Partida Rol por web

Suelto mis espadas. Estos bichos estaban siendo muy pesados y ya es hora de acabar con ellos. Acumulando mi ki, creo una nueva espada bastante extraña, pues su filo se enrolla en forma de espiral

-Oye bicho, deja de molestar y muerte de una vez-le digo mientras levanto la espada y se la lanzo como si fuera una lanza, creando una gran onda de energia a su paso, dañando todo lo que su estela rozaba

Parece que la situación se está poniendo complicada, pero no podemos aflojar...

Bryan decide proteger a sus compañeros mientras los demas preparan la gran ofensiva, Yumiko  concentra su poder interno mientras notais como la sala comienza a temblar debido al poder de la tecnica y con un simple gesto, arroja la espada, la espada cubierta de energia  atraviesa el combate  alcanzando a todos los enemigos incluido al ser que se encuentra al fondo del todo.

Muchos de ellos se derrumban, aunque algunos quedan en pie pero Elena y Yumina acaban con ellos de manera rápida y eficaz dejando solamente en un monton de huesos que se esfuman al instante, sin embargo parece que no esto no acabado ya que el Señor de los Muertos, se levanta como puede.

---Parece ser que hemos fracasado en nuestro cometido, sin embargo...esto no es el final...vosotros nos acompañareís en nuestra caida al infierno...¡morid!- y con un descomunal grito el Señor de los muertos libera toda la energia acumulada hasta el momento en una descomunal explosión sobrenatural, la explosión os alcanza a todo y hace que parte del techo se caiga sobre vosotros y pese a el estruendo todos podeis escuchar en vuestras mentes una última frase- Maestro...us...sé ....igo...de nuestro....juramento.

Cuando lograis salir entre los escombros veis que la sala en general ha sido bastante dañada, vuestro querido "amigo" oseo esta sepultado bajo los escombros y a diferencia de los otros no ha desaparecido., el portal que accedisteis esta roto y ya no podeis salir de alli por ese medio, por alivio vuestro podeis ver que el caliz está intacto pese a que sen encontraba bastante más cerca del epicentro de la explosión...

El combate ha sido complicado... Digno del premio que guardaba su líder...

- ¿Estáis todos bien? - Pregunto mientras intento salir bajo los cascotes. 

El último ataque ha sido muy fuerte... Y me ha producido grandes heridas... Por suerte nada de gravedad. De manera que mientras voy saliendo de debajo de las rocas, observo como las heridas se van curando a velocidad vista.

- ¿El grial? - Miro hacia el premio... Parece que está bien... Aunque en el siguiente momento me sigo acordando de mis compañeros. - ¿Estamos todos bien? 

Vuelvo a repetir saliendo de debajo de los cascotes ya curada por completo, dejando solo en mi ropa los signos de las heridas.

-HIIIII!!!!- Me encojo y cubro la cabeza con los brazos. Si alguno de esos escombros llega a caer encima mío...

...

...bueno, parece que todo salió bien. -..!!- No, no salió todo bien, la onda expansiva de la explosión causada por el bicho feo me cubre por completo y me arroja lejos, haciendo que ruede por el suelo.

Y allí quedo, apenas consciente y llorando. -_{...guuh... ...Y..yun...chan... quiero ir a casa...}- No hay una sola parte de mi cuerpo que no me esté doliendo ahora.

Veis que pese a que los otros compañeros no te responden estos se levantan algo tambaleantes seguramente desorientados por la explosión al parecer todos estais con vida....

Bien... Parece que al menos todos estamos vivos... Mis compañeros tienen algunas heridas, aunque mis reservas de magia son tan bajas que no puedo hacer nada por ellos.

- Venga... - Digo dirigiendome hacia la salida. - Será mejor que salgamos de aquí lo antes posible.

No me gustaría encontrarme con ningún enemigo justo cuando salgamos.

El portal al que accedisteis está roto, así que primero te centras en tu objetivo que es el caliz dejando a tus compañeros  que se recuperasen del aturdimiento; tras cercionarte de que no habia ninguna presencia salvo las vuestras, te acercas y tomas el caliz, te fijas que es un caliz sencillo de piedra con diversas runas grabadas con surcos negros.

Te estas preguntando que es lo que podrian decir cuando sientes una presencia repentina en la sal, te giras preparanda para ver de que se trata y  enfrentarte a ello cuando te detienes al ver que se tratan de dos mujeres extremadamente viejas, cualquiera diria que son brujas puesto que van montadas en escobas y por gemelas aunque se diferencian de tener una el pelo de un color rojo incandescente y la otra de color azul hielo.

---¡MAL!- grita la peliroja - ¿ Que hubiera pasado sí hubiese sido un enemigo? ¡Estarias muerta! ¡Por Abel, niña! ¿Acaso no te he enseñado nada?

A continuación se gira hacia los demas.

---¿ Y que clase de agentes soy vosotros? ¡Poneros de pie inmediatamente¡ En mis tiempos los guerreros caian muertos de pie, no tirados entre los escombros- farfulla mientras se eleva junto a la otra mujer- Kisidan estará al corriente de esto, tenedlo por seguro

Ha pasado tanto tiempo que no sé sí te acordarás de quien es ella, es Kotake, tú Maestra y Lider del circulo de magos de la emperatriz; de la otra mujer no tienes ni idea...

-Quién rayos te crees que soy?! Benkei??- Le grito ofuscada a la pelifuego. -N-no me esperaba todo esto! Es demasiado!- La señalo con el índice. -Si tan chulas se creen, por qué no nos vinieron a ayudar? Pues seguro, ahora que ya todo acabó es fácil venir a criticar!

Paro un rato para respirar... -E.. momento... Tampoco estamos muertos!!! Qué tonterías dices?!- Creo que se me nota la vena del temple.

Parece que todo estaba despejado cuando cojo el cáliz... Al hacerlo, mi maestra y una mujer practicamente igual que ella, aparecen.

- Mil disculpas maestra. - Digo agachando la cabeza. - Tiene usted razón... Bajamos la guardia y podía haber sido una trampa... 

¿Ha sido una prueba? Aunque, por otro lado... Ha sido una prueba muy mortal...

- ¿Cómo han llegado hasta aquí?

No,no es una ilusion