Partida Rol por web

 La mueca de Togosaki es de tristeza y resignación. El forense se quedó apoyado contra la pared mientras mirada al cadáver del que hasta hace un día era otro de los compañeros que le quedaban en aquel lugar. No el mejor, ni el más querido. Pero al fin de cuentas, una persona que seguramente no se merecía ese final.

 Antes de tener alguna reacción desmedida o exagerada, propia de su temeroso carácter, el tímido chico simplemente se acercó al cuerpo de Yugure para verificar su condición. Toda la historia de los tasers era sumamente preocupante, especialmente para una persona inculcada en la salud como Miko.

- Yugure-kun... ¿e-está bien? Ha-háblanos... Enri-kun, ¿puedes mos-mostrarme el taser con el c-c-cual redujiste a Yugure-kun? Tengo que ve-verificar algunas cosas...

 Se notaba que el forense no tenía un tono muy amigable con su pastor. Su temple era serio.

Maxwell, no te estoy acusando formalmente, solo quiero que me cuentes que ha pasado, una version creible... con lo del maldito perro, tuve que resignarme y darte la razón, me contaste tu teoria y más o menos me cuadraba y pensé que eras el unico para sacarnos de aquí.

Ahora, cuando ocurrió todo yo me estaba despertando cuando entrasteis, y posiblemente no me viste... y tus palabras creo que eran sinceras, y en tu blanquisimo corazón hubo un apice de pena al pensar que yo estaba debajo de la sabana, que menos mal que no. 

No quiero acusarte, quiero que uses lo unico bueno que tu dios te ha dado, el cerebro, ese en el que confié para salir de aquí. Piensa y no hagas el tonto...

Acto seguido, le quita de las manos el taser y pregunta como funciona esto mientras sin querer pulsa el botón y una descarga sale disparada hacia Nanime...

Upsss!!! fallo mío, lo siento!!!

Por su parte Maxwell ignoró por completo como Namine fuera taseada en el suelo, no pensaba que ella fuera la asesina, pero al igual tampoco pensaba que ella fuera de gran utilidad en la investigación del caso, por lo que ahora Namine estuviera sufriendo de la descarga eléctrica no le importaba en lo más mínimo.

-¿Podemos ponernos a investigar de una vez? -Comentó cruzándose de brazos- Negro, muestra la marca del Taser.

Dicho esto, Maxwell se acerca a Yugure para levantarle la camiseta y ver la quemadura que tendría que tener.

Muestro la marca del taser y de paso le enseño el culo al cura!!!

-¡Por el amor de dios! -Exclamó el Joven Obispo- ¿Por qué diablos el asesino no te mató a ti ^_-también-?

Enrico estaba realmente desesperado con esa situación, pero ahora que no tenía su querida pistola eléctrica poco podía hacer para defenderse de Tenko, y aún con ella, poco podría haber hecho. Por lo que la situación era realmente complicada.

-¡Monokuma! -Llamó el Obispo- ¿Nos das ya el informe de la autopsia?.

Maxwell se gira hacia Togosaki, era el momento de dar su explicación del caso, al menos de cómo este lo había visto y así quería mostrar al resto de los presentes. Se notaba que el obispo estaba visiblemente nervioso, quizás por no tener ya su preciada arma, quizás por volver a ser el centro de sospechas o quizás porque había pisado un charco sospechoso que provenía de Yugure.

1. Tenko vino a mi habitación, buscaba una forma de escapar, ahora que habíamos descubierto que el perro de Goro era un Robot, ahora que sabíamos que había alguien pululando por la academia...

2. Sugerí ir al Taller de Robótica, puesto si el perro era un Robot, debió haber salido de ahí. Lo cual podría haber alguna que otra pista al respecto. Porque Goro nos mintió, ya que no es el Ultimate Dog Trainner.

3. Le dije que iba a investigar la Sala de Arte porque si Goro, el presunto traidor, mató a Tanaka, sería por algún motivo. Esto en parte fue una mentira, puesto que en la Sala de Arte había escondido mi Pistola Eléctrica. En caso de que alguien me registrara, yo no tendría nada y sabría donde sacar un arma para defenderme.

4. No encontré mi pistola eléctrica en la Sala de Arte hasta que de repente, alguien me lanzó algo a la cabeza. Al mirar al suelo, estaba ahí mi querida pistola. -Maxwell se toca la cabeza, donde presuntamente tendría un chichón- Malditos bárbaros...

5. Volví al pasillo y me percaté que la puerta del Taller estaba cerrada, pese a que yo la había dejado abierta. Eso me hizo desconfiar, en mi mente me imaginé a Tenko tratando de matarme nada más cruzar la puerta, por lo que tras meditarlo por un instante planee una contra-ofensiva, si iba a matar a alguien no sería a mi, así que busqué al que yo pensaba que era el Mastermind.

6. Decidí "no arriesgarme", ir junto Yugure y pedirle amablemente que viniera conmigo, algo que tras MUCHO esperar por el para que se vistiera, al final lo hizo; todo bajo el pretexto de que necesitaba sus dotes detectivescas para resolver el problema de la Academia... Pfff... Como si yo necesitara algo de el...

7. Yugure abrió la puerta, escuchamos un "Click", y encontramos el cuerpo bajo la manta con el arpón ensartado. Algo que sencillamente me sorprendió, puesto que jamás pensé que Tenko fuera la víctima, ni siquiera cómo este iba a ser la víctima...

8. Yo heroicamente decidí hacer lo evidente, disparé y electrocuté a Yugure. En el caso de que la victima muriera por el arponazo y el asesino fuera quien "inició la acción del arpón al caer", entonces sería el culpable Yugure. Pues ahí tenemos al culpable.

9. Tenko apareció de la nada y me lanzó una llave Inglesa a la cabeza, discutimos por minutos sobre quien era el asesino, sobre el motivo que tuve de electrocutar a Yugure y sobre quien era el muerto... Al final retiramos la manta y vimos a Daichi ser la víctima.

Buen resumen, gracias...

Yo fuí electrocutado nada más irse Maxwell y me desperté cuando entraron.

Tenko por una vez pensaba que el cura podría decir la verdad, y aún dudaba de su inocencia, pero pensando... si Maxwell no fuera el asesino y lo fuera Yugure, tendría que ir desnudo por la academia. tasearme, tirar el taser a Maxwell y salir para su habitacion... hasta que viniesen a buscarlo o esperar a la mañana siguiente. Solo de pensar en esa imagen ya me parecia bastante repugnante.

Podeís ir diciendo donde estabais cada uno? menos Daichi, mejor no digas nada porque nos darias un susto acojonante!!! Aunque por otro lado resolverias el misterio en menos que un cura pederasta saca caramelos para un niño...

Maxwell echó un rápido vistazo al cuerpo de Daichi desde lejos, en caso de que este se levantara y explicara la situación; ya con el agua bendita y el crucifijo preparo por si acaso.

-Ahora mismo tengo varias teorías en mente, si queréis escucharlas, sentíos libres de hacerlo.

1. El Asesino es Tenko.

Tenko, de alguna forma, sabía que había escondido mi pistola eléctrica en la Sala de Arte, la robó, se disparó a sí mismo para tener una coartada. Posteriormente vino a mi cuarto a pedirme "ayuda para escapar", el sabía que el único lugar que yo diría sería "Taller de Robótica", puesto que ambos vimos al Perro-bot que era Haruki, y por tanto que Goro no se traía nada bueno entre manos. Además de eso, sabía que el Taller de Robótica estaba al lado de la Sala de Arte donde yo tenía mi arma.

Me separé de el para buscar el arma; el preparó el caso, electrocutó a Daichi usando la pistola, lo subió y lo tapó, preparó el sistema del arpón, fue a la Sala de Artes, me lanzó la pistola a la cabeza, volvio al Taller, conectó el cable a la manilla de la puerta y se escondió.

Al entrar Yugure y yo, Yugure activó el dispositivo matando este a Daichi. Rompiendo con el plan original de Tenko: Que yo fuera el asesino. - A fin de cuentas "el es una víctima electrocutada, Daichi también, yo tenía el arma de electricidad, yo abrí la puerta..."

2. El Asesino es Daichi

Todos los presentes sabemos que Daichi no estaba bien de la cabeza, esto lo vimos de forma más que evidente cuando apuñaló a Makoto y me lo lanzó encima. ¿Quien diablos hace eso?. Pues en esta teoría viene a ser lo mismo, pero cambiando a la víctima y al culpable por ella misma.

Daichi sabía dónde había guardado mi arma y la había sustraído de antemano, y nos estuvo espiando. Cuando Tenko vino a verme y ambos fuimos al Taller de Robótica, Daichi se escondió. Cuando yo me separé de Tenko, Daichi entró al taller de robótica, noqueó a Tenko con la pistola eléctrica, lo escondió, me lanzó la pistola a la cabeza.

Volvió al Taller, preparó el arpón se tapó, y esperó que yo abriera la puerta. Probablemente pensaría que en el "peor" de los casos, yo sería declarado culpable y yo sería el ejecutado, y en el mejor de los casos y el verdadero asesino fuera el (lo planeo todo), todos muriéramos al votar en mi contra.

Por suerte, para mi, usé a Yugure para abrir la puerta.

3. El Asesino es Monokuma.

Tened en cuentas que en las "vacaciones" que tuvimos, en sus mas o en sus menos, todos obtuvimos algo de información, quizás Daichi consiguiera información "de más", algo que lo hizo realmente peligroso, y aún más ahora que Naminé se cargó a un ejército de Monokumas...

Así que este planeó todo, Monokuma evidentemente sabía de mi pistola eléctrica, la robó, electrocutó a Tenko, me la lanzó, puso a Daichi en el lugar y preparó la trampa. Luego tan solo esperó a que yo, o alguien más, pasara por la puerta.

En caso de esto ser cierto, Yugure no sería el Mastermind... puesto que él jamás abriría la puerta.

Estas 3 teorías tienen algo en común, la IMPOSIBILIDAD de colocar la trampa Y salir de la habitación. En caso de que el asesino pudiera colocar la trampa y salir de la habitación, los sospechosos seríamos todos... desde Naminé hasta Risu, incluso Yugure sería sospechoso.

Ya estas diciendo tonterias....

Lo ves? pierdes toda credibilidad... Tenko se puso la mano en la cara y agitaba la cabaza en señal de negacion

Primero yo no podria electrocutarme y lanzarte el taser si estoy inconsciente

Segundo, no creo que Daichi se suicidara

Tercero, Monokuma quiere que nos matemos, no creo que nos matase él mismo.

No olvides que el taser es tuyo y podrias ser el asesino, pero personalmente creo que prefieres salir desentramando el misterio que por la puerta trasera siendo un asesino... pero me haces dudar tanto de esto ultimo que estoy por pintarte artisticamente una diana en la espalda o un cartel de Soy el asesino.

El joven Obispo resopló y trató de explicar la situación nuevamente, esta vez más despacio para que Tenko lo comprendiera... y ya de paso que para el resto de cabezas de chorlito entendieran la lógica.

-Dije que primero te electrocutaste para dejarte la marca y luego viniste a mi habitación. Es decir, tu ya estabas electrocutado y bien para cuando toda la trama comenzó.

Vale, te lo acepto como teoria, podria ser posible.

Lo malo es que no soy el asesino... ahora... tu también has tenido oportunidad, dejandome seco, preparando la trampa, e ir por yugure, a sabiendas que yo no te cachearia, ni te tocaria con un puntero laser atado a una escoba. 

Lo que pasa es que tendrias que haber dejado frito a alguien o a ti mismo para saber cuanto tiempo duraría mas o menos el efecto de la descarga... por lo que sugiero que te desnudes para eliminar que has utilizado el taser contra ti y que no llevas un cilicio.

Yugure sigue grogui. A los que están más cerca les parece escuchar cómo entre sueños susurra a media voz Que se desnudegrzll y sigue durmiendo.

El olor a carne quemada es ligero cuando te acercas al cuerpo de Yugure, le pones boca arriba y cuando vas a acercar la mano al cuello para tomarle el pulso, te das cuenta de que el detective comienza a despertarse aturdido, le ayudas a levantarse.

Yugure se incorpora. Le sangra la boca por haberse mordido la lengua. Se gira, mira el cuerpo de Daichi, mira a sus compañeros, mira sus pantalones que, efectivamente, están mojados, y sale por la puerta caminando despacio sin decir nada, intentando mantener algún atisbo de dignidad entre confuso, cabreado y avergonzado.

-¡Se está escapando! -Dice Maxwell señalando al dolorido y apalizado detective- ¡Tenko haz algo!.

- ¡O-oigan, denle u-un poco de espacio! ¡Tiene que recuperarse del s-shock y n-no lo ayudaran si lo siguen a-agobiando! Enfoquémosnos en revisar todo lo que po-podamos en la ha-habitación... incluyéndolo a él...

 Tragando saliva, Togosaki señala al cuerpo de Haga Daichi. Con la manta tapándolo casi entero y su expresión de horror enmarcada en su rostro. Pero a estas alturas, no había otra cosa que el pudiera hacer más que realizar la autopsia

-Comprueba sus genitales. Quizás sea un robot. -Puntualizó Maxwell- ¡O una mujer!.