Partida Rol por web

Buenas tardes Apsalar y Gobolina, ya estáis dentro. Bienvenidos.

Como podéis ver, en la otra escena están las fichas de los dos PJ. Son hermanos, y tenéis que confirmarme cual elegís.

Despues, añadid un nombre, un avatar realista y unas líneas de trasfondo (en el foro indiqué cuatro o cinco, pero no hay extensión maxima). Para el trasfondo vamos a poner que estamos en torno a 1350, y os dirigis al pueblo de Rivera,cerca de la ciudad castellana de Avila(no hay mas premisas).

Deciros en cuanto a las reglas que hace unos años solía añadir un resumen completo de las mismas,en una escena propia. Hoy en dia lo único que añado de reglas es un listado (resumido) de las acciones de combate, donde, en el caso de haberlo, los jugadores puedan escoger lo que quieran hacer.

Y una última cosa. En mis partidas los jugadores hacen sus lanzamientos de tiradas... Excepto en los combates. Un combate sencillito entre unos 5 o 6 personajes PJ y PNJ  tiene, sin exagerar, entre 12 y 20 tiradas por turno. Y en rpw el hecho de esperar el lanzamiento de cada jugador resulta muy costoso y lento.

Por ello, en los combates, vosotros declarareis acciones de combate (del listado que os dije antes) y yo hago todas las tiradas, arbitrando acciones de PJs y PNJs de una tacada. Este método hace totalmente sencillos y ágiles los turnos.

Y poco más. No suelo poner tanto rollo en el Off Rol, prefiero explayarme en la narración ;)
Cualquier duda o comentario es bienvenido.

Bueno, vamos allá. Yo me quedaré con el Cazador, cuyo nombre e gustaría que fuera Gutierre.

Tengo varias preguntas sobre el trasfondo histórico. Es por hacernos una idea del dónde y el cuándo que nos ayude a montar la historia de nuestros personajes. Tal vez en una partida corta como esta no sea necesario que nos trabajemos un trasfondo del personaje muy detallado, pero aun así siempre es buen momento para aprender cosas nuevas.

Creo haber leído que en el siglo XIV ya no había feudalismo como tal, sino que Castilla tenía a su rey (¿Alfonso XI?) y, por debajo de este, sus señores de la nobleza. La plebe ya no estaba atada a un lugar como con los señores feudales, entiendo, ¿no? ¿Podían cambiar de tierras en busca de trabajo o una nueva vida? Es por saber si esos dos hermanos van de camino a Rivera con vistas de quedarse o como lugar de paso, o si van pero están obligados a volver por sus posibles obligaciones hacia su señor.

¿Tenían apellidos, los plebeyos?

¿Cómo eran vistas las mujeres con habilidades especializadas como una curandera? No sé si era algo normal o si Gutierre va a tener que partirle a alguien los dientes por meterse con su hermana... 

Hola, voy contestando:

- Pues mira, la época podría ser nada más comenzar el famoso rey Pedro I el Cruel (con casi 16 añitos). De hecho, las aventuras corrientes de aquelarre suelen comenzar a partir de este año (se trataría ya de la Corona de Castilla)

-Lo del cambio de lugar o tierras de la plebe no es algo homogeneo en toda la Península, pero podemos considerar que para huir de unos territorios o instalarse en ellos era necesario, para el pueblo llano, contar con el permiso de los señores (feudatarios, conses,nobles bajos, barones, etc).

-Lo del destino al que vais (Rivera) pretendia narrarlo en base al trasfondo que tuvierais para vuestros PJ (esta aventura es flexible en ese sentido). Por tanto, podeis concretar unas lineas en el trasfondo para decir qie vais enviados por un noble, por un clérigo (obispo, por ej.), por cuenta propia por cierta razón (visitar a un familiar, amigo) o bien buscando trabajo. Eso son solo algunas ideas(¿Quizá vais a pagar o cobrar ina deuda?¿O tal vez huid hasta esw pueblo de alguna condena lejos de alli?,jeje)

-los villanos (asi se llama el escalafon medio de este juego (por encima burgueses y nobles, por abajo vampesinos y esclavos) no solian tener apellidos. Si da mucho juego poner motes a los personajes, claro está.

-En cuanto a las mujeres en la edad media, estaban defenestradas, ninguneadas y básicamente apartadas de todo evento social, bélico, político, etc. Por mi parte me gusta el realismo en las partidas, pero con los PJ de los jugadores doy mucha libertad. Por ejemplo, ¿No podria usar una mujer una espada? Una villana o campesino no, por razon social (al igual en masculino); pero ¿ porque no una mujer noble no podria hacerlo en sus partidas? Si veo una razon logica y divertida, y al jugador/a le apetece, podemos hacer excepciones, sin duda. Una mujer curandera no hay problema, y tampoco es que vayamos a narrar (ni quiero hacerlo, la verdad,) esos desprecios al genero femenino ;)

-Tambien te digo, si alguien se mete con tu hermana esta genial que la defiendas (o ella a ti), no por ser mujer, sino por ser parte de tu familia y vida :)

Os pregunto: ¿Qiereis que añada algo de ambientación general sobre la edad media

y tal?

Por mi parte prefiero ser coherente con la época, además, que a mi personaje le va bien.

He creado esta historia para ella, por explicar un poco de dónde viene su sabiduría y tener en cuenta su personalidad. Si a ti te parece bien, Apsalar, puedes usarlo para crear la tuya y que no contemos cosas distintas sobre nuestros padres o lo que nos ha motivado a movernos. Si quieres cambiar algo porque ya tenías en mente otra cosa, me lo dices sin problema porque ya ves que las partes de historia que tenemos en común no las he profundizado y se pueden cambiar. 

Oliva es una mujer de 23 años, morena, de tez blanca, más porque se tapa ante el sol y suele rondar bosques sombríos para buscar plantas que la ayuden a mantener el difícil equilibrio que lleva su mente.

De joven salía a hurtadillas tras su padre y su hermano cuando iban de caza. Les observaba esperando aprender con el simple hecho de mirarlos, pero pronto descubrió cuál era su lugar. Aprendió las duras labores de su madre, pero el bosque seguía llamándola, así que al atardecer salía en busca de animales, árboles y plantas con los que quedarse fascinada. Una fuerza natural le hacía sentirse en su lugar cuando permanecía allí horas, en silencio. Imitando movimientos, sonidos, descubriendo nuevas flores.

Cambiaba el sueño de sus noches por una curiosidad que no se saciaba nunca. Cada vez más callada durante el día, más ausente, esperando que llegara el ocaso, con la mirada perdida. A veces su madre le preguntaba si había hablado con alguien, temiendo que estuviera poseída.

Obediente y sumisa en la vida austera que llevaba pero con un latido animal en las noches que despertaba todo lo que sentía que era en realidad.

Una noche de viento, mientras olía la tierra y palpaba las hojas cercanas, una figura encapuchada se arrodilló junto a ella. Y para su propio asombro, no se asustó, algo que no era habitual en ella. Aquella energía que la acompañaba, que buscaba junto a ella en los matorrales, le resultaba una presencia familiar. Con los años fue creciendo y aprendiendo de Loba, una mujer que aparentaba muchos años pero con la vitalidad de un ciervo y la sabiduría de un lobo para encontrar sus presas en forma de hierbas “mágicas”.  

Al morir su madre, las tareas se le acumularon y sus ojos cansados solo reavivaban la luz en contacto con el bosque y las criaturas que en él habitaban. En compañía de la que sentía como una madre y a quien debía las ganas de despertar cada día.

Con el paso del tiempo su padre también murió y solo le quedó su hermano Gutierre. Habían permanecido casi ocultos, sobreviviendo de la caza y esquivando a las heridas y enfermedades con ungüentos y bebidas que Oliva preparaba con determinación y seguridad. Solo en aquellos momentos parecía otra, tal vez lo fuera.

Las historias que su padre contaba habían calado en Gutierre. Tiempos mejores llegaban tras la reconquista y las ciudades se llenaban de personajes dispares donde podían prosperar con sus propias tierras. De modo que partieron, contra la voluntad de Oliva, que nada dijo ni expresó en su rostro. Solo sintió el crujir por dentro de un corazón que poco entendía de humanos. Asustada y con una sensación desoladora por dejar atrás su hogar, salieron al alba, un día que hacía calor, hacia tierras nuevas.

Nunca hubo despedidas, pero jamás olvidaría a Loba, aquella extraña mujer que ya ni siquiera sabía si era real o la había inventado para sobrevivir. De lo que estaba segura es de que la quería y jamás abandonaría todo lo que con ella había aprendido.

He encontrado el libro de Aquelarre (3a edición) y le he echado un vistazo a la parte de trasfondo histórico del Reino de Castilla:

A llegada del siglo XIII encuentra a la corona de Castilla envuelta en la anarquía y el desgobierno, pues los nobles y el rey de Aragón intentan por todos los medios influir o, mejor aún, derribar al todavía niño Fernando IV, al que su madre, la regente María de Molina, tiene que defender a capa y espada, consiguiendo finalmente que sea declarado rey en 1301, lo que no acaba ni mucho menos con la caótica situación del reino, pues tiene el nuevo rey que seguir haciendo frente a levantamientos nobiliarios y a las pretensiones aragonesas hasta el mismo día de su muerte en 1312, cuando se halla en Jaén preparando la toma de Algeciras. Y según cuenta la leyenda, su muerte fue provocada por una maldición lanzada un mes antes por los hermanos Carvajales, enemigos del monarca que éste había ordenado ajusticiar encerrándolos en una jaula para, a continuación, despeñarlos por un precipicio, aunque antes emplazaron al rey a una muerte segura en poco tiempo. Debido a esa leyenda, Fernando IV sería recordado como El Emplazado.

Sea como fuere, la muerte del monarca deja el trono castellano en manos de su hijo, Alfonso XI, que cuenta tan sólo con un añito de edad, por lo que María de Molina, su abuela, se arremanga las sayas y se convierte de nuevo en regente, aunque
acompañada esta vez de la esposa y de los hermanos del rey fallecido —todo quedaba en familia—, hasta que en 1325, con quince años, Alfonso XI es declarado mayor de edad y asume sus tareas como rey de Castilla, dedicándose desde entonces a darle fuerte y flojo a tanto noble levantisco, que entre ajusticiamientos, asesinatos y emboscadas, los deja bastante mal parados, ganándose el sobrenombre de El Justiciero entre sus seguidores —los nobles posiblemente le llamarían cosas peores—. También invierte dinero y esfuerzos en proseguir la guerra contra Granada que había empezado su padre, venciendo a los moros en la batalla del Salado (1340) y conquistando Algeciras (1344), claro que no contento el buen hombre, que creía que estaba en racha, prosigue el avance hasta Gibraltar, donde en 1350 se le acaba la suerte; y es que un año antes, en el puerto de Barcelona, había desembarcado una nueva enfermedad, la peste negra, que rápidamente se extendió por la Península, y se llevó consigo, entre varios millones de personas, al propio rey —al que, por cierto, enterraron en dos partes: el cuerpo fue llevado a Sevilla y los intestinos se quedaron en Jaén: misterios de la historia, oiga—. Pero lo que nadie puede negarle al buen Alfonso XI es que supo divertirse, pues además de los dos hijos legítimos que tiene con su esposa, María de Portugal, tenemos que mencionar a los diez hijos, diez, que le dio su amante, Leonor de Guzmán, lo que traerá cola, como ahora mismo veremos.

Y es que, claro, muerto el rey le sucede su legítimo hijo, Pedro I, quien convierte en consejero principal a su ayo, el portugués Juan Alfonso de Alburquerque, que ni corto ni perezoso le dice al nuevo rey que está tardando ya en quitar de en medio a la amante de su padre —que tras ser torturada es ejecutada al año siguiente— y, de paso, mandar encerrar a tanto hermanastro como tiene, que a éstos se les da la mano y luego te piden un reino, a no ser claro que se sometan con las mayores pruebas de arrepentimiento, lo que hacen casi todos ellos (aunque de poco les sirve: en los años siguientes serían ejecutados).
Otra de las ideas del ayo del rey es que Pedro se case con la hija del rey francés, Blanca de Borbón, a la que dos días después abandona para volver a los brazos de su amante, María de Padilla —ya lo dice el refrán: de tal palo…—, aunque tampoco le dura mucho, pues en cuanto el rey consigue que se anule su matrimonio con la francesa, abandonó a su amante y se vuelve a casar con Juana de Castro. Poquito a poco, el muchacho, que no cuenta aún con veinte años, se va ganando el sobrenombre de El Cruel.

Creo que con esto nos podemos hacer una idea de cómo estaban las cosas por Castilla en 1350.
 

Me gusta mucho la historia de Oliva. Voy a crear la de Gutierre a su alrededor, complementándola. Voy a ello.

Bueno, he escrito apoyándome en lo dicho por Gobolina y complementando lo suyo. Allá va:

Gutierre es un joven de 24 años, alto y robusto. Tiene el pelo castaño de su madre y una barba descuidada como la que lucía su padre.

Creció en mitad de los bosques, en una cabaña aislada, junto a sus padres y su hermana menor, Oliva. Conformaban una familia sencilla, austera y feliz, dentro de sus posibilidades. Ya de niño aprendió de su padre los secretos de la vida en la espesura: qué plantas comer y cuáles no, cuál era la mejor madera con la que alimentar el fuego del hogar, cómo moverse entre los árboles sin molestar a los animales salvajes o cómo seguir el rastro de una presa de valle en valle.

Todavía era poco más que un adolescente cuando su madre murió de unas fiebres. Su hermana tuvo que hacerse cargo de las tareas del hogar. La Oliva con quién había compartido una infancia de juegos y travesuras, se había convertido en una chica silenciosa e introvertida, y la pérdida de su madre no hizo más que ahondar esa sensación de melancolía que la rodeaba. El corazón de Gutierre quedó dividido entre la felicidad que sentía al perderse durante días por el bosque junto a su padre y el amor que profesaba a su hermana, a la que no quería dejar sola en una casa vacía. Gutierre sabía que Oliva rondaba por los bosques desde hacía años y que sabía protegerse, llegado el caso, pero temía que la soledad acabara devorándola.

Su padre nunca llegó a superar la muerte de su esposa. En los viajes al pueblo, donde vendían las pieles cobradas y la carne ahumada de la que podían prescindir, el hombre empezó a aficionarse a las tabernas y al vino. Poco a poco fue embruteciéndose, perdiendo habilidad, tino y salud. Dos años después de la muerte de su mujer, él falleció también de una pulmonía, tras quedarse dormido en un callejón durante una ventisca invernal. De su mano engarfiada colgaba una jarra de loza vacía.

Gutierre y Oliva quedaron así huérfanos y tuvieron que subsistir por sí solos. El buen hacer del joven en la caza les procuró carne con la que alimentarse y pieles con las que comerciar y vestirse; Oliva cuidó de su salud con las extrañas mezclas de hierbas que preparaba en la marmita del hogar. Gutierre nunca tuvo muy claro de dónde había aprendido esas milagrosas recetas... Con el paso de los años, Gutierre fue haciéndose consciente de que el mundo avanzaba a su alrededor y que ellos se iban quedando atrás. Tal vez pudieran seguir viviendo unos años como hasta el momento, pero tarde o temprano el cruel destino volvería a golpearles. Quizás un día volviera a casa y no encontrara a Oliva, secuestrada por bandidos o víctima de algún accidente. O tal vez fuera él quién resultara herido o muerto durante una cacería o a resultas de un mal encuentro con salteadores de caminos. Allí aislados eran demasiado vulnerables.

Cuando le propuso a su hermana viajar hasta Ávila, para intentar contactar con la hermana de su madre, supo al instante que Oliva no quería abandonar los bosques que habían sido su hogar. Pero aun así, no cambió de parecer. Él también echaría de menos los árboles, los claros floreados y el cantar de los arroyos, pero por su seguridad, debían dejarlos atrás. Tal vez pudieran encontrar un paraje tranquilo cerca de la ciudad y empezar una nueva vida.

Me encanta!!!! Queda más redondico y completo. Echaba de menos el gustazo que me da leerte jajaja.

Pues si no hay objeción, podemos colgarlas en nuestra ficha. Y a esperar 

Tic-Tac...

Por mí, ok.

Buenos días,

acabo de leer vuestras historias, están muy bien, me gustan mucho. Ya me van surgiendo cosas a partir de ellas para introducir en la historia, por si acaso es necesario. Tal vez viajárais a Ávila para buscar trabajo a las órdenes de algún/na noble (los cazadores solían estar al servicio del señor, y cazar en sus tierras con su permiso previo).

Pues nosé, si queréis añadir algo más estáis a tiempo. O dudas o lo que sea.

Aún nos quedan unos días para comenzar, justo el sábado 1.

-Por otro lado, os explico más cosas:

-He añadido una escena con las Acciones de combates. Se trata de un resumen de acciones para un combate disponibles. Se dividen en Acciones de movimiento, de ataque, de defensa y otras. Todas están explicadas en el manual, pero lo que he puesto es un resumen. Ya os recordaré cómo funciona el combate, pero os voy diciendo que usamos tales acciones de la lista. Podré ampliarlas y explicarlas en caso necesario, porque cada una tiene su propia mecánica.

-Por otro lado, explico un poco los valores de Racionalidad e Irracionalidad (RR e IRR). La racionalidad es el entendimiento y valores personales que los personajes tienen sobre el mundo racional, es decir, sobre lo que es real, poniendo énfasis en la religión, la fe religiosa (sea cual sea). Y la Irracionalidad es el conocimiento e interiorización del mundo irracional, es decir, de todos esos conocimientos de magia, criaturas, demonios, etc. Por eso (y por poner un ejemplo), un PJ clérigo comienza con 75 de RR y 25 de IRR (tiene mucha Racionalidad al tener muy interiorizada su fe). Sin embargo, un mago, bruja o alguien usuario de la magia suele comenzar al revés con 75 de IRR y 25 de RR. 

Ambos valores siempre suman 100, y por supuesto ambos valores fluctúan. Depende de lo que presencies puede bajar o subir ambos valores, uno en detrimento de otros. Por ejemplo, ver una criatura irracional normal puede hacer que suba la IRR y baje la RR; pero acabar con ella con armas mundanas (un cuchillo, espada ,arco, etc.) puede hacer lo contrario, o incluso ver un milagro.

Si os fijáis en la ficha, Oliva tiene un valor de IRR algo mayor que Gutierre. Ello significa que Oliva tiene más interiorizado el mundo irracional (¿tal vez vió alguna criatura? ¿tal vez presenció algun hechizo tiempo atrás?) De hecho, si no recuerdo mal, los curanderos pueden utilizar la magia si poseen 50 puntos en la Competencia "Conoc. Mágico" y si tienen 50 puntos en IRR (no ocurre con oliva en este caso).

- Una última cosa (de momento). La templanza. La templanza es un valor que sirve para evitar que un personaje quede paralizado, vomite, quede en trance, etc., cuando ve una situación espantosa. Por ejemplo, es muy común que personajes mundanos como los vuestros encuentren, por poner un ejemplo, una carnicería humana (supongamos por que una criatura irracional ha devorado a tales gentes). Pues los PJ suelen tirar por "Templanza". Si la superan, evitan ese mal trago y sus consecuencias; y en caso contrario suelen quedar paralizados, temerosos, mareados, etc. (y a veces pueden llevar a algún malus parcial en sus acciones, a discreción del Director/a).

Tal vez viajárais a Ávila para buscar trabajo a las órdenes de algún/na noble (los cazadores solían estar al servicio del señor, y cazar en sus tierras con su permiso previo).

Creo que la idea podría ser esa. La tía de Gutierre y Oliva podría vivir en Ávila o en algún pueblo cercano. Los hermanos se dirigen hacia allí cuando pasan cerca de Rivera, con la idea de pedir a su tía que les deje instalarse por un tiempo con ella mientras Gutierre busca trabajo a las órdenes de algún/a noble de la zona. Ávila y sus alrededores es una zona algo más civilizada y habitada que el aislado bosque en el que crecieron y Gutierre cree que, una vez allí y tras conseguir un empleo, tal vez puedan encontrar un lugar donde asentarse y empezar una nueva vida más segura. 

pues perfecto, sin problema :)

Gobolina, cuando puedas sube tu ficha a la pestaña "ficha".

En breves comenzamos :)

Hoy está rebelde la página, pero he conseguido subir la Historia. El apartado de Ficha y Equipo es lo que nos escribiste ¿verdad? Puedo hacer un copia y pega. Aunque creo recordar que eso no pueden verlo otros jugadores, así que no sé si te será necesario. Ya me dirás.

Sobre la "Acción Libre" me gustaría saber algo más. No cuenta como una de las dos acciones que tenemos disponibles, eso lo entiendo. ¿Se refiere a algo que no esté especificado en la lista de combate y que se nos ocurra hacer? ¿Es un chollo, no? Algo me estoy perdiendo, seguro jejejeje. Si puedes detallarla un poco más te lo agradecería. 

Haz copia/pega de la ficha en el apartado Ficha del desplegable de tu personaje. Esa pestaña solo es visible para el jugador propietario del personaje; el resto solo tenemos acceso a la pestaña Descripción/Historia.

Y creo que lo de la acción libre sirve para acciones que pueden hacerse sin apenas gastar movimiento ni tiempo: soltar algo que lleves en la mano, gritar un nombre o decir algo corto,... Y no puedes hacer tampoco veinte acciones libres en un turno, porque sería aprovecharse de las reglas. Se supone que una acción es libre si apenas ocupa tiempo, si haces seis acciones libres tal vez dejarían de serlo y se convertirían en acciones normales o incluso extendidas.

Pero como tampoco lo tengo muy claro, mejor que nos lo termine de aclarar Orthanc.

En la acción libre, el manual habla y se refiere a ella como "detectar un movimiento a nuestras espaldas, escuchar una conversación que tiene lugar cerca, ordenar a nuestros hombres que lleven a cabo una carga, entender el idioma en que hablan nuestros enemigos, etc. También es acción libre moverse una vara durante un asalto en cualquier dirección.

A eso le añado yo el poder hablar, gritar, nosé, acciones que no sean tan concretas con el resto. Lo cierto es que en los combates jamás he usado la acción libre. Quizá algo que haya caído dentro de ese saco lo he hecho alguna vez en la propia narración. Por ejemplo, gritar aun compañero PJ para llamar su atencíno (acción libre) en mi momento de las acciones de combate (acciones normales).

Por otro lado, comentar que dentro de los 4 tipos de acciones mencionados (Ataque, Defensa, Movimiento y Otras), todas ellas se clasifican, a su vez, en dos tipos: Normales, y Acción extendida. Las "Normales" es una acción puntual (en el turno cada PJ/PNJ tiene dos acciones disponibles). Las "Extendidas" es una acción que ocupa las dos acciones (por ende sólo puede hacerse una en cada turno).

Puedo hacer un copia y pega. Aunque creo recordar que eso no pueden verlo otros jugadores, así que no sé si te será necesario. Ya me dirás.

Como bien dice Apsalar (gracias), haz copia pega en la pestaña "ficha", sí. La historia en la pestaña "Descripción/historia" 

Buenos días,

como ya sabéis, mañana día 1 comenzaremos el desafío con Aquelarre. Esta tarde estaré delante de PC, por lo que si necesitáis cualquier cosa no dudéis en comentarlo.

Comentaros que, como hago en los desafíos (hoy precisamente acabo uno), siempre posteo por la mañana temprano (a eso de las 9 o 10h del servidor), y así dejo el resto del día para los post de los Jugadores.

Oído cocina. Ahora mismo no tengo dudas que resolver, pero supongo que durante la partida ya irán apareciendo. ¡Que llegue ya mañana!

Buenos días, comenzamos el desafío.