Partida Rol por web

Nueve había decidido quedarse en la nave, investigando sobre ese mundo. Pero dejó la nave muy cerca del templo, por si había problemas.

El resto se dirigió al interior de aquella orgánica estancia. Chiv-chiv miraba hacia todos lados, fascinado. Mientras tanto, Starbreeder se arrodilló frente al altar y comenzó a murmurar una plegaria.

Un barathu maduro, oficiaba como sacerdote del templo, enciendiendo velas, esparciendo humo de incienzo, impartiendo bendiciones a los devotos, etc. Al verlo se dieron cuenta: El templo no estaba hecho de un único tejido orgánico, sino que varios barathu se combinaban entre sí para formar toda la estructura.

Nueve había logrado averiguar lo mismo durante sus investigaciones en la red.

- Esto es fascinante - comentó CID-2 a Nueve por el comunicador, en voz baja para no importunar - me refiero a la vida -

- Para algunas especies la vida es única y sagrada. Para otras, apenas un eco en la vastedad de la galaxia - continuó. - Pero todas las especies buscan y encuentran consuelo en la religión. Incluso nosotros... -

Después se arrodilló y pronunció una plegaria.

- Triune, tú que en tu divina inteligencia entendiste el secreto de la vida, dame el coraje para encontrar mi verdad -

Se levantó. Estaba allí para custodiar a su empleador y ya se había distraído suficiente.

De pronto, las paredes del templo comenzaron a estremecerce y de ellas salieron algunos Barathu jóvenes que se encaminaron presurosamente hacia la salida. Ellos podían modificar física y químicamente su cuerpo para adaptarse a diferentes circunstancias, aunque a la edad de éstos individuos, esas habilidades eran más limitadas. También tenían la habilidad de unirse entre ellos para formar entidades más grandes. El sacerdote intentó disuadir telepáticamente a los jóvenes que se desprendían del templo

¡No!¡No lo hagan!¡Regresen, por favor!¡Nos matarán a todos! 

Nueve también notó el estremecimiento de la estructura y vio a algunos de los barathu acercarse a la puerta.
 

Al ver que los jóvenes ignoraban sus súplicas, se dirigió a nuestros héroes

Amigos, lo siento, los jóvenes a veces no comprenden del todo nuestro sentido de comunidad y se empeñan en vivir una vida individual. Normalmente los dejamos ser, confiando en que con el tiempo entrarán en razones, pero los que se han ido han debilitado la estructura del templo. Los demás no podrán mantenerla durante mucho tiempo más. Por favor. ¿Pueden convencerlos de regresar? Estoy dispuesto a darles una generosa recompensa a cambio de su ayuda.
 

La visión de las paredes desarmándose y convirtiéndose en barathus sorprendió un poco a CID-2, pero no lo suficiente para paralizarlo. Al escuchar las palabras del sacerdote asintió y, de unas pocas zancadas, se adelantó a los jóvenes que abandonaban el templo.

- ¡Esperen! si se van podrán vivir una vida plena, es cierto, ¡pero los ancianos se verán perjudicados! -

Su cerebro computarizado procesó la frase que acababa de decir y en 0,8 milisegundos resolvió que era la peor frase de convencimiento que haya pronunciado en lo que lleva de funcionamiento.

- eeee... Nueve, algo de ayuda... - murmuró.

Nueve escucho todo lo que estaba pasando en el templo y la situación era grave. No entendía por que querían separarse los entes más jóvenes. Como androide le costaba entender muchas de las acciones de las criaturas orgánicas.

- Cid-2, ahora voy, intenta entretenerlos... Comentó nueve a su compañero en apuros, mientras daba un salto y salía corriendo hacia el templo... 
 

Por el camino envío un pequeño mensaje con el canal general.

Cid-2 intentó convencer a los barathu, y aunque Starbreeder y Chiv-chiv intentaron ayudarle, ninguno pudo evitar que las criaturas desconfíen de ellos.

¡Mienten! Tratan de mantenernos prisioneros aquí. ¡No nos atraparán sin pelear!

Con estas palabras, el que parecía ser el líder del grupo, se lanzó a la batalla.

CID-2 sacó su espada y se resignó. "Si hago un ejemplo de uno, no será necesario lastimar a todos".

El joven barathu se movió con gran destreza atacando primero, pero CID programó un contraataque que impactó en la criatura causándole algo de daño. 

- No queremos engañaros u obligaros hacer algo que no queréis, simplemente que antes de iros sin más hay que hablarlo o los daños que provocaran dejar vuestras obligaciones pueden ser irreparables. Mis conocimientos en ingeniería y estructuras me dicen que sin vuestra presencia el templo se puede colapsar y provocar muchas muertes. Mi sugerencia es que volvías a vuestra posición y sabiendo que deseáis abandonar la comunidad y ser independientes, que os busquen unos sustitutos y así evitaremos el colapso.

La batalla estaba a punto de iniciarse, cuando Nueve irrumpió en el templo, y comenzó a dar explicaciones técnicas de lo que pasaría si los jóvenes lo avandonaban.

La androide tiene razón. ¡Hay que apuntalar el templo!

El líder se dirigió inmediatamente a uno de los huecos que habían dejado. Al poco tiempo, los demás lo siguieron. El templo quedó estabilizado.

El sacerdote del templo de Oras los recompensó con un credstick con 16000 créditos.

Una vez el conflicto quedo resuelto, Nueve pudo admirar la fascinante estructura...

- Realmente es una estructura de lo más compleja y a la vez, como lo diría un humano "Fascinante"... La Androide no sentía o tenía emociones, aunque intentaba expresarse como si los tuviera.

- Los créditos nos irán muy bien para hacer mejoras en la nave y equiparnos un poco mejor, muchas gracias, y nos... "sentimos bien" por haber sido de utilidad. Fue la respuesta a la generosa recompensa del sacerdote.

Una vez acabaron allí, se dirigió con CID-2 a la habitación.