Partida Rol por web

Dioses en extinción: Los ultimos favores divinos

{ 2.1 } Los Entusiastas de Holckein

Cargando editor
26/05/2012, 02:18
Eira Linwëlin

Desde que su instinto le había hecho llevar sus manos al arco colgado a la espalda cuando el matón se adelantó hacia Umbra,  se quedó en silencio, pensando que estaba demasiado nerviosa desde... pues desde que había sido encerrada en la cárcel, cuándo si no.

Entra y se sienta en silencio en la mesa, escuchando a Hiemdrich hacer un comentario que no viene a cuento, como si quisiera que le contara qué pasó para que se la aprecie tanto en el lugar. Suponiendo tal vez que fue algo ilegal, ¿tal vez pretende cumplir el trato que hizo devolviendoles su libertad para después acusarles de otro delito?

Cuando Umbra habla de la fauna autóctona habitual del garito, Eira suspira.
- Probablemente no seríamos considerados mejor que ellos si decimos de dónde venimos. - dice de forma que sólo su grupo escucha, para después levantar un poco la voz. - Para mi un vaso de vino con la comida, por favor. 

Notas de juego

Ibram, dijiste que eso te pasaba sólo en las partidas en mesa, ¿verdad? ¿VERDAD?

XD

Cargando editor
29/05/2012, 10:18
Pieter "Dedosgrasientos"

!Marchando! !Si si! !Ahora mismo! Os dice Pieter desde el otro de la barra mientras comienza a preparar cosas y a dar órdenes a la cocina a voz en grito. Pese a lo temprano de la mañana se puede ver a una gran congregación de parroquianos en la taberna. Todos comendo un poderoso desayuno mientras hablan y ríen en un ambiente distendido y agradable. Las salchichas, especialización de la casa, se pueden ver en todas las mesas al igual que las jarras de cerveza. Parece en verdad que algunos de los clientes no han llegado hace poco sino que llevan ahí más de un día. Un párroco, con sus ropas de oficio incluidas, duerme inconsciente sobre una mesa atestada de jarras de cerveza. La imagen os hace sonreír, especialmente a Umbra, pues bien sabe que es algo altamente común ahí donde está Pieter. Esperais la comida sentados en la mesa.

Cargando editor
29/05/2012, 23:34
Umbra

Bueno dama y caballeros preparaos para degustar uno de los manjares más exquisitos de esta gran ciudad. Se rumorea que el mismísimo emperador pidió que le llevaran de estas salchichas para probarlas debido a la fama que tienen. Además puede que sea la última vez que comamos entre cuatro paredes, así que mejor que sea una comida como Sigmar manda. Porque supongo que de ser posible partiremos hoy mismo, ¿no capitán? le pregunto al capitán de la guardia con tono burlón y una media sonrisa en la boca.

Cargando editor
29/05/2012, 23:41
Otto Dusseldorf

¿Cómo es posible, entonces, que nunca haya oído hablar de ellas? He estado unas cinco o seis veces en la capital, y nunca oí de este lugar. 

Aunque lo cierto es que tanto mencionar comida estaba abriendo el apetito del escudero, y la sed.

Cargando editor
30/05/2012, 19:49
Diego Wolffham

Espero que me dejen bien servido a mi....-Miró al perro y luego a umbra.-la calidad la comprobará Asche !JÁ¡.-rió de forma ruidosa Diego ante el comentario.-y un poco de cerveza no me sentaría mal oye...-deja caer el soldado.

Cargando editor
30/05/2012, 20:45
Umbra

Me encogí de hombros ante la pregunta de Otto supongo que para escuchar las palabras adecuadas tienes que oírlas de las bocas adecuadas. He dicho que es uno de los más sabrosos, no de los más conocidos. Y lo del emperador no es más que un rumor y si ya has estado con anterioridad en Altdorf ya sabrás que si se hiciera caso de los rumores habría más brujas y adoradores del caos que habitantes.

Y no os preocupéis que si en algo es experto Pieter es en combatir el hambre. Todos saldremos bien servidos, incluso Asche le comento a Diego mientras acaricio la cabeza de su perro.

Cargando editor
31/05/2012, 10:07
Otto Dusseldorf

¿Acaso no es cierto que hay más brujas y adoradores del Caos que habitantes? -comentó sonriendo- En esta mesa, sin ir más lejos, ya hay una bruja.

Notas de juego

Umbra: No me lo pongas tan fácil.

Cargando editor
31/05/2012, 19:42
Umbra

Es cierto, soy una bruja. Pero si lo que dices es cierto y yo soy una bruja, ¿no te hace eso a ti un adorador del caos? respondo con tono burlón y una divertida sonrisa sin apartar la vista del perro mientras le sigo acariciando la cabeza.

Notas de juego

A este juego podemos jugar los dos :P

Cargando editor
07/06/2012, 22:43
Pieter "Dedosgrasientos"

Pieter llegó con una generosa fuente de salchichas y con las bebidas que el grupo había pedido. !La hija predilecta ha vuelto! !Y con hambreeee! !Jajajaja! Gritó mientras os servía. La gente se había vuelto a miraros, sorprendidos de que Pieter dijera semejantes cosas de alguien en su taberna. Dejó todo en la mesa para que cada uno se pudiera hacer con lo que había pedido, y colocó un cestillo de panecillos en el centro. Era un manjar de reyes. Las salchichas, de varios tipos, formas y colores, estaban en su justo punto, la cerveza se encontraba fría y el pan tierno. Se acercó con gesto confidente a Umbra y le preguntó: Dime, ¿Necesitas algo más querida?

Cargando editor
08/06/2012, 17:37
Umbra

Solo una cosa más le susurro al oído al pequeño halfling tras comprobar que todos los parroquianos se habían vuelto a sus propias conversaciones aunque me duela en el alma volver a dejarte sin mi compañía solo estamos aquí de paso. No te preocupes que volveré en cuanto termine mis asuntos le pongo la mano sobre la cabeza y le revuelvo el pelo como haría con un niño pequeño que se lo mucho que me echas en falta.

Son asuntos complicados y no quiero aburrirte ahora con los detalles. Ya tendremos tiempo cuando vuelva de hablar frente a una jarra de buena cerveza, no el agua sucia que repartes a los borrachuzos. Pero necesito que me digas si en la taberna hay algún comerciante que vaya camino de Middenheim. O si conoces a alguno.

Cargando editor
11/06/2012, 21:39
Pieter "Dedosgrasientos"

Ohhh... Entiendo querida. Dijo Pieter mientras se volvía con escaso disimula y señalaba con un dedo regordete a un grupo de hombres y mujeres que estaban sentados frente a una fuente de salchichas pero que prácticamente no probaban bocado. Las mujeres estaban bastante blancas, y los hombres tenían el gesto un poco perdido. Esos hombres de ahí son mercaderes, al parecer venían de... Oh demonios, no recuerdo. La cuestión es que los asaltaron de camino a la ciudad, y creo que han perdido a gente. ¿Ves? !No comen! !Aquí se viene a comer! Susurra bastante indignado al parecer sin darse cuenta de la situación que los aflige. Han estado comentando que iban de camino a Middenheim pero no sé si continuarán su viaje tras eso. ¿Qué te voy a decir? Mi único objetivo es intentar alegrarlos con cerveza y salchichas. Pero parece que se niegan... Dicho lo cual di una palmada a Umbra en el hombro y se fue a atender algunas mesas.

Cargando editor
12/06/2012, 13:36
Otto Dusseldorf

Alabado sea Sigmar, es una señal del cielo. Tienen lo que necesitamos y tenemos lo que necesitan. Muchas gracias Pieter, que los dioses halfling se lo paguen a tu gente con largos años de buenas cosechas.

Has sido de gran ayuda, tomaré otra cerveza más y otras dos de sus salchicas.

Cargando editor
12/06/2012, 13:46
Pieter "Dedosgrasientos"

Ajam. De nada buen hombre. Sabía que si viajaba junto a Umbra, aquel era un sujeto de honor. Desde el otro lado de la estancia ya, te hace un gesto con el pulgar y prepara una jarra de buena cerveza y unas pocas salchichas más en una fuente.

Cargando editor
12/06/2012, 18:44
Diego Wolffham

Diego que se había dedicado a honrar a su anfitrión dándole buena cuenta con ayuda de su perro a las salchicas y la cerveza.-Está jodidamente bueno.-dijo a mitad de comer una salchicha y alzó la mano junto a la del escudero,se dió un golpe en el pecho y asintió.-otra ración por aqui,y algo mas de cerveza.-Sonrió a los de la mesa y palmeó al perro en la cabeza mientras este masticaba con mimo una salchicha.-tiene mucha hambre...y yo también jajaja.-el soldado se abstenía de la conversación en cuanto a decisiones se trataba,desde aquella puñalada en la calle,decidió ser un hombre un tanto mas...cuidadoso.

Cargando editor
12/06/2012, 23:07
Umbra

Eres un sol. Cuando vuelva te de Middelheim te traeré de esas especias que tanto te gustan despido al pequeño cocinero devolviéndole el gesto con el pulgar arriba y acompañandolo de un guiño. Después ataco sin piedad una de esas jugosas y especiadas salchichas de color blanco que eran mis favoritas. La devoro con avidez y sin levantar la vista del plato. Cuando termino le doy un buen sorbo a la copa de vino para hacerla pasar por la garganta bueno chicos ahí tenemos nuestro querido y preciado billete a Middelheim. Propongo terminar de comer antes de comenzar las negociaciones. Siempre se charla mejor con el estomago lleno.

Cargando editor
22/06/2012, 12:32
Hiemdrich

El capitán de la prisión también dio buena cuenta de la comida y parecía bastante satisfecho pues dejó unas cuantas monedas en la mesa para que el próximo viaje que Pieter viniera pudiera recogerlas. Buen lugar... nunca había estado en el... Se limpia con un trapo la boca y luego mira entornando los ojos hacia la mesa en donde aquellas personas desconsoladas se encontraban lamiéndose sus heridas. Ahora que hemos comido, sería bueno hacer algunas averiguaciones a ver si podemos sacar algo de aquellas gentes. ¿No creen? La indicación de que el no iría estaba claramente implícita en la frase.

Notas de juego

Claro que el no va a ir...XD. Teneis que currar vostoros.

Cargando editor
22/06/2012, 20:44
Umbra

Por supuesto que si. Y si lo hacéis vosotros mientras yo sigo zampando salchichas mejor. Lo que me extraña es que con la madera de político que tiene este tipo se haya hecho guardia. Habría llegado muy lejos aquí en Altdorf... pienso con una pícara sonrisa al escuchar las palabras del capitán.

Por supuesto pero, ¿no lo voy a hacer yo todo verdad? Ya he conseguido buena comida y encontrar lo que buscábamos. Esperaba que alguien más demostrara iniciativa y capacidad. Además no es propio de caballeros dejar que las mujeres hagan todo el trabajo duro concluyo dirigiendo la mirada a Diego y Otto alternativamente.

Cargando editor
23/06/2012, 21:26
Diego Wolffham

Diego remató con velocidad la ultima salchicha y bebió de su cerveza.-Está bien..-Se limpió la boca y se levantó de la mesa,ajustándose la espada al cinto.-iré yo a hablar con ellos,tal vez un poco de charla mercenaria les haga bien.-se acercó a los comensales de la mesa,carraspeó y habló rompiendo el silencio.-Disculpen sus señorías,pero no he podido evitar comprobar su consternación...-señaló la mesa y acercó una silla cercana para sentarse junto a ellos.-Mi nombre es Diego Wolffham y soy un veterano hombre de armas...-se mesó el bigote y sonrió.-corren rumores de que viajáis lejos y es de saber común que los caminos no son seguros...-se palmeó la mejilla y confesó.-ni siquiera para gente de armas como yo,así que puede que los servicios de mis compañeros de viaje les sirvan de ayuda...-se encogió de hombros,miró a los presentes y dijo.-soy un hombre honrado y de palabra...como todos los estalianos.

Cargando editor
25/06/2012, 21:24
Erick Von Schaffer

Si, en efecto, los caminos son... terribles. !Terribles! El hombre niega con lágrimas en los ojos, aferrando a su esposa con un brazo que pasa por sus hombros. Ella mira al suelo desconsolada mientras las lagrimas gotean sobre un plato de salchichas que ya más parece un caldo que otra cosa. La pareja parece un matrimonio, y los hombres que hay frente a ellos, dos sujetos con armaduras de cuero y chapas de metal oscuras con un escudo grabado sobre el pecho, no hacen signo alguno de detener al hombre que habla con la pareja. Una ojeada basta para ver que están heridos, y no tendrían muchas posibilidades de defenderse frente a Diego. Un honrado ciudadano libre ya no puede viajar y comerciar, ni hacer nada, esperan que nos quedemos en nuestras casa, encerrados, mientras nuestros recursos menguan. Pero cuando uno se ventura al exterior... Se lleva las manos a los ojos. !Oh nuestro pobre hijo! La mujer llora más fuerte al oírlo.

Cargando editor
26/06/2012, 20:00
Eira Linwëlin

Aunque Umbra con sus palabras dio a entender que debían moverse los hombres para hablar con el grupo de comerciantes, tal vez recordando la conversación que tuvo con la mesonera, Eira se levanta tras haber comido poco, pero suficiente, y acercándose a Diego, le pone suavemente una mano en el hombro, mientras habla al grupo de comerciantes. 
- Siento mucho su pérdida. Si todavía desean ir a Middelheim nos gustaría acompañarles, y defenderles en caso de ser necesario - dice girándose lo justo para que vean apoyado en la silla en la que se sentó, su arco y sus flechas.