Partida Rol por web

De amores, muertes y sueños

II. Locus Amoenus

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28/03/2012, 23:11
Alejandro Benavente

- Hagamoslo de forma menos cortes, Álvaro.- dijo mientras señalaba su hombro con la mano desafiante para demostrar su fuerza.

No tenia inteción de permanecer a la interperie y si alguien habia tomado molestias en cerrar la puerta con cerradura...temeroso de algo debería de estar... 

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29/03/2012, 01:53
Álvaro de Mesía

Amos'allá

Álvaro se separó un paso de la puerta, miró bien remirado a diestra y siniestra por si algún alcahuete les vigilaba y con ayuda de Alejandro se dispuso a echar la puerta abajo.

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05/04/2012, 17:35
Director

En esos momentos, Álvaro y Alejandro cogieron cierta carrerilla dando unos pasos hacia atrás y se lanzaron contra la puerta de la choza.... ¡¡BOOOM!! Un golpe tremendo hizo restallar una pequeña cerradura, la cual parecía estar hecha de mantequilla. Tras el golpe, ambos cayeron en el suelo de la vivienda, justo en el interior, pues apenas presentó resistencia la vertical... Acto seguido, un pútrido olor inundó el ambiente, lo cual no era fruto sino del abandono, el nido de algunas ratas que seguramente habría en algún lugar, o algún animal muerto encerrado allí.

Pudísteis ver a través de la puerta una vivienda derruída en su interior, aunque conservaba casi intactos algunos de los muebles (otros estaban podridos por las humedades y las lluvias filtradas). Aquello parecía como una especie de comedor (sólo era una estancia, una especie de majada, choza, cabaña), con algún asiento, una esquina como ennegrecida para fogatas y mantas totalmente roídas. Había también calderos, algún plato y algun apero de labranza totalmente oxidados y cortantes. Fue en éstas que, mientras aún seguían en el suelo "los dos forzudos" e intentaban levantarse, una voz apareció de una de las esquinas: había un bulto tapado con una de esas carcomidas mantas:

¿So...sois vos?

La voz de joven mujer parecía totalmente asustada y nerviosa.

Notas de juego

Bien, creo que Balin y Calafia están semiactivos, asi que iremos sin mucha prisa hasta la semana que viene. ¡Saludos!

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08/04/2012, 12:06
Berg Van Eyck

Se acerca dubitativo al bulto, temeroso, queda a unas pocas varas de distancia de lo que parece una mujer por si acaso y pregunta

- ¿ A quién os referís muchacha? ¿esperáis a alguien? ¿qué hacéis aquí sola? ¿estáis enferma? ¿por qué váis tapada?- le hace un gesto a Silvia para que se acerque - conozco a alguien que puede aliviar vuestros males.

Notas de juego

Yo ya he vuelto.

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08/04/2012, 16:29
Álvaro de Mesía

Álvaro se levanta del suelo con algunos trabajos y mira nervioso a diestra y siniestra. Su aspecto es amenazador plagado de los hierros del oficio y se mantiene apartado mientras Van Eyck habla con la chica. Reflexiona un momento y finalmente pregunta a la niña.

¿ Dorotea ?

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08/04/2012, 22:18
Dorotea de la Osa

¿Co... Cómo...? ¿Cómo conocéis mi nombre? -dijo la muchacha destapándose desde arriba hasta sólo la nariz- ¿No seréis siervos de mi padre? ¡No le digáis que estoy aquí! ¡No me lleven con él!

Luego reparó en las palabras del comerciante.

Si, espero... a alguien... bueno... no sé... supongo que es un hombre, y estoy segura que me conoce, lo sé... ¿es acaso alguno de ustedes quienes me hablaron? ¿Lo hicieron? ¡Hablen!

Los ojos de la chica se clavaron en los tres hombres, esperando una respuesta.

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08/04/2012, 22:26
Berg Van Eyck

¡cuán estúpido había sido!

Era imposible no haber asociado aquel bulto a la muchacha desaparecida, Berg se las daba de ser el cerebro del grupo, pero parecía que aquel soldado había sido más ágil que él.

Apretando los puños con fuerza hasta que se le tornaron blancos los nudillos de lo enfadado que estaba consigo mismo sólo acertó a preguntar

- ¿quién os hablaba muchacha? ¿de dónde provenía aquella voz?

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09/04/2012, 21:57
Alejandro Benavente

Alejandro mantuvo las distancias con la joven, no le gustaba la circunstancias que se estaban aconteciendo... No parecía una joven damisela en apuros que anhelaba ser rescatada...para nada; y eso lo turbaba.

- Entiendo, Dorotea, ¿Qué estás aquí por tu propia voluntad? ¿Acaso no tendrá algo que ver esta circunstancía con tu futuro prometido?.- hilar fino nunca se le había dado demasiado bien pero tampoco lo había intentado jamás, así que se encontraba ante una nueva faceta de su personalidad que aún lo desequilibraba mas que las incoherencias alrededor de la jovenzuela.

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09/04/2012, 23:34
Silvia Helguera

PNJOTIZADO.

¿Prometido? -susurró Silvia cual pensamiento escapado. ¿De qué estás hablando, Alejandro? ¿Qué es lo que te ha contado el señor de la Osa?

Estaba atenta a cualquier movimiento de la muchacha.

Notas de juego

Se la llevo hasta su vuelta.

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09/04/2012, 23:50
Dorotea de la Osa

Cuando escuchó nombrar la palabra "prometido", la chica abrió sus ojos, dejó caer su manta (haciendo visible todo su bello rostro) y en seguida se tapó de nuevo hasta los ojos, una vez más (como si hubiera visto u oído un pecado y estuviera temerosa).

Pues sí, por propia voluntad, señor -dijo ahora más tranquila-; bueno, movida por... por una voz... esa cálida voz ¡No me lleven con mi padre! ¡Os pido tal con el corazón!

Entonces fue cuando se quitó la manta, luciendo su buen vestido que bien podría venderse por un saquito de monedas o cambiarse por numerosos paños en Germania... Luego, se puso de rodilla, como pidiéndoos ese favor.

Tuve que escaparme, ¡esa voz me vino como anillo al dedo, en el momento preciso! Me dijo: "Camina por la noche, sin que te vean, mi Amor; en la oscuridad nos encontraremos, allá donde tu estés; camina fuera de la luz y no habrá casamiento, lo juro, pues... tiempo ha que te amo..."

Luego levantó su cabeza, aun con la rodilla en el suelo, para ver las caras de los presentes. La muchacha esperaba que la creyeran.

En dos días vendrá mi futuro esposo, un noble palentino que mi padre quiere "colocarme" con casamiento, aunque más bien es para sus propios negocios en la ciudad... -continuó-. La Voz que escuché... fue en un sueño, un sueño cálido y placentero; y  esa palabras son la esperanza contra mi negativa ante este falso matrimonio... ¡Quiero huir con él, con esa Voz! ¡No me entreguen! ¿No lo harán, verdad?

De nuevo un aullido en la noche. Sin duda aquel animal, ese lobo, rondaba la casa ahora por los alrededores.

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10/04/2012, 19:54
Berg Van Eyck

Se encoge de hombros

- Vuestro padre está muy preocupado muchacha, como ya sabrás hay un asesino suelto en este pueblo, ya han muerto varias muchachas... y bueno... medio pueblo anda buscándoos pensando que quizás podíais estar en manos de ese vil asesino. Ya vemos que no, gracias a nuestro Señor Jesucristo.

Lo de la voz le sonaba muy extraño, sin duda era obra de un brujo, quizás uno de esos brujos que confabulaban con el mismísimo Diablo. Pero prefirió no asustar a la muchacha.

- Creo que deberíamos decírselo a tu padre, y ándate con cuidado de esa voz, ¿pudísteis ver algo? o por el contrario simplemente, ¿era una voz que os susurraba?

Deja una pausa para humedecerse los labios y continuar

- En otro orden de cosas, ¿conocéis al padre Grifaldo? ¿qué sabéis de él? ¿le tenéis por un hombre piadoso? ¿se parecía la voz que escuchásteis a la de él?

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10/04/2012, 20:07
Dorotea de la Osa

No, no, ¡no me llevéis! ¡No me delatéis!, ¡por favor! -la muchacha echó a llorar, sin atender las razones de aquel asesino suelto o el Padre Grifaldo del que Berg hablaba-.

La chica se encogió de hombros, se acurrucó de nuevo sobre la manta y comenzó a llorar desconsoladamente.

¡Se que me ama, y yo le amo...! ¡No quiero casarme con quién tan sólo una vez he visto! ¡¡Escóndame!! ¡Quédense aquí esta noche, conmigo! -todo ello entre ya unas lágrimas visibles, a pesar de la noche...

Parecía que cuanto más se le "acercaba" a Dorotea (al menos en términos de palabras y razones) al lado de su padre y a su hogar, menos atendía ésta y menos propicia estaba para hablar y contar nada (eso lo notásteis todos).

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10/04/2012, 20:12
Silvia Helguera

PNJOTIZADO.

Tal vez... -interrumpí tras el llanto-. Amigo Berg, los males de amores son muy dañinos, y no te diría que no es un capricho de malcriada -esto último en bajo, para que la chiquilla no lo oyera- el no querer regresar aún con un "matajóvenes" suelto por aquí..., pero parece convencida y decidida; mírala aquí, una chica de buena hacienda en una ratonera como ésta: ¿acaso habría necesidad de tal situación de no ser acaso por...?

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10/04/2012, 20:15
Dorotea de la Osa

Dorotea interrumpió a Silvia en su frase.

... ¡Amor! ¡Sí! ¡Amor verdadero, aún sin conocerlo!

Pese a locura y surrealismo de la situación, miró con ojos llorosos llenos de halago a la médico, que bien mostraba una condescendencia para con ella.

¡Quedáos esta noche conmigo, señores! ¡No quiero volver donde la desdicha e infelicidad han comenzado a germinar!

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10/04/2012, 20:44
Berg Van Eyck

Intentando tranquilizar a la muchacha

- No temáis que aquesta noche velaremos vuestros sueños- Berg entendía algo de mal de amores - pero prometedme que mañana en cuanto amanezca iremos junto a vuestro padre. Os dejaremos con él pues vuestro padre y señor. Después podréis hacer cuanto gustéis amén de que debo deciros que al menos al hombre escogido por vuestro padre una vez habéis visto, al dueño de la voz jamás.

Aquello no tenía ningún sentido, temía que la muchacha hubiese sido objeto de un hechizo de amor, Berg había viajado y sabía que una magia antigua a base de preparados era capaz de enamorar muchachas del más feo, o de nadie, como era el caso.

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10/04/2012, 23:17
Alejandro Benavente

Si la magia tenía cabida en este mundo sin lugar a dudas esa joven la estaba sufriendo hasta el último poro de su piel, y bien entendía que los extremos nunca eran beneficiosos para el que los poseía. Posaba la vista de Berg a Dorotea, de Dorotea a Silvia y de esta última de nuevo a Berg, sin entender donde desembocaría la situación... Esto no traerá más que problemas.- pensó sin analizar detenidamente las conversaciones enfrascado en sus propios pensamientos de los hechos.
 

Se acercó a Berg, y le susurró al oído de forma disimulada para que la Dama no se percatase: Amigo, deberíamos seguirle el juego a la doncella, para que nada tema mientras nos encontremos a su lado, y así le hagamos desistir de cualquier nuevo arrebato de huída... pero.- volvió a bajar el tono para cerciorarse de que fuera el comerciante el único en oír.- sin dudas debemos devolver a Dorotea a su Padre antes que este tan hechizada que pierda la cordura, además, eso nos reportará la confianza tan necesade Don Sacristán ria para poder seguir con vida en este poblado.

 

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11/04/2012, 20:40
Álvaro de Mesía

Álvaro atendió a toda aquella situación como mejor pudo aunque todo aquello le parecían brujerías y malas artes. El soldado pensaba que aquello que tenía Dorotea no era amor sino obsesión y como tal podía ser peligrosa.

Si la chica había traicionado la confianza de su padre no pondría límites a su obsesión y podría meterles en mayores problemas todavía.

Algo decía Alejando a Van Berg al oído.

No dijo nada más, no quería hablar con la chica para no tener que mentir. En su opinión debían entregarla a su padre. Pasarían allí la noche protegiéndola. Sólo esperaba que no les encontrasen con ella y les acusasen de secuestrarla.

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11/04/2012, 23:00
Dorotea de la Osa

Gracias señores -dijo la muchacha-. Les estoy sumamente agradecida, ¡de veras!

Los ojos de Dorotea casi se sumieron en lagrimas de emoción.

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11/04/2012, 23:01
Director

Acto seguido preparásteis las cosas para pasar la noche. Lo único aprovechable (lo cual era altamente dudoso) era esa manta roída y que seguramente había sido nido de algun zorro y seguramente, hasta hace poco, de ratas y cuantas polillas y cucarachas pudieran allí encontrarse.

Tras despejar un poco el lugar en el centro de la choza para hacer hueco os dispusísteis a sacar vuestras mantas y alguno vuestro saco para velar la noche. Quizá no los usaríais, pero quien sabe cuándo el sueño llama a los párpados de uno.

Notas de juego

No se si queréis hacer guardias o algo así. Os lo pregunto por si queréis hacer algo más antes de continuar.

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12/04/2012, 10:23
Berg Van Eyck

Sacó su manta y la extendió sobre un rincón que parecía relativamente limpio y mientras la extendía comentó al resto

- Nada debemos temer pero no seamos presuntuosos y desconfiados, hagamos unos turnos para descansar tranquilos, si os parece bien, yo haré la primera , pues poco sueño tengo  y las otras dos podéis hacerla vosotros - refiriéndose a los hombres - dejemos que las mujeres descansen esta noche, mañana será un día duro.

Notas de juego

Claro que hacemos guardias, no nos fiamos del máster :P