Partida Rol por web

_Parece que el turismo por aquí no es precisamente un éxito, ¿no crees Rory?

Junto a Rory, el Dr. busca algún libro de registros para conocer la fecha, y mapas para saber en qué lugar se encuentran. También hace una recorrida general por la oficina buscando cualquier cosa que le parezca fuera de lugar, en un intento por descubrir qué es lo que le genera esa sensación de que algo está tan mal.

La estación de alquiler de botes es... extraña. No falta ninguno de los detalles que uno esperaría encontrar en ese lugar, incluyendo un ordenador último modelo para realizar las trasacciones. La mayoría de los folletos informativos y de los mapas estan actualizados acorde con el siglo 21.

Excepto...

Excepto, quizá, ese curioso teléfono de los 50 que descansa en el mostrador. A un lado del ordenador hay incluso una vieja (aunque excelentemente bien cuidada) máquina de escribir.

Tampoco, tras revisar un poco, falta documentación de décadas atrás. Y objetos. Cuando os fijáis un poco más veis perfectamente que en el lugar se entremezclan artefactos de principios de siglo con otros puramente actuales.

Y, por un segundo, cuando Rory mira de reojo hacia el hueco que da al mar, donde descansan un par de grandes botes de alquiler, le parece ver que estos cambian de forma sutilmente, pasando de ser embarcaciones de madera primorosamente pintada y con el nombre a un lado, a ser de madera desnuda, sin más adorno que una pequeña mancha, una firma antigua, tal vez, en los costados. Cuando mira fijamente (o parpadea) los botes vuelven a ser lo que eran.

Doctor todo esto es una ilusion, pero no se con que proposito...puedes usar tu destornillador sonico para ver si te da alguna informacion relevante?.

No se porque pero me da la impresion de que alguien quiere mostrarnos un paisaje que podria existir pero la informacion que tiene no es la mejor por eso mezcla epocas.

El doctor miró muy extrañado toda la escena. Primero creyó estar en el S. XXI. Eso lo tranquilizó en parte, porque los sujetos que habían conocido minutos antes parecían de esa época. Pero de a poco comenzó a notar cosas que correspondían tanto al pasado como al futuro; sin dudas algo muy extraño estaba ocurriendo allí. Escuchó la hipótesis de Rory.

_¿Qué te hace pensar eso, Rory, y no que se haya abierto una grieta en el espacio-tiempo y que por eso coincidan en el mismo lugar objetos de distintas épocas?

A pesar de no creer que la hipótesis de Rory fuera correcta, sacó el destornillador y comenzó a aplicarlo contra distintos objetos al azar, de distintas épocas.

_Lo que tú podrías hacer mientras tanto, Rory, es intentar entrar a internet, si es que existe internet, y buscar información sobre Arrowdown. También podrías tomar distintos objetos y analizarlos con sentidos que no sean tu vista. Puedes tocarlos, olfatearlos, lamerlos, escucharlos... Solo una tecnología muy avanzada podría crear ilusiones que sean capaces de engañar a todos los sentidos. Si es como tú dices, posiblemente algo no tenga la forma o sabor que aparentaría visualmente tener -concluyó, mientras seguía utilizando su destornillador-.

Rory empieza a hacer caso de lo que le ha sugerido el Doctor y lo primero de todo trata de ver si hay algun ordenador con conexion a internet y de no ser asi comienza a oler cosas y tocarlas para ver si son reales y acordes a la imagen.

William se adentra en la feria extrañado de que este "encendida" sin que haya nadie que la maneje y busca las consolas y fuentes de energía de las distintas atracciones para ver si hay algo raro en ellas.

Encuentras un ordenador. Un tanto obsoleto, que podría tener conexión a internet. Sin embargo, si intentas abrir el navegador te darás cuenta enseguida de que no hay ninguna red disponible a la que conectarse.

Por otro lado, todas las cosas que tocas, hueles, escuchas (en caso de que hagan sonido) son perfectamente normales. Todo parece muy real. Tal vez hasta sean reales del todo.

Todas las consolas, hasta donde puedes ver, son perfectamente normales. Se exceptuamos el hecho de que, como las atracciones, se mueven solas: las palancas bajan y suben conforme es necesario para mentener el funcionamiento de la atracción que controlen. Algunos botones se pulsan solos. Luces que se apagan, carteles de "stop" o "play" que se encienden solos...

El destornillador te da lecturas completamente normales sobre los objetos hacia los que lo enfoques. No parece haber nada raro en ellos.

_¿Algo, Rory? Estos objetos parecen estar bien.

William se quedo extrañado ante el funcionamiento de las maquinas y penso en un instante de pánico que algo había fallado con su saltador y que estaba en un espacio apartado con tiempo compartido del mundo real, pero antes de infundir el pánico en los demás intento interactuar con aquellas consolas, primero de una manera sencilla y ante la duda de que podría causar daño a alguien del tiempo real esperar a que una atracción hiciera la pausa para carga y descarga de pasajeros y luego desenchufarla de la corriente.

Camino por la feria con algo de miedo y a la vez algo extrañada por el lugar y el ambiente, pronto comencé a relacionar cosas tratando de lograr averiguar el lugar en el que estaba.

Por aqui todo parece estar normal tambien Doctor, sin embargo no hay conexion a internet. Estoy muy perdido...no se que mas buscar. Aqui no parece haber huellas ni sintomas de que nadie haya estado por aqui salvo por los objetos que han quedado.

_No te preocupes, Rory. A menos que la feria esté tan deshabitada como esto, allí encontraremos respuestas. E incluso si está tan deshabitada, también encontraremos respuestas. Vamos para allá.

Llegáis hasta la feria, una caminata corta pero un tanto costosa pues está por encima de las dunas, en una explanada de hierba al lado del pueblo. Las atracciones se mueven, se ilumínan y emiten su sonido característico (ese estridente pitido que anuncia el término de un turno y el comienzo de otro) Sin embargo, no hay nadie en ellas, no hay público ni operarios. Está desierta...

... A excepción de W.H y Lirith, que caminan por ahí, el primero toqueteando los controles de las máquinas. El primero se agacha, justo en el momento en que una de las atracciones, un carrusel, se detiene con ese pitido. Busca los cables que conduzcan al generador que permite su movimiento... Y no encuentra nada. A excepción de los cables, que se adentran en la tierra y parecen extenderse como una miríada de raices de un árbol. Pero no hay generadores, no hay nada de donde desenchufarlo.

Y los controles, cuando los tocó, simplemente no hicieron nada. Si llegó a mover alguna palanca regresó inmediatamente a su sitio.

_¿Y bien, han encontrado algo? -preguntó el Dr. al llegar a la feria y ver a los otros dos-.

Solo estaban ellos cuatro, nadie más. No estaba ni siquiera ¿la energía? Era bastante llamativo eso en lo que trabajaba W.H.. Los equipos funcionaban sin generadores y los controles no respondían a las órdenes del hombre.

_Veamos...

El Doctor se acercó a otro juego con el destornillador sónico en la mano y comenzó a revisar tanto los controles como los cables, recorriéndolos hasta sus extremos donde aparentemente no se conectaban con nada.

Efectivamente, los cables no se conectan a nada... a nada visible. Se internan bajo tierra al poco de deslizarse por los costados de las consolas y siguen su camino cubiertos. O no. Gracias a la ayuda del destornillador, averiguas que, efectivamente, una vez se internan en la tierra no continuan, pero eso no signifique que no haya algún tipo de energía actuando allí.

Lo mires como lo mires, todo apunta a que la fuente de energía se encuentra en algún punto del Tren Fantasma. Es fuerte, es poderosa, y engloba a toda la feria.