Partida Rol por web

Las palabras del hombre se me antojan ofensivazs... no lo parecen pero la maner en que dice "que los forjados no tienen razon de existir" e incluyendo el hecho de querer quitarles a los forjados su piel, nuestro recubrimiento... miro al individuo ladeando ligeramente la cabeza. No entiendo de mentiras y politiqueos pero solamente teniendo en cuenta las riquezas que alberga este lugar dudo que sea el tipo de saco de carne que se detiene ante nada, es mas, despues de la explicacion de antes de Decker tal vez sea su manera de conseguir algo de vuelta tras liberar a los forjados... solo es una idea, una que entra en mi mente y no quiere salir... una que me pone furioso.

- Yo le doy mi recubrimiento saco de carne, si usted me da el suyo. - El tono de voz es mas que una simple amenaza, si me toca lo mato. En cuanto a capturar a uno de los nuestros, eso me gusta menos... pero el lado bueno es que podre preguntarle la verdad sobre lo que hace esta casa con ellos. Estoy harto de que me traten como un objeto, un arma a la que admirar o repudiar... y este individuo hace que me entren ganas de aplastarlo y recubrir su preciada piel con metal fundido.

Miro a Khala por su comentario, mi postura es bastante obvia, tengo pinta de que me importe la mala fama... tras el comentario y la mirada a Khala me callo, sin dejar vislumbrar si ayudare o no, o como lo hare...

Tras la presentación de nuestro nuevo cliente Jackie presentó cordialmente sus respetos, haciendo una cuidada reverencia comentando sobre el placer de conocerle y alabando algún que otro detalle sobre aquella prestigiosa familia denotando algo de  cultura, aprecio e interés.

Una vez terminado su inciso, el cual procuró que fuera lo más escueto posible, prestó atención a la explicación del señor Kraden sobre el encargo para el que pretendía contratarles. 

Durante la charla, Jack no salió de su asombro ni dejó de recorrer con la mirada la habitación de un lado a otro, posándose en sus compañeros mecánicos y su noble cliente. La tensión era palpable pero no era una de esas situaciones en las que querría o necesitara intervenir.

Asintió con el ceño fruncido, pensativa, mientras sus compañeros opinaban al respecto. Desde su particular perspectiva trataba siempre de procesar la información de manera alternativa y ahora se preguntaba cuál era el verdadero propósito de todo aquello, no de su misión sino de las intenciones de la casa Cannith para con los forjados de Eberron.

¿Y por qué querría un forjado mudar su piel? -me preguntaba mientras escuchaba al hombre relatarnos los motivos por los que nos hallábamos en aquel lugar en aquel momento. Un nuevo contrato, un nuevo peligro y esta vez, un posible vínculo. Un forjado enloquecido por un... ¿tratamiento? realizado por los mismos que nos contrataban. Dudas... preguntas... - ¿Quién era? ¿conoceríamos al forjado? pero mucho más importante... ¿cómo querían que nos encargásemos del problema? - Mientras eso pasaba en mis circuitos, escucho los comentarios de mis compañeros de viaje, tanto nuevos como Khala, como viejos camaradas como Mephist.

-Bzzz... ¿Preferible... destruir o capturar? - pregunté con mi metálica voz, esperando aclarar ese punto antes de proceder adelante.

Preferentemente capturar, pero nose si se dejara, porque tiene la extraña idea de destruir todo. He de decir que ha dejado ocho muertos en su huida, asi que no me importa decir que pagare 200 monedas a cada uno de ustedes si me lo traen. Vivo o muerto- Despues de decir eso veis que se gira y mira hacia una de las ventana que da en direccion hacia la estatua del jardin donde estabais antes.-Espero que sean cautos y discretos al respecto, claro esta.

Por las palabras del Cannith creo que le interesa más que eliminemos al forjado que capturarlo, un testigo muerto no habla y seguro que todo lo que hacen aquí no es legal.

Por mi parte intentaré que el forjado salga vivo, pero en este grupo hay demasiado aficionado a los golpes, así que será difícil.

- Claro señor, nadie se dará cuenta de que estamos alli.

Asentí a lo que decia Khala, aunque no las tenia todas conmigo, Por lo que sabia de ellos y de mi miemo no eramos un grupo demasiado discreto. De todos modos intentariamos sacarlo de ahi con vida, si podian ayudarle. Y me imaginaba que Kernel y Mephist no querrian matar a uno de los suyos a menos que no tuvieran mas remedio. 

- Vamos. Acabemos cuando antes. - Dije al grupo. No me gustaba demasiado estar ahi y cuanto antes acabasemos antes nos largariamos. 

Algo no me gusta... y estoy casi seguro de que quiere que matemos al forjado y eso no va a pasar. Sere un guerrero y un mercenario pero aun me queda algo de honor para los que son como yo y mas aun si han sido modificados por sacos de carne con infulas como el que tengo delante.

El resto del grupo decide que es el momento de irse y estoy de acuerdo, no digo palabra alguna aunque un detalle no se me escapa, demasiada discreccion pide... no soy demasiado bueno en eso y creo que en este caso particular tampoco me apetece serlo.

Esto sí que era interesante pese a la licitud dudosa, la moralidad cuestionable y la presencia de forjados pero en cuanto Jack escuchó la cifra, una sonrisa socarrona rasgó sus comisuras inevitablemente. 

Les había rogado discreción a la hora de realizar el trabajo, ante lo que la joven frunció el ceño enarcando una ceja mientras se le escapaba la mirada hacia Mephist. No quería infravalorar a sus compañeros, bien cierto era que aún no había compartido demasiado tiempo con ellos y desconocía de sus habilidades, pero sus prejuicios contra los forjados hablaban primero.

-Pues más vale que se engrase las junturas...-

Pensó.

Si había algo que ella podía proporcionar era discreción, no obstante, el hecho de ir en un grupo hacía las cosas más difíciles aunque también tenía sus ventajas, evidentemente.

Sus compañeros parecían más o menos conformes con las condiciones del "contrato" por lo que Jackie se limitó a asentir y a sonreír cuando hicieron sus comentarios. Antes de marcharse  dedicó unas escuetas palabras al señor Kraden.

- Cuente con nosotros, señor. -

Sonrió mientras hacía una corta reverencia protocolaria a modo de despedida.

Echo una mirada a Mephist antes de responder, mientras escucho los comentarios de los compañeros reunidos, pienso que es una idea un tanto ridícula pasar desapercibidos yendo en la compañía en la que vamos, pero simplemente seguiré la corriente de mis compañeros. En cuanto a capturarlo... bueno, otros han caído en batallas, si es posible preferiría no tener que destruirlo, pero por desgracia... no siempre es posible.

-Así... sea... pongámonos... en marcha... -dije mientras me dirigía hacia la puerta acompañando a Mephist, donde pararía a esperar que algún otro guiase el camino.

Decker al igual que hizo en la entrada os acompaña a la salida, y antes de llegar al mercado se os gira y dice: bueno aqui teneis el mercado mejor surtido de todo eberron, pocos mercados pueden competir, si quereis comprar algo ahora es el momento.

Sigo al puñetero enano mientras me doy cuenta que todo el asunto del forjado loco me esta poniendo realmente de mala leche... miro al enano detenidamente mientras intento adivinar que narices ha querido decir con eso, ¿nos comprara algo? Porque sino... yo creo que voy servido, dudo que con el dinero que tengo pueda costearme algo mejor...

Una vez en el mercado le consulté una duda a Decker.

- Tu no tendrás por casualidad, algo que nos ayude a capturar al forjado enloquecido, verdad? Se que los Psionicos pueden crear un ectoplasma capaz de atrapar lo que sea. 

Mientras le preguntaba, observé al enano y algo me dijo que no estaba del todo relajado. 

- Ocurre algo? - Le pregunté. Tal vez nos ocultaba algo, op le daba mala espina y seria mejor que nos advirtiera de ello antes de separarnos. 

El ectoplasma que tu dice es igual que cualquier conjuro de mago, o incluso que una bolsa de enmarañar, si ese forjado es fuerte, seguramente se deshiciera de ello en un abrir y cerrar de ojos.- bajando el tono de voz-nada este viejo enano ya esta muy cansado para ir con paso acelerado a los sitios.

- Ahora no es que tenga necesidad de comprar nada, quizás más adelante cuando pueda encontrar algo que me sea de gran utilidad - por lo que vi Decker estaba bastante nervioso, pero no tengo motivos para desconfiar de el más de lo habitual.

La verdad es que no se le ocurría nada que pudiera resultarle de utilidad ni sentía la urgencia de comprar cosas de primera necesidad, tampoco es que tuviera mucho dinero encima.

Jack se mantenía en silencio, cavilando en las posibilidades de enfrentar a aquel forjado mientras observaba sus alrededores y prestaba atención a los comentarios de sus compañeros. Durante un instante miró con suspicacia a Decker en el momento que Kanatash levantó la incertidumbre que el enano se aventuró a disipar en un santiamén.

La joven muchacha reaccionó tras la intervención de la cambiante, comentando su falta de interés o necesidad de comprar.

-Eh...sí, yo tampoco nada...de momento, creo...-

Repasó mentalmente una lista mientras se tocaba algunos bolsillos.

- No, nada-