Partida Rol por web

Es un placer conocerlo, Sr de la Cruz. Digo haciendo una reverencia al caballero.

Miro a Lazar ante su ultimo comentario. Bueno, realmente no trabajo para Radu, sino para ustedes, solo me ha enviado, ya que necesitaban a alguien capaz, y su excelencia opina que soy el mejor, sobretodo despues de haber diseñado su castillo.

Cambio mi aspecto y me dirijo hacia el albañil y el carpintero, para intercambiar opiniones y nuevas ordenes sobre como debería ser la estructura, junto a el van Lazar y Ramirez.

Bien, con el personal que tenemos y los materiales, puedo hacer sin problema una bella torre, muy elegante, además de poder añadirle un tunel de escape, además de unas habitaciones ocultas para que pudais descansar sin problemas por las noches

--No necesitamos que sea bonita, sino funcional, el presupuesto es ajustado, y que este lista lo antes posible

Asiento a las palabras de Ramirez y miro a los demás.

- Quizás sea el momento de que los nuevos señores del Paso de Tihuta soliciten los tributos habituales para contribuir a la fortaleza que ayudara a protegerles. - comento con especial intención a los 3 que gustan actuar de líderes.

--No necesitamos que sea bonita, sino funcional, el presupuesto es ajustado, y que este lista lo antes posible

Arrugo las cejas hacia mi compañero.

"¿Acababa de decir lo que me parecía haber oído?"

- Quizás sea el momento de que los nuevos señores del Paso de Tihuta soliciten los tributos habituales para contribuir a la fortaleza que ayudara a protegerles. 

- Que vaya Ramirez. Así nos ahorramos esas aportaciones sin sentido por aquí.

Y resoplando hacia el aire en una carcajada, añado

- Claro que la construcción será funcional además de elegante. En fin... por dónde íbamos

procedo con la conversación con Zelios, ninguneando a Ramirez como si no existiera para mi a partir de ahora.

- ¿Tienes algo pensado para la distribución interior de la torre? ¿y las defensas?

Los nervios de Ramírez habían llegado a su punto álgido.
En realidad por un momento la perspectiva de poder marcharse y cambiar de aires le pareció apetecible, pero su paciencia tenia un limite y Lazar la había sobrepasado, y a pesar de no ser el típico Lasombra todo el mundo tiene un límite.

Ramírez se interpone ante Lazar y le ordena--¡Ve tu a hablar con los señores del paso, y no regreses hasta que tengas el dinero suficiente para sufragar los gastos del castillo!

Sientes la necesidad de realizar lo que Ramirez te ordena.

Observo la "discusión" entro los dos vástagos, y me quedo algo serio, no era una situación que me gustara en demasía, prefería estar en mi mundo, construyendo castillos o fortificaciones.

Ah, no será necesario el dinero. Me conformaré con algo simbólico y una promesa de ayuda, cosa que dudo que llegue a necesitar ya que por mi profesión no suelo hacer enemigos.

Me río al ver el mosqueo de Ramirez, perdiendo los nervios. Así solo demostraba sus limitaciones.

- Bien. De una forma o de otra, me ahorraré oír más sandeces.

acercándome al óido de Zelios, le susurro señalando con el pulgar al corsario.

- ...es un poco difícil de tratar!

y con mi encanto natural le guiño el ojo y me despido.

- Buena suerte.

Me marcho al paso, cogiendo un caballo si los hubiera.

El arquitecto decía que no necesitaba más dinero para completar la obra, así que sería fácil cumplir con la órden de Ramirez y de paso me entretendría reclutando a algunos humanos más para la construcción.

Con suerte, incluso era posible que encontrara alguien digno de hacerme de criado. Empezaba a tener recados pendientes para Sherazina y Ramirez.

Ya una vez sin Lazar me dirigí al Nosferatu --Bien, ahora que no esta el petimetre podremos centrarnos en el trabajo sin interrupciones banales.-- sonrie.
--Como le decia no necesitamos que sea una obre de arte bella, sino una obra de arte de la funcionalidad. No necesitamos ribetes, marmoles o adornos, si no entereza, resistencia en imponencia, y ademas vamos cortos de presupuesto y tiempo.
Ni yo, ni mis compañeros creo que tenemos la menor idea de arquitectura, no obstante sospecho que el señor De la Cruz si entiende de fortificaciones, asi que quizas sus aportaciones puedan ser útiles, no obstante como digo el tiempo apremia.

Observo el intercambio con aire guasón, no todas las noches discutían el lasombra y el toreador de manera tan abierta.
Y aunque el pirata tiene razón, la estrategia de Lazar tampoco está mal.

-Al fin y al cabo, alguien al servicio de el señor que nos paga para cumplir el encargo de un tercero conocerá todos los secretos de nuestra torre.
Lo lógico sería matarlo al acabar, pero seguro que Radu se ofende.
Al fin al cabo es su señor, diga lo que diga el constructor.

Asiento cuando Lazar me dice unas palabras al oído y se marcha obedeciendo a Ramirez, el cual empieza a explicar como quiere que sea el proyecto.

Por eso mismo le he dicho, que el precio en oro, con que sea algo simbólico me es suficiente, con este trabajo rápidamente puedo ganarlo. Me conformaría con un pequeño favor, cuando lo necesite.

Sí el tiempo nos apremia, y realmente tengo ganas de ver este trabajo terminado. Sr de la Cruz, digame pues que otras cosas cree que debería tener la estructura, lo comentaremos con los trabajadores más cualificados y prepararé nuevos planos para todo.

Espero a que Yago me acompañe junto al albañil y el carpintero.

Dejo correr la pequeña disputa entre Lazas y Ramirez. Chiquilladas. Y a sus años. Las vergüenzas de sus sires.
Ningún enemigo decía… sabiendo los pormenores de sus fortalezas… Lo extraño es que siguiera vivo.
- Por supuesto que le ayudaremos si así lo requiere en el futuro. – le confirmo asintiendo a mis palabras – Si me lo permite, estaría bien tener una sala espaciosa con vistas a que se convierta en una gran biblioteca en el futuro. Las noches aquí son bastante aburridas. – comento sonriendo.

La reacción de Yago al roce entre Lazar y Ramírez fue estoica; apenas una leve sacudida de cabeza mientras los dos se enzarzaban... Su primer impulso había sido ofrecerse en lugar de Lazar para ir a las aldeas cercanas, pero al ver en qué escalaba la situación decidió mantenerse fuera; no quería que ninguno de ellos pensara que iba a tomar partido por el otro.

Desde luego, aún no se llevaba lo suficientemente bien con ninguno como para batirse el cobre por él por ninguna otra razón que simpatía. Lamentaba mucho el no estar llevando a rajatabla uno de los corolarios de su antigua orden "Nunca viajes junto a alguien con quien no estés dispuesto a morir", pero las circunstancias mandaban.

Al final, de relativo buen grado, Lazar aceptó hacer de heraldo para los "señores de Tihuta" (¿De verdad el señor Lenz pensaba que nos iban a ceder aquella tierra de tan buen grado sin ser a título temporal?), y la situación se solucionó por sí misma en aquella ocasión; momento en el que decidió tomar la palabra de nuevo.

- El señor Ramírez tiene razón sólo en parte; si bien es cierto que pasé gran parte de mi vida entre fortalezas, tengo más idea sobre cómo defenderlas que sobre cómo diseñarlas. - dijo con humildad, inclinando levemente la cabeza a modo de disculpa. - Mi ghoul está más versado en los temas académicos, así que contad con sus servicios para que os ayude a supervisar el cumplimiento de vuestras instrucciones durante el día.

- La única aportación que de verdad puedo sugeriros es que hagáis torres circulares para facilitar la defensa y dificultar el asedio; también que encastréis en la medida de lo posible todas las escaleras, para construirlas de caracol, que desciendan en el sentido de la mano diestra. Así, los defensores tendrán el brazo del escudo expuesto, por lo que estarán mejor protegidos y los atacantes, el costado del arma, por lo que estarán más expuestos.

- Aparte de eso, almenas, matacanes, trampas para flechas en las dobles puertas... Todo lo que sin duda sabéis imprescindible en defender una fortaleza.

- Del mismo modo, si la tragedia nos golpea, puedo recuperar trabajadores perdidos. No serán hábiles ni inteligentes, pero trabajarán sin descanso ni sueldo.

Asiento conforme ante las palabras de Markus de aceptación y luego ante su petición.

No hay ningun problema en añadir esa sala para vos.

Luego Yago me da una explicación de temas defensivos, los cuales conozco bien por mi experiencia pero que nunca está mal de recordar con alguien que se dedica a ello.

Sí, buscaremos la forma de que sea más sencilla de defender, ya que este lugar parece un buen lugar estratégico. Miro al hombre sorprendido con su ultima frase. Serían utiles... pero no creo que sea una buena idea mezclar a los mortales con sus... trabajadores...