Partida Rol por web

Pongo cara de sorpresa: -¿Pero es que ya ha estado aquí? ¡Le dije que yo me ocuparía de alquilar la barcaza! Madre mía... que lío.. Disculpe, creo que ha habido una confusión, veo que mi compañero ya se me ha adelantado, y me ha dejado varado en Mos Eisley. ¿Tendrá el código de radio de la barcaza, para que pueda enviarles un mensaje? Se lo agradeceré muchísimo.

Te mira con su inexpresiva cara alienígena y dice:

-Mmm, eso va a costarle unos créditos,así que dice usted ¿Qué le dejó tirado aquí? Vaya parecían tranquilos la última vez que vinieron y no parecían esperar a nadie- Mira su datapad, y se gira lentamente hacia ti-Mmm...Parece que han pasado la noche lejos en el desierto y no parece que tengan mucha prisa en reunirse con usted...Creo que voy a necesitar algo más de dinero para no tener que enviar a las autoridades a recuperar mi barcaza en el desierto, nadie responde a la llamada de la barcaza...hablamos de 3000 créditos y de su identidad.

Te das cuenta que intenta sacar partido de tu situación.

Desdo deja que una sonrisa cómplice crezca en su cara, y luego una ligera risa, no de burla, sino de complicidad. -Vamos camarada, pongámonos serios. ¿Crees que caminaría por aquí preguntando por amigos si tuviese esa cantidad? Te alquilaría cualquiera de esas motos y saldría a buscarles. No no no, los dos sabemos que pedirles a los imperiales que vayan a buscar tu vehículo solo terminara con tu barcaza incendiada, o en el mejor de los casos, decomisada hasta vaya a saber la galaxia cuando… y esos malditos de blanco son capaces de hacernos la vida imposible a nosotros los fronterizos…

Baja la voz, como quien ofrece un trato demasiado bueno y teme que alguien le escuche por accidente -Mira, realmente necesito hablar con mis camaradas. Si no lo hago, es probable que hagan alguna tontería con tu vehículo. Solo necesito que me indiques el código de mensajes, y yo me ocupare de avisarles que la jueguen sobre seguro, y tendrás la máquina de vuelta aquí en tiempo y forma. Si no, bueno, es sentarse a esperar lo mejor.

Te mira con cara de asombro y dice:

- Tienes razón, toma el código, y por favor trae mi vehículo de vuelta sano y salvo.

Desdo cogió el código con una mano, y apoyó la otra sobre el hombro del Duro. En tono fraternal, le dice –Te lo prometo camarada. Gracias por esto. Tendrás tu vehículo a salvo.

Desdo sabía que no tenía manera de garantizar tal cosa, y que seguramente jamás volvería a ver a aquel fulano, que sus palabras podrían perfectamente llevárselas el viento. Pero lo sabía, si que lo sabía: que intentaría hacer todo lo posible para que recuperase su vehículo. Simplemente, no podía evitarlo… y ese mismo impulso lo había traído por media galaxia hasta Tattoine, como un pobre rebelde contra el imperio.

Salió del local, haciendo una rápida mirada de que no hubiese sospechosos siguiéndole o algo parecido. Buscó una esquina tranquila, cogió el comunicador y marcó el código. Vamos chicos… contestad, maldita sea…

Lo pruebas con tu comunicador y nada, buscas por las calles y te cruzas con tres patrullas de soldados de asalto y finalmente encuentras un terminal y lo utilizas, tampoco responde nadie.

Parece que no mentía ese Duro... Así que supongo que también es cierto eso que están en pleno desierto... No hay más que hacerle.

Escondiendo el código dentro de su ropa, Desdo se dirige a la Cantina de Mos Eisley.

Puedes intentar buscarlos con el localizador que te ha dado.

Cuando lo consultas, obviamente como el Duros había hecho antes, están en medio del desierto.

Unas 5 horas en transporte, andando 1 día.

Jenssar considero si llamar al Bothan en ese momento y salir a buscar la barcaza, pero lo consideró demasiado arriesgado. Mejor planificar esa jugada con más cuidado.

Guardándo el código, de dirigió a la cantina, atento a si por alguna casualidad veia a BoShek.

Supongo que luego tendré que pasar por el espaciopuerto... habrá que empezar a pensar cómo salir de aquí, con o sin las granadas...

Te cruzas con 3 patrullas de soldados de asalto en tu camino hacia la Cantina. Entras en ella y puedes ver a BoShek en su asiento de siempre, hablando de vez en cuando con uno y a ratos con otros, ahora con un cliente y ahora con el dueño de la cantina.

Me acerco hasta la barra y me siento a su lado. En cuanto haga una pausa de halar con otros, me giro y le comento, en voz normal, pero no demasiado alta: -Hola camarada, ¿tienes un minuto? Necesito hablar contigo.

En cuanto te diriges hacia él en la cantina te mira y le hace una señal hacia una zona más oscura, con sombras, donde te parece ver el brillo de un arma. Luego baja del asiento y te sonríe:

- ¿No hay devarionanos hoy?

-Por suerte, la cosa se ve mucho más clara el día de hoy. Me siento en algún lugar que podamos charlar pero que también pueda ver la puerta principal, de ser posible.

Me siento y comento -Me alegra que finalmente podamos tener esta charla. Sé que esperabas más personas, pero por ahora, soy el único operativo en Mos Eisley.

Te mira extrañado y dice:

- ¿Quizá deberíamos ir a un reservado? No se exactamente lo que buscas pero creo que no eres un profesional tras tu actuación de ayer.- Se levanta y le hace una señal al dueño del local y avanza hacia la zona oscura donde hay unos reservados.

Una vez en el reservado BoShek se sienta mirando hacia afuera, dejándote el asiento que da la espalda a la entrada o salida, según se mire:

- Usted dirá de que negocios estamos hablando, soy un hombre con varias opciones de negocio.