Partida Rol por web

[DM 22/09] Dragonlance - Regreso a Kalaman

Capítulo I - Un viaje aéreo

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16/09/2022, 18:04
Dungeon Master

21 Argon 433 AC

Después de cinco jornadas esperando el regreso de Enrielle y Klunurig de su visita al chamán Tsuga Chanti, lleváis un par de días sobrevolando los Páramos de Nordmaar, usando las anotaciones del mapa de Lluvia Estelar y del que se proyecta en la cúpula de la sala del Capitán del Viento para orientaros en vuestro viaje. Y, en ese tiempo, os maravilla que la fortaleza voladora no se haya desplomado ni una sola vez. Debéis ir por buen camino porque habéis dejado atrás el pantano y a lo lejos se divisa ya el Pico de las Nubes, la cima más alta de toda la región.

Para quien pilota el castillo no es una experiencia muy estimulante tener que pasarse varias horas a pie firme, mirando techo y empujando una palanca la mayoría del tiempo. Pero, para los demás, es una forma de viajar mucho más agradable que tener que hacerlo a pie por una ciénaga llena de mosquitos y con la tensión de ser atacados en cualquier momento por algún animal salvaje, por alguna partida de goblins jinetes de lagartos gigantes, o por una naga vengativa.

Y cada uno aprovecháis ese tiempo libre en lo que mejor os parece. Kylian en familiarizarse con su nuevo cuerpo y organizando la biblioteca del castillo. Lluvia Estelar adiestrando a Jilhazhí. Klunurig utilizando el pequeño laboratorio alquímico del Túnica Gris para fabricar sus propios venenos. O Thorwyn, identificando los diferentes objetos mágicos que habéis ido reuniendo en las últimas jornadas y abriendo con su magia el único baúl que no había sido capaz de abrir con sus ganzúas: el del dormitorio de sir Kragger Nelish.

Lo que descubrís allí dentro no son tesoros sino cartas. La correspondencia que alguien llamado Galen Nemedi, Lord Adjudicador de los Caballeros de Neraka, ha estado enviando a lo largo de los últimos meses. En ellas se le encomendaba a sir Kragger asaltar desde el aire la ciudad de Kalaman con su ejército de goblins una vez que la ciudadela volante de Mem vuelva a estar operativa.

Y no solo eso, las cartas mencionan los esfuerzos de todo el culto a Takhisis por adquirir artefactos de inconmensurable poder imbuidos con la esencia de su diosa con los que esperan traer de regreso a la vida a la Reina Oscura. Uno de ellos es el mismísimo sudario con el que el cuerpo sin vida de la deidad fue envuelto después de ser asesinada, otro es algo llamado Miceram, otro parece ser una gema que responde al nombre de Piedra de Sangre y el cuarto es una maza llamada Portadora de la Noche.

Los Caballeros de Neraka creen haber encontrado este último artefacto y, aunque no especifican en manos de quién se encuentra, sí hablan de que necesitan una fuerte suma de dinero para adquirirlo. Una cantidad que están reuniendo mediante el saqueo de pequeños asentamientos por todo Ansalon y que esperan completar sobradamente con la conquista de Kalaman a manos de sir Kragger y sus hombres.

Está claro que habéis logrado frustrar este asalto aéreo a Kalaman y entorpecer así enormemente los objetivos de los cultistas. Pero es evidente también que esto solo retrasará sus planes y no bastará para detenerlos.

Notas de juego

NOTA: podéis usar el próximo turno para declarar qué acciones habrían hecho vuestros personajes estos días (las que yo he indicado son solo propuestas y pueden haber estado haciendo también otras cosas), si se han atrevido o no a pilotar el castillo, sus planes cuando lleguen a Kalaman, hechizos que tengan preparados para entonces... Y también podéis darle una pensada a que queréis fabricar o comprar con el botín que habéis conseguido.

NOTA 2: He asignado a Enrielle la mitad de la piedra de recado sintonizada con la Thorwyn para que la pudiera usar de walkie-talkie mientras andaba por ahí con Klunurig. Lo digo para recordaros que tenéis las dos mitades y que eso os permite cierta comunicación limitada estéis donde estéis.

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20/09/2022, 23:51
Lluvia Estelar

Durante la larga espera al regreso de Enrielle y Klunurig de su paseo por el pantano, no permanezco ociosa. Aunque me sorprende que hayan decidido marcharse sabiendo como saben que hemos sido advertidos de la venida de un gran ejército de goblins.

En otras circunstancias me hubiera dedicado a forrajear por la zona para reunir la mayor cantidad posible de provisiones, porque las de los nerakanos disminuyen rápidamente y han conocido tiempos mejores, pero sé bien que no debe haber nada comestible en la zona que no se hayan llevado los trasgoides a la fuga.

Así pues, paso los días practicando el manejo de la fortaleza voladora en previsión de que nuestros atacantes lleguen en cualquier momento. Pilotar durante horas no es cómodo, produce toda suerte de calambres y dolores musculares de mirar al techo mientras se accionan las diferentes palancas a pie firme. Aun así, Sahanahráy-iiná, el Espíritu de la Vida, siempre me ofrece su alivio cuando más lo necesito.

Además de practicar en el uso de esta magia tan extraña como fascinante, he dibujado un tosco plano del castillo y he ido anotando en él todos los desperfectos que he ido encontrando y que necesitan arreglos urgentes. No quiero que un trozo de muralla se caiga encima de nadie o que el agrietado suelo del patio se abra bajo los pies de alguno en pleno vuelo.

Que la entrada esté bloqueada y no podamos alzar el rastrillo también es un problema que habrá que arreglar más temprano que tarde. Por mucho que dificulte los asaltos por parte de terceros, nos obliga a estar descolgándonos y trepando por las almenas cada vez que queremos entrar o salir de la fortaleza. Necesitamos una entrada funcional, pero carezco de las habilidades necesarias para repararlo yo misma.

Ahora que por fin estamos comenzando a comprender lo que había detrás de los ataques a Belleria y otras poblaciones, me siento mucho menos preparada que nunca. No es que los cultistas de Takhisis adoren a una diosa muerta, sino que pretenden revivirla. Una diosa a la que, según contaban en mi tribu, condenaron los otros dioses por robar el mundo para sí misma. La madre de todos los males, empezando por los espantosos dragones cromáticos. La alfombra encantada con su rostro en el dormitorio de sir Kragger me provoca pesadillas.

Está claro que, a pesar de nuestros notables logros, esto nos queda muy grande. Cuanto antes informemos a los solámnicos para que ellos puedan actuar con sus ejércitos, tanto mejor para todos.

Notas de juego

Mi rutina estos días será:

1) Conjuro "crear agua" para que haya agua fresca y potable para todos, con la que cocinar y con la que darnos un baño, que ya va tocando.

2) Conjuro "purificar comida y bebida" antes de cocinar nada que hayamos encontrado en la despensa, para evitar enfermar en caso de que hubiera algo en no muy buen estado.

3) Prácticas de pilotar mientras esperamos por Enrielle y Klunurig, sin alzar mucho el vuelo e intentando aterrizar siempre en el punto de origen. Y, una vez que estemos reunidos todos, piloto tanto tiempo como pueda. Thorwyn tiene mejores cosas que hacer y aunque Lluvia Estelar seguramente no tenga la mejor TS de Fortaleza contra la fatiga, sí tiene más espacios que nadie para lanzar "curar heridas leves" y disipar así el daño no letal causado por la marcha forzada. Especialmente ideal para vuelos largos en los que no podamos aterrizar durante muchas horas. Cuando lleguemos al pie de las Astivar, aterrizaremos y relevaré a quien esté pilotando en ese momento, porque encontrar un lugar donde aterrizar la fortaleza en las montañas no va a ser fácil y preferiría cruzarlas sin detenernos allí si fuera posible. Calculo que debemos estar ya cerca de las Astivar suponiendo que nos hayamos estado relevando hasta ahora para que la fortaleza apenas se detenga y que llevamos dos días de vuelo, así que en las últimas 16 horas no habré estado a los mandos para asegurarme de llegar descansada y comida a esta sesión maratoniana (haciendo números, le hecho unas 18 horas de vuelo ininterrumpido para cruzar la cadena montañosa). Agradeceré que alguien que pueda lanzar "luz" me de conversación de vez en cuando para asegurarse de que no me quedo dormida y de que puedo ver bien el mapa del techo en todo momento. En cualquier caso, yo lanzaré un conjuro de "luz" con 10 horas de duración antes de tomar los mandos, por lo que pueda pasar.

4) La mayor parte del tiempo que no esté en el puesto del Capitán del Viento, se me podrá encontrar en la despensa o en el dormitorio principal de la primera planta del torreón noreste. Creo que era la del sivak y me gusta mucho esa cama gigante con ese edredón de pieles. Además, está cerca de la armería y me parece que hay una trampilla para subir al tejado y ver volar a Jiłhazhí, que se mueve mucho más rápido que la fortaleza.

5) Ya pensaré en Kalaman si no estrello nuestro castillo en mitad de las montañas :P

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21/09/2022, 16:28
Thorwyn

Klunurig y Enrielle abandonaron la fortaleza contra los dictámenes del sentido común y la prudencia, pero salieron de todas maneras. Mantuvieron el contacto gracias a la piedra de recado del túnica gris, lo que contribuía a la vez a sosegar los ánimos y a tensarlos hasta la recepción del mensaje. No sería hasta 5 días más tarde que volverían, sus objetivos satisfechos.

Las cinco largas jornadas de espera al regreso de la pareja fueron provechosas para el arcanista del grupo: identificó objetos, inscribió pergaminos1 y echó un buen vistazo a la biblioteca de la fortaleza (un bien así no había que subestimarlo). Eso, claro está, cuando no le tocaba pilotar la fortaleza.

Thorwyn había sido el primero y el probablemente el más implicado. Más allá del hecho de que a todos les interesaba que la fortaleza no golpease el terreno o sufriera algún daño... Una vez que comprendió el funcionamiento de los mandos, la tarea era sencilla, aburrida, casi tediosa. Era una tarea hecha para él. Más allá del dolor en las articulaciones provocado por soportar el peso de su compacto y recio cuerpo de enano en la misma postura, le resultaba una actividad sumamente tranquilizadora, que reportaba la recompensa de un viaje aburrido, estable, sin baches o insectos incordiosos.

El abandono del pantano y el acercamiento hacia las montañas y hacia Kalaman suponían un alivio para la tensión casi crónica que había desarrollado el enano durante el asalto a la fortaleza. Resultaba irónico que aquello que le había provocado tantos quebraderos de cabeza e incertidumbres ahora se hubiera convertido en un elemento de calma. Si por el fuera, serían escasas las veces en que volviera a pisar "tierra firme". De hecho, coincidiría mucho con Lluvia durante el viaje a los mandos de la fortaleza. Al parecer ambos consideraban que era su responsabilidad el mantener en el aire aquel extraño nuevo hogar suyo. A su manera se cedían de forma respetuosa pero un poco a regañadientes el puesto de capitán del viento.

No obstante, una vez abierto el baúl de sir Kraegger gracias a la ayuda de un hechizo, quedó claro para él que no habría paz por el momento en su vida: los nerakanos buscaban resucitar a su diosa muerta y no sólo estaban decididos a ellos, sino que tenían un plan que parecía tener visos de funcionar y que ya estaba en marcha. Los héroes de la neutralidad habían puesto trabas a su rápida consecución, robándoles la fortaleza voladora e impidiendo el ataque aéreo de Kalaman, pero no les habían detenido. Habría guerra y las calamidades se sucederían. Debían informar a Kalaman, a los solámnicos, a todos los que quisieran escucharles...

Alguien debía detenerles, impedirles que se hicieran con Portadora de la Noche. Averiguar quién tenía en su posesión semejante artefacto y arreglárselas para obtenerlo, ya fuera comprándola, robándola, lo que fuera... Demonios, ¿tan fácil era caer en sus viejas costumbres? ¿tan theiwar era que no sería capaz de sobrellevarlo y volver a alzar sus estándares morales?2

El primer paso era informar al consejo solámnico de Kalaman. Y también a los LeBesco. Era lo primero porque se debían a la promesa de Lowen, aunque estaba por ver si les dejarían acceder a hablar con el consejo sin la presencia de su amigo caído.

Por otro lado, Thorwyn compartía preocupaciones más mundanas con Lluvia, como la de la comida y bebida (de los cuales el sentido común dictaba que deberían hacer acopio en Kalaman, especialmente teniendo en cuenta que disponían de una cocina y almacenes para transportar aquello que quisieran comprar) y la del estado de la fortaleza. Sí, definitivamente y mientras no consiguiera una Lira de construcción (valorada en torno a las 13.000 monedas de acero en el mercado), haría bien de conseguirse al menos un hechizo de Sirviente invisible. Eso contribuiría a adecentar la fortaleza, limpiarla… El tema de la puerta iba a ser difícil de momento, pero de momento se podía paliar con un par de escaleras de cuerda para sortear la muralla. Y, ya puestos, se podría pedir una muy larga, para usar mientras la fortaleza estaba volando.

Y, además, dijeran lo que dijeran los bigotudos y sabios humanos, Thorwyn pensaba dedicarse a fabricar algo mágico. Si sus compañeros de viaje deseaban algo y él podía proporcionárselo, se lo encantaría encantado, valga la redundancia. Aunque había que tener en cuenta que, pese a que no les cobrase más que los costes de los materiales, no iban a ser baratos. De hecho, serían lo más caro que se habrían permitido jamás, sin duda.

Y también iba a poner la ciudad patas abajo buscando magos y pergaminos. Tenía algunos hechizos en mente que necesitaba para seguir mejorando su grimorio3 y pagaría un buen dinero por el derecho a copiarlos o los pergaminos que podría transcribir. Además, necesitaría más suministros de escritura, para transcribir también los hechizos que le interesaban del grimorio del rey hobgoblin al suyo propio4. Y, por supuesto, vender el mismo, si es que le encontraba comprador. Seguro que lo tenía que malvender, pero tampoco tenía tiempo que perder para sacar unas pocas monedas más. Ese era su yo del pasado. El yo del presente era un arcanista que quería seguir progresando... uno que tendría que pasar más pronto que tarde por la torre de alta hechicería. Y no les vendrían mal unas perlas para los hechizos de identificación. Seguro que acabarían necesitándolas.

Pediría indicaciones a los magos que pudiera encontrar. Pediría mapas, consejos, trucos. Hablaría sobre las pruebas... sobre lo que le podían decir sin violar el juramento de no revelar nada sobre ellas, claro.

Su futuro era uno atribulado, lleno de actividad. Al menos hasta llegar a Wayreth. Si llegaba a Wayreth.

Notas de juego

(1) Hechizos inscritos: Impacto verdadero (1º nivel de conjuro x 1 nivel de lanzador x 25 = 25 p.a y 1px). Tenía 150 p.a. en material de escritura, así que lo inscribo 6 veces. Total 150 p.a. y 6px
(2) Quiero recuperar mi Legal Neutral, ¿cómo lo hago?
(3) Sirviente invisible (1º, 125 p.a. entre pergamino y material de escritura), Agrandar persona (idem) y Partículas rutilantes (2º, 300 p.a. si logro que me lo deje copiar un mago o 350 entre pergamino y material de escritura si no)
(4) Montura, Soportar los elementos y Retirada expeditiva de 1º, Flecha ácida e Imagen múltiple de 2º

Hechizos preparados a la llegada a Kalaman:

Detectar magia (0), Leer magia (0), Sonido fantasma (0), Abrir/cerrar (0), Cuchichear mensaje (0), Escudo (1º), Manos ardientes (1º), Proyectil mágico (1º), Disfraz (1º), Armadura de mago (1º), Caída de pluma (1º), Invisibilidad (2º), Gracia felina (2º), Rayo abrasador (2º), Alterar el propio aspecto (2º), Telaraña (2º), Acelerar (3º), Arma mágica mayor (3º), Bola de fuego (3º), Flecha flamígera (3º)

Resumen económico:

ITEM PRECIO N.º TOTAL
Inscribir hechizos del grimorio del rey hobgoblin 700   700
Venta del grimorio del rey hobgoblin -1.275   -1.275
Piedras de identificar 100 4 400
Partículas rutilantes 350   350
Sirviente invisible 125   125
Agrandar persona 125   125
Clarividencia/clariaudiencia 675   675
Elixir de esconderse 125   125
Elixir de furtividad 125   125
Elixir de aliento de fuego 550   550
Ballesta ligera de gran calidad Distante +1 4.000   4.000
Venta de gemas -1.795   -1.795
Dinero ahorrado -122   -122

TOTALES

Presupuesto: 4.000
Gastados: 3.983
Quedan: 17

 

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22/09/2022, 09:54
Enrielle Flechas de Muerte

Condenado Klunurig. Cinco días. Cinco malditos días para ver a su chamán. Claro, él en forma de gaviota hubiera llegado antes, pero bien la podía haber avisado. Por suerte, el ejército goblin no había aparecido entretanto, y gracias a la piedra de recado habían mantenido la comunicación y todos asegurarse que estaban bien. Cuando regresaron a la fortaleza y volvió a encontrarse con sus compañeros, fue consciente realmente del aspecto que tenía. Volvía recubierta de barro seco en todo su cuerpo, con trocitos de musgo entrelazado con el cabello. Volvía vestida de pantano. Los rituales de Klunurig para despertar su poder habían incluido eso, pero también imitar sus extrañas danzas en cuclillas, que le provocaban dolor en los tobillos, y gruñir lo más ronco que sus cuerdas vocales le permitían, que no era mucho. Con todo, aparentemente había sido suficiente para el pantano, y ahora se sentía capaz de canalizar su magia la mayoría de las veces antes de sentir que se agotaran. Había merecido la pena.

Para disgusto de Klunurig, no obstante, no pudo resistirse a meterse en la bañera cuando vio que Lluvia Estelar la había llenado de agua limpia. Utilizando su jabón, se lavó concienzudamente como hacía mucho que no lo hacía. Cuando terminó, su piel limpia parecía más blanca aún, y su cabello, ya cepillado y sin marañas, mostraba de nuevo sus reflejos rojizos.

En cuanto a volar, inicialmente no le gustó en absoluto. Practicar a baja altura y escasa distancia, que ya de por si le daba miedo, había sido medianamente tolerable por ella, pero en cuanto ganaron altitud y empezaron a desplazarse, Enrielle no se soltó en un buen rato de la silla con cuerdas que Thorwyn había dispuesto. Sólo cuando pasaron algunas horas y comprobó que la fortaleza seguía volando de forma lenta pero consistente, empezó a relajarse y ver las enormes ventajas que suponía.

Era innegable que volver a Kalaman por los aires en lugar de a pie con todos los peligros, mosquitos y demás, era una maravilla. Hasta empezaba a sentir poco a poco que, por encima del temor a que la fortaleza colapsase o se precipitara, le gustaba volar. Aún así, otra parte de ella también le decía que la fortaleza era muy peligrosa si caía en malas manos, y que lo mejor era hundirla en el mar.

Enrielle pasó los dos días de viaje bastante ociosa, intentando dejar siempre que podía el puesto de capitán del viento a Thorwyn y a Lluvia Estelar, que parecían disfrutar de la tarea. A ella le gustaba ver la imagen mágica que aparecía en la bóveda de la torre, pero pilotar era bastante cansado. Enrielle sujetaba demasiado fuerte las palancas, como si así la fortaleza se mantuviera más firme en el aire, y además acababa con dolor de cuello. No, ella prefería pasear por la fortaleza, asomarse a la ventana o sentarse en un tejado para mirar  al horizonte o ver volar a Jilhazhí. Otras veces cerraba los ojos y se concentraba en el pantano como le Klunurig la había enseñado. Incluso allí arriba notaba la sutil conexión, curiosamente como si ya formara parte de ella. También, por supuesto, pensaba en los espectros que habían regresado a por el tridente.

La visión de los elfos azules que éstos le habían mostrado había sido fascinante, pero ninguno de sus compañeros había sabido decirle nada al respecto. De modo que, con tanto tiempo libre como tenía, decidió pasae por la biblioteca, de dónde Kylian no parecía salir ni para comer. A veces Enrielle, mientras hojeaba los libros, se quedaba mirándola cómo pasaba una página tras otra con sus deditos verdes, y con sus ojillos malévolos devorando palabra por palabra.

Era extraño, pero se alegraba de tener de vuelta al clérigo. Si es que realmente se trataba de él.

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22/09/2022, 13:09
Klunurig

En los días que siguieron al retorno del pantano, Klunurig estuvo realmente atareado. Volver había sido un proceso lento, ya que la mujer-arquera, Enrielle-flechamuerte como la llamaba ahora Klunurig, avanzaba muy lentamente por la ciénaga. Lo bueno es que Klunurig había tenido tiempo de celebrar un lento ritual, pidiendo al pantano que le otorgase la compañía y protección de uno de sus guerreros animales. Tras largas horas de cánticos, una figura inmensa apareció entre los juncos, para regocijo de Klunurig.

- ¡Makuwa Ambawi! - gritó el bakali, anunciando su nombre.

Era un monstruoso cocodrilo gigante, de piel verde grisáceo y enormes colmillos. Subirle a la fortaleza no había resultado nada fácil, y mantenerlo alimentado allí arriba requería a Klunurig constantes descensos al pantano, en busca de grandes peces que luego echaba a un cesto y que debía arrastrar hacia arriba en forma de garza.

Alimentar al cocodrilo no había sido la única ocupación del druanti aquellos días. Descendía afanosamente al pantano, cargando un cesto de mimbre que había encontrado en el castillo, y arrastraba hacia arriba barro húmedo y pequeñas plantas vivas, las cuales transplantaba luego en maceteros de piedra que fabricaba, de algún modo, usando la propia roca del torreón noroeste, en el que se había asentado. Tras varios días sembrando allí todo tipo de plantas, recitando cánticos salvajes y efectuando sus extrañas danzas, el lugar se había convertido en un jardín viviente: plantas con flores de colores vivos lo cubrían todo, hasta el punto en que era imposible transitar por el interior. Había flores rosas, azules y púrpuras, de formas extrañas y apariencia venenosa. Sus tallos eran largos y crecían sobre una base espinosa y densa de helechos aguzados. Las enredaderas se habían extendido por las paredes del torreón, entrando y saliendo por las ventanas y puertas. Y allí, oculto en algún punto, dormía Makuka, el monstruoso cocodrilo gris, al que Klunurig construyó también un estanque a base de deformar mágicamente la piedra del suelo, en la parte trasera del torreón.

Tras varios días de afanosos trabajos, el druanti se introdujo en el laboratorio del mago gris. Él solía trabajar con instrumentos más toscos, pero de alguna manera se adaptó a todo aquel instrumental, mezclando semillas y hojas de colores vivos, escupiendo en el interior de los morteros, echando barro, machacando, olfateando. Qué demonios fabricaba, era imposible saberlo. Pero, por la pinta, no parecía nada comestible. De cuando en cuando, olfateaba una muestra, reía a carcajadas, y decía algo en bakali. Luego, guardaba esa mezcla en un tarro de barro, y continuaba con otra cosa.

A ratos departía con Enrielle-flechamuerte, corrigiendo sus gestos o explicándole los cánticos que debía realizar. Insistía en untarle la frente con el barro que se había ido trayendo del pantano, pero la mujer-arquera parecía reacia a dejarlo sobre su piel.

- ¡Siempre desnuda! ¡Humph!

Klunurig sentía que aquella discípula le requeriría mucho esfuerzo, así que se desesperaba y dejaba las lecciones a medias para irse a por peces para Makuwa, o a machacar semillas y fabricar emplastos.

Cuando por fin dejaron atrás el pantano, Klunurig observó desde las almenas con gran pesar. Se quedó largo rato contemplando la vista de su hogar, y una gran nostalgia se apoderó de él. Ya no podría descender a por más barro ni plantas. Su torreón se había convertido en una versión en miniatura del lugar en que había vivido durante largos años. Pero, al mismo tiempo, una extraña curiosidad se apoderó de él. Se dedicó a interrogar al hombre-barbudo sobre su pueblo, los enanos, y sintió, por primera vez en su vida, la necesidad de ver más allá del pantano. Este era su hogar y su destino, pero sentía que debía aprender algo más.

Notas de juego

Como dije en el off, el dinero de Klunurig podéis usarlo a vuestro gusto. Mi sugerencia es un Cetro de prolongación menor, que puede duplicar la duración de 3 bufos/día, y es algo que podemos "compartir" según el momento. Si es que puede comprarse.

Mi otra sugerencia son las Lentes de identificación. Pero no sé si esto es válido (lo he sacado de otra partida de 3.5 que juego, donde otros jugadores me sugirieron las opciones, y ellos usan todos los manuales, así que no sé de donde salen; diría que al menos el cetro sí sale de la guía del DM).

Por otro lado, estaría por hablar el tema de los venenos, máster, que al final no lo vimos. Lo comentamos por el off si quieres.

 

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22/09/2022, 20:56
Dungeon Master

Tu investigación sobre los elfos marinos en la biblioteca, con la ayuda de Kylian, te lleva a descubrir que en realidad existen dos razas de estas criaturas, que fueron creadas a partir de los elfos terrestres hace mucho tiempo por algo llamado la Gema Gris.

Ambos tipos de elfos marinos tienen la piel azul, siendo los Dargonesti de color azul oscuro y los Dimernesti de color azul claro. El color del pelo de los Dargonesti va del rubio al verde oscuro, mientras que el de los Dimernesti suele ser plateado. Los elfos del mar son los más altos de las razas de elfos, y aunque son elegantes y esbeltos, son corpulentos en comparación con sus primos terrestres. Los dedos palmeados de manos y pies les permiten moverse con mayor facilidad por los océanos de Ansalon. Las branquias afiladas que tienen justo debajo de sus orejas puntiagudas permiten a los elfos marinos respirar bajo el agua. El color de los ojos tanto de los Dargonesti como de los Dimernesti va desde el azul pálido hasta el índigo profundo. Lo cual coincide con la breve visión que tuviste durante el encuentro espectral.

Según el único libro que has encontrado al respecto, probablemente escrito por algún humano que nunca vio no realmente, los elfos marinos comparten con sus primos terrestres un aire de arrogancia y superioridad hacia el resto de razas. Sin embargo, dice el texto, una vez que se establece una relación de confianza con ellos pueden ser compañeros fieles y leales y se sabe que en raras ocasiones han entablado relaciones estrechas con humanos y elfos terrestres.

El libro dice también que tanto los Dargonesti como los Dimernesti son de sangre caliente y se apasionan por todo lo que hacen, un rasgo que no suele asociarse a los demás elfos. Son ferozmente independientes, disfrutan de la vida al máximo y trabajan para lograr la armonía con su entorno oceánico.

En tierra, el entorno seco y la falta de flotabilidad y movilidad les crea una sensación de pánico e incomodidad. Los elfos marinos, de fuerte carácter, ocultarán esto a los demás durante el mayor tiempo posible, aunque cualquiera que esté familiarizado con su comportamiento habitual bajo el agua notará el drástico cambio que les sobreviene. No se parecen a sus elegantes primos, sino a una criatura marina que se tambalea.

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23/09/2022, 13:02
Kylian

Kylian pasó gran parte del tiempo de espera del regreso de Enrielle y el enano de barro, tratando de adaptarse a su nueva forma. Su aspecto monstruoso fue algo que le preocupó de buenas a primeras. Un sacerdote no debería ser preocuparse por su aspecto físico, pero Kylian siempre había sido un joven de rostro angelical y aunque no había tenido mucho éxito en el terreno afectivo, se tenía en buena consideración. La transformación le había dejado muy desorientado. 

No sólo era un goblin feo y menudo como un niño, sino que además, había variado su género. Tener que orinar sentado era extraño y tener aquellas dos bolas verdes incrustadas en el pecho, incómodo. No hacía falta decir que echaba de menos a su miembro viril, aunque no fuera a comentarlo abiertamente con nadie. 

Pensó en su debía cambiarse el nombre. Él seguía identificándose como un hombre humano, aunque ya no lo era... Decidió que mantendría su nombre, al menos por el momento. No obstante, aquella reflexión le hizo pensar en que sucedería al llegar a Kalaman con aquella extraña forma. ¿Le capturarían? ¿Creerían lo sucedido? ¿O directamente atentarían contra su vida nada más verle? 

Y luego estaba lo del castillo. Se lo querrían robar, tanto solámnicos, como políticos e incluso meros asaltantes o cuadrillas de goblins si lo dejaban descuidado demasiado tiempo. Era un gran arma, pero también una enorme responsabilidad. 

Los ratos en los que Kylian no pasaba absorto en sus pensamientos, rezos y conocimiento de su nuevo cuerpo, los pasaba ordenando su biblioteca. Sonaba bien: "la Biblioteca de Kylian". ¿Cuánto tiempo le duraría hasta que la fortaleza les fuera robada? No lo sabía, pero esperaba poder mantenerla el tiempo suficiente como para poder haber reunido un grupo de allegados suficiente como para defenderla en su ausencia. 

Y estaba el dedo de Valev. Se había podrido en buena parte. De no ser así, le habrían dado ganas de comérselo. Y es que a medida que iba adaptándose a su nuevo cuerpo, extraños impulsos crecían él/ella. Decidió que aquel dedo era comida, aunque no se lo comería por todo lo que representaba. Por contra, lo purificó de forma divina a través de los dones otorgados por Gilean. La podredumbre desapareció y acto seguido pidió de nuevo a Gilean para preservarlo evitando que volviera a iniciarse la putrefacción. 

Entre todas aquellas labores, buscó hueco para copiar algunos pergaminos divinos con los dones de la neutralidad allí inscritos. Todo ella si el thiewar le dejaba algo de material de escritura, pues parecía absorto en sus arcanos asuntos y acaparaba diariamente, los útiles para inscripción de pergaminos...

Notas de juego

Queda algún material para pergaminos? Cuántos podría inscribir jefe??

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23/09/2022, 15:31
Dungeon Master

Hace unas cuantas horas que Thorwyn ha cedido los mandos de vuestra fortaleza voladora ante la insistencia de la mística que-shu de cruzar la cordillera de las Astivar, en un larguísimo vuelo que promete durar casi una jornada completa.

La mayoría de vosotros estáis demasiado ocupados con vuestros quehaceres como para daros cuenta, pero en estos momentos Lluvia Estelar os conduce entre los dos picos más altos de toda la región: el Monte Brego (de unos 3600 metros de altura) y el Pico de las Nubes (de más de 4200 metros).

Solo Enrielle, encaramada al tejado de la armería en sus juegos con Jilhazhí, contempla las espectaculares vistas de las cimas montañosas; unas cimas que se encuentran nevadas incluso ahora, en mitad de la estación estival. Y es precisamente la exploradora de la Legión de Acero, abrazada a sí misma a causa del frío, la única en reparar en la diminuta pero creciente mancha azul que se ve en el cielo despejado.

Ante su aguda vista, particularmente entrenada para detectar a esta clase de criaturas, la vaga silueta va tomando la forma de un dragón de color cobalto que asciende por entre las crestas aserradas de las Astivar batiendo enérgicamente sus alas.

El pequeño Latonado tarda más en reparar en esta presencia y solo lo hace cuando, después de pedir insistentemente a Enrielle que le mire hacer cabriolas en el aire y de quejarse de su falta de atención, mira en la misma dirección que ella.

—Es como Glïxtlych, pero mucho más grande —confirma Jilhazhí los peores temores de su amiga humana, sacudiéndose con un enérgico escalofrío al recordar que aquella cría Azul estuvo a punto de matarlo—. Y ha visto la fortaleza, seguro, ¿cómo no iba a verla aquí arriba?

No hace falta que el dragoncito de latón diga nada más para que Enrielle corra escaleras abajo alertándoos a voz en grito del peligro inminente que se cierne sobre vosotros.

Para cuando os reunís en el patio de armas de la fortaleza, todos podéis ver claramente la majestuosa y temible figura de brillantes escamas añil y tan grande como el cocodrilo de Klunurig, que se alza ahora por encima de vuestras cabezas con un furioso aleteo.

Bueno, no todos lo veis. Lluvia Estelar continúa en el puesto del Capitán del Viento, incapaz de abandonar su posición ni siquiera ante esta inesperada amenaza.

- Tiradas (1)

Notas de juego

NOTA: Gracias al aviso de Enrielle, el ataque no os sorprende y voy a concederos dos de asaltos para prepararos. Tirad iniciativas, podéis lanzar un par de conjuros y situaros donde queráis del patio de armas.
Considerad que en el asalto -1 (el primer asalto preparatorio) el dragón Azul estará a 500' de vosotros. En el asalto 0 estará a 200' de vosotros. En el asalto 1 (donde comenzaremos el combate por turnos), el dragón podría aterrizar en cualquier parte del patio durante su acción.

NOTA 2: Como lógicamente Lluvia Estelar no puede tomar parte en la defensa de la fortaleza, dejaré que su jugador lleve a Jilhazhí en este encuentro (no es lo mismo, claro, pero menos da una piedra xD).

NOTA 3: Estáis a más de 2.500 metros, lo que significa que podéis sufrir el mal de altura (los síntomas comprenden dolor de cabeza, cansancio, náuseas o pérdida de apetito, irritabilidad y, en casos más graves, dificultad respiratoria, confusión e incluso coma). Lógicamente no estáis tan arriba como para caer en coma, pero debéis superar un TS de Fort (CD 12) para evitar sufrir 1d6 de daño no letal y quedar fatigados.

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23/09/2022, 16:08
Kylian

¿Un dragón? - Preguntó la goblin sobresaltada. - ¡Maldición! - Exclamó con gran temor, pero a la vez, esperanzas de poder sobrevivir al encuentro. Al fin y al cabo, Gilean estaba de su parte. 

¡Oh Gilean, en tu inmenso poder divino, concédeme tus dones para el combate, para que ningún mal que pueda alcanzarme y concédeme tu divino auxilio! - Comenzó a orar con gran convencimiento. - ¡Te lo imploro Gilean, dios de la Neutralidad! 

- Tiradas (4)

Notas de juego

Lanzo: poder divino (ataque base 7, +6 FUE y 7 pg extra), círculo mágico contra el mal. 

En mi turno de iniciativa (a menos que tenga el dragón encima y provocase AdO), lanzaré auxilio divino (+1 ataque y miedo, moral y + 13 pg. 

Superó la TS y 12 de iniciativa. 

Me coloco junto al torreón, cerca de alguna entrada, por si tuviera que huir al interior 

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23/09/2022, 16:21
Thorwyn

─Un dragón azul... ─dijo en voz mucho más calmada el arcanista del grupo─ Me suena que son los rojos los inmunes al fuego. Veamos si estoy en lo cierto...

Thorwyn no había perdido el tiempo en iniciar las hostilidades. No hacía falta esperar a que aquel dragón cromático llegara a la fortaleza para declarar sus intenciones, había toda una guerra de dimensiones continentales de experiencia para no tener dudas al respecto. Aquel que lanzó era, con diferencia, su hechizo con mayor alcance. Incluso a esa distancia impactaría. Otra cosa sería cómo se las arreglaría el dragón para evitar un impacto directo. Por otro lado, aquel era también el más poderoso hechizo de ataque que tenía, uno que, además, se decía que escapaba del control de los magos sin túnica, como él.

─Primero sobrevivir, después las consecuencias ─pensó para sí, autoconvenciéndose de la necesidad de acabar el combate cuanto antes.

La Bola de Fuego surgía de su mano como una pequeña bola incandescente, una canica de cristal más luminosa que el propio sol, pero de aspecto más fascinante que mortífero. Sin embargo, a un movimiento de la mano de Thorwyn, salió despedida en línea recta hacia el dragón azul, ignorando todas la leyes naturales. Al estar a su altura, a su señal, estalló en una enorme bola de fuego que bien podría haber acabado con medio grupo si la hubiera arrojado a sus pies. El dragón, sin embargo, era sin duda una bestia mucho más resistente.

El esfuerzo de ese primer conjuro tuvo sus consecuencias. Más allá del daño causado, el enano arcanista sudaba profusamente y respiraba como si acabara de subir unas escaleras saltando los peldaños de dos en dos. Y, sin embargo, perseveró. Aquella situación había que afrontarla cuanto antes mejor, apoyar con su magia a sus compañeros para lograr causarle al monstruo alado el mayor de los daños lo antes posible.

A la bola de fuego le siguió el encantamiento de las flechas de Enrielle, con un nuevo y poderoso hechizo, uno recientemente incorporado a su grimorio: Flechas flamígeras. Con este hechizo las flechas se cubrían de fuego, lo que incrementaría considerablmente su capacidad de abatir enemigos. O enemigo, en este caso.

─Enrielle, ahora tus flechas quemarán a nuestro no-invitado...

Llegado este momento, el arcanista se planteó su siguiente movimiento. No era baladí el ponerse a cubierto. Si se agrupaban, serían pasto del aliento del dragón, pero tampoco podía alejarse mucho si quería alcanzar al monstruo. O ayudar a sus amigos. Fuera como fuera, necesitaba estar vivo para hacer algo, así que el enano se refugió en la entrada de la torre donde Lluvia les mantenía por los aires.

- Tiradas (6)

Notas de juego

El primer hechizo es el Bola de fuego, con el que me canso. El segundo es Flecha flamígera, que no me añade más cansancio.

Imagino que el dragoncito (y básicamente el resto de PJs) tendrá más iniciativa que yo, así que me refugio en el edificio, luego ya asomaré la barba. El movimiento lo hago al final del turno 0.

Mira por donde, ahora un arco largo compuesto con la cualidad "distante" nos habría ido de perlas...

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23/09/2022, 17:27
Lluvia Estelar

Los gritos de Enrielle alertándonos de que un dragón se aproxima a nuestra fortaleza hacen realidad una de mis peores pesadillas: el retorno de la pérfida Ysalla.

Desde donde me encuentro no puedo saber si es realmente ella o no, pero en mi mente recuerdo de manera vívida cómo perdimos a nuestro amigo Ginthalas a manos de aquel monstruo sanguinario. Pensar que ahora pueda perder a otro de mis amigos a manos de ella o incluso a mi pequeño Jiłhazhí hace que el miedo me hiele la sangre.

En el interior de la mágica esfera que envuelve el puesto del Capitán del Viento me siento a salvo de esta amenaza y, al mismo tiempo, prisionera. No puedo acudir a salvar a mis compañeros y ni siquiera puedo ver cómo se desenvuelven pues mi mirada permanece fija en el decorado techo. Solo lo averiguaré una vez que alguno venga a informarme o cuando el Azul irrumpa en lo alto de la torre donde me encuentro.

Sin embargo, me obligo a respirar profundamente y a calmar mis nervios. En estos momentos yo tengo una responsabilidad tan grande como la de cualquiera de mis amigos. Transitamos el estrecho paso de montaña entre los dos picos más altos de la cordillera y cualquier descuido por mi parte podría ser fatal para todos.

- Tiradas (1)
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23/09/2022, 17:37
Jilhazhí

Jiłhazhí

El pequeño dragón miraba horrorizado cómo la silueta del ejemplar Azul crecía ante sus ojos. La imagen reavivaba sus recuerdos del breve periodo que estuvo cautivo por Lizbet Valanta y su sádica mascota.

Entonces no había podido hacer gran cosa para defenderse, pero ahora tenía a su lado a sus protectores. Esos seres de carne tierna y sangre cálida a los que consideraba su familia y que siempre encontraban el modo de sacarle de todos los líos en los que terminaba metiéndose no sabía muy bien cómo.

Algo en su interior le decía que corriera, se escondiera debajo de alguna cama y esperara a que todo hubiera terminado. Que era demasiado pequeño como para plantar cara a esa criatura, pero no podía apartar la mirada de ella. Nunca había visto un espécimen de su raza de semejante tamaño y su soberbio porte resultaba hipnótico. ¿Llegaría él algún día a convertirse en un ser igualmente magnífico? No tenía la respuesta, pero deseaba con todo su corazón que así fuera.

Una bola de fuego disparada por Thorwyn estalló como preciosos fuegos artificiales y eso le sacó de su fascinado ensimismamiento. Tenía que hacer algo, tenía que ayudar a su familia a defender su nuevo hogar aunque no sabía cómo. En el aire, no era rival para las grandes alas de su adversario y en tierra tampoco podía enfrentarse a sus garras y colmillos. Solo había una cosa que pudiera hacer: esperar a que el Azul aterrizase y vomitar su aliento ardiente sobre él desde el aire.

Sí, eso haría. Y después se alejaría volando tan deprisa como pudiera hasta que hubiera recuperado de nuevo el aliento. Si conseguía mantenerse fuera del alcance de su enemigo, tal vez conseguiría desgastarle poco a poco.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Master, si puedes cambiarme la foto por la del dragoncito de latón te lo agradezco.

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23/09/2022, 21:37
Enrielle Flechas de Muerte

Era el dragón más enorme que hubiera visto nunca. A decir verdad, no había visto ninguno más que a Jilhazhí y al dragón azul que había ejecutado, por lo que este ejemplar le resultaba terrorífico. Y achacó a eso que, al bajar a toda prisa por la escalera para avisar a los demás, empezaran a ser consciente de los mareos y ese desagradable dolor de cabeza.

Una vez ya en el patio de armas, Enrielle fijaba la mirada en la temible silueta del dragón, pero el malestar que sentía le dificultaba verlo con claridad. ¿Qué demonios le pasaba? Siendo una muchacha criada en la costa, tan lejos de las montañas, jamás había escuchado que la altura hiciese daño a nadie, así que sencillamente no lo entendía. Debía ser algún tipo de poder de ese maldito monstruo.

Más pálida que de costumbre, que ya era decir, y con unas oscuras ojeras que empezaban a marcársele, Enrielle trataba de enfocar la mirada.en el dragón cuando recordó que tenía el poder del pantano. Una pequeña parte, al menos.

¡Jilhazhí, ven aquí un momento!

Una vez a su lado, Enrielle comenzó una suerte de danza ritual totalmente descoordinada que consistía en dar pequeños saltitos en cuclillas alrededor de Jilhazhí mientras lo señalaba y tocaba su cabeza.

¡Humm humm hummm! — trataba de imitar el sonido que le había enseñado Klunurig, pero el resultado era bastante pobre. Se sentía totalmente ridícula, además de haberse revuelto el estómago aún más con la estúpida danza.

Creyó no obstante haber sentido fluir el poder del pantano en algún momento, así que igual había funcionado. En cualquier caso no se quedó para comprobarlo, y se alejó lo que pudo, dando tumbos por el patio de armas preparando su arco

Thorwyn en un momento dado arrojó una esfera llameante que estalló en el cielo. Eso no lo hacía nates. Luego le dijo algo sobre... ¿flechas que quemaban?

Sacudió la cabeza tratando inútilmente de quitarse el embotamiento que tenía. Aprestó la primera de las flechas, que de momento no quemaban, y trató de apuntar al dragón. Maldijo entre dientes. Con lo grande que era le costaba verlo con nitidez...

- Tiradas (8)

Notas de juego

Valiente exploradora con +9 en fortaleza xD. Parece que voy a recoger ahora lo de los críticos del pasado...

Le echo colmillo mágico a Jilhazhí. No se si le servirá para el aliento de fuego, creo que solo para garras o dientes, pero bueno, para cuando se quede sin fuelle y le muerda las pantorrillas!

Luego los disparos, a ver si le doy a algo que no sea mi pie, con la pifia xD. Creo que he aplicado bien la fatiga, -2 a los atributos fuerza y destreza, que ae traduce en -1 de cada uno al ataque. ¡Ánimo muchachos, no temáis! Enrielle la matadragones ya llegó xD

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23/09/2022, 23:25
Klunurig

Klunurig andaba ensimismado en el transplante de uno de los últimos arbustos traídos del pantano, cuando comenzó a escuchar los gritos de la gente-alta del vendaval-de-muerte. Unos gritos que llamaban a la batalla. Se asomó al exterior del torreón, y sus ojos vieron a una criatura que, por un instante, hizo que el vientre se le aflojase: un gusano alado, como el monstruoso Mohrlex el bendecido, pestilente e infeccioso contaminante del pantano. Pero no era él, pues sus escamas brillaban en un color azul intenso que en nada recordaba al negro oscuro del gusano del pantano.

No obstante, los gritos de sus compañeros de vendaval le hicieron reaccionar rápidamente: aquel gusano también era una amenaza, quizá no tan grande como Mohrlex, pero igualmente muy peligrosa. Volaba hacia ellos con gran determinación, y Klunurig se preguntó qué pretendería hacer. El druanti había agotado una parte importante de su poder en seguir acondicionando el torreón para disponer de plantas y un estanque de barro en el que lavarse. Y ahora, cansado como estaba, debía hacer frente a aquella amenaza.

- Makuwa, sígueme.

Le dijo aquellas palabras al perezoso cocodrilo que ahora le seguía a todas partes... cuando le parecía oportuno, que era casi nunca. Klunurig sospechaba que aquella era otra broma del pájaro-de-llamas-azules, pero aún no lo había confirmado. En todo caso, volvió su atención a Krik'k lettz, patrona de su pueblo, y entonó un cántico al tiempo que se agarraba los antebrazos uno con el otro, y efectuaba obscenos movimientos con la pelvis.

- ¡Humph, humph, humph, humph!

De repente, su cuerpo mudó en otra cosa, y se convirtió en un enorme lagarto*. Aún en esa forma, siseó obscenamente, sintiendo como la fuerza de sus músculos aumentaba por la bendición de la diosa. El lagarto se agazapó entre la maleza del torreón, esperando su momento. De todos modos, a campo abierto no podría hacer gran cosa.

- Tiradas (4)

Notas de juego

* Monitor lizard.

Asalto 1: (gratis) "Controlo" al cocodrilo para que se pegue a mi; (estándar) me convierto en lagarto; (movimiento) paso gratuito de 5' para asomarme a ver qué pasa, y otro paso para volver a ocultarme.

Asalto 2: Me lanzo fuerza de toro sobre mí mismo; (movimiento) esconderme entre la maleza.

Asalto 3: (sólo si actúo antes que Ysalla) Me lanzo colmillo mágico menor a mí mismo, y afecto al cocodrilo (si le ha dado la gana pegarse a mí) aprovechando la aptitud de druida que me permite hacer esto. Afecto al mordisco, naturalmente.

No sé si el cocodrilo haría algo, aparte de seguirme, supongo que no xD. Pero bueno, aunque sea que esté ahí, por si se le cruzan los cables y decide atacar a la dragona.

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24/09/2022, 00:08
Dungeon Master

Atraído por las voces de Enrielle y su evidente malestar físico, Jilhazhí se acerca a ella y deja que la mareada exploradora acaricie su gorrito con orejas de león con la esperanza de que eso la reconforte de alguna manera. Pero lo que sucede es que sus colmillos se vuelven más afilados. Desconcertado, alza el vuelo para encaramarse a lo alto de la muralla y esperar allí a vuestro asaltante.

Asomada a la entrada de la biblioteca, Kylian observa cómo el dragón azul se acerca a toda prisa mientras ella implora la protección de su dios. Puede que su cuerpo haya cambiado de forma drástica, pero no lo ha hecho su fe, ni el favor de Gilean.

Mucho más expeditivo, Thorwyn dispara una bola de fuego contra la creciente figura de cobalto. El Azul logra esquivarla pero la explosión la alcanza en pleno vuelo, engulléndolo por completo. Por un momento tenéis la esperanza de que lo habrá logrado destruirlo o al menos derribarlo, pero un instante después lo veis emerger algo chamuscado a través del humo blanco que ha formado la explosión y que ahora se disipa rápidamente con el gélido viento de montaña.

El dragón centra en el arcanista enano su atención y se lanza contra él en un vertiginoso picado, pero el mago theiwar consigue mantener la suficiente presencia de ánimo como para encantar uno de los carcajes de Enrielle antes de esconderse en el interior de la torre del homenaje tan deprisa como sus cortas piernas se lo permiten.

Para entonces la exploradora de la Legión de Acero ya tiene dispuestas un trío de flechas que hacer llover sobre la criatura que desciende a toda velocidad en el patio de armas. Sin embargo, antes de que consiga disparar la primera de ellas, un repentino mareo se apodera de su tembloroso cuerpo y las náuseas hacen que vomite el desayuno sobre sus botas.

Entretanto, Klunurig ha permanecido todo el tiempo en el interior de su torreón en proceso de "readaptación", observando agazapado a través de la puerta hecha astillas e implorando la ayuda de su diosa. Detrás de él, Makuwa se relame mientras avanza perezosamente hacia su pequeño amo.

Notas de juego

Jilhazhí (20) → 45/45 [colmillo mágico4]
Enrielle (15) → 50/50 [-5 daño no letal; fatigada3; 20 flechas encantadas con flecha flamígera5]
Kylian (12) → 54/47 [poder divino1, protección vs mal2]
Klunurig (12) → 61/61 [fuerza de toro6]
Dragón (11) → ileso
Thorwyn (5) → 28/28 [fatigado3]

1: Poder divino (NL 7) [ataque base +7/+2, +6 de mejora de FUE, +7 pg, durante 5 asaltos]
2: Protección vs el mal (NL 7) [+2 de desvío a la CA y +2 de resistencia a los TS a todos en 10' de Kylian, durante algo menos de 70 min]
3: Fatigado [no puede correr, ni cargar, -2 FUE y -2 DES hasta que descanse 8 horas]
4: Colmillo mágico (NL 3) [+1 de mejora a sus tiradas de ataque y daño de mordisco, durante 3 min]
5: Flecha flamígera (NL 6) [+1d6 daño de fuego, durante algo menos de 60 min]
6: Fuerza de toro (NL 7) [+4 de mejora a FUE, durante 7 min (y a Makuwa mientras se mantenga a 5')]

NOTA: El conjuro flecha flamígera puede encantar hasta 50 flechas que se encuentren en contacto entre sí. Como en un carcaj solo caben 20 flechas y no os habéis dedicado a volcarlas todas en el suelo para encantarlas (Enrielle no lo podía saber y Thorwyn no se lo ha pedido probablemente porque no era muy sensato en esta situación), únicamente las flechas de un carcaj han sido encantadas.

NOTA 2: La posible pifia de Enrielle, sí se ha confirmado incluso con ese 20 en su tirada de ataque (¡oh, oh!). Así que pierde el resto de acciones de su turno. En realidad ha sido una pifia "buena", porque hubiera desperdiciado tres flechas que ahora se ha ahorrado por no haber podido disparar. De nada xD

NOTA 3: Ahora sí, empezamos el asalto 1 de combate. El dragón se encuentra a 200' de vosotros y postearé lo que hace en cuanto hayáis declarado vuestras acciones los que tenéis más iniciativa que él. Así que Thorwyn, si quieres, puedes esperar a que haya declarado la acción de la bestia (o declarar la tuya si crees que lo que haga no te va a influir en nada).

NOTA 4: Con su penalizador a FUE, Enrielle no tiene fuerza para tensar su arco con todo el potencial que tiene. Sufre un penalizador de -2 a las tiradas de ataque (que se apila con el -1 de DES) y el daño del arco pasa a ser +1 (en lugar de +2).

NOTA 5: Podéis pinchar en la imagen para ampliarla un poco.

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24/09/2022, 00:27
Jilhazhí

Jiłhazhí

El pequeño Latonado miró con preocupación a su pálida y temblorosa tía Enrielle. Parecía haber desayunado algo en mal estado aquella mañana y eso le ponía muy triste a Jiłhazhí porque ella siempre era muy buena con él. Quiso acercarse a consolarla pero la enorme sombra del Azul cerniéndose sobre el patio de armas le disuadió de abandonar su actual posición.

Atemorizado, trató de esconderse entre las ramas del árbol muerto que crecía junto al muro y esperó la ocasión de sorprender a su imponente enemigo.

El intimidante Azul descendía a toda velocidad hacia la zona occidental del patio de armas buscando al tío Thorwyn y Jiłhazhí solo esperaba, conteniendo la respiración, que no lo descubriese a él por casualidad.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Ya sabes, Master, la foto cuando puedas ;)

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24/09/2022, 11:27
Klunurig

Klunurig-lagarto observaba agazapado, esperando a la llegada de aquel gusano azul. Desde donde estaba, discernía malamente a Enrielle-flechamuerte, que vomitaba en medio del patio. Aquella muchacha humana era un auténtico desastre, pero Klunurig sabía que sus dedos estaban benditos por el toque del pantano, y confiaba en que pronto comenzarían a causar estragos.

Inexpresivo, el lagarto comenzó a sisear con su lengua bífida, invocando una vez más la ayuda de Krik'k lettz. Su piel de lagarto se empezó a tornar dura y adoptó un color más marronáceo, y algo parecido le ocurrió a Makuwa.

Notas de juego

Créale un PJ a Jilhazí, máster, y se lo das a Dainthalar. Así es más fácil.

Lanzo Piel Robliza.

=> CA de Klunurig: 10 (base) + 2 DES + 3 lagarto + 3 piel robliza = 18
=> FUE de Klunurig: 17 base + 4 Fza toro = 21
=> CA Makuwa: 16 (base) + 3 piel robliza = 19
=> FUE Makuwa: 27 (base) + Fza toro = 31 (:D)

Lo pongo por acordarme yo, más que nada xD.

 

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24/09/2022, 11:43
Enrielle Flechas de Muerte

—¡Bluaargh!— vomitó Enrielle.

Estaba doblada sobre sí misma, apoyando las manos en sus rodillas, mirando fijamente el desagradable charco que había en el suelo y sobre sus botas. Aún se podían distinguir trozos de su desayuno.

Escupió y se quitó los restos de vómito de la boca con el dorso de la mano, tratando de incorporarse. Todo le daba vueltas, tenía frío y también la desagradable sensación de querer seguir echando las asaduras a pesar de tener ya el estómago vacío.

Se incorporó justo para ver que el dragón se recuperaba después de haberse lanzado en picado. Con torpeza recogió la flecha que se le había caído cerca del vómito y la colocó en el arco. Ni en las peores borracheras de Kalaman se había visto en aquella mierda. Tensó el arco con un resoplido y trató de apuntar al dragón, que veía moverse más de lo que hacía en realidad.

- Tiradas (6)

Notas de juego

Bueno, podría ser peor. A ver si Enrielle termina de arrancar xD

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24/09/2022, 12:23
Dungeon Master

La cría de Latonado se esconde lo mejor que puede, aprovechando su pequeño tamaño, entre las deshojadas ramas del árbol muerto apoyado contra la muralla occidental.

Enrielle, por su parte, parece haber recuperado momentáneamente el control de su estómago aunque todavía se la ve enfermizamente pálida. El arco tiembla entre sus manos, mientras sus delgados y temblorosos brazos se esfuerzan por tensarlo. Uno tras otros sus disparos se estrellan contra las impenetrables escamas de cobalto y solo una de las flechas encantadas consigue penetrarlas en su largo cuello, haciendo que la bestia ruja airada.

Desde donde se encuentra, Kylian no puede ver a sus compañeros. A quien sí ve perfectamente es al dragón pero este parece tener la atención puesta en el otro lado del patio de armas, de modo que la sacerdotisa goblin mantiene la calma y continúa rezándole a Gilean.

Tampoco el druida del pantano tiene mucha prisa por abandonar su vergel en construcción y se toma su tiempo para endurecer sus nuevas escamas con ayuda de la magia de la naturaleza.

La bestia alada aterriza sobre el empedrado con un violento batir de alas que ralentiza su picado mortal y evita que se estrelle contra el suelo. Sus ojos con pupilas como de serpiente se clavan rápidamente en Thorwyn y lanza un pavoroso rugido al verle.

Notas de juego

Thorwyn (5) → 28/28 [fatigado3] ⇒ Tu turno
Jilhazhí (20) → 45/45 [colmillo mágico4]
Enrielle (15) → 50/50 [-5 daño no letal; fatigada3; 17 flechas encantadas con flecha flamígera5]
Kylian (12) → 66/47 [poder divino1, protección vs mal2, auxilio divino7]
Klunurig (12) → 61/61 [fuerza de toro6, colmillo mágico8]
Dragón (11) → ileso

1: Poder divino (NL 7) [ataque base +7/+2, +6 de mejora de FUE, +7 pg, durante 4 asaltos]
2: Protección vs el mal (NL 7) [+2 de desvío a la CA y +2 de resistencia a los TS a todos en 10' de Kylian, durante algo menos de 70 min]
3: Fatigado [no puede correr, ni cargar, -2 FUE y -2 DES hasta que descanse 8 horas]
4: Colmillo mágico (NL 3) [+1 de mejora a sus tiradas de ataque y daño de mordisco, durante 3 min]
5: Flecha flamígera (NL 6) [+1d6 daño de fuego, durante algo menos de 60 min]
6: Fuerza de toro (NL 7) [+4 de mejora a FUE (y a Makuwa mientras se mantenga a 5'), durante 7 min]
7: Auxilio divino (NL 7) [+1 de moral a las tiradas de ataque y TS vs miedo y +12 pg, durante 7 min]
8: Piel robliza (NL 7) [+3 de armadura natural a la CA (y a Makuwa mientras se mantenga a 5'), durante 70 min]

NOTA: Jilhazhí, Enrielle y Thorwyn deben superar una TS de Voluntad (CD 13) o sufrirán un -1 de moral a las tiradas de ataque y TS vs miedo.

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24/09/2022, 13:43
Thorwyn

Dragones, monstruos astutos, mágicos, físicamente capaces de aniquilar a humanoides despreocupadamente. Todas las razas habían tenido que reunir ejércitos enteros para enfrentarse a ellos. Y Thorwyn había tenido la genial idea de cabrear a uno. La bola de fuego que le había lanzado apenas si le había manchado las escamas.

Con el estómago encogido por el terror de ver como el monstruo aterrizaba ante él, Thorwyn se sintió pequeño, vulnerable e indefenso. Ninguno de sus hechizos podría acabar rápidamente con él. Moriría mucho antes... Salvo que tuviera uno que pudiera salvarle. Y lo tenía. Estudiado de esa misma mañana.

El arcanista enano no lo dudó más y lanzó el hechizo de invisibilidad, escabuyéndose a continuación sigilosamente hacia fuera de la torre. He sumado el bono de +20 a sigilo del hechizo de invisibilidad.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Lanzo invisibilidad y muevo mis 4 casillas hacia fuera, siguiendo la pared de la torre y alejándome del dragón lo máximo posible.