Partida Rol por web

Entras en el metro, dirección a casa... hogar dulce hogar! no sabes como saldrá lo de esta noche, pero seguro que es un cambio en tu vida!

Que haces?

Iago llegó a su casa sudando a causa del calor que pasó en el metro y del paseo que había dado, así que decidió refrescarse dándose una ducha. Concluyó que por la noche iría en su coche a donde había quedado con Pedro y lo dejaría en alguna calle cercana al restaurante por si ocurría algo inesperado.

A la hora de vestirse se puso ropa negra, pensaba que así pasaría más desapercibido en medio de la noche. En ese preciso instante sonaba en su mini-cadena “Getting Away With Murder” de Papa Roach, una canción muy apropiada a la situación que se estaba enfrentando. Se sonrió.

Se le pasó por la cabeza las palabras de Pedro: “¿Cuánto vale tu vida?” A ver si va a ser él el asesino… Llamó a su jefa para decirle que por la noche quedaría con el hermano de la víctima para entrevistarle, de esta forma alguien sabría con quién iba a estar, lo hacía como medida de prevención ya que en su interior tenía algún miedo. Habló durante 5 minutos con su jefa pero no le mencionó nada acerca del dinero que quería Pedro, ya que no quería que se mosqueara con él.

Se leyó de nuevo los datos que había obtenido y los dejó en el escritorio, no se los llevaría porque no quería perderlos. Cogió una linterna para poder ver en la oscuridad, en ese momento sonaban las señales horarias de la radio y se dio cuenta de que era tarde así que cogió las llaves del coche y se fue al lugar donde había quedado con Pedro…

Hombre, pues si voy a asaltar la escena de un crimen aprovisionarme de guantes, una palanca , linterna, alambre, pasamontañas ese tipo de cosas ;)

Bien, el reloj del bar "Casa Pepe" ya marca las 12 de la noche. Por fin os encontráis en la barra del bar, estáis nerviosos pero decididos a investigar (cada uno por sus motivos)
El restaurante "La Ciaboga" está a dos manzanas del bar.

Que hacéis?

Una vez provistos de ropa nueva os sentís con fuerzas para volver a la carga. Samuel estás un poco alicaído porque Marco no te dejó comprar unas gafas de las que tienen una narizota de plástico y un bigote pegadas, para disimular mejor y pasar completamente desapercibido... AYAYA Marco, eres un poco perro! ;)

Bueno, esta es la situación, estáis en mitad de la calle, a lo tonto con la compra de ropa y una caña que os habéis tomado junto con un bocata (recordad que llevabais un día entero sin probar bocado) son como las 12 y media.
La tripa llena y ropa limpia, lo único que os falta es una ducha para estar como nuevos... pero aun así es hora de investigar.

Apura el vaso de pacharán cuando ve entrar a Iago por la puerta de “Casa Pepe”: - Vamos chico, yo sheré un borracho, pero shoy un borracho puntual. - Su aliento y su manera de alargar las eses indican que ha llegado, quizás, “demasiado puntual”. Deja el dinero a deber en la barra y coge a Iago por el hombro. Se lo lleva hacia fuera: - Tú cabrón. – grita a pleno pulmón en su caminito hacia la salida. – Cuanto tiempo laostia, ¡que tal tu hermana! Bie ¿no?…AAAAYYYY PICHÓN. -

Emmmm... - Iago siente un poco de vergüenza ajena porque todo el mundo se les qeuda mirando - Vamos a la calle a tomar el fresco...

Una vez fuera... Has traído las llaves para entrar? Tenemos que hacer las cosas bien, así que estate atento a todo.

¿Llavesh? Shi claroo - ríe entredientes - Tengo una llave maeshtra, vamosh. – Empieza a andar hacia "La Ciaboga", torpemente, dando saltitos de borracho y describiendo todo tipo de eses por el camino. Se para y mira a los lados. Vomita. - Nesesito una pausita – Se sienta en el suelo y con un movimiento que solo la pura rutina es capaz de entrenar, se mete en la nariz una esquinita de carnet con “vetetuasaberquedrogaina”. Deja pasar unos segundos apoyado en la pared, los ojos cerrados. Cuando parecía que se iba a quedar ahí toda la noche, se despierta de un pequeño espasmo y dice - Ya estoy. – Esta vez con tono normal. – Necesitaba respirar un poco de aire crudo.

Vuestros tambaleantes pasos os llevan hasta la entrada trasera del restaurante, es un callejón sin salida, al fondo hay contenedores de basura y la pared de la izquierda es la del restaurante, donde efectivamente hay una puerta. BINGO!
La zona está poco iluminada, por no decir que además está totalmente desierta.

Vuestros paseos nocturnos no sirven para nada, no habéis sido capaces de encontrar nada en las basuras, salvo unas manchas en vuestras camisas que tienen pinta de no quitarse bajo ningún concepto.
Cuando estáis entrando en el último callejón antes de llegar al restaurante pasan un par de cosas.
Primero veis a un par de tipos que aparentemente se dirigen al restaurante, pero aparentemente, ya que no lo veis bien, porque la luz es baja (hay un par de farolas fundidas y además es noche cerrada).
Segundo, cuando estáis cerca del contenedor oís ruidos, como si alguien estuviera rebuscando entre ellas y al oír vuestros pasos una voz emerge de entre las basuras
QUE COHONES HACEIS AQUÍ, ESTO ES MIO, LARGAOS!

Samuel saca el machete y se lo pone entre los dientes. Seguidamente, se agazapa y empieza a culebrear, siguiendo las técnicas de los rangers, hacia los contenedores mientras se lleva la mano derecha al bolsillo trasero del pantalón para sacar la "pipa". Cuando consigue llegar tras los contenedores, se incorpora resoplando, sudoroso y sucio, espera escuchando preparado para saltar y liarse a tiros contra toda cosa viviente.

No puedo pensar bien. Hay una niebla roja que me estorba la vista

Marco Navarro pasa automáticamente del tipo que les ha gritado.

-Joder, Samuel, ya la estás liando, pasa de él que es un pobre borracho. Para sacar la pipa no hace falta que te arrastres por el suelo de este fétido callejó. Mira como te vas a poner.- dice Marco torciendo la boca hacia un lado muy en voz baja--Ahora vengo colega, los dos tíos de allí me han llamado la atención voy a acercarme un poco a ver si consigo oir algo. A cualquier señla que oigas de peligro ven corriendo a ayudarme, esto no tiene muy buena pinta.

Marco se acerca muy sigilosamente hacia donde están los otros dos hombres y se queda parado a una distancia pruencial: la mínima para poder oir con claridad y la máxima en distancia.

Cuando llegas a la esquina de tu callejón los tipos no están, oyes claramente sus pasos en la calmada noche, pero no están a la vista! Tu cerebro está que echa humo intentando saber donde pueden estar, lo lógico es que estén en la calle paralela a tu callejón, porque ese es el rumbo que seguían cuando los viste pasar.

Mientras te aproximas a los contenedores arrastrándote por el suelo, sale de entre los mismos un vagabundo, te resulta imposible discernir nada en él, ya que está totalmente a la sombra.
Lo que si reconoces, porque te da en la cabeza, es una litrona que sale volando desde su mano hasta tu cabeza! Por suerte tu entrenamiento con el Ranger Walker te sirvió de bastante y consigues esquivarlo sin muchos problemas.
Que te pires de aquí zumbao! Déjanos en paz! se oye otra voz distinta y al mirar de nuevo, puedes ver otra sombra detrás del que te ha lanzado la litrona vacía.

Marco intenta acercarse sigilosamente siguiendo el camino por donde cree que los dos tipos se han marchado.

Delante de la puerta intenta desprenderse de la mochila que lleva encima, sin demasiada elegancia, dado que intenta hacerlo quitándose las dos correas al mismo tiempo. A efectos gráficos es como si intentara zafarse de una especie de mono en llamas agarrado a su espalda.- ¡Virgen puta! Que duras las hacen hoy en día... – Una vez consigue quitársela la deja en el suelo y empieza a trastear buscando la cremallera para abrirla. Instintivamente levanta la cabeza tras hacerlo y… - ¿Quién cojones? AHÍ hay un tío, Iago - recoge su mochila y la coloca encima de un cubo de basuras a su lado. Como si no hubiera visto a nadie, saca una bolsita de su mochila y empieza a prepararse un par de lineas sobre el contenedor. - Ya verás que buena, Lolo... Te vas a caer de culo con esto -

- ¡DISIMULA! -