Partida Rol por web

Parpadeo ligeramente y veo una luz que proviene de enfrente de mi. Abro los ojos despacio mientras noto como mis extremidades van dejando de estar entumecidas por el frío. Giro la cabeza y veo que estoy apoyada en Anthony y medio sentada, a la par que Mich y Joseph están alerta moviéndose. - Chicos, ¿Qué ocurre? ¿Por qué estoy en ropa interior? - Digo sin levantar mucho la voz.

Desde la ventana Michael no ve nada, de hecho juraría que el ruido que oyen es el viento moviendo las ramas de los árboles. No cree que la cosa ahí fuera sea para tanto, lo que se escuchan son ruidos normales del bosque. Unos animales corriendo por aquí y por allí, quizás huyendo de algún depredador. El aullar del viento entre las ramas cargadas de nieve.

Mientras Katherine se calienta y puede vestirse de nuevo, sin comprender bien qué ha ocurrido mientras ella dormía. 

No veo absolutamente nada y eso me desquicia un poco, no le respondo a Joseph porque sería entrar en una discusión, así que me centro en Kat que se ha vestido ya. - ¿Recuerdas algo? No sé, estabas "rezando" allí y has mencionado a nuestra amiga... - pregunto para ver si algo llega a ella, quizás sea la forma más fácil de entender esta maldita situación o al menos intentarlo. 

- ¿Rezando? ¿yo?- Digo entre graciosa y perpleja, pero cuando escucho la mención a Alice empiezo a ver visiones sobre mi trance. Tengo la mirada perdida mientras contemplo las llamas y alzo la voz. - Bueno, recuerdo una biblioteca, libros sobre una de las mesas...- Acerco mi mano a mi sien frotándola un poco como si eso me fuese a hacer recordar mejor. - Había una persona sentada, aunque no recuerdo bien la cara ahora, supongo que sería Alice por lo que dije. Luego estaba esa figura delante de mi hablándome...- Me paro y siento como un escalofrío me recorre la espalda al recordar con nitidez como no se movía nada pero su voz retumbaba en mi cabeza. Ahora con un hilo de voz y como en un trance añado - Adoradme o morid. Vuestras almas son mías. - Sacudo la cabeza y los miro. - Creo que tenemos un problema.

Tratando de mirar lo que hay en el exterior, no alcanzáis a discernir nada con la tormenta de nieve y la oscuridad. Aún no era de día, aunque quedaban unas horas. Los ruidos en el exterior, que antes no cesaban, se paran de repente dejando un silencio inquietante que hace esperar lo peor.

Anthony, que se encuentra cerca de una ventana, no tiene tiempo de reaccionar cuando la ventana estalla hacia el interior. El estruendo hace que todos os asustéis, pues la madera al ser tan vieja tampoco aguanta aquel golpe. Algo agarra a Anthony y se lo lleva a la oscuridad de la noche. Tras él solo deja un agujero en la pared que da a la oscuridad y decenas de copos de nieve que entran en la estancia junto con la ventisca.

Tras el estallido de la ventana detrás mía pude sentir como mi cuerpo se sentía arrastrado hacía la oscuridad rapidamente con una fuerza descomunal. Podía ver como se alejaba de la luz que desprendía fugazmente y con ella la de sus amigos. Sentía que algo realmente grande lo llevaba del hombro, no era un animal ni un humano, sino algo que no era de este mundo... Anthony no sabía como no se había desmayado. Anthony no podía para de gritar de puro terror, desconocía lo que le iba a ocurrir, y sobre todo el temor de la muerte.

Siento como el aire sale de mis pulmones al tiempo que pasa todo. No consigo racionalizar lo que ha pasado pero algo dentro de mí grita para que corramos detrás de él para ayudarlo, obviando toda lógica de que no es seguro y de que podemos perdernos. 

Me levanto como si tuviese un resorte - Vamos, tenemos que seguirlo antes de que perdamos la pista con la tormenta. - Digo a la vez que en mis ojos se refleja la adrenalina del susto corriendo por mis venas.

Sin decir una palabra más, al ver como Anthony es arrastrado desde la ventana hacia el exterior, provoca en mi una reacción en consecuencia, cuando con el atizador en mano avanzo corriendo con tal de seguir sus pasos a donde sea que vaya mi amigo. No digo una sola palabra, simplemente salto por la ventana y me pierdo en la inmensidad de ese bosque. Muchas veces puedo parecer un cobarde, pero otras soy totalmente lo opuesto ya que pienso demasiado las cosas. Y en esta ocasión, el instinto y la necesidad de salvar a mi amigo, es más importante que cualquier otro asunto. 

Una vez mis pies pisan el exterior, intento buscar con la mirada hacia donde lo están llevando. La nieve no ayuda para nada, pero haré lo que sea para encontrarlo. 

Veo que Mich se lanza y se embulle en el frío y la oscuridad de la noche.

Intentando que esto no acabe fatal agarro por la muñeca a Joseph y con la otra mano sujeto firmemente el arma que había creado Anthony. Salgo por la puerta arrastrando a mi amigo y buscando a Mich.

Cuando lo veo me acerco a él, veo que está buscando el rastro que podría haber dejado lo que se llevó a Anthony y lo acompaño.

Sigo a Katherine que me llevaba agarrado del brazo para buscar a Michael... esto es de locos ¿que cojones ests ocurriendo aquí...? No entiendo nada 

Michael ¿estas bien? ¿Has encontrado el rastro de Anthony? 

digo preocupado y con algo de miedo 

No tenéis que ir muy lejos para encontrar quién o qué había cogido a Anthony. Veis a aquella cosa descomunal correr entre los árboles con vuestro amigo en su boca, o lo que sea que tuviera eso que lo estaba sujetando y lo estaba raptando.

La criatura no te ha cogido por la cabeza y has perdido tu arma, al menos sigues consciente. Ese bicho te mira con sus ojos brillantes y demoníacos, al tiempo que dos manos heladas sujetan tu cabeza y así corre de alguna forma. Tu cuerpo se mueve como si fuera el muñeco de trapo que un niño zarandea.

- Ya... No lo encuentro, pero... ¡Joder! - digo al ver que esa cosa con mi amigo en su boca. No tengo momento para acojonarme, simplemente aprieto con más fuerza el atizador que tengo en la mano y salgo corriendo como alma que se la lleva el viento siguiendo los pasos de ese bicho gigante. Como sea, no permitiré que le suceda algo a Anthony. 

No veo si me hay ramas, trampas o lo que sea en el suelo, mis ojos permanecen fijos hacia el objetivo y no veo la hora de alcanzarlo. 

Vemos al monstruo, es enorme y no consigo distinguir que es o que forma exacta tiene. Lo que si veo es a Anthony y Mich corriendo como un poseso a por ambos. Suelto a Joseph.  Joder, joder, él sólo no va a poder.  Ahora sujeto el arma con ambas manos e imito los movimientos de Mich a la vez que grito -Joseph, ¡ven!- 

Al escuchar a Katherine voy corriendo 

Era terrorífico solo poder ver dos ojos brillantes en plena oscuridad, solo escuchando su respiración y el sonido del leve viento. Intente con todas mis fuerzas liberarme e intentar huir pero como si nada, estaba totalmente inmobilizado. Lo curioso es que no me estaba haciendo daño solo me sujetaba y me observaba. Comencé a gritar desesperadamente para que mis amigos me salvaran.

Solo podía pensar en que se diesen prisa en salvarme...