico venga a ayudarle.

Se reira de mi, me ayude o no, asi que por lo menos cumplire con la faena y mama me dara esa recompensa que me prometio jeje.

Sientes como de repente, te asalta un gran dolor de cabeza y te das cuenta que lo mejor será que te sientes un poco y descances... Que mala pata... tenías la respuesta en la punta de la lengua, pero no te sale...

Te tumbas en uno de los bancos del jardín mientras llamas al elfo doméstico con un silbido... uno demasiado débil como para que te escuche. En realidad, crees que deberías descansar. Estás haciendo un esfuerzo mental muy grande con tus estudios de transformaciones...

Que dolor de cabeza...Lo mejor sera que me despeje un poco antes de continuar, en este banco estare bien, mama siempre dice que una mente descansada es la clave del exito..Y aunque esto sea un jardin...Pues tambien ahi que lograr un exito ¿no?

El joven decide cerrar los ojos unos instantes....Quizas asi recobre energias y no necesite ni al elfo....