Partida Rol por web

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 23:30.

—¿Sus escoltas? —preguntó el arcadio mientras rememoraba la apariencia de ambos. Sin duda uno de ellos le había parecido más monstruoso que el otro aunque sabía que la monstruosidad no respondía únicamente a la apariencia física.

—Cambia el acuerdo, quiere que Arcadia se someta como antes y además ahora quiere estudiarme a mí para hacer replicas mías que aumenten el poder de Jerjes, mientras Arcadia pierde su dignidad a cambio de unas poco fiables ¿IAs? En Arcadia no somos de esos.

Negó con la cabeza pues obviamente aquel acuerdo no parecía complacer los intereses que él defendía. No obstante y como había hecho con anterioridad el suprahumano aclaró su gesto con palabras.

—El problema sigue siendo el mismo. Si Jerjes da opción a una alianza podremos hablar, si Jerjes únicamente nos quiere sometidos bajo su ego Arcadia no tiene nada que ofrecer. Seréis un buen embajador si conseguís hacer que Jerjes recapacite en su exagerada petición.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:30

Tras ver salir a los guardaespaldas del embajador persa, Trescaras se mantuvo en la sala. No quería separarse de la Marquesa, no cuando cometió aquel error fatal de dejarla sola en el primer de la reunión. Como siempre, se mantuvo en un discreto segundo plano, detrás de la Marquesa, atento a lo que pudiera pasar.

El embajador reconoció abiertamente que supo de aquella reunión a través de sus espías, y si a la Marquesa le molestaba esa confesión, no lo dejó entrever en ningún momento. No obstante, por la mirada que le lanzó la Marquesa, ahora mismo no lograba descifrar que es lo que estaría pensando su señora en aquel momento.

Sin embargo, ahora tenía otra prioridad. Tras recibir las pruebas del ataque riteano, Trescaras asintió en silencio, y con suma tranquilidad se marchó de la reunión para cumplir la orden de la Marquesa. Allí en aquel momento no era necesario, y era mejor que la Marquesa estuviera a solas con el embajador para seguir con la conversación.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:30

Tras la salida de Trescaras, el embajador continúa la conversación.

- "Lo confieso, Marquesa." - Admite sin vergüenza alguna. - "No somos los únicos que espían aquí... y desde luego un sensor no es lo mismo que una flota armada emboscada." - Niega con la cabeza.

- "No me lo podéis comparar. Si Ritea paga su crimen estaré dispuesto a pagar el castigo que consideréis oportuno por... haberos espiado." - Dice sin permitir que desaparezca la amable sonrisa de su rostro.

- "Pero en algo os equivocáis. La neutralidad de la Marca os ha permitido moveros entre dos aguas... hasta ahora. Hoy mismo deberéis escoger entre uniros a nuestro bando o perecer con los demás. No tengo mucho más tiempo para negociar con ninguno de los presentes. Debo regresar con una respuesta." - Explica.

- "Vuestro mundo ofrece muchas oportunidades para alguien como vos... y pocas para alguien como Jerjes. Os estamos ofreciendo seguir con vuestro status quo... Pero es cierto que vuestra ayuda nos podría resultar sumamente interesante. Tenedlo en mente y reflexionad las próximas horas." - Continua. - "Dadme una respuesta antes de que nos unamos a los demás para continuar con el debate, por favor." -

- "Respecto al ataque informático no tengo pruebas... pero sí varios candidatos. Omnios, Hades, cualquier otra IA avanzada o los propios Mercs. ¿Sabíais que realmente trabajan para Terra?" - Pregunta hilando un tema con otro con bastante naturalidad.

- "Ordenaré ahora mismo a mis hombres que os entreguen también las pruebas que tenemos sobre los Mercs. Analizadlas también si no creéis mis palabras." - Respira hondo y se encoge de hombros.

- "El fenómeno de la puerta nos tiene bastante intranquilos. Aún no sabemos nada más, pero sea quien sea conoce cómo abrir y cerrar la puerta del Laberinto, y eso supone un peligro para cualquiera de los presentes en esta estación." -

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 23:30.

- "No, mis escoltas no. Hablo de otros." - Explica con celeridad. - "Otros con una apariencia menos... humana. Poco útiles en una misión diplomática." - Admite.

Finalmente, Ziro cierra los ojos por un momento.

- "Por muy buen diplomático que sea, hay imposibles que no pueden conseguirse." - Admite. - "En cualquier caso transmitiré vuestras intenciones a Jerjes de la mejor manera que pueda. Ya sabíamos de antemano que Arcadia es un pueblo orgulloso. Y no niego que tengan motivos para estarlo." -

Se humedece un poco los labios, algo resecos pues debe llevar un rato largo conversando.

- "Quizá las palabras de otros en la próxima reunión le hagan recapacitar." - Comenta antes de esperar por si Helicaón desea añadir algo más antes de terminar la reunión.

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:30

Ahí estaba de nuevo la forma de actuar de los persas. Le estaban ofreciendo atener su status quo, algo que la Marquesa anhelaba para su pueblo. Sin embargo, la amenaza estaba ahí. Si no aceptaba perecería junto a los demás.

- No os preocupéis. Analizaré todos los datos y tendréis una respuesta por mi parte antes de la reunión. Ahora bien, sí que os pediría, si llegara a acepar aliarme con Jerjes, que tengáis en cuenta la complicada situación en la que me encuentro actualmente, con todas las delegaciones de la Alianza en mis dominios. No podría apoyaros públicamente en este momento. - Era fácil de entender. Si sus hasta ahora invitados decidían enfrentarse a ella por su decisión no tendría escapatoria. Tendría que aparentar seguir siendo neutral, o incluso lo contrario, mostrarse más favorable a la Alianza. Al menos hasta que estuvieran todos fuera de sus dominios.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:30.

El embajador no sonríe ante las palabras de la Marquesa. Permanece muy atento, como si realmente le interese en exceso cuál será la decisión de la mujer. Cuando la Marquesa afirma que lo pensará, parece respirar más tranquilo.

- "De acuerdo. Espero vuestra respuesta. Entiendo vuestra postura, aunque no creo que llegado el momento tengáis por qué ocultar vuestra decisión." -

Vuelve a dar un sorbo de su copa de vino. 

- "Pensadlo bien." - Vuelve a sugerir. - "Probablemente la vuestra sea la única oferta real que pueda conceder. Con el resto no voy a molestarme." -

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 23:30.

—Entiendo —Fue la corta respuesta que el arcadio ofreció al persa. 

No conocía a los seres de los que estaban hablando pero su cabeza podía hacerse alguna idea al respecto. La depravación persa tratando de replicar el genio arcadio sin duda habría dado algo perverso y deforme, no tenía dudas sobre eso.

—Con eso me conformo por el momento, imagino que Jerjes no es alguien sencillo.

Se concedió una escueta sonrisa tras decir eso, se imaginaba muchas cosas más acerca de Jerjes y sabía otras tantas con las que era capaz de hacerse un perfil aproximado de aquel que respondía al título de Rey-Dios. Nada parecía indicar que fuera alguien sencillo.

—Agradezco la conversación, para mí ha sido fructífera. Vine a por conocimiento y eso he obtenido. Nos veremos más imagino, al menos mientras dure la reunión.

Tras aquellas palabras el suprahumano se giró, no mostró gesto alguno a lo dicho por el persa acerca de otros líderes pero no fue una información que pasara desapercibida para él. Con los mismos firmes movimientos con los que había llegado, se marchó de la estancia, dispuesto a contarle a Eteocles todo lo sucedido.

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

No respondió de inmediato Hades, que se acarició la barbilla, pensativo. O, al menos, lo hizo su holograma. Finalmente, negó con la cabeza.

- Temo que hasta que no pueda ver esas pruebas cualquier posible acuerdo que os ofrezca sería falso. Debo estudiarlas y examinarlas, convencerme que no estáis mintiendo. O que no os están mintiendo a vos. Espero que lo comprendáis. No obstante... hay otro tema del que quiero hablaros. Antes de vuestra dramática llegada sufrimos un ataque. Una IA atacó este lugar, y acabó con varios miembros de diversas delegaciones. ¿Esa IA os atacó también? ¿sabéis algo de ella?

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Ziro asiente.

- "Lo comprendo, Rey Hades." - Se lleva una mano al mentón, pensativo. - "Confío en que la Marquesa comparta con vosotros las pruebas y sus conclusiones, una vez ella las haya analizado. Estoy seguro de que permitirá que todos analicéis los datos por si alguien llegase a conclusiones distintas." - Añade.

- "Respecto a esa IA... En efecto. Tenemos sospechas de que tuvo que ver con el cierre de la puerta del Laberinto, y que no fue casualidad que partiera a nuestro acorazado en dos. De momento no tenemos mucha información sobre dicha IA, salvo que estamos examinando los sistemas de nuestras naves de cabo a rabo para asegurarnos de que no está ahí." - Sus ojos se dirigen momentáneamente a una de las esquinas superiores de la estancia.

Acerca un poco la cabeza hacia la figura de Hades y hacia Perséfone.

- "No me fío de las IAs. No me fío de Omnios y no me fío de esa nueva IA. Hasta podrían ser la misma IA que adoptase distinto aspecto... Ignoro sus motivaciones o sus objetivos. El caso es que me temo que estamos siendo vigilados, y creo que mis naves no están a salvo. Hasta que no pueda asegurarlo no dispongo de mucha más información que ofrecer." -

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Perséfone escuchaba atentamente, asimilando las afirmaciones del emisario persa. Así que Ziro pensaba que sí, que las puertas del Laberinto habías sido cerradas por la IA. Con la finalidad de partir su buque, y con ello... ¿forzar una guerra? ¿promover una unión del Racimo incluso por encima de rivalidades ancestrales...? 

-Temo que estamos siendo un juguete en manos de esa IA. No, no creo que tenga nada que ver con el Gestor Omnios. Y sinceramente creo que es muy superior en cuanto a poder que el delegado de Ritea. -Negó con la cabeza, no tenía base para pensar como lo hacía, pero era así. Y si resultaba ser cierto, no se perdonaría no haberlo advertido.- Vos pensáis que es Terra quien la envía, que es Terra el enemigo. Yo creo que Terra no tiene el potencial suficiente para hacerlo, creo que esa IA, a la que llamamos Aniquiladora de Mundos por razones evidentes y nada casuales, está manipulando nuestros mundos para sus propios fines. Que no intereses, creo que es malvada sin más, no creo que lo haga para agenciarse esos mundos. Creo que pasará por encima, los destrozará, y seguirá adelante en busca de nuevas presas...

Se detuvo, lo que había dicho le había sonado tenebroso hasta a ella misma.

-Os digo esto porque creo que vos mismo estáis siendo acosado de algún modo... no... entiendo, si me lo permitís, vuestra posición, si no es así. Vuestros guardianes... el ultimátum del Rey Dios, las coincidencias que se han sucedido desde que se inició la Cumbre... -Acercó ligeramente el rostro hacia el dignatario, de modo casi imperceptible. Pero lo suficiente como para que su mirada fuese trasparente y clara a los ojos de Ziro, y su voz un susurro.- ¿Hay algo... personal... que queráis decirnos, señor?

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Hades mantiene el silencio ante las palabras de su ministra de exteriores. El holograma que representa al monarca y dios de Cripta parece tremendamente humano, casi curioso ante las preguntas de Perséfone y la posible reacción de Ciro. No obstante... es un holograma. 

En un momento determinado, al decir Ziro que no confía en las IA, está a punto de intervenir. Pero las palabras de Perséfone captan su atención. Y espera a que el embajador persa se pronuncie.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

- "¿Personal?" - Repite lentamente Ziro, con gesto pensativo. - "No." - Dice negando con la cabeza. 

- "Lamentablemente para mí todo esto es trabajo. Creo que mi señor no será muy paciente con los que no acepten unirse a él, y por otro lado existen diversas presiones... Terra y los Mercs, la Aniquiladora que mencionáis, varias de vuestras facciones... Tengo que jugar en un delicado equilibrio y conseguir que todos esos puntos de vista se únan. Es... difícil." - Admite.

Sus ojos se desvían a Hades. - "Rey Hades... disculpadme si en algún momento hablo con demasiada franqueza, no os lo toméis a título personal. En su mayor parte son generalidades, pero si queréis mi opinión por alguien en concreto no dudéis en preguntar. Prometo seros todo lo sincero que mi estatus de político y embajador aquí me pueden permitir." -

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Hades mantuvo silencio, incluso después de la respuesta de Ciro, unos segundos. Luego, negó con la cabeza.

- Franqueza: bien. Seamos francos. LLevo vivo más de setecientos años. Recuerdo como empezó todo. Recuerdo el pasado de Damocles. Para mi es un recuerdo, algo que he registrado en mi memoria. Los persas han esclavizado (o convertido en ciudadanos de segunda si preferís un término más políticamente correcto) a los humanos en los mundos que han ocupado. Han dejado que la clase dirigente de superhombres a la que pertenece vuestro propio rey dios sean los únicos ciudadanos con auténticos derechos considerando al resto como ciudadanos de segunda. Como mucho. En el caso de los seres como yo es aun peor, me temo. Antes habéis dicho que desconfiábais de esa IA, y del Gestor Omnios. Lo comprendo. Pero esa desconfianza no acaba solo en ellos. También desconfiáis de mi, ¿o me equivoco? Decidme, ¿qué podéis ofrecer de verdad a los planetas de Damocles que garantice su independencia? ¿qué podéis ofrecer de verdad a Cripta, a sus mortales y también a sus IAV?

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Hades habla, y Ziro escucha. 

- "Lleváis vivo demasiado tiempo." - Admite. - "Por mucho que registréis acontecimientos y hechos, hay otras tantas cosas que no comprendéis y que no sois capaces de almacenar." - Continua mirando a Perséfone.

- "¿Distinguís la belleza, Rey Hades? Y no hablo de una puntuación que asignéis a objetos o personas para catalogarlos en base a ciertos cánones..." - Añade explicando su punto de vista sin esperar respuesta, de momento.

- "Puedo ofrecer a los ciudadanos de Cripta, sean mortales o IAV, lo mismo que a otros muchos planetas del Racimo. Protección, tecnología y la pertenencia a una nación común mucho más grande y con opciones de prosperar. Ofrezco verdades, como la llegada de Terra y la verdadera lealtad de los Mercs. Ofrezco lo que hay. Sé que Jerjes no perdonará a los que se nieguen a unirse a nosotros... Y aunque los que acepten unirse no serán independientes políticamente... sí podrán serlo en otros muchos aspectos. Jerjes cree que es mejor que los diversos planetas accedan a unirse a nosotros de forma pacífica... y no solo porque sería malgastar tiempo y recursos en aplastar y sofocar las distintas rebeliones. Pero si ha de usar la fuerza, lo hará. Ofrezco a los habitantes de Cripta otro camino a la salvación." - Continúa.

- "Bien podríais rehusar... y bien podríais hacernos frente." - Admite. - "Jerjes invertiría tiempo y recursos en acabar con todos. Sería perjudicial para él, pero lo haría. Y eso, a vosotros, solo os conduciría a la extinción. Os ofrezco, por tanto, la salvación para vuestro pueblo." -

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Por unos segundos Hades no responde, y cuando lo hace, el holograma que lo representa se encoge de hombros, con algo que podría parecer cansancio.

- Y ese es el problema, Ziro. No me malinterpretéis: os admiro. Bien sea porque habéis venido de buena fe, bien sea porque estáis cumpliendo una misión objetivamente complicada, estáis aquí. Habéis venido a territorio hostil. Y tratáis de actuar de una forma que, juzgáis, justa y mesurada. Creo que o bien sois un actor extraordinario, o bien entendéis que, de verdad, nos ofrecéis lo mejor que está en vuestra mano. Sois lo mejor que puede ofrecer Persia.

Hades mantiene silencio para luego negar con la cabeza.

- Y sin embargo no sois capaz de entender a más de la mitad de mi pueblo. Vuestra pregunta lo delata. Pensáis que simplemente registramos datos, fechas, situaciones. Pensáis que el volcado solo supone volcar una ingente cantidad de datos. Y no es así. Hay que perfeccionarlo, es verdad. Y ojalá pudiera tener junto a mi a algunas mentes brillantes para subsanar los problemas que aun existen. Pero el volcado incluye todas las emociones, la percepción, los sentimientos. Soy tan humano en lo que siento, en lo que recuerdo, como lo era cuando nací. Vuestra pregunta, diplomático, únicamente no es ofensiva porque no se basa en buscar ira o indignidad, sino en un profundo desconocimiento. No obstante... vuestra propuesta será valorada. Aunque, creo, que estáis cometiendo un error. O mejor dicho, que Jerjes lo está haciendo. Es evidente que la llegada de Terra es lo que ha causado este intento de acercamiento. ¿No se da cuenta que al tratar de obligarnos a apoyarlo puede causar el efecto contrario? ¿No sería mejor desde el punto de vista, no de la supervivencia de mi pueblo, sino de la supervivencia de Persia, un acuerdo de respeto de fronteras y de defensa mutua ante terceros? Persia, así, seguiría siendo el mayor poder de la zona... y todos veríamos respetados nuestras áreas de influencia y podríamos defendernos ante ese posible ataque terrano. Si tal fuera mi propuesta, ¿podríais transmitirla a Jerjes o carecéis de esa posibilidad?

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Ziro se mantiene en silencio por unos segundos.

- "En efecto, aun hay mucho que desconozco de la mitad de vuestro pueblo. Y mis disculpas si con ello he metido la pata en alguno de mis comentarios." - Dice educadamente. Luego se piensa más la siguiente respuesta antes de añadir.

- "Puedo transmitirla. Si ésa es vuestra propuesta y ése vuestro deseo. Solo confío en que no sea tarde." -

Parece resignado a que la opinión de Jerjes no variará lo más mínimo.

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Tras dejar que su Rey el Delegado de Jerjes, siendo allí los más altos dignatarios que eran, discutieran del futuro de su parcela de Universo, Perséfone inclinó la cabeza sin abandonar el gesto pensativo que había adoptado cuando le hizo a Ziro su pregunta.

Algo rondaba su mente, algo mucho más mundano y humano que sus destinos. 

Parecía que la conversación terminaba, por eso se atrevió a volver con sus dudas.

-Embajador. No es momento ahora para proponeros acuerdos diplomáticos, o acercamientos comerciales. Hay otras cosas ahora sobre el tapete, demasiado importantes como para dejarlas de lado, pero habrá otro momento, sinceramente espero que sea así. Sin embargo... si me permitís que insista... y sin ánimo de pareceros impertinente, dejad que os transmita una impresión completamente personal. Vos... vos no parecéis comulgar completamente con las premisas del Rey Dios Jerjes. Me da la impresión de que tenéis vuestras propias ideas, distintas ideas. Aunque tenéis guardianes en la puerta. ¿Son vuestros...? ¿O son... para vos...? ¿hacéis esto tal como lo estáis haciendo por convicción y propia voluntad?

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Ziro observa con interés a Perséfone. Finalmente, tras pocos segundos sonríe.

- "Hago esto por propia voluntad... No son mis carceleros." - Dice a modo de explicación. Y parece realmente convencido de ello.

- "La situación es complicada para todos... Pero nunca es fácil, ¿verdad?" -

AÑO: 783 D.

MES 2: METAGITNIÓN.

MENÓS PHTHINONTOS: LA DÉCADA DEL MES QUE SE ACABA.

DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

AÑO: 783 D.

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DÍA: 28 HENNATÉ.

HORA LOCAL: 22:50.

Hades había guardado segundo durante unos instantes esperando la contestación de Ziro a Perséfone y, cuando esta se produjo, el holograma que le representaba asintió.

- Preguntad, pues. Se que la oferta que habéis presentado no tiene posibilidad alguna, pero quizás... esta...- Hades guardó un instante silencio y luego, el holograma vibró y apareció puesto en pie- Se que estáis ocupado, embajador. Espero veros nuevamente.