Partida Rol por web

El mal parecia haberse tomado unas vacaciones. Tras el accidente en la central nuclear de Sta.María Garoña (Burgos) en la que adquiristes tus nuevos poderes habías hecho mucho bien, pero de repente todo dejo la gran escala y paso a ser pequeños hurtos por parte de gente acuciada por la crisis. 

Esta falta de trabajo metahumano te daba el tiempo para tener una vida más allá de luchar por el bien, aunque echas de menos la acción.

Después de haber almorzado en un Burguer King, estaba dando vueltas por un centro comercial, viendo ropa, objetos de decoración y cosas así. Mientras seguía aprovechando el día de descanso, Eterna se puso a buscar una tienda de armas y artes marciales que, según había visto en google, estaba en aquel centro comercial. Debe estar por aquí cerca, pero esto es tan grande... - Pensaba interiormente.

La tienda de armas, no es otra que una tienda de pesca y caza. Por la poca luz crees que o está cerrada o no hay nadie dentro. 

Acercándome a la tienda disimuladamente, reviso si hay algún cartel en la puerta que me indique si está cerrada o abierta. De paso, pruebo a abrir la puerta para comprobarlo finalmente.

Veamos si está abierta o no... - Piensa Eterna, interiormente.

La tienda está abierta, pero totalmente desierta. No ves nadie para atender, pero si te fijas un poco si que ves cámaras de vigilancia por cada pasillo.

Miro a un lado y a otro por si logro percatarme de la presencia de alguien. Me dirijo a lo que sería el mostrador, si lo hay, e intento buscar a alguien.

- ¡Hola! ¡¿Hay alguien que pueda atenderme!?

Unos pasos de detrás del mostrador te llaman la atención, parece un anciano por como anda arrastrando los pies por el suelo.

- Buenas noches señorita, ¿desea algo? - te inquiere con la tipica voz rota de un anciano

- Buenas noches señor. Responde Eterna, sin tener muy claro como solicitarle algún tipo de arma al señor tras el mostrador que se había presentado a atenderla. Veamos si puedo improvisar algo.... En ese momento, mientras echo un vistazo a la tienda, veo utensilios y herramientas de "pesca".

- Estoy buscando un tridente para la pesca submarina. El mío se me ha quedado algo obsoleto y buscaba algo más "profesional". 

- Pesca submarina... si... - empieza a andar lentamente y arrastrando los pies - tengo algo... aunque ya le bien aseguro que no es un ultimo modelo... - te acompaña hasta un aparador donde hay armas y herramientas para la pesca submarina -

- Dígame que precio tienen los tridentes. Los de mejor calidad que tenga. Por otro lado, también me gustaría ver algunos artículos más relacionados con la caza, además de la pesca.
 

Esperé paciéntemente a que me mostrase lo mejor que tenía en la tienda.

El anciano te saca un tridente de uno de los mostradores, está nuevecito, aunque dirías que no es el ultimo modelo del mercado te seria útil.

- El precio son 56€, ¿lo quiere para regalo? - dice mientras anda hacia otra zona de la tienda

Miro el tridente brevemente antes de asentir con la cabeza.

- Esta bien, póngamelo con su funda y bien envuelto para regalo. Gracias. Ahora, podríamos echar un vistazo a los artículos de caza. Ando buscando un cuchillo de supervivencia y quizás algún tipo de arma a distancia, pero que no sea de fuego. Algo como un arco o una ballesta pequeña, ya sabe...

El anciano asiente mientras sigue andando.

- Tenemos unas ballestas de una mano de disparo rapido que podrian ser lo que busca... y de cuchillos... ¿de que tamaño de hoja?

- Cogeremos una de esas ballestas, además de su funda y un juego bastante amplio de flechas con su carcaj para usarlas. Y sobre la hoja de los cuchillos....digamos....sobre 15 centímetros más o menos.

El anciano empieza a sacarte cuchillos del escaparate, doble filo, filo normal y de sierra, un solo filo... te los deja sobre el mostrador para que los veas mientras se dedica a desmontar una de las ballestas y guardarla en su funda, haciendo un paquetito con un carcaj y varias virotes para esta.

- Usted verá lo que prefiere... 

Mientras señalo al cuchillo con filo normal por un lado y de sierra por el otro, me dirijo con unas palabras al tendero de la tienda.

- Ese es el que quiero. También con su funda por favor. Ahora, hágame la cuenta de todo si es tan amable.

El anciano asiente, saca la funda del machete y lo pone en la misma bolsa neutra. Empieza a teclear en su ordenador y te saca una factura. Sube unos 250€ en total. Te la entrega mientras sonriente te mira.

- Va de caza o de pesca?

Asiento al ver la factura, mientras rebusco la tarjeta de crédito en el bolso. Se la entrego, junto con el DNI al anciano para que se cobre.

- Aquí tiene. La verdad es que a mí me va más la pesca, pero me invitaron a una pequeña cacería por una celebración. Y ya que vine, pensé en "matar dos pájaros de un tiro". Ya me entiende.

Le sonrío, mientras espero que me cobre, esperando que haya entendido el chiste.

El anciano te coge la tarjeta y saca el datáfono, marca el importe y pasa la tarjeta. Después de dos pitidos, te pasa el datáfono para que pongas el pin.

- Es muy poco usual ver a una mujer practicando pesca o caza, la verdad... - sonríe - pero no ha de por ello ser imposible, ¿no cree? - comenta 

Mientras recojo la factura, la tarjeta y las bolsas con el material.

- Tengo cinco hermanos mayores que jugaban a destrozar mis muñecas barbies. Así, que acabé jugando con soldados de juguete y petardos. Supongo que heredé algunos gustos de ellos. Jeje!!

Hago una pequeña pausa antes de continuar.

- Bueno señor, le dejo con sus "quehaceres". Que tenga un buen día.

Y me dirijo a la salida de la tienda en dirección a "mi casa".